Temporada 2 mis dias en prision 8
Continua la historia en el presidio de luli
TEMPORADA 2
MIS DIAS EN PRISION 8
DIA OCHENTA
Luego de cumplir mi rutina casi a diario con Pedazo, eso quiere decir, dejar que me cogiera a su gusto durante toda la madrugada y al despertar solicitar que le mamara la vergota y tragara su leche, me dirigí un poco cansado a las duchas. Debo decir cansado, pero no saciado.
El baño fue realmente refrescante, me sentía pegoteado por todos los huecos de mi cuerpecito deseado. Así que me sentí como nuevo.
Tomé un buen desayuno, fui a los baños, en fin hice todo lo que tenía que hacer.
Mi día se planteaba un poco aburrido. Pero de pronto me llamaron por el altoparlante. Me requerían en visitas. Era una de las nuevas implementaciones que se hacían en aquella prisión modelo.
Fui a la habitación de encuentros higiénicos. Tal habitación constaba de baño, ducha, condones, en fin, todo lo apropiado para encuentros íntimos. Grande fue mi sorpresa cuando vi a tío Walter parado allí.
__¡Tío Walter!
__¡Cariño!¿Como estás?__ nos dimos un abrazo gigante. El acarició mis nalgas y las apretó seductoramente. Estaba un poco más viejo de lo que recordaba. Hacía tiempo que no lo veía, mucho antes de entrar en prisión
__¡Ese culito sigue tan bueno!!
__¿Como estas… y tía?
__¡Estamos bien!¡Siempre extrañándote!__ acercó sus labios a los míos y nos besamos.
Me dio gusto sentir su lengua dentro de mi otra vez. Su lengua hizo dibujos en mi boca y sus manos no tardaron en desvestirme. Pasaba su nariz por mi cuerpo tirado en la cama de lado a lado.
Besaba mis nalgas, las olfateaba como animal.
__¡No sabes cuánto te extrañé!
__¡No mientas!__ dije yo sonriendo. Walter ya abría mis cachas y entraba con su filoso molusco mojado y rascaba mi anillo limpio y deseoso de aquel macho que me había cogido tan bien años atrás.
__¡Ohh tu culito sabe tan bien, me enloqueces!!!
__¡Ahhh tío eres de maravilla!!!__ su lengua hacia cosas mágicas en mi ojete y mi pija ya se había levantado rocosa y realmente muy empinada, a veces, me preguntaba, como hacía para haber estado cogiendo toda la noche, y tener ganas de que otro macho me metiera su cosa.
___¡Cuando me llamaron para notificarme que estaba en tu lista de visitas, no lo podía creer!!!¡No veía la hora de llegar aquí!!!__ su lengua me atravesaba. Se clavaba en mi ojete y los gemidos implosionaban por doquier.
__¿Tanto me extrañabas??¡¡Ahhh!!__ preguntaba yo haciéndome desear.
__¡No te imaginas cuanto!!!__ dicho esto Tío Walter me giró. Besó un poco mi verga y mis bolas. Las lleno de saliva. Jugó con ellas.
Luego se quitó sus ropas y apareció su garrote alzado al máximo. Rocoso. Duro. Con las venas marcadas. Un tronco excepcional.
__¡Oh es tan lindo Tío!!
__¡Es todo tuyo, acarícialo con tu boquita!!¡¡Anda!!__ engullí el garrote sin pensarlo. Mi saliva lo baño al instante. Los gemidos y gruñidos de Walter empezaron hacerse oír. Le estaba dando placer con mi mamada. El se retorcía apretando mi cabeza para que tragara profundamente. Lo llevaba a lo más hondo. Me ahogaba, pero no importaba quería tener ese bocado en mi caverna bucal.
A medida que avanzaba con mi lengua, el se fue acomodando para que procediera a hacer lo que tanto le gustaba.
Me ofreció su agujero y allá fui con mi lengua, sus desgarradores gemidos me indicaban que lo estaba pasando realmente bien. Mi lengua se metía muy dentro de aquel orificio que a Walter tanto le gustaba que le chuparan. Sus bolas eran recorridas también por mi lengua lujuriosa. Perforé con un dedo el ojete a mil de Tío Walter.
__¡Ahhh eres impresionante, mi Luli querida, ohhhh vas a hacerme acabar en tu boca!!!
__¡Hazlo Tío!!!__ pedía yo
__¡No, aún no, quiero disfrutar de tu ojete, lo extraño tanto, ahhhhh!!!__ yo seguí un rato más chupando y besando el culo abierto de Tío que gozaba a más no poder. Cuando vio que no aguantaba, me quitó del lugar y atacó el mismo mis nalgas a mordiscos y chupones. Se abrió paso y entró en mi anillo dilatado ya de tanta calentura. Chupeteaba mi ojete sabrosamente.
Me aferré otra vez a su mástil y así en 69 estuvimos unos instantes. Mamando, chupando, sobando, mordiendo, lamiendo.
Al rato considero que mi ojete estaba receptivo para que su lanza entrara en mi. Tío Walter apoyo la cabezota de su chorizo en mi entrada. Empujó. Yo lo deje hacer. Un momento después, comencé a mover mis caderas hacia adelante y hacia atrás. La banana entró en mi. Tío taladraba y gruñía mordiendo mi oreja. Chupándola. Apretando mis tetillas bien paraditas. Pellizcándolas. Haciéndome gozar de su potente palanca metida en mi orto que chorreaba jugos.
__¡¡Ohhh extrañaba este agujero glorioso y glotón!!
__¡Me encanta Tío, cógeme!!!
__¡Luli eres tan putita!!
__¡Soy tu puta, Tío!!¡¡Mi colita es toda tuya!¡Ahhhh!!!__ ardía el macho al oír estas palabras y aceleraba sus embestidas fatales. Serruchaba agitado, como un joven de antaño. No parecía pesarle la edad. Aún estaba en forma. Iba y venía en mi túnel ensanchado. Sentía inflarse cada vez un poco más la tararira de Tío. Poco a poco empecé a largar mi semen para todos lados, no sabía que había juntado tanta en tan pocas horas. Me vacié por completo en las sábanas blancas y perfumadas. Mi ojete dilatado pedía leche a gritos, Tío sabía que deseaba ya que me llenara. Apuró y bombeaba rápido y firme. Se aferró a mis caderas, apretó las mandíbulas, y comenzó a retorcer su poronga en mi culo, en tanto largaba chorros espesos de leche que se filtraban en mis entrañas profundamente, llenando el caño. Tío mordía mis hombros y mi cuello, resoplando, y terminando de largar su néctar dentro de mi. Yo me movía apenas, dejando que el hiciera el trabajo. Cayó sobre mi espalda. Latía su espada.
__¡Oh no recordaba que cogerte fuera tan hermoso!!
__¡Me encanta Walter!!
__¡¡Quiero seguir cogiéndote!!
__¡Tranquilo hay tiempo!!
__¡No hablo de hoy!!
__¿Cómo?
__¡Quiero que cuando salgas de aquí te vayas a vivir con nosotros!!¡Quiero tenerte cerca!!
__¡Ohh Tío, Tío, me encanta lo que dices!!
__¡Dime que tu también lo quieres!!
__Bueno veré que pasa Tío, recuerda que está madre también…
__¡Sí mi hermana, claro que recuerdo!¡Piénsalo!
__¡Lo hare Tío, lo prometo!!__ el me apretó contra si, su pija fue saliendo de la funda, rebalsaron los jugos por doquier, enseguida las sábanas se mancharon.
__Venía recordando camino a la prisión…
__¿Qué recordabas Walter?
__¡Aquella vez que tu tía se tuvo que ir por una noche y nos quedamos tu y yo!!…
__¡Oh si claro!!
__¡Te vi allí, desnudo, durmiendo placido, no pude contenerme al ver tu figura, tan hermosa, mi verga se infló de inmediato…me volví loco…y me metí en la cama a tu lado, comencé a acariciarte y tu no te resististe…
__¡Me gusto!!
__¡Claro que te gusto, y más cuando metí un dedo en tu anillo, como te moviste, te sacudiste y tu pija se levantó al instante, yo ya estaba gozando…mi poronga estaba al palo, era una brasa, te envolví en mis brazos, te besé el cuello, tu mismo guiaste mi garrote a la entrada de tu culito limpio, hermoso, empujé y empuje y te fui clavando…ahhh que belleza!!
__¡Si fue tan lindo!!
__¡No pude aguantar muchas estocadas y acabe enseguida!!
__Sí y yo te limpié la verga con la boca, no se desinfló…
__¡No, no se me bajó y enseguida me trepaste y te sentaste en ella!!¡¡Empezaste a cabalgar como un jinete diestro y experto!! Acabaste en mi panza, me llenaste de líquido, eso hizo que mi calentura fuese en aumento!!
__¡Yo busqué tus labios y te besaba y te lamía los labios!!!
__¡¡Ohh como lo recuerdas!!¡¡Luli que diablillo tan putita, tan calentóna!!¡¡Como me cabalgabas, tan intenso, querías más leche, eso buscabas!!¡¡Querías ordeñarme nuevamente, querías secarme!!¡¡Lo decías en mi oído, recuerdas!!
__¡¡Y tu decías no llores como niña, no llores como niña que me voy a venir de nuevo!!
__¡Y a ti no te importaba, y te llene la cola otra vez, mi leche parecía no terminar nunca de salir!!
__¡¡Mira como se ha puesto!!
__¡Se ha vuelto a levantar!¡Solo de recordar!!¡¡Luli, Luli, eres un demonio para los hombres!!__ Tío me beso las tetillas, las empezó a chupar, dedicándoles un tiempo exquisito. Las mojaba y no las soltaba. Su tronco estaba duro otra vez y yo con mis manos lo masajeaba suavemente. Pero con ardor. Con diligencia. Mis pezones duros.
__¡No puedo saciarme de ti Luli!!
__¡No quiero que te canses de mi Tío!!
__¡¡Ohhh me encantas, estos pechitos tuyos son de una perrita, ahhh!!!
__¡Son tuyos Tío cómelos, cómelos, ay, ay, ahhh!!!__ el insaciable calentón metía en su boca mis pechitos, y gemía sudando ya por aquella labor y la fricción de los cuerpos. Los olores abundaban en la habitación.
Me subí a horcajadas y lentamente me fui clavando el sable de Tío, que estaba tan duro como antes. Para mi satisfacción y mi placer. Lo cabalgaba lento, luego fui acelerando, mientras el macho me abría las nalgas, para que el perno entrará fácilmente. Los gemidos iban en aumento.
Nos besamos infinitamente. Chupaba su lengua. La saliva caía por todas las partes del cuerpo de ambos. Me sacudía como víbora con la serpiente dentro de mí. Los suspiros y mi pija se ponían al máximo nuevamente. Tío Walter con una mano me acariciaba el falo creciente, otra vez me haría acabar.
La espada me ensartaba a fondo. Estaba en su esplendor. Corrientes eléctricas atravesaban nuestros cuerpos sudados y ardientes. El macho gruñía gozando. Mi ojete era explorado sabiamente por aquella poronga que tan bien conocía y me daba tanto placer.
Mi cuerpo se retorcía jugando con la aguja que clavaba aquel hombre en mis entrañas. Su rostro indicaba que tarde o temprano explotaría nuevamente. Yo bailaba sobre él. Nos volvíamos a besar, cruzábamos las lenguas inflamadas de placer.
__¡Oh, Luli, me haces llegar, ahhh, ahhh!!
__¡Tío lléname, lléname!!!
__¡Oh sí quiero darte mi leche!!
__¡Sí, dámela, es mía es mía!!__ mientras decía así, iba acabando sobre el vientre de Tío, dando saltos, y saltos. El macho se aferraba a mis nalgas, me pellizcaba. Hacía arder mi piel. Con un grito desgarrador Tío me fue llenando el culito con su leche. El hombre se vaciaba, en tanto, yo caía sobre el pecho ancho de aquel macho que buscaba mis labios y los cubría con su boca, tragándome. Glotón.
Al rato nos golpearon la puerta.
__¡Debes irte Tío!
__¿Ya?
__¡Y si, nos dan un tiempo!
__¿Ya pasaron las dos horas?
__¡Así parece!
__¡No olvides lo que te dije de vivir con nosotros!__ decía mientras se lavaba un poco y luego se vestía.
Finalmente se acercó a mí y besándome desapareció tras la puerta.-