Tengo un hijo con mi cuñada

Alguien pensará " inmoral depravado o cualquier calificativo degenerado" pero lo cierto es que el incesto esta documentado aceptado e instaurado en la antigua Grecia, imperio romano y en el Egipto de los faraones era normal en la elite gobernante,

Hola, mi nombre pongamos que es Axel,  actualmente vivo en Burgos y a continuación contare lo que me paso con la mujer de mi hermano, es un relato real y veraz, aunque los nombres no correspondan como vosotros comprenderéis.

Pues bien en mi familia somos tres hermanos, dos chicos y una chica, yo soy el mayor y mi edad actual es de 52 años, mi hermano  Carlos 39 y su mujer 35, hace 15 años que se caso con Ana, en un principio como todas familias íbamos y veníamos juntos , mi hermano ,Ana , Beatriz (mi mujer) y yo, en las charlas de reunión con unas cervezas pues salía el punto picante y es cuando yo vi que mi cuñada Ana me dirigía unas miradas muy lascivas, he de decir que no me considero un Adonis ni soy muy dotado, pero siempre procuro ser bueno en lo que hago y así me gusta decirlo. Pues como decía mi cuñada Ana miraba con una cara de querer saber más y casi que me diría de probar,  una tarde de estas duras de Burgos, nos pusimos a ver una peli no me acuerdo del título ni de la trama, solo sentí una mano sobre mi pierna y como me acariciaba el muslo, yo, no me lo pensé y le cogí la mano y jugué con ella (todo esto bajo las faldillas de la camilla, con mi hermano y mi mujer delante). Creo que fue la adrenalina o el morbo de tener delante a nuestras parejas lo que me animo a seguir un poco más allá y estire el brazo y puse mi mano sobre su pijama, encima de su chochito, nos miramos y casi me invito a meter la mano bajo sus telas.

Que delicia, Sublime note su conejito húmedo,  resbaloso  y tierno, que a sus 20 añitos me parecía que era una niña, encima mi cuñada es pequeñita como la mayoría de las vascas (Ana es Alavesa) pequeñita delgada y con unas curvas que resucitan muertos.  Pues seguiré en el aparte, como iba diciendo toque su conejito con la punta de los dedos y como si fuese una cucharilla en la cuajada se hundieron dentro de ella, ya mojados por completo e impregnados de su néctar no me atreví a moverlos pero cuando los saque para irnos delante de todos, a escondidas, los metí en la boca para probar su jugo.

Al día siguiente quedamos al salir de la oficina para tomar un café, la fui a recoger con mi coche y sin pensarlo dos veces metí la mano bajo la minifalda que traía. Me dijo tranquilo fiera vamos a un sitio tranquilo y déjame que te dé a ti lo que no pude ayer. Pues bien puse rumbo al monte de la abadesa y en un lugar apartado nos pasemos al asiento trasero, me bajo la cremallera y cogió mi polla y la mamo como nunca había sentido, luego me miro y me salto. Ahora hazme eso que dices haces tan bien.  Me dejo pasmado, pero le subí la mini y con la braga puesta se la metí, me encanto sentir su pequeño cuerpo perforado, estaba apretado  mojado y calentito, casi me corrí al instante pero que haces me grito,  tranquila que acabo de empezar le dije,  me quite el pantalón y el bóxer y le saque la braga. Le di tal comida de chocho que parecía que tenía una cazuela de natillas, me comí mi corrida mezclada con sus flujos, guarde un buchito y con un beso se lo pase, pero que cochino eres me rechisto,  me puse encima y se la clave otra vez esta vez sí que se retorcía y tensaba, entre comida de chocho y besos la volvía a penetrar, así estuvimos casi una hora hasta que le dije, ahora te voy a llenar otra vez de leche y esta vez te quedara ahí para que cuando llegues a tu casa tengas toda la braga y muslos mojados.

Luego de ese día hubo mas que ya relatare otro día. Lo mejor de ese día fue que la deje embarazada y nació mi sobrino-hijo.  Cierto es que a pesar de la diferencia de edad mi hermano y yo somos muy iguales, pero en lo personal y maneras mi sobrino- hijo es  igualito a mí.

Aun hoy, llevamos siendo amantes quince años.

Anónimo.