Tentaciones . Capítulo 2 : Resignación

En este capítulo , Abdullah acepta que va a casarse para poder salvar su empresa y su fortuna y no tanto por amor , como siempre quiso durante años . Y conoceremos a Florián , el segundo protagonista , que ama a Abdullah desde que trabaja para él y que oculta un íntimo secreto en su vida .

Tendría que casarse lo quisiera o no . Así se lo había impuesto su tio Alí .

Abdullah miró al hombre de 55 años y pelo medio canoso con sus bellos ojos verdes llenos de tristeza .

Veo que no te importa lo que yo quiera - el joven retrocedió unos pasos y se llevó las manos a su cabello moreno .
¡ Por Alá ! Siempre me he preocupado por tí , sobrino - Alí estaba siendo sincero - . Pero es la hora de que asientes tu vida y la formalices con un buen esposo que te respete .
¿ Acaso me has preguntado si estoy enamorado de un hombre ? - Abdullah se hallaba muy dolido por esa situación - . No , no lo has hecho . Ni siquiera sabes si mantengo una relación estable . Y hoy más que nunca me impones un matrimonio para salvar el Corporativo y nuestro dinero .
Abdullah - el bello heredero le dio la espalda a su tío y se dirigió a su habitación - . ¡ No me des la espalda así ! ¡ Lo hago por tu bien !

El moreno se detuvo y sin volverse atrás , le anunció a Alí .

Pues sí , tío Alí . Amo profundamente a un hombre que además es cristiano . Y ya que ansías verme casado , será a él a quien despose .

Sin más que añadir por el momento , entró a su habitación y cerró la puerta dando un golpe . Se quitó su albornoz , cambiándolo por unos calzones , una camiseta blanca , una sudadera y unos vaqueros medio desgastados . Se sentó a su escritorio y tmó su ordenador portátil para escribir un e - mail a Florián Pacheco , su asistente .

De : [email protected]

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Para : [email protected]

Asunto : Privado

Florián , te espero mañana a las 9 de la mañana en la terraza del Café Bar Dinarama , junto al Mercado de las Flores . Tenemos que hablar sobre algo muy importante .

Si se te ocurre decírselo a alguien , te dejo castrado y te consideraré despedido .

Abdullah .

Le dio a `` enviar ´´ y se quedó suspirando . Le había dicho a su tío que estaba enamorado de un hombre cristiano . Pero no le había dicho que se trataba de Florián .

Sentado a la terraza del Café Bar Dinarama , Florián Pacheco se sacudió su pelo rubio y se preguntaba por qué su jefe , el atractivo - varonil - estiloso Abdullah El Hakim , lo había citado allí . Ya eran las 9 menos cinco , y conociéndolo como lo conocía , llegaría con puntualidad británica o incluso con unos pocos segundos de adelanto .

A sus 25 años , Florián llevaba tres trabajando para su jefe en el Corporativo El Hakim . Organizando sus reuniones y presentaciones , concretando sus proyectos , enviando circulares y contratos de compra - venta a distintas compañías navieras , contestando llamadas telefónicas , atendiendo sus recados . Y siempre había estado enamorado de él , alimentando en secreto sus sueños con sólo verlo cada día en la empresa que algún día presidiría . Pero aparentemente , Abdullah nunca se había fijado en él , a pesar de que todos en el Corporativo sabían de su homosexualidad .

Le vio llegar a la hora prevista , conduciendo su Audi de color beige . Nervioso , escondió sus muñecas en las mangas de su cazadora de cuero marrón , temiendo que después de tanto tiempo su amado jefe llegase a descubrir el secreto que tanto se había empeñado en ocultar al mundo pero no a su familia . Bajó la cabeza y su voz le vino como si de un coro celestial se tratase .

Buenos días , Florián .
Buenos días , señor El Hakim .

Abdullah se sentó enfrente de él .

Por Mahoma , ¿ cuando dejarás esa timidez de lado ? Me pone de los nervios .
Lo siento mucho , señor El Hakim .
Abdullah - se miraron fijamente y el moreno le sonrió como sólo él sabía hacerlo - . Desde ahora llámame Abdullah y no de usted .
Está bien . . . Abdullah .

Cuando su jefe le tocó uno de sus musculosos brazos , el rubio se alarmó y lo apartó . Lo que hizo que Abdullah sacudiese su cabeza en aparente desaprobación .

Estás enamorado de mí , Floríán - era una clara afirmación y no una pregunta .

Su asistente sintió que sus mejillas ardían avergonzadas .

No vuelvas a decir eso , Abdullah - le pidió - . Estamos en público .
A mí no me importa que todos sepan lo que sentimos entre los dos . ¿ Por qué no me di cuenta antes de lo que sentías ? ¡ Llevamos tres años trabajando juntos !
¿ Lo que sentimos entre los dos ? - Florián se sintió una hormiga ante la magnitud de de esas palabras .
Yo también estoy enamorado de tí , Florián Pacheco .

El bello rostro del rubio empalideció .

No , no es posible .
Entonces tendré que hacer algo para que me creas .

Y sin más , Abdullah El Hakim se le acercó aún más , y besó a Florián Pacheco por primera vez . Un beso que su rubio asistente correspondió con ganas .