Te deseo
Cuando no puedes dejar de pensar en un hombre y te imaginas todo lo que podrías hacer con el
ESTA VEZ LES CONTARÉ UNA FANTASÍA, ALGO QUE ME ENCANTARÍA HACER CON EL OBJETO DE MIS DESEOS. EL ES UN HOMBRE MADURO, PERO ATLÉTICO, ALTO, FUERTE, CON GRANDES BICEPS, Y UNA SONRISA MUY SEXY.
DESEO
Nos encontramos en una habitación a media luz, lejos de todo, olvidando todo lo que ocurre afuera, uno frente al otro, desabotono tu camisa poco a poco y voy besando tu piel suavemente con cada botón liberado; intentas besarme pero aun no te lo permito, con el corazón acelerado, te desabrocho el cinturón y el pantalón, pero no es momento de quitártelo, te saco la camisa, y la hago a un lado.
Te sientas en la cama, mientras yo me voy desnudando para ti, moviendo con cadencia mi cuerpo, llevo lencería de encaje negro que deja ver mis pezones rosados y erectos y la redondez de mis nalgas; me pongo tu camisa y te lanzo una mirada maliciosa, permanecemos en silencio, solo escuchando nuestra acelerada respiración.
Me monto sentada sobre ti de frente, rozando con mis pezones tu rostro, besas y lames mis pechos y me estrujas las nalgas, las aprietas amasándolas, siento como ya estoy húmeda y lista, pero aún no...
Te empujo con fuerza para obligarte a que te acuestes restriego mi sexo en tu pecho y ato una mascada en tus ojos para q solo te concentres en lo que siente tu cuerpo.
Finalmente te voy sacando el pantalón para ir descubriendo tu miembro bien duro y rico, lo tomo entre mis manos, lo froto, lo beso, elevo la mirada para notar tus reacciones de placer, deslizo suavemente mi lengua sobre él, una y otra vez, como lamiendo un helado, hasta introducirlo en mi boca y darte una buena mamada, tengo el control de tu cuerpo ahora, escucho tus gemidos, como te dejas llevar, y me exito cada vez más, muero por sentirlo adentro.
Yo aun con la lencería puesta, me monto de nuevo sobre ti, te beso en la boca, mordisqueo tus labios, hago a un lago mis bragas e introduzco tu miembro en mi cuerpo, siento un gran alivio, una pequeña explosión dentro de mí al tenerte adentro, apoyo mis manos en tu pecho, cierro los ojos y me muevo sobre ti, primero suave y voy aumentando la intensidad.
De pronto te quitas la mascada de los ojos, te reincorporas y me tomas por la cintura con una mirada de demonio, me das la vuelta y me tiras bruscamente sobre la cama, con la misma mascada atas mis manos sobre la cabeza, me desnudas por completo, separas mis piernas y me vuelves a embestir una y otra vez, con furia, yo grito de placer, en ese momento puedes hacer conmigo lo que quieras.
Como su fuera una muñeca, me manipulas, me pones boca abajo y me acaricias la espalda, besas mi piel, con tu lengua recorres mi cuerpo, que se eriza todo al contacto de tu húmeda lengua.
Sigo atada de manos, me jalas con fuerza las caderas para ponerme en cuatro, y me la vuelves a meter con todas tus fuerzas, y yo grito de nuevo, con una mano me aprietas la cadera y con la otra frotas mi clítoris, dándome mucho más placer, los fluidos escurren por mis piernas.
Estrujas mis senos, los aprietas, los muerdes, me besas con pasión, jalas mi cabello, y yo lo disfruto...