Te amaba y no lo sabía (parte 3)

“ el miedo a sufrir o a fracasar es peor que el mismísimo sufrimiento o fracaso”

Disculpen la ortografía, hago lo que puedo jeje

Te amaba y no lo sabía (parte 3)

Estuvimos así, abrasadas, un largo rato, hasta que ella toma mi mano y nos dirigimos a sentarnos en el sillón, una frente a la otra, solo nos mirábamos tiernamente, ella limpió mis lágrimas con su mano.

MARIANA: no quiero hacerte sufrir, lo siento

SOFIA: jamás pensé estar en esta situación, Mariana, estoy muy confundida… que estamos haciendo?

MARIANA: lo que sentimos.

SOFIA: y que sentimos? Explicame.

Estábamos una frente a la otra, mirándonos a los ojos, tenía que saber, que le pasaba exactamente a ella, ya era inevitable eludir el tema.

MARIANA: sabes que yo te quiero desde siempre porque sos una personita importante en mi vida, pero ahora es distinto, todo ese amor de amiga que te tenia… perdón que tengo… fue cambiando a algo mas profundo, no se como explicarlo… me gustas.

Seguíamos de frente, pero ella ahora bajó su mirada. Yo estaba sorprendida, fue tan directa, ella me quería de otra forma y yo, yo que sentía

SOFIA: para vos es muy diferente Mariana.- Acariciando su mejilla.- Porque es normal que salgas con una chica, pero yo estoy confundía… es verdad no te voy a negar que todo lo que paso me encanto pero… no se si soy así o si quiero ser así.

MARIANA: así como?

Su mirada ya había cambiado, su tono de voz era distinto.

SOFIA: sabes que no soy lesbiana. Todo esto es nuevo, raro para mí.

MARIANA: te parece raro que dos personas se atraigan, se gusten?...por favor Sofia, a mi me parece raro que pienses así, siempre me decías que me admirabas por mi decisión.

SOFIA: recuerdas todo lo que pasaste para aceptar lo tuyo?

MARIANA: estas equivocada, yo me acepte desde el primer momento, a los que les costó aceptarlo fue a m familia.

Me recosté en el sillón y cerré mis ojos, como había cambiado tanto mi vida en unos días, en que situación estaba. Era innegable ella me atraía, pero no, y si es solo curiosidad, y si realmente no es esto lo que siento. Estaba demasiado confundida y con Mariana frente a mi era imposible poder pensar. Ella se paro y comenzó a caminar hacia la cocina.

MARIANA: bueno Sofí yo mi decisión la tome ya hace varios años, creo que ahora llego tu momento.

SOFIA: no podes ponerme en esta situación… aparte, hay algo que vos tuviste en ese momento que yo ahora no. Lo dije en un tono melancólico

MARIANA: que cosas?

SOFIA: una amiga

MARIANA: no digas eso, sabes que siempre, pase lo que pase, decidas lo que decidas, yo voy a estar, nuestra amistad no se va a romper.

SOFIA: yo creo que de alguna manera ya se rompió

Mientras hablábamos yo no la veía porque ella estaba detrás de mi. Luego de decir esas palabras, sentí un silencio muy incomodo, era raro porque ella no es de quedarse callada. Volteo a verla y si estaba detrás de mi parada, tensa y de sus ojos corrían varias lagrimas. Mis palabras le dolieron mucho, era verdad ella juro que nunca se iba afectar nuestra amistad y yo rompo esa promesa con semejante frase, fui una inconsciente. Me levante rápidamente y la abrase.

SOFIA: perdón no quise decir eso, vos sos mi mejor amiga y asi lo será siempre.

Nos abrasamos muy fuerte por un largo rato. Me separo y beso su mejilla, ella solo me mira tristemente, y nuevamente mis impulsos me traicionan apoyo mis labios en los suyo y puedo sentir su dulzura y también sus lágrimas, que hasta allí habían llegado, ella correspondió pero fue un beso suave, muy lento, lo raro fue que la que se apartó esta vez fue ella.

MARIANA: basta Sofia, nos estamos lastimando mucho.

Realmente ella estaba muy dolida, mi rechazo, mis palabras, de verdad no había pensado en ella.

SOFIA: lo siento mucho, no se como manejar esto, creo que lo mejor es que me valla.

Pensé que me lo iba a impedir ya estábamos a altas horas de la madrugada, pero no dijo nada, ni siquiera me miraba.

MARIANA: creo que es lo mejor, cuando no estés mas confundida y sepas que hacer con tu vida hablamos.

Me dijo esto sentada en el sillón sin siquiera dirigirme mirada. Yo salí de su depto. y rompí en llanto, era horrible esa situación y yo fui quien la arruino y dependía de mi que todo mejore o no.

Pasaron 2 días de lo sucedido con Mariana, dos días en los que lo único que hice fue llorar y maldecirme a mi misma por lo estúpida que había sido. Ahora me encuentro totalmente sola. De Simón lo único que sé es que está pasando un tiempo en el campo y por lo visto no quiere saber nada de mí. Mariana no atiende mis llamados y contesta los mensajes muy fríamente, no la volví a verla,  porque sé que cuando lo haga tengo que tener una respuesta y por ahora no es así. En momentos quisiera que nada hubiese pasado y en otros quiero salir corriendo a buscarla y decirle… ¿decirle que Sofía… que?

Intento distraerme, no pensar en eso, trato de hacer algunos trabajos para la universidad, pero me es imposible, mi cabeza no me deja pensar en otra cosa, tengo que hacer algo, asi no puedo estar. En eso suena mi celular, es mi mamá:

SOFIA: hola mami… (jeje muy cariñosa)

MAMÁ: hola Sofi, querida, no me llamás nunca, no se nada de vos, como estas?

Mi mamá es un poco pesada, cuando quiere je

SOFIA: ma estoy bien, si no te llamo es porque estoy ocupada. Como estas vos?

MAMÁ: yo bien, en realidad te llamaba para decirte algo del abuelo

SOFIA: no me asustes, que paso con el abuelo?

MAMÁ: no es nada malo, tuvo una descompensación, pero ya esta bien, solo te avisaba para que después no me reproches.

SOFIA: bueno ma gracias, y sabes que aunque no te llame te quiero je

MAMÁ: yo también hija, cuídate, besos

Lo que había pasado era perfecto, mi mamá me había traído una solución. Les cuento mi abuelo José, es la persona que mas quiero de mi familia je, yo le digo que es un “viejito sabio”, siempre tiene la palabra justa para todos y cada momento. Hacía tiempo que no lo veía, el vive en una estancia a las afuera de la ciudad, un lugar único lleno de verde, con un pequeño lago, mi lugarcito en el mundo je, perfecto para pensar.

No pierdo nada con ir unos días, acá no tengo a nadie que puede ayudar a aclarar mis dudas, voy a perder solo unas clases, pero si me quedo es lo mismo no me concentraría.

Está decidido me voy visitar al abuelo.

No avisé nada a nadie, solo prepare unas ropas en un bolso, dormí en mi depto. esa noche y al día siguiente, bastante temprano, Sali rumbo a la estancia. No habría problemas para quedarme, porque es una casa grande donde viven solo él y dos personas que lo cuidan.

Luego de un poquito mas de una hora de viaje, llegué al lugar, hacia unos meses que no iba, es muy lindo, con una entrada larga, con arboles enormes a ambos lados y al final una casona inmensa y como siempre mi abuelo sentado en el hall, con sus libros y sus perros jeje. De inmediato fui corriendo a saludarlo, el con su carita de sorprendido je

ABUELO: mi niña, que haces por aquí tanto tiempo sin verte

SOFIA: me contaron que una personita no andaba muy bien jeje

ABUELO: me parece que te mintieron, porque aca hay abuelo para rato jaja

Estuvimos hablando un rato largo sentados en el hall, me conto todo lo de su descompostura, hablamos de la familia, de la estancias y mas. Hasta que llegamos a hablar de mí.

ABUELO: y vos mi niña, como estas, que es de tu vida?

SOFIA: todo bien abu,  je mucho estudio, nada mas.

ABUELO: te voy a creer pero, tus ojos no dicen lo mismo.

Eso es lo que me gusta de él, sabe leer la mirada de las personas, pero no insiste en que le cuentes solo se conforma con lo que le dices. Pasé dos día maravillosos, con largas charlas y caminatas con mi abuelo, o hablando con  alguna de las personas del lugar. Realmente me sentía muy bien, pero cada vez que quedaba sola, mi mente me traía todos mis problemas a la luz.

Una tarde decidí ir a caminar sola, llegue hasta un pequeño lago y me senté sobre el pasto, a la orilla, bajo un árbol. Solo observaba el paisaje, dejando mi mente en blanco hasta que en un momento en ella se reconstruyeron todos los hechos, desde aquel bar donde vi por última vez a Simón, hasta el día en que vi por última vez a Mariana. Me dolía mi relación con Simón pero, lo que me estaba destruyendo es la situación en la que estaba con Mariana, cada vez que recordaba esa última noche, mis lagrimas comenzaban a brotar y sentía un nudo en mi estomago. Era innegable la quería… y la quería mas que a una amiga, el solo recordarla me daban ganas de abrasarla, mirar sus hermosos ojos, sentir su perfume y sobre todo sentir sus labios… esos que me hacen perder la cordura. En medio del as lagrimas me veo riendo como una loca, recordarla me hacia feliz. Pero a esa chica es a la que lastime, solo por mis malditos miedos había perdido a una amiga y perdería a la persona que quiero si no me decidía a tiempo.

La noche comenzó a caer, me volví a la estancia, mi abuelo ya estaba preocupado

ABUELO: Sofi , donde estabas, pensé que te habrías perdido.

SOFIA: Sali a caminar un rato, nada mas, es muy lindo este lugar

ABUELO: es muy lindo si, sirve para relajar la mente

SOFIA: totalmente de acuerdo

ABUELO: Sofia, sabes que no me gusta meterme en la vida de los demás, pero desde que llegaste note algo distinto en vos. –yo baje mi mirada, el me conocía más que nadie- Mi niña que te esta pasando? Te veo muy triste?

Era verdad, frente a él me sentía como una niñita, volví a romper en llanto y mi abuelo me abraso, necesitaba sentirme protegida. Estuvimos así un rato, hasta que nos sentamos y él me preguntó

ABUELO: me dijiste que la familia estaba bien, los estudios también, entonces… como está todo con Simón?

SOFIA: con Simón esta todo mal… pero no es ese el tema… hay otra persona.

ABUELO: las vueltas del amor… -sonrió-

SOFIA: no te dije quien era esa persona y menos que estuviera enamorada

ABUELO: jaja, niñita… el solo hecho de pronunciar “otra persona” se te iluminaron los ojos.

Efectivamente, nadie me conoce más que el jeje

SOFIA: estoy confundida… esa persona me dijo que me quiere pero… yo tengo miedo.

ABUELO: a que le tienes miedo?

SOFIA: a sufrir y  hacerla sufrir, a que solo sea un capricho mío, a que no funcione

ABUELO: te voy a decir algo y quiero que me escuches bien “ el miedo a sufrir o a fracasar es peor que el mismísimo sufrimiento o fracaso”… te estás destruyendo antes de intentar, estas fracasando suponiendo que podría ser así y no lo sabes.

Sus palabras me dejaron pensando un largo rato, tenía razón en todo lo que me decía. La amistad de Mariana no volvería jamás a ser la misma y estaba quitando la única posibilidad de estar con ella solo por miedo.

SOFIA: siempre tienes las palabras justas… gracias viejito jeje. Lo abrase pero ahora ya con una sonrisa.

ABUELO: si llegas a darle una oportunidad a ese chico lo quiero conocer jeje

Mi cara cambio por completo, un detalle me falto darle al abuelo, no era ningún chico jeje… era una chica. Pero no quise apresurarme a los acontecimientos así que solo asentí y nada mas.

Pase un día mas en allí y luego decidí volver, no podía escaparme mas de la realidad. Llegue a mi depto. el viernes por la tarde, estaba segura de hablar con Mariana, la iba a llamar pero no, mejor sorprenderla en su depto. Ella sabía que yo estuve unos días en el campo, en uno de los mensajes que nos mandamos se lo conté.

Por la noche me arreglé y tome unos bombones que había comprado de camino, para ella. Tome coraje y me dirigí a verla. Estaba frente a la puerta de su depto, respire hondo y toque. Me atendió ella, estaba hermosa como siempre, al verme sonrió y impulsivamente nos abrasamos sin decir nada

MARIANA: pensé que no te volvería a ver, por Dios nunca más hagas esto de desaparecer así.

SOFIA: me dijiste que volviera cuando tenga una decisión tomada… por eso aca estoy.

MARIANA: no vengas con que… - puse mi dedo en su boca haciéndola callar-

SOFIA: te quiero

Sus ojos retomaron ese brillo que solo una vez pude ver, sus labios formaron una pequeña sonrisa. Pero la que cambio totalmente la cara fui yo porque, no termino de decir estas palabras que de una de las habitaciones sale una chica, muy bonita por cierto, estaba desconcertada, quien era esa chica, me arruino el momento. Mariana seguía mirándome, no reaccionaba, sus ojos estaban clavados en mi. La chica se acerca nosotros y dirigiéndose a Mariana.

DESCONOCIDA: no me vas a presentar a tu amiga… amor?

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Disculpen las demoras pero puedo subir los relatos solo los fines de semana, ya que es el único momento en que puedo escribir. Gracias por interesarse en esta historia. Cualquier recomendación es aceptada. Besos