Su reposapiés personal
Un día sin esperarlo se cumplió mi mayor fantasia
Llevaba tiempo sin verla, pero por fin había llegado el día en el que vería de nuevo a mi diosa pelirroja, era mi pareja desde hacía unos meses y no había estado tan enamorado jamás.
Cómo ninguno teníamos total libertad en nuestras casas para disfrutar del placer del sexo en su totalidad, le pedí las llaves de su piso en la capital a un familiar que no dudó en prestarmelas.
Cuando la ví en la estación de tren me quedé de piedra, llevaba una camisa verde que resaltaba el verde de sus ojos unos pantalones ajustados y lo que más me llamó la atención, unas botas marrones que encerraban dentro sus preciosos pies, a ella ya le había hablado de mí fetiche, pero nunca había mostrado interés y solo me dejaba darle algún beso o alguna lamida rápida durante el sexo, pero sin mostrar mucha ilusión, o al menos hasta ese día.
Llegamos al piso y sin muchos preámbulos empezamos a besarnos como locos, fuimos directos a la cama y como siempre me dispuse a desnudarla, ella tenía un cuerpo espectacular, delgadita y con muy buena forma.
Le quité la camisa pero no me dejó quitarle el sujetador y fui directamente a las botas, primero le quite una y le dejé el calcetin puesto, y luego la otra, y tras esto despoje cada pie de cada calcetín, encontrando debajo su par de medias de rejilla que más excitación provocaban en mí, entonces me percaté de un olor algo fuerte a pies (lo cual me extrañó por qué a ella no le olían nunca) que me encantó y como siempre que la descalzo le di un beso en cada pie a lo que me respondió "joder cariño que asco, llevo 2 días enteros sin lavarme los pies, y he hecho deporte" en un tono burlón e imaginé que esa tarde vendría alguna que otra sorpresa para mi.
Cuando intenté quitarle las medias me dijo "eso luego si te portas bien" y ya terminé de desnudarla.
Aproveché que estaba de rodillas por acabar de quitarle los pantalones y las bragas y comencé haciéndole sexo oral, mi lengua iba en círculos y estuve así hasta que me pidió que parase, tras esto, me desnudé yo, cogí un preservativo, y conmigo encima comenzó la penetración.
Siempre, y no es por echarme flores he durado mucho en la cama y de hecho a veces no he llegado ni a eyacular, no se por que pero es así, aunque ella tenía el punto cogido para que me corriera.
Tras un rato en esa postura me pidió cambiarnos de posición y ella estar arriba por un rato, a lo que le respondí con un "como tú quieras princesa" y nos cambiamos, note su mirada distinta, como más dominante, cosa que me gustó, y seguimos hasta que ella llegó al orgasmo, pero me dijo que no parara, y seguí un rato hasta que ella comenzó a provocarme el principio de la eyaculación, pero justo antes de que eso ocurriese, se levantó de mi, se sentó encima un poco más atrás de mi polla apunto de eyacular y sin decir nada plantó sus dos pies enfundados en sus medias de rejilla en mi cara.
En ese momento empecé a escuchar como de su móvil salía la banda sonora de Pokémon Mundo Misterioso juego para el que le había descargado un emulador en su teléfono, y durante la siguiente media hora no me dirigió palabra salvo cuando intenté sacar mi lengua para tocar sus pies que me dijo que no lo hiciese si no quería estropear el momento, así que la guarde inmediatamente.
A la media hora disfrutando de un olor increible, y sin darme más explicaciones levantó ambos pies y se quitó ambas medias, me dijo que abriera la boca y las metió junto con sus calcetines dentro, tras esto soltó un "¿me regalas otro orgasmo cariño?", con una mirada muy tierna, a lo que asentí con la cabeza ya que no podía hablar y ella otra vez comenzó a cabalgarme salvajemente, mientras yo saboreaba uno de los mejores sabores del mundo, y esta vez ella llegó a 2 orgasmos en vez de a uno, y como la otra vez cuando yo iba a llegar, se levantó cogió el móvil para continuar con la partida y me dijo que escupiera lo que tenía en la boca, lo hice y colocó sus dos pies igual que antes pero está vez estaban completamente desnudos y se notaba muchísimo mejor su suave tacto empapado de sudor y su embriagante olor, a la media hora, esta vez no los levantó si no que dijo "aquí está tu regalo, lame y limpialos con tu lengua, no quiero que quede una gota de sudor en mis pies" así que ya, completamente en el cielo, me puse a ellos durante otros 30 minutos, y se repitió el ciclo otra vez más, volvimos a follar, ella llegó un par de veces y yo no, aunque esta vez se regaló más y me dejó más a punto llevándome yo a creer que iba a llegar, pero no, y repitió el proceso.
Aunque esta vez me metió sus bragas en la boca, y me tuvo allí otra hora, otra hora en el paraíso, pero entonces, me dijo "mira por hoy he llegado yo a varios órgasmos y no quiero más, el juego está bastante interesante y creo que sí le echo otra horita puede ser que me lo pase" así que seguí ahí debajo como hora y media más.
Tras pasárselo se levantó, se me acercó y me dio un beso en la boca y me dijo "te has portado muy bien, me encanta que este lobito pueda ser un perrito conmigo cuando yo quiera, ven vamos a ver una peli que nos ha sobrado algo de tiempo" y me pase lo que dura Vengadores Infinity Wars dándole un masaje en sus hermosos pies, eso si, yo completamente desnudo y ella vestida entera, pero descalza, tras esto nos fuimos y concluyó el día en el que no me corrí pero fui el reposapies de la mujer que amaba durante horas, uno de los mejores días de mi vida.