Super Doll Licca Chan (4)
Licca se enamora de otra persona olvidando a su madre, pero lo que mas le gusto fue el sexo.
Super Doll Licca Chan IV (Gracias Por Revivir A Izumi)
Licca pensaba en Misty, no se podía quitar la imagen de la mente al verla como realmente era, con esas grandes tetas y su coño con vellos verdes, sobre todo lo buena que era para el sexo, lastima que fuera un demonio que quería raptarla.
Hace tiempo apareció una niña misteriosa llamada Catherine de cabello azul y ojos morados, ella reanimaba a Izumi así que Licca tenia que agradecerle de alguna manera.
O.- ¿Qué te parece si le llevas flores?
L.- Buena idea preciosa lo hare.
Licca beso a su madre por la excelente idea, lo hizo hasta que sin darse cuenta ya estaba cogiendo.
Cuando terminaron Licca fue a comprar las flores y se dirigió a la casa de Catherine.
Lo que nadie sabia era que Catherine era hermafrodita y ese día se estaba cogiendo ella sola, pero llego la princesa y le corto la inspiración, así que se puso la ropa y bajo a recibirla.
C.- Licca, que sorpresa ¿Necesitas lago?
L.- No, solo venia a darte las gracias por reanimar a la Dama Protectora Izumi, pero no sabia como así que te traje flores.
C.- Gracias, déjame ponerlas en agua, para por favor Licca entro y cerro la puerta- pero hay muchas formas de agradecerme.
L.- ¿Cómo cuales?
Catherine se acerco a Licca y la iba acorralando contra la pared.
C.- ¿Qué te parece si matamos el oso a puñaladas? ¿O si le damos leche al gatito?
Licca entendió a la perfección.
L.- En pocas palabras me quieres coger.
C.- Si pero no lo digas así, mejor di que le vamos a dar leche a tu gatito.
Licca solo sonrió mientras Catherine se agachaba y le plantaba un beso en su boquita de caramelo.
Licca recibió a esa lengua gustosa, ahí descubrió que besaba muy tiernamente, era habilidosa moviendo su lengua y probando ala princesa.
Catherine le quito la blusa y dejo a Licca en corpiño y pantalón, la niña de cabello azul solo quería sentir la calidez del cuerpo de Licca.
L.- Besas muy bien, y sabes delicioso.
C.- Tú no te quedas atrás princesa.
Licca sonrió y siguió besando a Catherine como si fuera su pareja olvidando a Orie.
Catherine empezó a tocarle su culito por arriba del pantalón, se sentía muy bien, aun así la niña de ojos morados era muy hábil con sus manos y su boca, era una experta.
Licca mientras se besaban pensaba que si Catherine comería su boca inferior igual, por lo menos eso esperaba.
Catherine le mordió los labios mientras le desabotonaba el pantalón y bajaba la bragueta, luego la bajo y se lo quito ala rubia.
Licca estaba en corpiño, pantaleta y calcetas, lo que se alcanzaba a ver de su cuerpo era hermoso.
Catherine le acaricio el sedoso cabello rubio a la princesa, era hermoso con un olor a chicle delicioso.
Licca metió las manos por debajo del vestido de Catherine y acaricio sus piernas hasta que después cayó y lo que vio Licca la dejo muda.
De la pantaleta de Catherine sobresalía el glande de su pene, se veía rojo con líquido preseminal
L.- ¿Tienes pene en vez de vagina?
C.- Tengo los 2, pero ¿Nunca has comido un pene de verdad?
L.- No jamás.
C.- Prepárate a probarlo.
Catherine se quito la pantaleta y la rubia vio esa verga palpitando.
Licca abrió su boquita y se metió la verga de Catherine, era muy rica, el olor a macho y el olor a hembra que tenia se combinaban en el aire, ese olor era extraño.
Licca estaba tan idiotizada con la verga de Catherine que no advirtió que no tenia corpiño y unas pequeñas tetas colgaban sobre Licca.
La princesa sentía como esa verga palpitaba dentro de su garganta mientras u lengua la recorría, era delicioso.
C.- Muy bien Licca, lo haces rico princesa, ya viene tu lechita llena de calcio.
Catherine se corrió en la boquita de Licca, esta sintió el semen de la niña de ojos morados estrellándose en su garganta, la rubia comió todo, luego se saco la verga y la estrujo hasta que salió la última gota que bebió.
L.- Era delicioso.
C.- Vaya no tuve que decirte que te los comieras.
L.- Hace tiempo descubrí que el producto de los sexos se come, también que tiene proteínas.
C.- Ven, vamos la cama.
Catherine la tomo de la mano y al llegar a su habitación la tiro en la cama, ahí vio las pequeñas tetas de su amante de cabello azul.
L.- Bésame por favor.
C.- Pero después te vas a amamantar ¿De acuerdo?
L.- Si lo que tu digas.
Catherine beso a Licca muy suavemente, tanto que hizo que la rubia se enamorara de ella, lastima que ya era casada.
Catherine la termino de besar y la princesa se dispuso a comer sus tetas, aun estaban duritas, era la primera vez que iba a comer unas tetas de niña.
Licca abrió su boca y empezó a comer las montañas de su amante las cuales mamo y lamio, luego tomaba los pezones y los mordía con mucho cuidado de no lastimarla, esas tetas eran sabrosísimas y muy suaves, dignas de una dama.
La princesa tomaba una tetita y la lamia toda, luego tomaba la otra y la besaba, luego también la recorría con su lengua.
La rubia succiono el pezón queriéndole sacar leche, pero jamás fluyo, aun así siguió chupando los morados y erectos pezones.
El pene de Catherine creció de nueva cuenta listo para lo que siguiera, aunque lo que en verdad quería era jugar dentro de la pequeña princesa rubia de ojos color miel.
Licca se acostó en la cama de nuevo y Catherine le acaricio su ardiente cuerpo con sus calientes manos, las paso por el estomago y por sus muslos, luego le quito el corpiño y pudo ver su plano pechito el cual comenzó a lamer.
Licca sintió delicioso cuando la lengua de la reanimadora de Izumi hizo contacto con su piel, la verdad pensó que su alma se iba en la lengua de la niña de cabello azul.
Licca acaricio el cabello de Catherine mientras esta saboreaba el pecho de la princesa.
Catherine lamio todo el pecho pasando por los pezones y como estaban erectos los alcanzaba a tomar, era excitante.
La verdad Catherine no le tenia respeto ala princesa, solo la quería para coger o como ella le decía para "darle leche a su gatito".
Catherine no paraba de lamer, lo que pasaba es que el pecho era una delicia pero tuvo que bajar y lamio su vientre, el cual también beso con mucha ternura.
Licca solo sentía una suave lengua pasando por su cuerpo, se sentía delicioso, pero sintió más rico aun cuando Catherine mordía su vientre plano y lindo.
Catherine subió y beso a Licca de nuevo.
C.- ¿Te gusta esto princesa?
L.- Claro, la verdad ya tenia ganas de hacer el amor contigo.
Catherine la siguió besando hasta conquistar su boca, así que la pudo recorrer libremente reclamándola en su nombre.
L.- Chúpame el coño.
C.- No princesa, llámale conejito, esas palabras no pertenecen a alguien de la corona.
L.- De acuerdo, chúpame el conejito.
Catherine bajo y le quito la pantaleta a la rubia con los dientes y vio la rosita rajadita de Licca lisa a diferencia de la suya que ya tenia algunos vellos azules.
Catherine lamio la rajita, luego la abrió y chupo adentro circularmente.
Licca se dejo llevar por la excitación y el placer, así que solo se aferro a la cabecera de la cama y comenzó a gemir, luego flexiono las piernas para darle paso libre a Catherine.
C.- Bien princesa, tu si sabes ser una buena lesbiana.
Licca supo enseguida que esa manera de chupar su boquita inferior era la manera en que la besaba en su boca superior.
L.- Te amoooh Catherine mmm
Catherine solo chupaba, y como le encanto el sabor de ese coño, nunca jugos con el clítoris para que no se corriera tan rápido.
Catherine le mordía los labios como si fuera una boca, a la rubia le encantaba como lo hacia, sobre todo cuando los tomaba con sus labios.
Licca seguía aferrándose a la cabecera de la cama, y no aguanto más, así que acaramelo la boca de la reanimadora de Izumi.
Licca la aprisiono con sus piernas impidiéndole escapar, Catherine no tuvo otra opción mas que volver a devorar el liso, caliente y húmedo conejo, era exquisito.
A ala princesa le encantaba sentir el aliento de Catherine sobre su coño, ya que la excitaba mas, la niña de cabello azul pensó que ese morado clítoris no podía crecer más pero estaba muy equivocada, ya que se alcanzo a asomar por entre los labios vaginales.
Catherine lo tomo y comenzó a jugar con el, la princesa sonreía y gemía, ya que su amante lo hacia de una manera muy especial y con mucha ternura, lo que nadie sabia es que era la primera vez que chupaba un sexo (masculino y/o femenino).
Licca se corrió de nuevo llenando a Catherine de sus ardientes jugos, luego abrió las piernas y la dejo salir.
C.- Tus jugos son delicioso, a decir verdad jamás había chupado un conejito.
L.- Pues lo hiciste muy bien, ahora bésame, quiero probar mis jugos.
Catherine subió y la beso, y como la rubia supuso, quedo el sabor de sus jugos en la boca de la niña de ojos morados.
Mientras se besaban Licca acariciaba el gran falo de Catherine, luego lo tomo y trato de introducírselo en su concha, la niña de cabello azul enseguida se dio cuenta.
C.- Aun no princesa.
L.- Pero ya quiero que le des lechita a mi gatito.
C.- No te preocupes, tenemos todo el tiempo del mundo.
Catherine la siguió besando y la princesa siguió acariciando el pene con sus delicadas manos.
L.- ¿Quién te enseño a besar?
C.- Aprendí sola ¿Me podrías comer mi gatito?
L.- Con gusto.
Licca bajo y vio ese coñito con uno que otro vello color azul descolorido al igual que su cabello.
Licca lamio la rajada, lo que hizo que Catherine se retorciera de placer, así que ella misma la abrió y la princesa comenzó a chupar.
Ese conejito era el más delicioso del mundo, aparte de que era muy suave y ardiente, igual que su verga.
Licca vio su bombón completamente morado y erecto, luego lo tomo con sus labios y lo empezó a jalar, después lo mordisqueo con ternura para no lastimar a su acompañante, esta solo gemía.
Licca lo movió en círculos con su mojada lengua, su amante ya no gemía, gritaba del infinito placer que su princesa le causaba.
C.- Princesa, eres una diosa en el sexo.
Licca sonrió y siguió comiendo el rico clítoris con habilidad y destreza.
C.- Te amoooh princesaaaaah.
L.- Silencio, déjame seguir trabajando.
Licca siguió y Catherine no pudo mas, así que le dio de beber ala princesa la cual todo todos los jugos, luego paso al pene y lo lamio una sola vez como si fuera una paleta.
C.- Mámalo.
Licca comenzó en el glande el cual solo lamio, luego degusto todo el tronco, después de lo metió en la boca y empezó a succionar.
C.- Si sácale tu lechita, eso es, así la tendrás cuando tu quieras.
Licca la mamo demasiado bien hasta que Catherine le dio su lechita, eso fue una experiencia sensacional, ya que aun no terminaban los orgasmos de la chupada de coño, era una experiencia indescriptible.
Catherine tomo a la princesa y la coloco boca arriba, luego la beso en su boquita de caramelo, esa saliva era muy sabrosa.
Catherine se despego de la rubia y beso toda su cara, luego paso toda su mojada lengua, eso le encanto a Licca.
La reanimadora de Izumi lamio todo el cuello de la princesa la cual solo gemía al sentir el contacto de la lengua de su amante con su cuerpo.
La niña de pelo azul y ojos morados comenzó a lamer el rico pecho con amor saboreando los pezones que eran una de sus partes más ricas y deliciosas, así que Catherine siguió comiendo.
Catherine lamio su trayectoria hasta el estomago, ahí jugo en el ombliguito con mucha ternura.
La niña de ojos morados chupo y lamio ese estomago de vainilla de una manera deliciosa, Licca se volvió loca.
L.- Esto me encanta, el sexo me fascina.
C.- ¡Me lo hubieras dicho antes!
Catherine hizo sufrir ala princesa, ya que le devoro las ingles y su aliento lo sentía muy cerca de su vagina, así que Licca solo se retorcía al sentir ese aliento.
Catherine bajo a los muslos y los lamios, mordió y beso como lo haría una dama, o como alguien se lo haría a una princesa.
La reanimadora de Izumi devoro todas las piernas y paso a los lindos piececitos los cuales consintió como solo ella sabia hacerlo de una manera sumamente especial.
Catherine regreso al coño, lo olfateo para comprobar si en verdad quería ser chupado, era cierto, al menos eso quiso pensar.
La niña de cabello azul lamio esa gordita vagina por fuera, luego la abrió y comenzó a lamer con más fuerza.
La rubia gemía lo más fuerte que podía, esa lengua le daba un placer infinito, solo le acariciaba el azul cabello a su amante.
Catherine jugo con el clítoris, mientras tomaba las manos de la princesa aprisionándola.
Por fin Licca se corrió de una manera deliciosa dejando escapar sus mieles dándole de comer a su preciosa amante.
Catherine la volteo y comenzó en su parte posterior, donde le mordió el lóbulo de la oreja un poco mas fuerte que sus otras partes, eso le encanto a Licca.
C.- Me gustas mucho.
Licca se sonrojo como tomate y no supo que decir solo un tímido "gracias".
Catherine devoro el cuello por detrás de la rubia, esta solo sentía la lengua recorriendo su femenino cuerpo.
La reanimadora de Izumi bajo y recorrió la espalda con su lengua húmeda y tibia, hasta que se quedo sin saliva, así que beso a Licca para reabastecerse.
Catherine siguió lamiendo la espalda de la princesa, era sabrosísima, pero bajo a sus piernas las cuales devoro por detrás.
Catherine bajo mas y volvió a comerle esos pequeños pies con ternura y amor, en verdad le gustaban esos piececitos.
Catherine termino y subió a besar el culito con mucho amor, ya que beso todas las nalguitas las cuales también amaso, mordió y lamio con lujuria, la rubia solo se estremecía.
Catherine le abrió las nalgas y comenzó a comer, fue el beso negro mas rico, largo y profundo de su vida, tanto que Licca se corrió dejando un gran charco.
Catherine se acostó boca arriba, era el turno de Licca, así que también comenzó en su boca entrelazando sus juguetonas lenguas.
Licca le mordió sus labios y bajo al cuello el cual empapo para seguir bajando a las tetas.
Licca las comenzó a morder con mucho cuidado de no lastimarla, luego tomo los pezones y comenzó a mamar como si fuera una linda bebita rubia de ojos color miel.
Licca se pasaba de una teta a otra saboreando las 2 como una bebe puta, y en parte lo era.
Licca termino con esas tetas y fue lamiendo hasta el vientre donde beso y lamio de una manera especial, era toda una experta en el arte de chupar.
Licca casi dejo encharcado el estomago de tanto que chupo y lamio, era deliciosa, con un sabor entre dulce y salado.
La rubia continuo en los muslos, mordiéndolos y besuqueándolos de una manera muy tierna y femenina digna de una princesa.
Licca llego a los pies y los degusto tal y como Catherine lo había hecho, de una manera sumamente especial.
Licca regreso al conejito y empezó a devorarlo, los pequeños vellos azules del coño de Catherine picaban en la lengua de la princesa.
Licca lo comió por dentro de una manera muy suave y deliciosa haciendo que su amante gimiera más y más fuerte hasta que no gimió sino que grito de placer.
La princesa localizo su botoncito del placer y comenzó a juguetear con el, lo jalaba y recorría como si fuera un pene pequeño de arriba hacia abajo y viceversa hasta que Catherine no pudo mas y acaramelo la boca de Licca con varios orgasmos simultáneos.
Licca bebió todos esos jugos y llego al pene el cual recorrió con su lengua de una manera deliciosa.
L.- ¡Que rico palo tienes!
Licca lo devoro como si su vida dependiera de eso, lo recorría de arriba hacia bajo y enredaba su morado glande con su lengua, eso le encantaba a Catherine, tanto que aullaba de placer
Licca se metió todo el falo de su amante en su boquita de caramelo y lo comenzó a mamar, ya que tenía mucha sed y quería su lechita.
Por fin Catherine se corrió y le dio su leche caliente a la princesa que era lo que esperaba, así que comió toda su lechita fortaleciéndose de calcio.
Licca la volteo y le mordió el lóbulo de la oreja tal y como ella lo había hecho, a la niña de cabello azul le encanto como lo hacia su princesa, era genial.
Licca continuo en la espalda lamiéndola de una manera muy deliciosa y especial, a Catherine le gusto como lo hacia era una experta.
Licca fue hacia los muslos y los comió por detrás, eran deliciosos, muy ricos, Catherine solo sentía esa lengüita recorriéndola, se sentía exquisito.
Licca termino con las piernas y paso a los exquisitos pies los cuales también engullo con hambre, eran sumamente ricos con un toque salado.
Licca regreso al culito y beso las nalgas suaves y amasables de Catherine, era algo sensacional y lo fue más cuando las lamio y mordió, eran exquisitas.
Licca le abrió las nalgas a Catherine y pudo ver su delicioso ojete, así que introdujo su lengua y comenzó a comer su agujero posterior.
Catherine solo sentía esa lengua en su rico agujero penetrándola de una manera deliciosa, era algo que nunca había sentido.
No lo he mencionado, pero la verdad era la primera experiencia lésbica de Catherine a diferencia de Licca que ya era experimentada.
Licca chupaba tan rico que Catherine se corrió dejando un gran charco, luego se desplomo.
La princesa se acostó a su lado y se empezaron a acariciar tiernamente, también se daban besos cortos y mojados, claro que esto aun no acababa, solo tomaban un pequeño descanso antes de continuar.
La rubia se coloco sobre Catherine y la comenzó a besar más intensamente, lo que hizo que se volviera a excitar la 100%.
Las 2 sentían la calidez de sus vaginas sobre sus cuerpos mientras entrelazaban sus lenguas comiéndose ávidamente.
Mientras las 2 se comían restregaban sus cuerpos y Licca ya no solo sentía la vagina de su amante sino también el pene. Era sensacional sentirlo erecto y palpitando.
Catherine la abrazaba con sus brazos, pero después también utilizo sus piernas dejando a Licca sin posibilidades de escapar.
Catherine tenía los pies sobre las nalguitas de Licca, se sentía delicioso, así que se siguieron besando mas profundamente y con amor como si fueran hombre y mujer.
Licca se despego un poco de Catherine.
L.- ¡Ya cógeme por favor! Perdón ¡Ya dale leche a mi gatito!
Catherine la acaricio, luego chupo 2 de sus dedos.
C.- Tranquila, tenemos tiempo.
Catherine ensarto los 2 dedos en el coñito de Licca y los comenzó a mover dentro de ella, sobre todo en el clítoris, se sentía hermoso.
Licca le agradeció con tiernos y calientes besos lésbicos, los cuales le encantaba a Catherine.
L.- Me quiero casar contigo.
C.- Princesa, tu ya eres casada.
L.- Por ti soy capaz de divorciarme.
C.- No, es mas excitante que estés casada y tengas una amante con quien engañar a tu esposa.
L.- ¿Tú serás mi amante?
C.- Si, y cogeremos todos los días, quiero decir, le daremos leche al gatito todos los días.
A Licca le encanto la idea de tener una amante para serle infiel a Orie, era muy excitante y caliente.
L.- Te amo.
C.- Y yo a ti princesa.
Licca siguió besando a Catherine, esta siguió masturbando a la rubia hasta que se corrió, pero no basto en haber manchado una vez a Catherine.
L.- Más, más por favor, quiero más.
Catherine chupo los dedos y los volvió a introducir, Licca pego un aullido de placer gracias a su amante de ojos morados.
Licca volvió a besar a Catherine, no se podía despegar era su adicción, era difícil dejar de alimentarse de sus labios.
Licca se corrió gracias a los hábiles dedos de Catherine, luego se bajo de su amante y reposo un poco al igual que la reanimadora de Izumi que tenía los labios hinchados de tanto que la princesa la había besado.
Licca pensaba en que mas podían hacer, aunque lo que en verdad quería era tener ese gordo y largo falo dentro de ella, solo que Catherine aun no la quería joder.
La princesa estaba boca abajo y Catherine aprovecho para acariciar la parte trasera del cuerpo de Licca, era muy suave y tersa, no por nada era princesa.
Catherine llego al culito, así que introdujo un dedo entre sus nalgas que entro fácilmente en su ojete desapareciendo, ahí movió el dedo un poco, la rubia solo gemía.
L.- Te ammmo Caaatherine, te amooooh, te quierooo mucho.
Licca no paraba de repetir que la amaba y la quería, estaba súper enamorada de ella.
C.- Yo también princesa, yo también.
Catherine siguió jugando en el ojete de Licca con su habilidosa mano, la rubia se quemaba por dentro y ya quería sexo de verdad.
Catherine la penetro ahora con 2 dedos jugando de una manera formidable, era sensacional.
La niña de cabello azul y ojos color morado metía los dedos los mas dentro que pida, la rubia solo dio un respingo, pero después se relajo increíblemente.
L.- Tener sexo contigo es delicioso preciosa.
C.- Lo se, lo has demostrado, eres perfecta.
Catherine introdujo un dedo mas, ya eran 3 penetrando a la princesa de la "Tierra De las Muñecas".
Catherine los metía y los sacaba haciendo gozar a su preciosa y femenina amante.
Licca comenzó a llorar pero no de tristeza sino de felicidad y amor por su pareja, estaba apunto de pedirle el divorcio a lady Orie pero aun no estaba segura, su madre era muy linda y aun la amaba ¿Qué podía hacer?
Catherine metió un cuarto dedo, los 4 los enterró hasta el fondo, sintió que le iban a salir por la boca.
La amante de Licca saco su mano y la coloco boca arriba, donde vio sus lágrimas.
C.- Disculpa princesa ¿Te lastime?
L.- No, lloro por que me encanta que me hagas esto.
Catherine se sentó en el plano estomago de Licca, tomo su pene y se empezó a pajear.
Licca iba a poder comprobar si en verdad le gustaba a Catherine cuando se corriera, que no tardo mucho en suceder.
Catherine tuvo una archirequeterecontrasuperultramega corrida, lanzando chorros en la cara de Licca, cuello, pecho y estomago, luego se levanto y dejo semen en los mulsos y los pies.
Licca no lo pida creer, no solo le gustaba sino que la hacia vaciarse con solo verla.
Catherine desparramo los chorros que dejo en la cara por toda su bonita carita igual que lo que dejo en el cuello.
Catherine desparramo los del pecho por sus tetitas, luego desparramo los demás por el estomago y unos que le quedaron los unto en su pequeña pero ardiente conchita.
Catherine bajo y desparramo los que dejo en los muslos por todas las piernas y los demás por los pies, así Licca quedo bañada en semen.
Algo de su lechita quedo en sus dedos y la unto en los labios de Licca, estaba lista para volver a devorarla.
A Catherine le encantaba comer su propia leche, así que chupo la cara de Licca devorando todo su semen, luego la beso y comieron de esa rica lechita caliente entre las 2.
Catherine siguió en el cuello comiendo todo el semen de su propio pene, era exquisito.
Catherine continuo en el pecho y bebió toda su ardiente leche, luego fue al estomago y comió todo el semen.
Catherine fue alas piernas y las limpio al igual que sus pies de una manera deliciosa, luego regreso al coñito.
Catherine comenzó a chupar esa panochita con leche hasta limpiarla, luego se reincorporaron y comenzaron a restregar sus vaginas.
Catherine metió un labio en Licca y viceversa, era delicioso, fue más rico aun cuando se corrieron, ya que los jugos de Licca trataron de entrar en su amante y viceversa.
C.- Es hora de darle leche a tu gatito princesa.
L.- Por fin, es lo que esperaba.
Licca y Catherine comenzaron a hacer el 69, la princesa chupaba todo y panocha, pero después se introdujo el pene mientras que la reanimadora de Izumi le chupaba la panocha y el culito.
Licca ensalivo todo el rico pene, después ya solo lo mordisqueaba mientras Catherine seguía comiéndole la vagina.
Luego Catherine se coloco boca arriba con el pene súper parado más duro que el acero y súper ardiente, listo para la penetración.
C.- Cabálgame princesa.
L.- De acuerdo.
Licca se iba a sentar pero Catherine la detuvo.
C.- Espera.
Catherine abrió un cajón, saco un condón y se lo puso.
L.- Esto no sirve.
Licca le quito el condón y lo aventó, luego se sentó en el pene que entro por la vagina.
C.- Oh princesa, que rica vagina posees, es delicioso, y es aun mejor sin condón, no me importa embarazarte.
L.- O Catherine ahhh, es genial tener un pene de verdad dentro de mi mmm, eres mi macho oooh.
Licca le amasaba las tetas a Catherine mientras le daba unos sentones fenomenales, luego se agachaba y la besaba y por lo rico que sentía arqueaba la espalda hacia atrás.
Las 2 cambiaron de posición, Licca se acostó boca arriba, Catherine le levanto las piernas y la cogió de nuevo.
Catherine hacia el mete-saca y veía las caras de satisfacción y las sonrisas, además oía los gemidos de su preciosa princesa.
C.- ¡Me corro, me corro!
Catherine se iba a salir así que soltó las piernas de Licca, esta ni tarda ni perezosa la abrazo con las piernas impidiéndole escapar hasta que se vacio.
L.- ¡Que delicia es sentir tu leche corriendo dentro de mi!
C.- ¿No te importa quedar embarazada?
L.- No, y si es de ti menos, no me importa lo que mi madre haga, tú serás mi marido, ahora cógeme por el culo.
Catherine la volteo y comenzó a chuparle el culito, luego lo dilato aunque no lo necesitaba, ya que tiempo atrás lo había hecho.
Catherine comenzó a embestirla tomándola por la cintura.
Lo hacia de una manera fenomenal y deliciosa, la rubia gemía y se retorcía de placer hasta que se corrió dentro de su culito.
L.- Es delicioso sentir tu leche caliente en mis entrañas.
C.- Wow, es la primera vez que me corro dentro de alguien, cuando yo me cogía sola jamás me vine dentro mío por miedo a quedar embarazada.
Catherine se puso en 4 y Licca llego restregando su vagina en el culito de su amante.
L.- Quisiera cogerte, me gustaría tener un pene como tu, es genial sentir uno de verdad.
C.- Mira saca uno de mi cajón, no es de verdad pero me podrás coger.
Licca se lo coloco y la comenzó a coger por el culo, por supuesto, primero con la lengua.
Licca lamio todo el rico culito, luego lo dilato metiendo varios dedos y rápidamente quedo abierto, la rubia comenzó a embestir.
Catherine ya no era virgen tampoco del culo, así que Licca la embestía de una manera fenomenal enterrando esa gran espada en el ojete de la niña de ojos morados hasta que las 2 se vinieron.
Licca la volteo y le empezó a dar por la panochita con fuerza, Catherine gemía y se retorcía del placer que la princesa le proporcionaba, era delicioso.
Licca no se cansaba y le dio hasta que se corrieron 5 veces con 10 orgasmos simultáneos cada una.
Las 2 quedaron acabadas, pero valió la pena por todo el sexo que hubo esa tarde.
Ya ninguna de las 2 pudo mas y cayeron en un profundo sueño, y cuando despertaron era de noche.
Catherine se vistió al igual que Licca y la acompaño a su casa por si Misty salía al encuentro pero no sucedió.
Licca se despidió de Catherine con un beso francés, luego entro a su casa y su madre la abordo.
O.- Cogiste con ella ¿verdad?
L.- No preciosa, yo te amo.
O.- Eso lo veremos.
Orie cogió con Licca, esta tenia miedo de que rescatara algo de semen de Catherine pero no sucedió, tampoco percibió el sabor del semen en su cuerpo.
Orie no percibió tampoco el sabor de la saliva de Catherine y es que desde que se casaron celaba mucho a su niña.
Desde ese día las situaciones fueron más difíciles con Orie, siempre que llegaba de trabajo, besaba a Licca, se ponía el pene, la cogía, se corría y dormía.
A Licca eso no la dejaba satisfecha pero sabia que contaba con Catherine para satisfacerse.
Licca solo esperaba poder divorciarse de su madre y casarse con su verdadero amor: Catherine.
Ella la hacia sentir especial, y Licca se sentía feliz con ella, Catherine también, eran la pareja ideal.
El metabolismo de las personas de la "Tierra De Las Muñecas" avanzaba más rápidamente que el de la gente normal, pero lo que nadie supo es que:
Aquella vez que cogieron por primera vez una célula crecía en el vientre de Licca, que como es de la "Tierra De Las Muñecas" su metabolismo avanzaba mas rápido, a su edad ya menstruaba.
La célula que crecía era el hijo de Catherine, imaginen el problema que la princesa tuvo en casa.
¿Fin?
Continuara