Sumisa en la red social 3.

Anais y Emilio se entregan a los deseos de Javier.

CONTINUACIÓN DE SUMISA EN LA RED SOCIAL 2.

Despues de nuestro encuentro, en el parking del centro comercial, estuve sin tener noticias de Anais, más de 20 dias, yo habia hablado con mi amigo Iker, era el de la tienda de pearcing y tatuajes en malasaña, le comente lo que tenia con Anais, y me dijo que en el momento que ella apareciera por alli me llamaria, conforme pasaban los dias, las posibilidades disminuian, pero un buen día, un martes por la tarde sono mi movil.

Iker.

  • Javi, que tal sabes una cosa?.

Javier.

  • No me digas que esta alli Anais.

Iker.

  • No aun no, ha llamado para coger cita y viene en 2 horas, me ha dicho que tiene 2 argollas y un pearcing, y que yo se donde se lo tengo que poner, dime donde se los pongo?

Javier.

  • Pues quiero que las 2 argollas, se las pongas en sus pezones, y el pearcing en su clitoris, explicale, por favor Iker, que el colocar los 3 objetos, significa que me pertenece y que su novio es consciente de ello, a ver que te cuenta, haz fotos en cuanto termines y me las envias por email, gracias Iker un abrazo.

Iker.

  • Adios.

Me fuí al gimnasio, e hice tiempo para que Iker me enviara las fotos, cuando llegue a casa, encendí el ordenador, y abri mi email, donde encontre las fotos de Anais, una de ellas estaba sin camiseta, no se le veia la cara solo sus tetas, con 2 argollas de plata en los pezones, los tenia un poco inflamados y de un color más rojo de lo habitual, en la siguiente se veia a Anais con las piernas abiertas sentada en la camilla de Iker, justo en el clitoris tenia el pearcing con 2 bolas y una barra de plata que las unia, eso si que lo tenia muy inflamado, no se apreciaba en las fotos la inicial de la letra J, eso lo tenia que ver en directo, conteste a Iker dandole las gracias, y comentandole que ya le pagaria cuando fuera a por allí, tras el email para Iker, decidi enviar uno a Anais.

Javier.

  • Hola Anais, he hablado con Iker y me ha dicho que ya has colocado en tu cuerpo lo que te pedí, espero que tambien le explicaras a Emilio tu novio, que tu eres mi sumisa y el un cornudo, para demostrarmelo enviame una foto de los dos desnudos, y cada uno con un folio escrito, en el tuyo pondra sumisa y en el suyo cornudo, espero esta foto y hablamos.

Con esto sabria a la perfección si Emilio estaba de acuerdo en que Anais, fuera mi sumisa y el un cornudo, no se hicieron esperar y sobre las diez de la noche, recibí una foto en mi correo, eran ellos dos, ambos desnudos con el folio sobre sus caras, y con los titulos exigidos por mi, Anais estaba preciosa, se le veian perfectamente la argollas en sus pezones, no tanto el del clitoris, Emilio estaba excitado en la foto, su pene estaba algo erecto, pense que le gustaba tanto la situación como a Anais, tras ver la foto les envié un nuevo email, indicandoles las ordenes para el dia que nos ibamos a conocer.

Javier:

Anais, con el pearcing que te he colocado no puedes mantener relaciones sexuales en 3 semanas, por tanto nos conoceremos el primer viernes del mes que viene, Tienes que vestir lo más provocativa que puedas, Emilio puede ir como desee, a las 23:00 horas estareis en la cafeteria Jose Luis en el paseo de la habana, preguntar en la barra, cual es la mesa de Javier Perez, y más tarde llegare yo.

En ese momento nos conoceremos los 3 y hablaremos de vuestras obligaciones, recuerda nada de relaciones, ni mansturbaros, ni tu ni el cornudo, nos vemos el viernes.

Pasaron las 3 semanas, era una noche estupenda del mes de junio, hacia calor pero a esa hora ya refrescaba, yo estaba en la cafeteria desde las 23:10 y aun no habian llegado, en un principio pense que no vendrian, segui tomando mi cerveza en la barra cuando los vi aparecer por la puerta, el llevaba un pantalon de pinzas color negro y una camisa blanca, era como yo de alto, 175 pero bastante mas delgado, moreno y con el pelo engominado, ella le seguia, estaba preciosa, llevaba una minifalda blanca muy ajustada, y arriba una camiseta de tirantes color negro tambien muy ajustada, unas zapatos blancos de tacón blancos, pasaron delante de mi y dijeron buenas noches, pude ver a Anais por detras, tras la falda se le adivinaba que llevaba tanga, al igual que yo lo vio todo el bar que no perdia detalle de ella, tambien me fije que llevaba sujetador negro, ya que los tirantes de la camiseta y el del sujetador no estaban juntos, escuche como preguntaban al camarero por la mesa de Javier Perez, y les indico cual era, era al fondo del salon junto a una ventana que da al paseo de la habana, en ella habia tres sillas, ellos ocuparon dos y se sentaron y se miraban nerviosos, se pidieron dos cervezas, y en ese momento antes de que llegara el camarero con sus bebidas, me fui acercando a ellos.

Javier.

  • Buenas noches, soy Javier.

Estaban muy nerviosos, me miraban con miedo, me sente en la silla que habia libre, y dijeron.

  • Hola.

Javier.

  • Que tal Emilio, a ti no te conocia, como estas?

Emilio.

  • Bien, un poco nervioso.

Javier.

  • No, te preocupes, no estes nervioso, con esto solo nos queremos divertir, los tres, y es lo que vamos a hacer, piensa que esto es un juego, que aqui y ahora tenemos unos roles, yo soy el amo, tu novia la sumisa y tu el cornudo consentidor, cada uno con nuestro rol, vamos a disfrutar, hasta el momento en que queramos parar, en ese momento, yo marchare y os dejare solos ok?

Emilio.

  • Vale.

En ese momento el camarero, llegaba con la bandeja y las dos cervezas, que ellos habian pedido, el hombre de unos cuarenta años no perdio detalle del escote de Anais, que desde arriba en su posicion seguro que era mucho mas apetecible, yo le pedi otra cerveza.

Javier.

  • No has dicho nada aun Anais.

Anais.

  • Ya, yo tambien estoy nerviosa.

Javier.

  • Que tal con Iker, te dolio mucho?

Anais.

  • Las argollas de los pezones, no duelen, el del clitoris si dolio mucho los primeros dias, ahora ya no.

Javier.

  • Ahora te daran placer, no?.

Anais.

  • Si cada vez que el pecho roza con el sujetador, o me muevo y el tanga roza con el pearcing, da mucho gusto, la verdad.

Javier.

  • No habeis mantenido relaciones, ni nada parecido, no.

Emilio/Anais.

  • No.

Javier.

  • Bien Anais, las argollas de los pezones son para que las lleves sin sujetador, con una camiseta ajustada como la que llevas todo el mundo podra notar que llevas en los pezones, y no pararan de mirar, ademas el roce de la camiseta tambien te dara placer, por tanto, vas a ir al baño y te vas a quitar el sujetador, y lo guardaras en tu bolso, has entendido.

Anais.

  • Si.

En ese momento Anais se levanto y se marcho, al baño, yo me quede a solas con Emilio.

Javier.

  • Que te ha contado Anais?.

Emilio.

  • Pues que a ella desde hace unos años, le gusta la dominación y se dedicaba en sus ratos libres a leer relatos de ese tema, que un descubrio varios relatos tuyos y le encantaron, te mando un email, diciendo que eran muy buenos y que le encantaria ser tu sumisa, y que la amenazaste con reenviar los emails a todos sus conocidos, y que a partir de ese momento para que yo no me enterara de sus gustos, se entrego a hacer lo que tu querias.

Javier.

  • La verdad, lo del chantaje fue una excusa para ella, estaba deseando ser dominada por un hombre, y apareci yo nada más.

Emilio.

  • Lo se, y lo acepto, en el momento en que me conto que tu existias, y lo que habia llegado a hacer, en la pagina de fotos, en el parque con el tipo desconocido y luego en tu coche, me excite, muchisimo, y ella me lo noto, y me dijo que si a los dos nos gustaba este juego, que por que no disfrutar.

Javier.

  • Bien y aqui estamos para eso.

En ese momento vimos llegar a Anais, desde el servicio, en la camiseta de tirantes negra, se le adivinaban perfectamente las argollas de los pezones, eso me encanto, y quise probar si Emilio estaba tan dispuesto a seguir como ella.

Javier.

  • Bien Emilio ahora te toca a ti, vete y quitate los calzoncillos en el baño, te los guardas en el bolsillo del pantalon y ven con nosotros de nuevo.

Emilio, muy obediente, se levanto y desaparecio entre la gente, camino de los baños, acerque mi silla a la de Anais, y la bese en la boca, cosa que ella agradecio abriendo su boca y entregandome su lengua, con mi mano derecha, busque entre sus piernas, hasta llegar a su mojado tanga, y en concreto toque el pearcing colocado en su clitoris, esto le provoco un gemido de placer, pare de besarla, no asi de tocar su coño, para ver si en las mesas de al lado, se estaban fijando en nuestro numerito, como era de imaginar, una pareja de al lado no nos quitaba ojo, y decidi sacar mi mano de debajo de la mesa, a los pocos segundos llego, Emilio, con sus pantalones de pinzas, se le podia ver una media erección en su polla, y se sento junto a Anais de nuevo, y indique lo que hariamos esa noche.

Javier.

  • Bien ahora vamos a pedir la cuenta e iremos a un pub, que hay cerca de aqui, es un local de intercambio y vamos a hacer algo, primero llegare yo y os esperare en la barra tomando algo, despues llegareis vosotros dos, tendreis el movil en la mano, yo os enviare sms con las instrucciones, ok?

Anais.

  • Ok.

Bien os doy la dirección, pagar esto, nos vemos alli.

Cogí mi coche, y me dirigí hacia, el local en cuestión, tome posición en la barra, alli era el unico lugar donde podian estar los chicos solos y alli se esperaba a que alguna pareja invitara a compartir el resto de instalaciones, eramos 4 hombres, uno era gordo de unos 40 años, otro era marroqui, y luego habia un chico muy joven más apartado a un lado, tras unos 5 minutos tomando mi copa alli, vi bajar por las escaleras a Emilio y a Anais, los tres chicos que habia en la barra conmigo, se quedaron locos con la belleza de Anais, pidieron dos copas, y dejaron su movil en la barra, yo estaba a 3 metros de ellos, y quise empezar a jugar enviando sms a mi Emilio.

Javier.

  • Te gusta como miran a tu novia, se la estan follando con los ojos.

Emilio, miro a los otros tres hombres que habia alli, y pudo observar como miraban a Anais, le enseño el movil a esta, que sonrio, como si le gustara lo que estaba sucediendo, puede ver como a Emilio se le advertia un bulto en el pantalón.

Javier.

  • De los tres tios que hay quien crees que tendra la polla más grande, puedes pedir ayuda Anais.

Emilio volvió a mostrar el movil a su novia, y esta le dijo una cosa al oido, tras esto Emilio me volvio a contestas via sms.

Emilio.

  • Anais dice que el marroqui.

Javier.

  • Yo tambien lo creo, vamos a comprobarlo, sube la minifalda de Anais y que puedan ver su coño y su culo, a ver que hacen.

En cuanto Emilio subio la falda hasta la cintura, dos de los hombres se acercaron a tocarla, ella se dejaba tocar el culo, el coño, las tetas, estaba a disposición de ellos, mientras Emilio y yo mirabamos, tras unos minutos siendo sobada, por ellos, volvi a mandar otro sms.

Javier.

  • Baja su mini falda y paralo ya y acercaros a mi.

Emilio muy obediente, se hizo paso entre los dos tipos el marroqui y el gordo, y bajo la minifalda de Anais, la cogio de la mano y la trajo hasta mi.

Emilio ya no podia disimular su erección y ella me miraba con ojos de vicio.

Javier.

  • Os gusta.

Si, contestaron los dos,

Javier.

  • Elige, al afortunado Emilio a quien quieres que se la chupe tu novia al marroqui, o al gordo.

La pareja se miro, Emilio cogio de la mano a Anais y la acerco justo delante del marroqui, esta se arrodillo y procedio a desabrochar el pantalon del hombre ante las atentas miradas de todos los que allí nos encotrabamos, bajo el pantalon hasta los tobillos, bajo tambien el calzoncillo, y apareció un pene de tamaño considerable, tras frotar con sus manos el pene de arriba a abajo, este crecia por momentos, cuando ya tomo su mejor tamaño, Anais empezo a chupar la polla de aquel desconocido, arrodillada con las manos en el culo del marroqui, esta empezo un ritmo de menos a más, aquel hombre tenia los ojos cerrados y sus manos en la nuca de Anais, cada vez la forzaba a introducir más su polla en la boca de esta, practicamente habia un momento en que la enorme polla del marroqui desaparecia de nuestra vista, los ojos de Anais cada vez eran más brillantes, un fuerte gemido de placer nos hizo entender que el hombre se habia corrido, poco a poco, Anais dejo de mover la cabeza y empezo a tragar el semen del hombre hasta que pudo sacarse la polla de la boca, y jadear, estaba fatigada, tenia aún algo de semen en la comisura de los labios, se puso de pie y se acerco a Emilio, al que beso en la boca apasionadamente, en ese momento me acerque a ellos, para hablar esta vez ya sin el movil de por medio.

Javier.

  • Ha estado fantastica verdad Emilio.

Emilio.

  • Si.

Javier.

  • Os ha gustado?

Ellos se miraron entre los dos con una sonrisa complice, y dijeron a la vez.

  • Si.

Javier.

  • Bien pues esto no solo es el principio, ahora nos pediremos unas copas y nos sentaremos en uno de las mesas que hay al fondo, desde alli, haremos una visita por todas las instalaciones y vemos como acaba la noche ok?

Anais/Emilio.

  • Ok.

CONTINUARA.......

agasan76@hotmail.com