Terapia sexual gay

El relato de una terapia revolucionaria, muy, muy excitante.

Soy maricón y me gusta, me gusta comer un rabo y metérmelo por el culo. Pero esto no siempre fue así. Hubo una época en la que no me atrevía a decirlo y ocultaba mis relaciones homosexuales. Pero un día llegué a la consulta del Dr. Ramirez me lo recomendó un amigo después de follar en una sauna. Fui a la consulta el Dr. Ramírez, era un hombre alto y guapo de mediana edad moreno de gimnasio, simpático y agradable pero muy serio cuando se trataba de su trabajo. Charlamos un rato y me hizo un montón de preguntas. Al final me convenció para entrar en un grupo que había formado de “terapia deshinibitoria de sexo gay” en la que me explicó que de una manera totalmente práctica y revolucionaria acabaría con mis problemas.

Llegó el primer día de terapia y me presenté en la clínica de Dr. Ramirez puntualmente. La secretaria me indicó donde cambiarme y me dio una bolsa con un albornoz. En el vestuario había tres hombres más, nos desnudamos y nos pusimos el albornoz que nos dieron nos fuimos a una sala grande que parecía un gimnasio como nos habían indicado anteriormente. Allí había más gente esperando sentados en unas sillas dispuestas en círculo. Cuando llegaron todos entró el Dr. Ramírez -Buenas tardes caballeros. Todos me conoceis, os agradezco vuestra confianza al asistir al grupo. Me gustaría que hiciéramos una breve presentación cada uno. Hicimos una breve presentación cada uno y el Dr. Ramírez nos indicó que nos pusiéramos de pie en círculo y añadió. - Cuando cuente tres quitaros el albornoz y lo dejais en la silla. -Uno, dos, tres... nos quitamos el albornoz y quedamos todos desnudos. -Quiero que os mireis bien unos a otros sobre todo fijaros en las pollas y los huevos. Ahora vamos a estrechar más el círculo para observarnos los genitales mejor.

Estábamos tan juntos que nos tocábamos unos a otros. Algunos nos estábamos excitando y empezábamos a tener una erección el Dr. nos dijo que eso era muy bueno y que siguiéramos así. Al rato, formamos dos filas una en frente de otra, seis y seis. -Ahora, esta fila que se de la vuelta y vosotros observad los culos -Inclinaros hacia delante y con las manos abriros las nalgas que se os pueda ver bien el ano. Así lo hicimos... A estas alturas casi todos teníamos la verga toda dura.

-Acercaros y observad bien el culo de los compañeros... Ahora vosotros haced lo mismo y nuestro grupo fue el que se dedico a mirar el culo y los anos de los compañeros. -Bueno, ahora que estamos todos empalmados nos vamos a masturbar todos juntos, sentaros empezad a masturbaros... Cuando estábamos pelándonos el rabo nos dijo... -Ahora agarrad la polla al de la derecha y masturbarle. Así lo hicimos, yo le cogí la polla al de al lado que era un hombre de unos cuarenta años con una gran polla y se la apreté con fuerza subiendo y bajándole la piel del miembro. A mi me la agarró uno de mi edad de unos veintitantos años y nada más empezar pensé que me corría vivo después de todo esto parecía estar flotando. -Chicos cuando os vayais a correr decidlo para que no nos perdamos la corrida. Inmediatamente se oyó... -Me corro!! le miramos todos y se pegó una corrida de miedo – Me corro!! se oyó otra vez era mi compañero al que masturbaba, su semen salpicó todo su pecho y mi mano estaba llena de semen que rebosaba de su verga. Al experimentar esto eyaculé con gran fuerza a la vez que decía -Me corro... y todos vieron como me corría sin remisión convulsionando de gusto en mi silla. - Menudo corridón. Me dijo el compi que me la había meneado. El Dr.Ramírez también participó y fue el último en correrse para que lo viéramos todos bien. -Aunque estábamos todos desnudos y recién corridos la secretaria del Dr.Ramirez entró en la sala y repartió toallas y nos invitó a ducharnos en el vestuario. -Caballeros, hoy ha sido el primer día y estoy muy contento con el grupo. Os espero el próximo día. Dijo el Dr. Ramírez. Nos duchamos y nos cambiamos. -Bueno chicos, nos vemos el próximo día... -O.K. Nos vemos -Adiós, hasta luego... Sinceramente estaba como flotando parecía algo irreal que tenía que procesar.

Llegó la siguiente sesión, llegué puntual, la secretaria me dio la bolsa con el albornoz y varias toallas. Esbozó una sonrisa y me corté pues me había visto junto a los otros desnudo y recien corrido. Me fui para el vestuario, me desnudé y me puse el albornoz, llevé las toallas conmigo y me senté en una de las sillas junto con los demás. Empezamos a hablar de cosas intranscendentes, como si estuviéramos en una clase, esperando que llegara el profesor. El Dr. Ramírez llegó y nos saludó.

-Buenas tardes chicos. Poneros de pie. Quitaros el albornoz.- Quedamos todos en pelotas. -Vamos a ponernos por parejas, pero yo os colocaré primero luego iremos cambiando. Tenemos que practicar las terapias con todos con todos. Hoy vamos a practicar la felación. Tenemos que saber chupar una polla con la mayor maestría para eso hay que practicar con interés. El Dr.Ramirez dio dos palmadas y llamó a un colaborador, Manuel, entró por una puerta aledaña y llegó a su altura iba desnudo, el Dr. Ramírez se arrodilló le agarró la polla y se la metió en la boca. Explicó muy gráficamente cómo presionar con la lengua el glande y cómo insistir en el frenillo, con la lengua lamió todo su miembro y explicó cómo había que chupar también los testículos. -Ahora vosotros, vamos, vamos..!! Yo estaba en la fila de los que tenían que chupar primero, me puse de rodillas y comencé a mamar la polla de mi compañero, no era una polla muy grande y podía tragármela entera, le hice una buena mamada incluyendo una buena lamida de huevos... -Cambio! Dijo el Dr.Ramirez. Cambiamos y me la empezó a mamar, al rato hicimos un cambio de pareja y después otro y otro y otro... si alguien se iba a correr había que parar de mamar hasta que se recuperara. Pasó un a hora y media y seguíamos comiendo polla -Vamos a corrernos, ahora vamos a ponernos en círculo en el suelo y uno se la come al otro y el otro al otro hasta completar el círculo. De esta forma todos comíamos un rabo y a todos nos la mamaban. -Ahora ayudaros con la mano y haced que se corra el compañero. Quiero que os tragueis todo, todo... un buen maricón ha de saber tragarse el semen. Derrepente sentí que me corría y me dejé llevar debí de inundar la boca de mi compañero. Inmediatamente noté cómo se contraía la polla de mi otro compañero en mi boca y empezaba a manar semen de ella, tragué todo lo que pude pero como era un pollón el que tenía en la boca y se me salía el semen por la comisura de los labios. Cuando terminamos todos teníamos churretes de semen en la cara, nos dimos cuenta que la secretaria nos había estado observando desde el principio y tomaba notas junto con el Dr. Ramírez para ponernos nota y mejorar la técnica mamatoria. Al parecer yo chupaba muy bien el rabo pero luego no chupaba adecuadamente los huevos y me había tragado casi todo el semen y era algo muy positivo.

-Bueno caballeros, la sesión de hoy ha terminado. Quiero que practiquen la felación, usen si pueden a un amigo o un consolador o queden entre ustedes y practiquen en casa. El próximo día veremos uno a uno cómo mamais un rabo y empezaremos con la penetración. Hasta la semana que viene. -Adios Dr. hasta la semana que viene. -Adiós Dr. Ramirez.

Carlos y Andrés se dirigieron a mi -Oye Rubén, quieres venirte con nosotros a practicar? -Vale, os llamo para confirmar el viernes. El sábado por la tarde fui a casa de Andrés donde ya estaba Carlos, me estaban esperando. Nos desnudamos enseguida y empezamos a comernos el rabo. Nos la mamábamos por turnos y uno observaba y decía lo que le parecía la mamada. -Creo que tienes chupar mejor los testículos no los chupas bien. -Y yo creo que que te deberías de intentar meterte toda la polla en la boca, hasta la garganta. Todos lo intentamos por muy grande que sea el rabo pero tu nunca te la metes entera. -Pues tu tienes que lamerla más y echar más saliva... Así pasó la tarde todo el rato practicando.