Tambien me los follo yo
Tan convencida que le hice caso, me puso su culo y pollita en la cara y ella empezó a tragarse mi rabo,
una vez que quede por internet con un jovencito putita, aquella perra decía que tenía 18 añitos recién cumplidos pero creo que tenía 16 como mucho, después de hablar mucho con ella y conocernos por internet, pasamos al vídeo por Skype, estaba muy buena, buenas curvitas y un culo decente, que además se abrió para que lo viese bien, entonces sin más decidí ir a verla a su ciudad, pille el coche y fui, cuando llegue la fui a buscar, era un viernes y la lleve al hotel de 2 estrellas que reserve, la subí a mi cuarto, nadie nos dijo nada, es más aquello parecía abandonado.
En el cuarto la puto se fue al baño a emputecerse cuando volvió, era toda una zorra.
Llevaba un conjunto de encaje blanco con un suje que apenas contenía algo, pero sexy igualmente, un cuerpo totalmente depilado y perfumado, una carita delicada bien maquillada con ojos verdes a juego con su peluca y labios negros sexy, un tanguita ajustado que dejaba ver unas nalgas impresionantes, y una pollita pequeña pero erecta, era una monada de putita.
Me acerque a ella la bese, ella temblaba y me puso las manitas en el pecho, era muy bajita mediría 1,50 como mucho, era mi putita peque. La mire a los ojos la bese y la atraje hacia mi por la cintura, ella empezó a quitarme la camisa y devolverme el beso, empecé a bajar a su culo, era duro pero tierno, cuando metí mi mano entre sus nalgas para tocar su ano, dio un respingo a lo que la sujete más seguí bajando y al mismo tiempo saque mi polla para que la tocase, ella ni lo dudo empezó con un tocamiento suave y luego paso a pajearme y pudo notar como mi polla crecía por segundos, la putita saco su pollita y empezó a tocar con ella mi rabo, me gustaba como lo hacía, era temblorosa pero gracil, después nos hizo una paja juntando nuestras pillas y poniendo cara de vicio mientras me besaba y me aferraba una nalga.
Esa zorra se puso mi polla entre sus piernas y empezó a follarse como una mujercita, mi polla estaba muy dura, yo estaba cachondo y ella chorreaba por su culo y su pollita, me lanzo en la cama y se puso encima de mi, me besó y me pidió un 69, que se lo hiciera que le comiese todo, que ella me haría una mamada de las buenas. .e lo dijo tan convencida que le hice caso, me puso su culo y pollita en la cara y ella empezó a tragarse mi rabo, ya me lo has visto así que sabes que es grande. Por mi parte yo no pude aguantar y me comí esa pollita de putito, era muy pequeña y casi no se movía, pero sabía a lubricante de fresa,ella gemía cual cerda en celo y me pedía que le comiese el culo, cosa que no dude en hacer, abrí sus nalgas y ahí lo vi, un ano suave, depilado, joven, exultante de energía con unas nalgas fuertes y suaves, pero lo que más me llamó la atención fue su aroma, era un olor muy suave a fresa y pude ver que ella zorrita se había limpiado el ano y llenado de lubricante de fresa con efecto calor, no lo dude, le di un beso en el ano, a lo que ella salto pero gimió, le mordió una nalga y abrí las dos de par en par, me acerque y empecé a comerme ese ano delicioso, joder que delicia sabía a fresa y era pequeño y estrecho, mi lengua entraba con dificultad, aquello empezaba a sacar fluido y ella estaba muy cerda, su pollita estaba muy dura, me comía la polla como si no hubiese un final y se golpeaba las nalgas con las manos dejándolas rojas, metí mi lengua hasta el fondo e hice succión tanto que la putita se corrió en mi pecho y se quedó quiera un rato, supongo que tuvo tal orgasmo que no lo aguanto más.
Pero yo no me iba a quedar así, la aguante un poco más ahí, pues la tenía encima y ella mi polla en la boca, así que la levanté con cariño, le sonreí la bese y ella de decisión propia me limpio el pecho a besos., Me abrazo y me pidió que la hiciera mujer, que no me detuviese, quería sentir mi polla en su culo, quería que literalmente la hiciera un puta.
La mire con lujuria y la lance contra la cama, busque el lubricante de ella en sus cosas, al encontrarlo, quite la tapa y lo metí directamente en su culo metiendo más aún del que habia, luego Hunter mucho su ano y nalgas, por último use mucho en mi polla, le di la vueltala apolle contra la cama y le puse una almohada debajo para quedar levantado, entonces deslice mi polla por la raja de ese rico culito y puse mi polla en su ano, empuje y metí el glande, ella gimió de dolor y placer, estaba muy lubricado y estrecho, era muy rico, era el mejor ano que he follado en mucho tiempo, ya me conoces Vane, sabes que no me detengo y follo con fuerza sobretodo cuando veo que no quieren seguir, pero esta no, se dio la vuelta me besó y me pidió que la metiese más al fondo.
Así lo hice, empuje más y mi polla entro más al fondo, ella se estremecía y gemía más duro, su ano me apretaba más aún, notaba como el lubricante me calentaba el pollón, y como ella volvía a estar dura, me gritaba que mi polla era lo mejor que había, que le metiese más polla y más fuerte, seguí empujando hasta que noto sus nalgas en mi pubis, así me quedé un rato, aquella estaba súper caliente, empezó a moverse el culo como una zorra, y cada vez más duro, ya no aguante mas, así que la sujete de la cadera y empecé a romperle el culo muy duro, ella gemía de placer con los ojitos cerrados. Vi como llevaba su mano a su pollita y empezaba a masturbarse, puta cerda, doble palcer, me puse más caliente así que le di con más fuerza y potencia. La levanté y bese mientras le daba la vuelta y la follaba como una señorita, me empezó a mirar y pude ver la lujuria en si misma.
Esta muy cachondo y extasiado así que la sujete de las nalgas y la levanté conmigo sin sacarle la polla de su culito, en el aire empecé a dollarla, aquella no se lo creía, era como una sueño porno hecho para ella, se sujetaba a mi cuerpo y recibiría mis pillados aumentados por su propio peso, me besó otra vez se acercó a mí oído y me dijo que se iba a correr que por favor me corriese con ella, me pareció tan delicada y tierna que acepte, la levanté en el aire por última vez empalandola en mi polla mié tras ella se corría y yo le llenaba el culo de leche.
Nos vamos los dos y nos quedamos dormidos mientras nos besábamos.
Pasamos el resto de la tarde-noche follando como dos enamorados cachondos, le enseñé muchas cosas, ella estaba muy por la labor de aprendizaje para su futuro, al acabar mi polla estaba roja y ella casi no podía sentarse. Me besó y me dio las gracias por hacerla mujer de verdad.
No volví a verla