Tarde de compras 5

• Nadia por el momento no tengo ni un pero. Dije yo con una cara iluminada por un deseo cumplido.

• Eso es lo que buscamos, clientes satisfechos; y usted tambien ...Dijo Nadia mirando a Claudia.

• La verdad bastante bien, aunque me quede con las ganas de que nos dieras tu el masaje. Dijo Claudia con su voz picarona.

• De verdad que lo siento casi mas que usted, pero no me es posible.

• Por favor no me llames de usted, sobre todo cuando te acabo de decir que me gustaria que te metieses en la cama con nosotros.Me llamo Claudia cariño y el Darneb.

Supongo que Nadia estaba acostumbrada a ser atacada a diario, pero no creo que fuese una mujer quien lo hiciese ...creo que Claudia consiguio incomodarla.

• Claudia de verdad es una oferta mucho mas que tenadora pero yo aqui ...trabajo.

• Nadia no quiero molestarte, perdona si me he pasado ..pero hija me pareces tan sesual que no puedo resistirme a intentarlo.

Nadia y Claudia se intercambiaban piropos y lindezas, pero como bien habia dicho Nadia ...aqui y ahora no era posible, por lo que intente sacarlas de esa bucle.

• Chicas como comprendereis si no es mas, por lo menos igual que vosotras ..me apetece ese plan, pero o esperamos a que termines de trabajar o ....

Nadia y Claudia se miraron y me miraron, buscando que presentara la propuesta..

• Pero mientras decidimos eso, creo que Claudia y yo necesitariamos una ducha ...como funciona eso ? seguro que lo teneis mas que pensado...

Nadia nos explico que efectivamente, tenian duchas, baños, saunas ....una extensa carta de servicios ..y nos fue explicando los diferentes servicios..Claudia escuchaba atenta y yo la miraba para ver su reaccion ante las diferentes propuestas. Habia de todos los tipos y colores..muy light, mas subiditas de tono y unas uuuuummmm..mucho mas que tentadoras.

Claudia abiertamente una vez que Nadia nos conto todos le pidio consejo y recomendacion.

• Claudia, lo mismo lo que a mi mas me gusta no es lo que a ti mas te apetece; pero yo encantada decirte mis preferencias.

Nadia nos dijo que ella era sumisa, y que lo que la gustaba era ser utilizada, por eso la ducha mani atada era su favorita.

• Cariño y por que piensas que eso a mi no me va a gustar, me encanta sentirme domada y sometida como una perra. Dijo mirando hacia abajo huyendo de mis ojos como temiendo que me asustase.

Aunque todavia estaba destrozado por el asalto, mi cuerpo no se como se empezo a revelarse sin control. Mi mente recordaba todas esas fantasias que habia tenido con Claudia siendo sometida y utilizada...no daba credito ..mi mente habia leido a la suya ..era yo brujo...o habia perdido totalmente la cordura ...fruto de alguna droga que habian puesto en la comida.jajajaja

• Bueno...bueno ..bueno..tenemos aqui a dos yeguitas ...vaya ..vaya ..vaya..pues podremos montar una pequeña cuadra quizas.

Las mire a las dos detenidamente, saboreando mis presas con la mirada ....

• Nadia ...a que hora sales de aqui ...

• Me quedan un par de horas....

• Pues primero vamos a dar una ducha a la perita Claudia, cuando terminemos te daremos una direccion y alli te esperamos para conocerte mejor.

Nadia asintio con la cabeza y se fue a prepararnos la ducha, vendria a avisarnos cuando todo estuiese listo.

Me costaba horrores controlar mi imaginacion y poner en orden mis ideas, debia ser lo suficientemente estricto para no defraudar a Claudia pero no debia cruzar ninguna frontera que ella no quisiera traspasar. Mi mente no dejaba de funcionar, aunque ahora era hora de hablar y consensuar.

• Claudia, me has sorprendido mucho esta noche. Dije adoptando una cierta distancia para crear esa atmosfera relacional, Amo sumisa.

• Osea que quieres ser dominada...pero sabes que eso conlleva unas normas y una disciplina, verdad.

• Si lo se, y las acatare.

• Si señor para ti...

• Si señor las acatare.

Algunas veces la vida te da sorpresas que incluso ni te mereces, y esta era una de ellas. Que estes obsesionado por alguien y que tu fantasia maxima fuese que disfrutase con lo que tu disfrutas..se cumpla ...no tiene precio. Esas palabras sonaron a musica celestial en mis oidos.

Estuvimos charlando mientras Nadia venia a avisarnos, hablamos de las normas, la disciplina, las obligaciones ...en definitiva construyendo las bases de una relacion que iria mucho mas alla del sexo y la lujuria.

Con nuetras batas puestas fuimos cruzando la sala, aropados por gemidos, suspiros y lamentos. Llegamos hasta una puerta que Nadia nos abrio, un joven nos esperaba mientras que nuestra amable camarera veia como nos alejabamos hacia al interior.

Caminabamos detras del chico por pasillos con puertas a ambos lados, hasta que se detuvo delante de una; nos la abrio e indique a Claudia que entrara.

• Caballero creo que encontrara todo lo que necesita en el armario, si no es asi ...y desea cualquier cosa;  junto a la puerta tiene usted un timbre.

• Asi lo hare si es necesario.

La habitacion respiraba dominacion, en las paredes baldosas blancas como sifuera una de esas antiguas clinicas, todo era de metal pulido, en la pared habia infinidad de sujeciones metalicas para poder hacer firme cuerdas o cadenas y asi inmobilizar a las perras; poleas para poder hizar. Estabamos en la cueva del Marques de Sade del siglo XXI.

Yo me estaba relamiendo como cuando estas delante del escaparate de una pasteleria, te lo comerias todo ...pero no queria empacharla el primer dia ....en los buenos sitio siempre hay que dejarse cosas para hacer para poder volver.

• Quedate de cara a la pared....Le dije con voz firme y seca.

Abri el armario y mis ojos se perdieron entre tanto vicio ...dios mio ...era un arsenal con todo tipo de artilugios algunos no me llegaba ni a imaginar su utilidad o si en realidad la podrian tener.

Me fui a lo sencillo ....ya buscariamos otras ocasiones para disfrutar del resto de la artilleria.

Cogi lo necesario y me fui acercando a Claudia con paso firme y decidido sin dejar por un minuto de mirarla a los ojos, segun me acercaba ella descendia la mirada. Abri su kimono, la despoje de el con suavidad pero con determinación, dejando girar sobre ella misma para poder colocarla de cara a la pared. Estire sus manos una a una haciendolas firmes a las esposas que enganche a las cadenas que colgaban del techo,  me aleje para recojer el resto de los instrumentos y comenzar a bañar a mi querida yegua.

Continuara