Su sobrina

La historia de como me cogi a la sobrina de la chica con la que vivia, espectacular.

Este es un relato real, vivido en Medellín Colombia, la historia narra como me tire a una de las sobrinas de mi mujer en su propia casa y con toda la familia allí.

Yo llevaba un año de convivir con Enith, era una mujer de 1.75 mts, grandes tetas, un culo redondo grande y rico y sus tetas grandes y firme de pezones ricos, ella era una mujer de 18 años su cara muy linda a tal punto que fue candidata a ser reina y por demás basquetbolista lo que la hacia con unas piernas y una figura envidiable.

La familia de Enith me apreciaba mucho y como vivíamos en un poblado cerca de Medellín acostumbrábamos a ir a pasear algunos fines de semana a la casa de Amparo su hermana mayor, vale la pena decir que Amparo poseía unos rasgos semejantes a Enith y pese a sus 33 años era una mujer que levantaba sus miradas, Amparo vivía con su esposo Carlos quien tiene un minimercado en el barrio muy cerca de la casa de habitación y dicho matrimonio tenia 3 hijos un varón de 10 años y 2 niñas Erica de cara linda y una cola envidiable que me lambía por tenerla quien tenia 15 años y a la que varias veces vi. Desnuda o en su ropa interior y tenían a Aída una morena de 12 años, con gran cola y senos desarrollados, sus piernas parecían de patinadora y una cara lindisima. Aída tenia fama desde pequeña de gustarle jugar con niños desnudos, ¡vaya que nació con un gran amor por la verga y el sexo!

La casa de la Familia era una casa sencilla pero con lujos de 3 alcobas distribuidas así: La principal para la pareja de padres, una pequeña que servia de estudio y dormitorio del niño y la otra que tenía 2 camarotes en la que dormían las niñas. Por determinación de la familia Enith y Yo dormíamos en uno de los camarotes de la alcoba de las niñas en el del frente dormían arriba Aída y al frente nuestro Erica, vale la pena anotar que esa familia me tenia demasiada confianza y tanto Amparo como la Otra hermana Patricia dormía en la misma alcoba que yo y ellas se vestían y desvestían sin prejuicios delante mió.

Con el pasar del tiempo Aída fue cogiendo confianza conmigo y yo aprovechaba cuando estábamos solos en algún lugar de la casa para decirle piropos y hacer que ella centrara su atención en mi así hasta llegar a juegos suaves de manos en la que yo "aprovechaba" y tocaba su rico culo o sus buenas tetas y de vez en cuando su rica raja.

Ese sábado había un evento cerca por lo que el trabajo en el minimercado se aumento siendo necesario que Amparo, Enith y Erica ayudaran allí a Don Carlos y el niño se fue con sus amiguitos a la cicloruta, como a mi no me gustaba meterme a aquel negocio y estaba cansado por el viaje le comunique a la familia que iría a dormir temprano y me prepare para ello. Aída estaba frente a la alcoba que ocupábamos con la puerta abierta estudiando y yo aproveche para cambiarme estando en un lugar que sabía que ella me vería. Cuando me cambiaba sonaba el timbre del mercado pidiendo elementos necesarios allí para trabajar y Aída y yo jugueteábamos a ver quien las llevaba y aprovechábamos para besarnos y toquetearnos, así una vez bajaba a llevar lo necesario la rica Aída y otra yo, hasta que les comunique que me iría a dormir ya y me dijeron que estaba bien, que descansar y pasara una buena noche.

Al llegar a la habitación me acosté y me dispuse a dormir, cerré la puerta pero no note que estaba con seguro, al cabo de 10 minutos aproximadamente llamaron a la puerta era Aída que me pedía que le abriera por que se acostaría a dormir, le abrí y sorpresa estaba con un camisón blanco casi transparente que permitía ver sus pezones negros y su tanguita brasilera de hilo color rojo, eso me encendió y de inmediato mi verga se puso dura pero sin comentarios me dispuse a regresar a mi cama cuando ella me llamo y me pidió que le ayudara a colocar la colchoneta en el piso por que hacia mucho calor, así lo hice y ella luego de que adecuo su sitio para dormir apago al luz y me dijo buenas noches, yo le respondí: -Ponle seguro a la puerta y dame el besito de buenas noches, ella no dijo nada y se levanto y cerro la puerta con seguro, luego se arrimo y me dio un beso en la mejilla buenas noches, le respondí buenas noches ven te doy el beso se acerco y fue cuando la tome y bese sus labios, le metí la lengua y ella acepto, nos dejamos por un instante y le dije te gusto y me respondió mucho. Te puedo dar otro mejor lo quieres? y me reto como cuando jugábamos a que no es mejor. Cuando dijo esto la tome y me le acosté al lado suyo besándola apasionadamente metiendo mi lengua a la vez que buscaba la parte inferior de su batola, al encontrarla la subí y empecé a buscar sus senos los acaricie y bese y ella empezó a gemir luego con la otra mano corrí su tanguita y sentí unos deliciosos bellos que apenas crecían toque su vagina y estaba demasiado mojada, le dije te Gusta y no respondió solo tomo mi cara y la llevo a sus senos.

Con mi cara y mi boca lamiendo sus senos aproveche y con una de mis manos acariciaba su rica rajita que ya estaba demasiado mojada, sin decir nada fui bajando y llegue a su rajita la empecé a besar y meter mi lengua, en ese momento escuche que empezaba a gemir y me decía sigue así méteme el dedo, le hice caso y le metí el dedo ya estaba lista para penetrarla pero deseaba que chupara mi verga, por lo que me quite y tome su mano para llevarla a que cogiera mi verga lo hizo y empezó a pajearme le dije chupala ella dijo como es muy grande y le dije haz de cuenta que es un helado y le sacaras toda la leche, así lo hizo primero la lamía, luego chupaba y chupaba parecía que le gustaba demasiado y cuando menos pensaba le solté un chorro de leche que la asusto y saco mi verga de su boquita, mi leche voló por su cara y sus pechos.

Luego me dijo méteme la verga le dije si la chupas de nuevo te la meteré y empezó de nuevo no se demoro para ponerme a mil y estaba yo chupando su rajita cuando decidido y sin pensarlo 2 veces saque mi verga y apunte a su rajita y la metí de una aaaaaaaggggggg que rico dijo sigue así, empecé a bombear mi verga dentro de su vaginita estaba apretada y caliente, aun no olvido esa imagen ella tirada con las piernas apoyadas sobre sus pies y su tanguita corrida a un lado y con la verga adentro diciendo que rico mas dale mas s¡¡¡¡¡¡ Y así lo hice le di mas y mas y mas y en esas sonó la puerta

Me hice el dormido y ella abrió era su hermana que recogía algo para llevar al negocio, al salir la hermana de nuevo cerro y puso el seguro alo que le dije a Aída así no me vas a dejar ven que te quiero seguir y la tome la senté en un escritorio del camarote y metí de nuevo mi verga y le di ella gemía y pedía mas luego la puse de espaldas estando de pie ambos y se la metí así me vine y le heche mi leche dentro y a dormir…..

Hoy deseo volver a ver a Aída y darle huevo.