Tarde especial

Prometi escribir algun dia como fue esa tarde tan especial. No hacen falta mas palabras. Te echo de menos.

Te espero en tu casa. Llegas del trabajo despues de un dia especialmente agotador y estoy en el salon con el televisor encendido.

Despues de darme un beso vas a la habitacion a coger las cosas para darte un merecido baño relajante. Recoges la ropa y pasas otra vez al salon, me ves leyendo el periodico y depositas un beso en mis labios. Me dices que vas a tardar un poco en el baño pues estas cansada.

Cuando llevas un rato dentro, voy a la habitacion y cojo mi camisa de cuadros negros y blanco. Es muy suave y calida y a mi me encanta verte con ella puesta. Cojo un paquete envuelto en papel de regalo y con ellos voy al baño.

Abro la puerta y te veo dentro de la bañera con los ojos cerrados. Descansando. El agua caliente te llega a la altura del cuello. La espuma lo tapa todo, solo se te ve la cara relajada y los pies que reposan en el borde de la bañera. Me quedo unos segundos contemplandote hasta que te das cuenta de mi presencia.

Cuando abres los ojos buscas los mios y preguntas cuanto tiempo llevo ahi. No contesto. Solo esbozo una sonrisa y me acerco a ti. Me arrodillo a tu lado y te beso en la frente. Te hago caricias en la cara y te quito un poco de espuma que tienes en la barbilla. El ambiente huele a fragancia de un aceite que has echado dentro del agua. El espejo del baño esta empañado y no refleja ningun objeto. Te digo que te pongas la ropa que te llevo y pongo debajo del brazo tu albornoz y la ropa que llevaste. Me miras con curiosidad, un esbozo de sonrisa te delata en la cara. Con un dedo escribo en el espejo "ven a la habitacion pequeña". La parte que se borro me permite verte reflejada y veo como lees con una cara divertida pues sabes que te espera un poco de diversion.

Cuando sales del baño te secas con la toalla, no tienes el albornoz pero ves mi camisa de cuadros. Te la pones. Abrochas todos los corchetes menos los dos de arriba. Coges con curiosidad la pequeña caja y desenvuelves el paquete. Al ver el interior una carjacada te invade. Es un tanga. Te encantan y a mi me encanta verte con ellos.

Es rojo. Se abrocha con una lazada a ambos lados. Facil de poner. Facil de quitar. Te lo pones. Te queda perfecto. Vuelves a mirar al espejo. El vapor poco a poco se va disipando pero lees mi mensaje y abres la puerta.

Te diriges a la habitacion. No hay nada encendido en la casa. La luz del salon deja entrever un poco pero conoces perfectamente la casa para evitar golpear tus pies desnudos.

La puerta esta cerrada. La abres. De dentro sale una tenue luz que da saltos. Abres la puerta de par en par y te quedas asombrada. No hay muebles en ella. Esta vacia. En las cuatro esquinas aparecen velas en conjuntos de cuatro o cinco. Son de diferentes tamaños y estan bailando como si de un ritual se tratara. En mitad de la habitacion estan unas mantas puestas una encima de la otra haciendo la forma de una cama. A un lado aparecen unos frascos y una hielera con una botella dentro. Dos copas al lado. La luz de la veintena de velas te permite distinguir que es una botella de tu vino preferido. Me ves al final de la habitacion sentado en el suelo. Te estoy esperando. Llevo los pantalones del kimono y no tengo puesto nada mas. Me levanto y me acerco a ti. El sonido de mis plantas suena en el suelo. Todavia estas bajo el marco de la puerta y acerco mi mano para coger la tuya.

Ninguno de los dos hablamos, no hace falta. Te guio por la habitacion hasta dejarte en mitad de las mantas. Te indico que te arrodilles. Te sientas sobre tus talones mirando a la puerta. Voy hacia ella y la cierro. La habitacion esta caldeada y deja un ambiente muy agradable. Me doy la vuelta y estamos encarados, uno en frente del otro. Te veo especialmente bonita. Me acerco rodeando las mantas hasta situarme detras de ti. Te ayudo a hacerte un recogido en el pelo. Te caen un par de mechones por la nuca, pero nada que una leve caricia no pueda apartar. Me arrodillo detras de ti y cojo uno de los frascos. Vacio un poco sobre la palma de la mano. Un segundo frasco con fragancia a rosas es recogido. Vierto un poco sobre el otro aceite. Empiezo a frotar las manos para calentar y mezclar los liquidos. El aroma sube penetrante y lo respiras. Es un olor agradable. Te pido que te desabroches tres botones de mi camisa. Cuando lo haces tiro de la camisa dejandote los hombros y un poco de la espalda al descubierto. La camisa se mantiene con tus brazos doblados.

Te toco con mis manos. Te pregunto si estan lo suficientemente calientes para darte placer. Me respondes con un gesto de la cabeza. Sigues sin decir palabra. Extiendo con la palma de mis manos el aceite por tu cuello y hombros. Suavemente, quiero lubricarte bien la zona para no hacerte daño con el masaje. Poco a poco incremento la presion. La nuca, los hombros, todo el cuello. Repito varias veces los movimientos y emites unos quejidos de gusto. Presiono con mis pulgares sobre tu cuello en firmes movimientos circulares. Noto como poco a poco la tension del cuello se afloja. Tu cuerpo tambien cada vez se hace mas pesado y dejas de tener tension en la espalda. La relajas y te arqueas un poco en una posicion mas natural. Tus brazos descansan sobre tus piernas y esto hace que la camisa pierda su sujeccion. Me pego un poco mas a ti y tiro de los corchetes de la camisa. Se abre pero no te la quito. Para mi es una imagen de lo mas erotico que jamas pueda ver. Estas con la cabeza ladeada y toda la espalda al aire. Tienes el tatuaje al descubierto. Se te ve el comienzo de las nalgas.

Te beso en la cara. Paso poco a poco mis labios desde tu mejilla en direccion al cuello. Te beso el cuello, los hombros, me detengo en tu nuca. Con una mano levanto los mechones de la nuca y la otra la pongo en tu estomago. Emites un gemido de placer. Se que eso te encanta y te pone un poco mas a punto. Te obligo a que te recuestes sobre mi. Permanecemos de rodillas pero tienes tu espalda pegada a mi torso. Con las manos todavia aceitosas me dedico a pasarlas por tu cuello pero por delante. Bajando por la nuez hasta el nacimiento de tus pechos. Sigo recorriendo todo tu cuerpo por delante. Paso del nacimiento de tus pechos a un costado. La otra mano va del otro costado a frotar todo tu estomago. Por debajo del ombligo. Las dos se juntan en el y suben despacio. Acariciando. El borde de mis manos roza tu pecho pero no llega a subir. Siguen dando vueltas y vueltas por tu cuerpo. Tengo la cara al lado de la tuya. Tu cabeza descansa sobre mi hombro y eso me permite escucahar el ritmo de tu respiracion. Y tambien oir como emites leves gemidos de aceptacion. Al girar mi cabeza para besarte en el rostro subo firmemente mis manos para cogerte los pechos. Me encantan. Me encantan sostenerlos aunque son firmes. Empiezo a jugar con ellos mientras te sigo besando la cara. Intercambio amasamientos con caricias con la punta de los dedos. Noto como emites un quejido mas alto al mismo tiempo que noto como los pezones te se ponen duros. Te estrecho contra mi, te aprieto mas fuerte mientras estoy besando y lamiendote el cuello.

Otro gemido. Es lo unico que se oye. Cojo tus brazos y los llevo para atras. Tocando mis piernas. No quiero que los muevas de ahi. Quiero que estes dispuesta para mi y tu te dejas hacer. Despues de estar un rato jugueteando con tus pechos deslizo una mano hacia el ombligo. Pongo la palma de la mano debajo de el y te aprieto un poco. Mis dedos rozan el borde del tanga que acabas de estrenar.

Poco a poco introduzco mi mano. Noto como voy penetrando al notar tu pubis en mis dedos. Me encanta jugar con el. Meterme mechones entre los dedos y tirar suavemente de ellos. Sigo besando tu cuello, tu cara, tu mandibula, suavemente. Sigo jugando con tus pechos, tus pezones, firmemente. Me gusta mordisquearte la oreja y mientras doy el primer bocadito a tu lobulo mi mano profundiza mas hasta encontrar mis dedos una humedad. Estas muy mojada. Estas muy excitada y yo tambien. Abres un poco mas las piernas como dandome consentimiento. No me hace falta, es un trofeo que quiero tomar y tu quieres que lo gane. Paso mis dedos por toda la humedad, noto poco a poco como los labios se adaptan a las caricias que hacen mis dedos. Encuentro el trofeo, esta especialmente hinchado, muy sensible y paso mis dedos bordeandolo, lo meto entre dos de mis dedos y juego un poco con el. Sigo mordisqueandote la oreja y tu con tus manos aprietas mis muslos. Te esta gustando y a mi me entusiasma sentir como disfrutas.

Bajo un poco la mano juego con la entrada de tu sexo. Noto la apertura e introduzco los dedos corazon y anular en el. Hasta el fondo. El dedo indice y el meñique abren tus labios. Penetro los dedos y los dejo unos segundos. Quiero ver, quiero notar como te comportas. La presion de tus manos me indica que voy en buen camino. Pongo la palma de mi mano sobre tu clitoris y empiezo a presionar sobre el. No muevo los dedos, solo presiono con la palma. Movimientos circulares, firmes, cada vez mas rapidos. Empiezas a balancear la pelvis indicandome el ritmo a seguir. En la habitacion solo se oye ya el sonido entrecortado de tu respiracion. Cada vez aprietas mas la cadera. Cada vez aprietas mas tus manos en mis muslos. Se que estas cerca de llegar al climax y te muerdo el lobulo de la oreja. A los pocos segundos emites un grito ahogado de placer mientras cierras las piernas y aprietas mi mano. No intento sacarla, seria imposible por la presion que ejerces en ella y tambien porque se que todavia te dura el orgasmo. Tu cuerpo esta tenso, tus uñas me aprientan los muslos y poco a poco vas aflojando.

Separas las piernas poco a poco y puedo sacar la mano totalmente humedecida. Te abrazo fuerte mientras poso mis labios sobre tu cara. Te tengo asi durante un par de minutos. La respiracion poco a poco se torna mas lenta. Te tengo abrazada y tienes las manos recorriendo y acariciando mis antebrazos. Te giras un poco y nos besamos en los labios. Sin separarnos, sin dejar de besarnos apasionadamente vas dandote vuelta y te arrodillas frente a mi. Echas la camisa a un lado de la habitacion. Estas desnuda. Solo el tanga cubre parte de tu cuerpo. Nos besamos durante unos minutos. Solo nos separamos para mirarnos a los ojos y ver como sonreimos. Sigue sin haber una sola palabra.

Te miro desnuda y me encanta. Las velas bailan dibujando sombras sobre tu cuerpo. Te ayudo a recostarte sobre las mantas y me echo sobre ti. Estoy metido entre tus piernas y te beso dulcemente los labios. Mi lengua empieza a jugar con tus labios hasta que los entreabres. Muerdo tu labio inferior, tiro de el suavemente y le pego pequeños mordisquitos. La barbilla es la que continua, tu garganta, tu cuello. Te beso apasionadamente al limite de dejarte una marca delatadora en el cuello. Bajo un poco mas. Mi cuerpo poco a poco se va despegando del tuyo. Juego con mis labios y mi lengua con tus pechos. Lamiendote entera. No dejo un solo centimetro sin tocar. Me entretengo en tus pezones unos segundos. Siguen erectos, siguen sensibles. Mis manos pasan por tus caderas mientras voy deslizando otro poco mi cuerpo. Alterno mordisquitos en tus caderas. Tus manos estan jugando con mi pelo y noto como empujones casi imperceptibles me indican que siga bajando. Te hago caso y bajo la cabeza hasta la altura de tu sexo. Tienes las piernas reposando sobre mis hombros. Saco la lengua y juego con tu sexo por encima del tanga. Noto la humedad, esta mojado y ya tiene un sabor a ti. Me encanta. Nuestras manos estan cogidas entrelazando los dedos y a cada lametazo que doy nos apretamos mas y mas fuerte. Te suelto, y con mis manos cojo los lazos del tanga y tiro de ellos. El tanga se queda abierto pero sigue tapando tu sexo. Retiro el tanga y se notan en tus labios un brillo delatador. Me alegro que estes disfrutando de tu noche.

Me incorporo un poco y juego con mis dedos en tu sexo, pasando los dedos por tus labios, clitoris, profanandote a veces. Cojo sin que te des cuenta un trozo pequeño de hielo y lo llevo a mis labios. Dejo que poco a poco se deshaga en mi boca y no dejo de mover mis manos. Mientras separo tus pliegues descubro el clitoris y le pego un suave lameton. Esta muy sensible y no te agrada mucho. Asi que bajo a la entrada de tu sexo y jugueteo con ella. La frialdad de mi lengua hace estremecerte. Meto la lengua hasta donde mas no puedo y la deslizo por las paredes, hasta que la temperatura de la lengua se vuelve normal. Estoy bebiendo de ti. Tus manos vuelven a tocarme a cabeza, me indican otra vez que estoy en buen camino. Mis dedos estan otra vez masturbandote como antes. Te aprieto la zona y te encanta. Noto como cada vez tienes mas contracciones. Subo los labios hasta el clitoris y lo meto entre mis labios. Las manos suben por tus caderas. Mis labios succionan firmemente. Empiezas a emitir pequeños gritos. Los pulgares se hunden en tus caderas y sujetas mis muñecas. Te aprieto las caderas mientras sigo tomandote.

Tensas tu cuerpo. Arqueas la espalda y chillas. Aprietas las piernas sobre mi cuello y yo espero unos segundos a que aflojes un poco. Los pulgares siguen apretando tu caderas y tus manos me dejan sin circulacion mis muñecas. Poco a poco te relajas. Levantas la cabeza y posas tus ojos sobre los mios. Emitimos una carcajada complice y dejas que me incorpore. Tumbandome sobre ti y sin dejar de besarnos tomas la lazada de mis pantalones y tiras de ellos. En un movimiento sincronizado de tus piernas y las mias hacen que el pantalon se pierda a nuestros pies. Estamos los dos completamente desnudos tocandonos piel contra piel. No podemos dejar de besarnos apasionadamente. Estoy completamente erecto y quiero penetrarte. Estoy metido entre tus piernas y las pasas por encima de mi cadera. Me abrazas con ellas. Estiro los brazos todo lo mas que puedo. Me alejo de ti pero comienzo a penetrarte. Poco a poco. Hace pocos minutos que tuviste el segundo orgasmo y estas un poco sensible. Cada vez la penetracion es mas profunda. Cuando llegamos al tope nos miramos y empiezo a moverme sobre ti. Tienes las piernas cruzadas y agarras mis brazos. Empiezo a subir el ritmo, controlando profundidad con un poco mas de rapidez. Pasa el tiempo y seguimos freneticamente. No dejamos de mirarnos la cara de placer que tenemos los dos. Bocas abiertas, respiraciones entrecortadas, gemidos de placer. Tras unos minutos de movimiento mi cuerpo se deja caer bruscamente sobre ti y penetro hasta lo mas profundo. Mi pelvis se encarga de apretar la tuya, casi no hay deslizamiento, unos segundos de apreton y un grito de los dos inunda la habitacion. Aprietas tus piernas contra mi. Arañas mi espalda mientras mi cabeza esta en tu cuello y mis dientes empiezan a morderlo.

Nos quedamos quietos unos segundos. No quiero salirme de ti. Tu sigues prohibiendome la salida con tus piernas. Poco a poco nos aflojamos. Mi cuerpo yace sobre el tuyo, salgo de ti. Las velas casi se consumieron. algunas asi lo han hecho. El ambiente huele a ti y a mi.

Me incorporo y cojo las dos copas. Vierto vino sobre ellas y te ofrezco una. Mientras la sostienes entre tus dedos te miro dulcemente. Tienes el pelo medio suelto, el moño apenas se mantiene. Me siento a tu lado y deposito un suave beso en tus labios y te digo que te quiero.