Tarde de amigos III

Tarde de amigos III

Comenzaba a arrepentirme por haberlos provocado pues sabía que no acabaría muy bien…

Estaban extasiados por la situación, me encontraba tremendamente mojada pero a la vez con un gran pánico interior por la situación que había causado, mi amigo quitándose la camisa, le dijo a sus colegas.

• Joder, hay que llevarla al cuarto. -

sabía perfectamente lo que significaba, esta noche seria realmente larga…

Me tumbaron en la cama, completamente desnuda, sentí como mis pechos rebotaron, y vi como mi amigo una vez más movía su verga bien erecta ante mi, separandome las piernas y mirándome directo a los ojos, sentía como su glande acariciaba mi clitoris, y recorria mi vagina húmeda, y de una embestida metió entera su verga en mi, comenzó a moverse bruscamente, mientras sus amigos con la verga en sus manos jalandola frente a mi cara, la metían en mi boca por turnos, jugando con mis pechos y tocando mi clitoris, era una explosión completa de sensaciones, uno de ellos le dijo algo en el oído a mi amigo, este sonrió y saco su verga de mi, se acostó boca arriba en la cama, y me puso encima de él metiendo su pene en mí nuevamente, uno de ellos se levantó encima de mi amigo y metió su verga en mi boca hasta el fondo, de pronto sentí como otro de ellos, el que tenía el pito más grande y gordo, comenzó a tocar mi ano…

Tenía una verga en la boca, las manos de este tipo me sujetaban la cabeza, no podía voltear a ver lo que sucedía ni decirles que pararán, pues nunca lo había hecho por detrás, sentí como su miembro se postraba en mi orificio, y lo comenzaba a meter poco a poco, me dolía muchísimo, pero sentir eso a la vez que tenía otra verga en mi vagina y otra en la boca… Era demasiado, cuando por fin entro la mitad de su pene en mi ano, comenzó a moverse más rápido y duro, mi cuerpo reaccionaba ante cada embestida, lubricando más cada orificio, de pronto, sentí como se llenaba de leche mi boca y mi garganta, sujetando fuerte mi cabeza con su verga dentro, impidiendo que sacara o escupiera la leche, hizo que la tragara toda, el otro sujeto había estado en una esquina simplemente observando y pajeandose tomó la posición del tipo del oral, y metió su pene en mi boca también, su venida fue diferente, pues el no quiso que la tragara, se vino en mi cara y después con su verga la esparcio por toda mi cara, pasando su miembro aún duro por mis ojos, boca, nariz, mejillas, era repugnante el olor, el sabor, la situación en la que estaba, esa escena excito tanto al que me estaba dando por el culo que solo pude sentir su semen caliente dentro de mi, no se cuanto haya echado pues me inundó en dos segundos mi interior, saco su verga flasida de mi culo y una cascada de leche detrás de ella, el tipo del oral no perdió oportunidad y cambio posición para ensartar en mi culo su verga, que aunque ya se había corrido aún estaba dura, me sentía completamente hinchada, mojada y asqueada de tanta leche, el que se había corrido en mi culo fue a mi cara a que se la chupara para limpiarle la verga, comencé a lamerlo, sintiendo cada fluido que estaba en su pene, se sentó a un lado de la cama junto con su otro compañero que ya se había dormido, y yo aún con dos vergas en mi cuerpo, sintiendo sus gemidos, su sudor en mi cuerpo, sus vergas hinchadas y mojadas en mi interior, sus alientos en mi oreja y mi cara, mi cuerpo exhausto y sudado, nuevamente llenando mi culo de leche, pero esta vez en simultáneo con mi vagina, sacando sus vergas ya eyaculadas de mi, dejándome a un lado vaciando sus fluidos poco a poco, mientras ellos se limpiaban el sudor y se vestían, como si nada hubiera pasado, uno de ellos se acercó a mi oído y me dijo…

• Que buena putita eres, nos veremos pronto, mi amor. -

Salieron de la casa y yo me hundí en un sueño profundo...