Tania... La hermana de mis sueños

Mi hermanita y yo enfrascados en una tormenta herótica...

TANIA…LA HERMANA DE MI VIDA

Esta historia se desarrolla cuando sus protagonistas, yo (Daniel, 18 años) y Tania (Mi Hermana, 17 años), se dejan de ver el uno al otro como hermanos y se comienzan a ver como personas del otro sexo.

Desde toda la vida nos hemos llevado de maravilla, aunque nos gustaba mucho molestarnos, siempre éramos muy unidos. Ella siempre con sus amigas, yo siempre con mis amigos, pero algo de ella me llamaba la atención, desde algunos días atrás sentí que me trataba de otra forma, mas cariñosa, mas amable, mas linda.

Mi familia siempre había estado junta, nunca salía alguno solo, o sin permiso, siempre fue así.

En una ocasión, dejó a la vista de todos que yo le parecía atractivo, pero mamá dijo que se fijara en otros muchachos, ya que éramos parientes, pero desde esos momentos, mi hermanita, que ya estaba bastante bien desarrollada, como era lógico para su edad, tenía unos pechos de buen tamaño, firmes y apetecibles, un culo paradito que ningún hombre ignoraba al verla pasar, y todo esto complementado por unas piernas lindas y una carita angelical.

Cada ves que podía me dejaba ver sus encantos, y hacía como que era sin querer, pero yo no le hacía mucho caso, yo tenía bien metida en mi cabeza que era mi hermana y no podía haber nada, pero en alguna ocasión ya le había dicho que me gustaba. Volviendo a eso que hacía, por ejemplo, yo estaba cenando en la sala y ella pasaba por ahí y tiraba algo, y decía: "ups".

Se agachaba dejando ver por debajo de su camisoncito sus ricas tetitas o a veces su culo. Una de esas en que yo estaba acostado en el sofá oyendo música (como supondrán mis padres no estaban), ella llegó y se sentó en el sofá poniendo sus nalguitas a la altura de mi pene (yo estaba acostado de lado) y con tanto movimiento, mi verga no pudo resistir y tuve una gran erección, cuando Tania la sintió volteo a verme y sonrió

  • ¿De que te ríes Tanny?-

  • De lo que te pasa por aya abajo- Respondió ella

  • ¿De que hablas?- le dije

  • tienes una erección, y es por mi- soltó una risita inocente

Después de eso, comenzó a meter en nuestra plática al sexo y platicaba que varias de sus amigas ya no eran vírgenes y que ella no sabría que hacer si fuera su primera ves.

Entonces preguntó - ¿Tú eres virgen Dany?

Después de soltarle un chorote, y de que ella insistiera con la pregunta, accedí a responderle

  • No-

  • ¿Y te gusto tu primera ves? -

  • Si, pero mejor, cambia el tema Tania –

Después hizo una pregunta que me sorprendió, sobre todo con la cara que puso al hacerla:

  • ¿Harías el amor con una chica como yo? –

  • Cambia el tema Tania – le dije algo fuerte

  • Solo responde –

  • Si, si lo haría, no estas nada fea hermanita-

Al decir esto, pude ver en su cara, una sonrisa que nunca le había visto, se acercó a mí y preguntó:

  • ¿Te gustaría cojerme ahora mismo?

No lo dude y le dije que ningún chico se le resistiría, que si ella quería, yo también.

Entonces nos dirigimos una mirada de gusto y enseguida me pidió que la siguiera a su cuarto (o alcoba), para estar más cómodos, y les juro que así fue.

Al llegar ahí dijo que me pusiera cómodo, que ella saldría del baño en u momento, y así lo hizo, salió con un camisón que descubría las mitad de su tanga y se transparentaba para dejarme ver su brasier, y sus pezones marcados en el.

  • ¿Lista hermanita? – le pregunté tomándola de las manos.

  • Para lo que tu digas Dany –

Al escuchar eso la abrace y por primera ves en la noche nuestros cuerpos se unieron, entonces nos comenzamos a besar y la verdad sabía como, y lo hacía muy bien, pude poner mis manos en sus nalguitas y levantarla, después de bajarla, me empujó a la cama y se quitó el camisón, entonces se sentó abierta de piernas en mi pecho, para después quitarse el brasier y tomar una de mis manos poniéndola sobre sus tetas, que comencé a moldear y a apretar con dulzura ella me bajó el pantalón mientras yo me ocupaba de sus ricos senos, en un momento mi verga estaba en sus manos, y la comenzó a masturbar lento y con suavidad. Bajé mis manos y de nuevo las coloque en sus nalgas, que ya no tenían la tanguita azul rey.

Con un movimiento para levantarme logré que se sentara en mi enorme erección y acomodé mi cabeza en la entrada de su vagina virgen y comencé a metérsela suavemente en el momento en que comenzó a gemir con mas intensidad, cuando la tuvo toda adentro me dijo que quería que me comiera enteras sus tetas, que las estaba cuidando para mi, y así lo hice, comencé a morderlas y chuparlas y eso, junto con la penetración tan movida, tuvo tres orgasmos juntos y yo deje toda mi leche en su vagina, después de esto acabamos cansados y nos quedamos dormidos en su cama y despertamos como a las dos de la mañana, descubrí que mis padres ya habían llegado, y por suerte no habían asomado a las recamaras, por que Tania y yo estábamos dormidos juntos, abrazados y desnudos.

Decidí que lo mejor sería bañarnos y dormir cada quien en su cama, cuando Tania se metió a la regadera, pude ver desde afuera su culito y pensé que era ese momento o después no se podría.

Cuando estuvo de espaldas a la puerta del baño, entré y me metí con ella a la ducha, metí mis manos debajo de sus brazos y agarré sus pechos, ella solo dijo:

  • ¿Aún quieres mas?, si, yo también-

Entonces se lo metí por atrás, al sentir que entraba, ella se recargó en la pared y comenzó a gemir con más fuerza que nunca, después de 20 minutos de tener mi verga en el culito rico de mi hermanita y mis manos en sus preciosas tetas, me fui a mi cuarto y despertamos como si nada, cada quien en su cuarto y desayunamos como siempre.

Espero les haya gustado, fue un placer compartir mi experiencia.