Soy una caliente

Una aventura con mi ex que casi me cuesta el trabajo.

Hola a todos, estaba pensando que relato contarles esta vez y recordé una aventura con mi ex  que casi me cuesta mi trabajo.

Actualmente soy la directora de un proyecto social de una institución católica, un puesto deseado por muchos. El trabajo es bonito y bien pagado, además que contrario a lo que muchos piensan, trabajar con monjas y curas es genial cuando haces tu trabajo eficientemente.

No tengo que decirles que en el trabajo me toca ser una santa, aunque de santa no tengo ni el nombre, pero bueno hay sacrificios que hacer cuando a uno le gusta lo que hace. En el trabajo siempre había sido la directora pura y santa que no mataba ni una mosca y lo disfruto. Me encata mi cara de santa e inocente que ayuda a que cuando a alguien le lleguen rumores de mis puterías, no se las crea.

El día en cuestión había un evento muy importante en la institución, la inauguración de un nuevo proyecto y ni modo la bendición y todo lo demás. Me vestí como se supone que una dama debe vestirse, medias, tacones y un hermoso y sencilo vestido verde sin mucho escote y  sin faltar mi cruz en el cuello que me distingue como miembro de la comunidad. Iba un poco tarde y mi carro no estaba funcionando asi que me toco pagar taxi y esperar una eternidad. Al fin llegué y me dirigí al lugar del evento. Casi me desmayo cuando me presentaron al nuevo encargado del área de sistemas del proyecto. Era mi ex esposo! No se que cara puse yo, pero a él se le arruinó la noche. Tras nuestro divorcio y la anulación de matrimonio, decidimos fingir que nunca estuvimos casados y no volvimos a saber nada el uno del otro. Eramos jovenes y sin muchos bienes así que todo era fácil de superar. El se casó de nuevo y lleva casi 4 años feliz con ella. Pero bueno.

Nos saludamos cortésmente y seguí saludando a los demás miembros tratando de olvidar ese encuentro y divertirme un poco. Conforme fue pasando la velada el calor se hizo más fuerte y maldije haberme  puesto medias. Joder no hay cosa más incomoda para las mujeres que estar metida en nylon strech. Me sentía más y más incomoda por lo que decidí ir a mi oficina a quitármelas y guardarlas en mi cartera.

Salí del salón y me acerqué a mi puerta cuando sentí una mano fuerte que me sujetaba. Era José, mi ex esposo! Lo salude nuevamente y le pregunté que hacía por el corredor. Me explicó que había salido a verificar la instalación del nuevo servidor que se había retrasado y que debía estar listo lo antes posible. Lo invité a pasar (inocentemente aclaro) a mi oficina para conversar y ahí empezó todo. Nomás cerre la puerta me tomó en vilo y me sentó sobre mi escritorio, se colocó enmedio de mis piernas y empezó a besarme. Fue como si todos los interruptores de mi cuerpo se hubiesen activado. Nadie en mi vida me ha tocado nunca ni me tocará como ese hombre con 10 años de experiencia sobre mi cuerpo.

Me empezó a morder el cuello, cosa que me enloquece y a abrazarme pegadita a el. Podía sentir su respiración acelerándose y una protuberancía que se pegaba más y más a mi cadera separada únicamente por la tela de su pantalón y de mi tanga. Cuando sentí esa protuberancia solo me deje llevar. Detás de ese pantalón se encuentran 20 cms. de pura carne dura, un hombre que de verdad sabe como follar. Me abrió rasgó las medias y empezó a jugar con mi clitoris por encima de mi ropa interor. Inmediantamente senti mi cuerpo responder a sus expertos dedos y ahogué un gemido de placer mordiéndole el hombro. Sentía esos dedos jugando con mi clítoris por encima de la tela mientras me besaba. Me estaba mojando cada vez más y más. Me estababa volviéndo loca. A la mierda las precauciones pensé, que me folle como solo el sabe. Le dije Métemela, y se río. Me dijo "No muñeca, después de tanto iempo extrañándote, mínimo te voy a disfrutar".

Movió mi tanga y empezó a meterme la punta del dedo medio en mi vagina. Estaba mojadísima y era una tortura cuando uno más deseaa estar llena, sentír únicamente la yema del dedo penetrarme. Empecé a mover las caderas buscando penetrarme con el dedo completamente, pero mientras más lo buscaba, menos me metía el dedo. El muy descarado se reía sabiendo las ganas ue tenía.  Empecé a deslizarme hacia el piso para quedar hincada prente a él y abrísu bragueta. Su verga estaba tal y como la recordaba. 20 Cms, gruesa y dura. La mejor verga de mi vida. Empecé a mamarsela suavecio, primero rozando mis labios alrededor de su glande, metiéndomela hasta la garganta mientras lo escuchaba gemir...

Toqué su punto débil, mientras se la mamaba, metí mi dedo indice en su ano. Empecé a sentir que iba a correrse y pare. Me puse en cuatro sobre el escriorio y le dije, métemela. Empezó a bombear durísimo mientras me metía la mano bajo el vestido para tocar mis senos. Sentía su pene llenarme toda, y sentirlo cada milímetro entrándo y saliendo. Cuando ya no pude más lo empujé a la silla, me monté encima de el y me lo empecíe a follar con fuerza. No dijo nada solo empezó a gemir más fuerte y fue cuando pasó..

Se abrió la puerta de la oficina y entra el director de la obra con unos papeles en la mano. Los dos nos morimos del susto mientras el director sólo dijo lo siento y salío. Nos vestimos a la carrera, y salimos al salón de ceremonias para reincorporarnos a la fiesta. Yo me sentía incómoda, aún mojada y sabiéndo que me habían observado.

Al entrar al salón ví al director de la obra platicándo con el coordinador general y hablándo bastante alterado.

Esto fue ayer, así que les cuento mañana si me despiden

Saluditos.