Tequila y fiesta con mi hermano y su mejor amigo
Mis papás se habían ido de viaje por el fin de semana. Mi hermano invitó a su amigo Mateo a que vaya a quedarse el fin de semana con nosotros. Ellos son más grandes que yo, así que no sabía si me iban a dejar juntarme con ellos, pero en un momento mi hermano me llamó y me mostró que tenía dos botellas de tequila, y que fuera a su pieza cuando llegara Mateo así tomábamos los tres.
Mis papás se habían ido de viaje por el fin de semana. Mi hermano invitó a su amigo Mateo a que vaya a quedarse el fin de semana con nosotros. Ellos son más grandes que yo, así que no sabía si me iban a dejar juntarme con ellos, pero en un momento mi hermano me llamó y me mostró que tenía dos botellas de tequila, y que fuera a su pieza cuando llegara Mateo así tomábamos los tres. A mi Mateo un poco me gustaba, así que me puse una ropa más o menos linda (tampoco que se note tanto, si era en casa). Entré a mi pieza, me saqué todo lo que tenía, me puse una remerita roja sin corpiño (no tengo tantas tetas), una mini de jean, y una bombachita roja medio chica pero linda, que por ahí se podía ver un poquito si me sentaba, me pareció que podía quedar bastante adorable. Cuando mi hermano me llamó fui en seguida asu pieza, estaba re entusiasmada. Saludé a Mateo con un beso, y me pareció que su mirada se iba a mis piernas. Mi hermano había servido tres shots de tequila, cada uno con un limoncito y sal. Ellos tomaron primero, yo después. Me resultó bastante fuerte, tosí, nos reímos. El shot te da como una energía, es raro. Mi hermano sirvió otra ronda, “total dormimos todos acá, no hay que manejar aningún lado”. El segundo pasó más fácil. Yo ya quedé bastante mareada. Ellos se sirvieron el tercero, yo esperé un poco. Ya nos estábamos cagando de risa. Mi hermano sirvió otra ronda. Lo tomamos y yo me tiré en la cama riéndome como loca. Cuando levanté la cabeza me di cuenta que Mateo, ya re borracho, me estaba re mirando la bombacha. Sonrió y se hizo el tonto. Lo pesqué un par más de veces mirando de reojo mi bombacha, y a mi hermano también. Pero bueno,estábamos re borrachos, que se yo. A mi me gustaba que me miren. Mi hermano sirvió otra ronda. Ya estábamos re mareados, nos reíamos, nos abrazábamos,andábamos arrastrándonos por la cama y por el piso. En un momento nos estábamos cagando de risa y Mateo me dice “pará, vos no tenés corpiño guachita!” y yo respondi riéndome mucho también y le juré que si tenía. “Como es?” me preguntó.Verde, le mentí. “Ah entonces no hace juego con la bombacha” dijo y nos recagamos de risa. "Me re viste la bombacha hijo de puta! Si que tengo corpiño". “A ver, mostralo” me dijo. “Bueno” dije yo “pero un segundo nomás, para que dejen de decir pelotudeces”. Los dos me miraron esperando, y yo me levanté la remera y les mostré las tetas un segundo. Estallaron de la risa y se tiraron para atrás. “Estás en tetas boludaaaa” decía mi hermano. Sirvió otra ronda. Mateo tomó su shot, setiró en la cama y dijo “sos hermosa boluda”. “jajajajajaja que te gusta de mi hermanita? Decilo hijo de puta”. “Las tetitas jajajajaja” dijo Mateo. “Bah, nose, todo”. “Besala boludo jajajajaaj, Anto, te va un besito?” me dijo, yo me cagué de risa, mi hermano lo agarró del brazo y lo levantó, y lo llevó hasta el sillón donde estaba yo, Mateo se acercó y me besó. Mi hermano se seguía cagandode risa, nosotros ya no, nos pusimos re serios mientras nos dabamos un beso bastante tierno pero de labios y un poco de lengua. “Otro shot!” dijo mi hermano. Lo tomamos y ahí sí ya estábamos en cualquiera. Nos caímos los tres abrazados al piso, yo besándome con Mateo y mi hermano cagandose de risa,mirándonos la cara de re cerca mientras nos besábamos y haciendo chistes. En un momento Mateo soltó a mi hermano y usó esa mano para tocarme una teta porarriba de la remera. Yo respondí llevando mi mano a su culo y agarrándole un cachete. El ya estaba arriba mío. Mi hermano seguía acostado re cerca de nosotros dos, mirándonos. Nosotros nos re besábamos, yo ya sentía que la pijade Mateo estaba re dura y me rozaba la pierna. “Me voy?” dijo mi hermano. “Si pero volve con otro shot y después quedate” le dije cagandome de risa, Mateo también se rió. Mi hermano se levantó, sirvió, se tomó el suyo y volvió tropezando a darnos el nuestro. Lo tomamos. Yo estaba hecha un fuego. Nos dimos un beso re profundo con gusto a alcohol. Mi hermano nos miraba de re cerca. Me parecio verlo que se llevaba la mano al bulto. La pollerita se me había levantado, y sentía la pija de Mateo contra mi bombacha. “¿Te puedo sacar la remera?” me dijo Mateo. Le dije que sí. Me la sacó. Me quedé en tetas. Me miró y me dio unos besitos re tiernos y borrachitos en cada una. Mi hermano nos miraba re risueño pero ya más excitado. Mateo iba alternando chuparme las tetas y besarme en la boca, mientras me había empezado a meter mano por la
se cuanto tiempo estuvimos así. Yo ya me sentía re mojada, algunas veces queme hice pajas largas con la bombacha puesta, como de 40 minutos, me había sentido mojada así. Seguro le estaba mojando el piso a mi hermano, pero no me importaba nada, y a él tampoco. Se levantó y trajo la botella, le dimos untrago más cada uno. “Te puedo sacar la pollera?” me dijo Mateo. Por un segundome dio un toque de cosa por lo mojada que estaba pero también estaba re borracha y caliente así que le dije que sí. Me la saco y me dió un besito en la concha por arriba de la bombacha antes de seguir besandome en la boca, se habrá mojado todos los labios. El se había sacado la remera también, y tenía los pantalones desabrochados. Mi hermano, que seguía acostado muy cerca nuestro, me miró y me dijo “che, todo bien?”. Vi que tenía la mano metida enlos pantalones. Como que me estaba preguntando si estaba todo bien con pajearse. Me dio mucha ternura. Yo la estaba pasando re bien, por qué él nopodía pasarla bien también? “Todo bien boludo, pero hacela bien, que haces con los pantalones abrochados relajate pelotudo” le dije riéndome. El se rió y sacó despacio la pija y se empezó a pajear. “Puedo?” me dijo Mateo. Le dije sí, y él también sacó la pija. Se la agarré y lo pajee un poco mientras nos besábamos.El chabón estaba a mil. Me encantaba sentir su pija calentita en mis manos, le toqué las bolas. Él tenía una mano en mi cola, adentro de mi bombacha, y jugaba con la punta del dedo en mi culo. Nos tomamos otro trago. Mi hermano ya estabacon toda la pija afuera, pajeandose a lo bestia, sin ninguna vergüenza. Estaba tan cerca mío que cada tanto en alguno de los pajazos sentía que la cabeza de su pija me rozaba la pierna. “¿Te puedo sacar la bombachita, hermosa?” me dijo Mateo. Ahí me rescaté un poco. Me pareció que no daba. Además yo nunca cogí, nosé, me dio miedo. Le dije que no. Me miró con una cara como de cachorrito que pide un mimo, pero no me insistió ni nada. Me dio como lástima y ternura así que me incorporé un poco en el piso,levantando la cabeza. “Vení” le dije, y lo acerqué a mi, y me llevé su pija a la boca. Mi primera chupada. El acercó la mano a la parte de delante de mi bombacha, que ya era un trapito rojo empapado. Alcanzó a deslizar un dedo, y me lo coló un poquitito en la concha. Eso me puso al limite, hecha un fuego mal, se la empecé a chupar mucho mas rápido mientras le tocaba las bolas. Mi hermano se pajeaba re fuerte. Yo le empecé a tocar la cola a Mateo, onda entre los cachetes, que sintió mi dedo ahí y me empezó a coger la boca con todo. “Ay bonita pará que acabo!” me dijo y yo lo miré a los ojos y le di la señal de que podía. Sentí como un chorro de leche tibia me entraba en la boca, y después otro y otro, Mateo gemía. Miré a mi hermano y vi que estaba acabando, salpicándome toda la pierna. Yo tenía el dedito de Mateo colándose en mi conchita, y empecé a acabar con todo, me temblaba todo el cuerpo, ni en mis mejores pajas acabé así, nunca. Quedamos los tres tirados, abrazados, borrachísimos, inservibles. “Me dormiría acá” dije.“Pará” dijo mi hermano, “limpiémonos un poco y vamos a dormir a la cama de mamá y papá”. Fue a buscar una toalla, y atención la ternura, también me trajo una bombacha limpia. Mateo dormía en mi pecho. Nos limpiamos la leche, yo me paré y me cambié la bombacha delante de ellos, rapidito. Nos fuimos a la cama de mis viejos y dormimos hasta el mediodía, los tres, en calzones en la cama. Al otro día nos levantamos. No hablamos muy directamente del tema pero los tres dejamos claro que la habíamos pasado re bien. A la tarde Mateo se fue. Yo me quedé caliente toda la semana, me hice una y otra paja pensando en eso, imaginándome en como habría sido si me animaba a sacarme la bombacha. Pero bueno, en dos semanas mis viejos viajan de nuevo, y mi hermano ya me dijo que Mateo está invitado y que trae tequila.