Soy Nimfòmana?? (5)

Después de haber catado polla por todos sus agujeros, Vero ya no puede controlar su necesidad de sexo, polla, placer, morbo y semen, hasta el punto que se descontrola y toma decisiones impulsivas y peligrosas.

Después de haber catado polla por todos sus agujeros, Vero ya no puede controlar su necesidad de sexo, polla, placer, morbo y semen, hasta el punto que se descontrola y toma decisiones impulsivas y peligrosas.

Pues ahí estaba yo, en el bus, con un viejo de 50/55 años, refregando su polla en mi culo juvenil, con dos dedos gordos metidos en mi coñito y otro en mi culito, a punto de irme a no sé dónde, en la casa de no sé quién, a que me diera polla alguien muchísimo más mayor que yo, que no conocía de nada, ni sabía quién coño era, ni realmente cuales eran las intenciones reales que tenía con migo.

La adrenalina se me disparó cuando de golpe me susurró en la oreja, prepárate que nos bajamos.

Uuuufffff….  Que mariposas en el estómago, que nervios, tenía miedo en parte, pero por otra me encantaba esa sensación. Me sacó el dedo del culo y noté que en su lugar me introducía algo muchísimo más grande y gordo, me lo metió de golpe y por un momento tuve la sensación como si Moha me la clavara del tirón. Me salió un pequeño grito de la boca, momento en el cual, el señor, aprovechó para retirarme muy repentina y bruscamente los dedos de mi coñito y disimular separándose un poco de mí, porque debido a mi pequeño grito, dos pasajeros de bus se giraron a ver.

Bajamos del bus, me indicó seguir andando hacia la derecha, nos introdujimos en un lugar de la ciudad, que las calles son estrechas y algo oscuras, por el hecho de que los edificios son altos y muy juntos y la luz casi no penetra en ellas. Seguimos andando unos diez minutos, hasta que llegamos a un edificio enorme, pegado a otros edificios enormes. Yo pensé, vaya, aquí la gente vive apelotonada, acostumbrada a vivir en una casa con jardín y árboles, aquello me parecía el bronks.

Llamó a un timbre, pasaron como dos/tres minutos hasta que contestaron al interfono.

Voz: Si? Quién es?

Señor: Hola Emilio, soy Miguel…

Hombre….  Por fin sabía como se llamaba el desconocido, pensé, Miguel y su amigo Emilio…

Emilio: Que haces aquí?

Miguel: Abre que te traigo una sorpresa…

Emilio: Pues mira que bien….. No te esperaba y además me traes una sorpresa…  Pues ya puedes pasar…

Se abrió la puerta, Miguel me cogió del brazo y me hizo entrar, cogimos un ascensor y subimos hasta el piso 9º. Al llegar al rellano, vimos una puerta abierta con un hombre de unos 45 años, delgado, algo velludo, con el pelo corto y bien afeitado, que nos esperaba con pantalón corto como de chándal y una camiseta de estar por casa.

Emilio: Hola Miguel, que tal? Que sorpresa verte por aquí hoy y estas horas…  A qué se debe tan agradable visita y tan bien acompañado?

Miguel: Pues mira…  (Entrando en la casa y cerrando la puerta tras de él) que me iba a casa en el bus y me he encontrado a esta zorrita que tiene unas ganas locas de rabos.

Emilio: Que me dices?  Si?  Tan zorrita es como para eso?  Si es muy jovencita..

Miguel: A si? Pues mira eso…

Miguel me da la vuelta, levanta toda la falda dejando todo mi culo al aire, coge la mano de Emilio y se la dirige por detrás de mí hasta depositarla en mi coño.

Emilio: joder…  si va llena de lechadas….  Y sin bragas…..  Pero de donde ha salido esta putita?

Miguel: Pues no se…  La veo muchas veces en el bus provocando a todo el mundo, pero no me imaginaba encontrármela así y que fuera tan guarra…  jajajajajajajajaja….

Emilio: Así que te gustan las pollas y que te llenen el coño de leche, no putita?

Yo: si, eso es algo que me vuelve loca.. Con voz de colegiala y metiéndome un dedo en la boca.

Emilio: Y has venido hasta aquí con Miguel libre y voluntariamente por qué quieres nuestras pollas, verdad putita?

Yo: si

Emilio: Y además vas a querer que te follemos y que te llenemos más de leche de la que ya llevas, verdad putita?

Yo: si..   No me lo podía creer, contestaba a esas preguntas sin ni siquiera dudar..

Emilio: Seguro putita?

Yo: siiii…..

Emilio: Dímelo tú!!!

Yo: He venido aquí porque quiero vuestras pollas, quiero vuestra leche y que me falléis….

Emilio: Joder, nene…  Dirigiéndose a Miguel   Esta cría es muy, pero que muy puta y muy caliente…

Miguel: Ya…  Yo también estoy flipando, pero ya ves, cuando la he visto tan zorra y tan llena de lechadas, no he podido evitar hacerla venir aquí..

Me ponía muy caliente como hablaban de mí, como me trataban, que uno me llamara zorrita y el otro putita, me estaba poniendo a mil y que además hablaran entre ellos como si yo no fuera más que un objeto sexual, ya me fulminaba de calentura y morbo.

Emilio: Pues no se hable más….  Pasar dentro que vamos a pasarlo muy bien los tres… yo como veréis, ya me estaba poniendo a tono con otras putitas, aun y que no esperaba a nadie…

Seguimos por un pasillo estrecho hasta llegar a un salón comedor bastante amplio, con un sofá enorme, muebles horribles de esos que no cuadran entre sí porque son viejos y uno de cada estilo como si los hubiera ido recogiendo de la calle, pero también tenía una tele enorme donde tenía puesta una película porno, donde se veía a una chica blanca jovencita siendo penetrada salvajemente por el coño por una polla negra descomunal, ella chillaba todo el rato aun y que se le veía feliz y muy bien lubricada.

Buuufffff….   Esa situación me superaba, al estar en un sitio desconocido, con dos desconocidos, viendo lo que estaba viendo en la tele…..    Joder que caliente me estaba poniendo y que morbo recorría todo mi cuerpo.

Nos sentamos en el sofá delante de la tele, Miguel se puso a mi derecha y Emilio a mi izquierda, sin esperar para nada mas, me agarraron una mano cada uno y me las llevaron cada uno a su paquete, mientras ellos ponían una de sus manos por debajo de mi falda hasta llegar a mi coño con total facilidad.

Madre mía….   Que paquetes más grandes…  que pollas más grandes y gordas bebían tener, porque estaban aún algo morcillonas y ya se notaban enormes….

Me frotaban los labios vaginales, me tocaban el clítoris, lo hacían súper bien y yo solo hacía que abrir más mis piernas, mientras seguía sobando esas pollas que por momentos se ponían duras a más no poder. Al mismo tiempo fueron a meter un dedo los dos y se encontraron, pararon un momento, se miraron y sin más dilación, metieron sus dedos al mismo tiempo en mi coño. Ooohhhhh…..   Qué bien se notaba y que ganas tenía ya de tener algo dentro de mi coñito…

Emilio: Joder….  Qué bien le entra en ese coño tan lubricado de leche..  y mira cómo se abre de piernas la muy putita…    De quien es toda esta leche, putita?

Yo: de unos amigos.. mmmmmm…. Mientras metían y sacaban sus dedos más rápidamente..

Emilio: Unos amigos? Cuantos amigos te han dejado su regalito hoy?

Tu: Cuatro…

Emilio: Y tienes más amigos que te hacen estos regalitos?

Yo: si

Emilio: Cuantos?

Yo: No se….  Muchos…

Emilio: muchos? Y cuántos son muchos?

Yo: No sé..  20 o 30 más o menos….

Emilio: 20 o 30?  Jajajajajaja   menuda puta estas hecha….   Jajajajajajajajajajaja……

En ese momento, como si estuvieran acostumbrados a estas situaciones, de manera coordinada, se desabrocharon sus pantalones, bajaron con una mano un poco los calzoncillos y liberaron parte de esas pollas que pedían ser liberadas a gritos desde hacía rato. Me quedé flipando…  menudos pollones…  Wiliam y sobretodo Moha las tienen grandes, comparadas con las de todos los demás chicos, pero aquellas pollas eran enormes, largas, gordas, peludas…  y eso que solo veía la mitad.

Yo las agarre una con cada mano y empecé a masturbarlas des de la mitad hasta la punta, mientras ellos metían un dedo más cada uno en mi coñito, con lo que ya tenían cuatro dedos dentro entrando y saliendo de mí, nunca antes me habían puesto cuatro dedos allí dentro, pero mi coño se los comía como si nada y además aún tenía el consolador en el culo...

Emilio: Sabes que, putita? Que me ha gustado eso de que siempre quieras compartir tu sexo con tus amigos, demuestra que eres una chica generosa….  A mí también me gusta compartir con mis amigos, al igual que Miguel ha querido compartirte con migo.

Dicho esto, coge su teléfono móvil y hace una llamada…

Emilio: Hola Néstor, que tal?.....   Pues aquí en casa…..  Me gustaría que te vinieras, tengo algo para ti…  Una sorpresa….   Haces algo ahora?   Pues vente va, que te espero….   Oye….  Y tu hermano, también está ahí?   Vale…  Pues bajaros los dos que aquí hay para todos….  Si, si claro…  lo pasaremos bien….  Cuando una sorpresa mía no ha sido buena?  OK…  OK, hasta ahora….

Yo estaba flipando…..   Esto se me había ido de las manos hacía ya mucho rato….  Yo siempre había controlado la situación, siempre conseguía de los demás lo que yo quería, siempre había manipulado a los chicos a mi antojo, pero esta vez yo ya no controlaba nada y por lo visto ya ni siquiera era dueña de mi cuerpo, estaba a merced de esos hombres, que incluso podían regalarme y ofrecerme a los demás. Supongo que por el hecho de ser adultos, habían tomado el control hasta de mí misma.

Emilio: Pues nada, en un rato tendrás más pollas putita….  Ves que bien eso de compartir…

En eso que Miguel se levanta, se quita los pantalones y los calzoncillos y se queda delante de mí con una polla de unos 19cm más gorda que la de Moha, peluda y con unos huevos enormes colgando por debajo…..   y Emilio, me quita la camiseta del uniforme y me deja en sujetadores…

Emilio: Joder….  Hasta las tetitas se ven apetitosas…

Miguel me agarra de la cabeza y la acerca a su pollon y me la mete todo lo que puede en la boca…

Miguel: Te toca chupar zorrita…

Yo abro la boca e intento tragar, pero es que es demasiado grande y no entra toda. Emilio me masajea las tetitas por encima de los sujetadores mientras me come el cuello detrás de la oreja..  Mmmmmmmmm   se me eriza todo el pelo, que cosquilleó por todo el cuerpo… Eso es algo que me pone a mil…

Miguel: Me parece que todas las pollas que te han entrado hasta día de hoy son pequeñas verdad? Son pollas de chicos, no?  Pues hoy vas a tener pollas de verdad, hoy vas a dilatar tanto que a partir de hoy, con las de tus amiguitos, no vas a sentir nada.

Y diciendo esto me puso dos dedos en la boca y empezó a tirar uno para cada lado de la comisura de mis labios fuertemente como para dilatarme la boca, luego puso dos de cada mano y siguió tirando hacia fuera con fuerza, me estaba haciendo daño, pero yo aguantaba porque me ponía muy caliente que me tratara así, como un objeto, como una zorra cualquiera…

Emilio, se quitó los pantalones, los calzoncillos y la camiseta que aun llevaba puestos y me quito los sujetadores, dejando por primera vez mis tetitas libres. Me tocaba las tetas firmemente pero con delicadeza al mismo tiempo, me hacía sentir placer y notar como mi calentura iba en aumento, estaba ya muy, muy cachonda y mi coñito lubricaba solito, tanto que incluso estaba quedando una mancha en el sofá.

De golpe, sin ni siquiera sacar los dedos de mi boca, Miguel me metió su pollon hasta la garganta y empezó a follarme la boca a lo bruto, me hacía daño en la boca, pero sobre todo cuando ese pollon chocaba con lo más profundo de mi garganta provocándome arcadas.

Emilio: Nene…  No seas tan bruto…  Que la vas a romper y los demás también van a querer..  Jjajajajajaajjajajajaajaj…

Miguel:  Jajjajajajajajajajajaj….  Pero al menos ahora ya entra…  jajajajajaja

Emilio: Seguro que con lo putita que es, si le das polla y dejas que te la chupe ella, seguro que la chupa que te cagas…..  jajajjajajajajaja

Acto seguido Miguel me la sacó de la garganta, pude respirar y me dijo, será mejor que me la chupes muy bien, porque si no ya sabes hasta donde te la voy a meter otra vez. Yo agarre su pollon, me lo lleve a la boca y le hice la mejor mamada que he hecho en mi vida, le comía los huevazos, le reseguía con la lengua todo lo largo de la polla hasta llegar a su capullo y me la metía en la boca de nuevo, se la chupaba con ansia y de vez en cuando me la clavaba hasta la campanilla, Miguel cerraba los ojos y gemía del placer que mis labio, lengua y paladar le estaban dando. De mientras Emilio ya tenía dos dedos metidos otra vez en mi coñito y con la otra mano seguía masajeándome las tetas de manera magistral. Que placer estaba sintiendo y como ya hacia un rato que me había relajado y me había centrado en disfrutar de esa polla, lo estaba gozando.

Mientras estábamos todos exhortos en lo nuestro..  Yo saboreando el pre semen que hacía rato le salía de la polla a Miguel, Emilio flipando con mis tetas y taladrando con sus dedos mi coño chorreante y la chica de la tele jadeando como una loca… Sonó el timbre y los tres dimos un sobre salto…

Emilio: Joder… Es Néstor… Dijo mientras retiraba sus dedos de mi cuevita y su mano de mis pechitos.

Se levantó, se digitó al pasillo que llevaba hasta la entrada y abrió la puerta, mientras yo pude ver, sin sacarme la polla de Miguel de la boca, como a la chica de la tele, que hacía rato que escuchaba gemir a gritos, pero que no la había podido ver, le estaban metiendo polla por el culo, por el coño y por la boca tres negracos de escándalo con unos pollones que ya los quisieran estos dos.

En el comedor de aquel piso cutre, aparecieron Emilio, desnudo con la polla dura apuntando al techo y detrás de él un chico de unos 38 años, rudo, corpulento, con unos brazos gruesos, musculados y con algún tatuaje y unas manos enormes, con unos dedos gordos a mas no poder…  Joder… parecía vasco…  Se llamaba Néstor como se podía haber llamado Patxi..

Detrás de ellos un chico más delgado, más joven, de unos 25 años, fuerte, fibrado del gim, también bastante rudo, pero no tanto como su hermano, con barba de tres días y guapísimo…  me pareció muy guapo. Al entrar los dos, no pude más que mirarlos de arriba abajo y fijarme en sus paquetes..  Joder…  Vaya bulto llevaban los vascos entre las piernas.

Emilio: Mirar…  Os presento a la putita…  Es una amiga de Miguel, que nos la ha triado porque quiere disfrutar con buenas pollas…  Parece ser que se la folla todo quisqui en el instituto, pero ahora quiere polla de verdad…  Verdad que si putita?

Yo: siiii  mmmm….  Siiii….   Conteste como pude porque Miguel en ningún momento me saco la polla de la boca.

Néstor: Joder macho…  Si ya la tenéis en bolas y tragando polla….

Emilio: Además ya viene lubricada de lefadas de todo el día…

Emilio hace que Néstor y Aitor se acerquen haciéndoles señas, les coge la mano y se la lleva uno a uno a mi coño.

Néstor: La ostia…  que guarrilla es, no?

Aitor: Y está muy buena, además…

Con todo esto, Emilio ya me estaba masturbando el coño con tres dedos que entraban de maravilla y Néstor se quitó los pantalones de chándal que llevaba sin gallumbos y la camiseta de tirantes en un plis, se acercó y pude ver una polla que realmente no era muy larga, pero era la polla más gorda que había visto en mi vida, me cogió la mano y se la llevo a su pollón para que lo pajeara.

Al poco, Miguel le dijo a Néstor que probara mi boca, que era brutal y que se notaba que me encantaban las pollas por que la chupaba con pasión, con lo que Néstor me metió el pollón en la boca y yo se la comí mientras se le iba poniendo dura dentro de mi boca.

Sin sacarme la polla de Néstor de la boca, me levantaron un poco y Miguel me la clavó en mi coño de golpe, que tuve que ir con cuidado para no morderle la polla a Néstor. Me follaba duro y cuando su pubis chocaba con mi culo, notaba como me clavaba el consolador que aun llevaba puesto.

Luego me pusieron de cuatro patas en el sofá con el culo en pompa hacia ellos y Emilio me la metió de un golpe también, pero esta vez mi coño ya la acepto como un guante, me estuvo follando duro un rato, hasta que decidieron hacer como un circuito y no follarme más de tres minutos cada uno, con lo que después de Emilio me la metió Néstor, que tengo que decir que aun y que no era tan grande que las demás, la tenía tan gorda que noté como me abría el coño, suerte que, con lo bruto que se veía, me trató con delicadeza y me gustaron mucho sus envestidas. Así se fueron turnando los tres mientras Aitor estaba aún vestido, con los ojos bien abiertos y masajeando su paquete.

Néstor: Aitor!!!   Pero que haces todavía así?? Ven a darle placer a la Guarrilla…  Fóllatela bien follada y goza de ella..

Luego, me estuvieron follando el culo con el consolador mientras se reían entre ellos y me decían cosas como…  Mira como le gusta a la zorrita….   Mira la guarrilla como disfruta…  esto es lo que te gusta putita??

Yo todo el rato decía que si incluso con la cabeza por había momentos en los que no me salía ni la voz del placer que me estaban dando aquellos tipos. Tenía el coño chorreando y las babas me caían de la boca.

Sin darme tregua, me sacaron el consolador del culo e hicieron que me sentara encima de Emilio y que me clavara su polla en el culo, cosa que hice sin rechistar, una vez ensertada por detrás, Néstor me la metió por el coño y entre los dos me agarraban por las piernas y caderas y me hacían mover de arriba y abajo, follándome de potísima madre…   Joder!!!!!!   Que placer, que morbo, que gusto sentía en mis abejeros y en mi cuerpo entero….   Gemía, me corría a chorros y ya empezaban mis orgasmos jadeando con la boca abierta… aaaahhhhhhh…..  ooooohhhhhhhh……  Siiiiiiiiiiiiiiii…….  mmmmmmmmm…..aahhh, aahhh, aahh…. Hasta que Miguel se puso de pie en el sofá y poniendo una pierna a cada lado de nosotros, me la metió en la boca y me la folló sin compasión a una velocidad brutal.

O sea…  Que yo estaba allí con una polla de unos 20cm clavada en mi culo hasta el fondo, con otra de unos 17 pero gordísima taladrándome el coño y otra de unos 19 follándome la boca y con un chaval tímido y reservado sentado a nuestro lado masturbándose viendo todo aquello, la chica de la tele gritando a voces unos orgasmos brutales y yo, chorreando fluidos por todos lados disfrutando como una loca fiera de sí, con unos placeres tan brutales, que no había vivido nunca antes.

Quien me iba a decir a mi esa misma mañana cuando los chicos del cole me la metían por turnos para correrse en mis abejeros y saciar su apretones, que acabaría siendo follada tan magistralmente por, de momento tres desconocidos pollones muchísimo más mayores que yo y que además lo estaría gozando tanto y disfrutando de aquellas pollas tantísimo…

Cuando llevábamos así un buen rato, Néstor dijo que se estaba a punto de correr, e hizo la intención de sacarla, cosa que Emilio se lo impidió cogiéndolo de los codos y no dejándole que se separa de mí.

Emilio: No… no la saques…  La putita ha venido en busca de pollas, pero también a que la llenen de lefadas….   Le encanta que le llenen de leche los abejeros..   Verdad Putita?

Yo. Mmmmmmmm….  Shhhhiiii…..   Imposible hablar cuando te están follando la boca con 19 cm de polla a toda velocidad.

Néstor: Pues me corro….  Me corrrooooo    La ostia…  que gustazooooo  Menudo coñito apretadito….   Aaaaaaaahhhhhhhh……  soltando tres o cuatro trallazos dentro de mi coño que los noté muy, muy calientes.

Me siguió follando hasta que su polla se fue debilitando hasta que se salió solita, dejando salir parte del semen que había dejado dentro de mi útero. Rápidamente Miguel saco su polla de mi boca y ocupo su lugar metiéndome la polla hasta el fondo sin miramientos y follándome como si no hubiera un mañana. Yo alucinaba del placer que sentía, ya no sé cuántos orgasmos levaba y chorreaba por todas partes. De todas maneras Emilio le hozo parara al cabo de un rato, porque al estar el debajo, su margen de movimiento era poco y tenía ganas de follarme bien, con lo que me sacaron las pollas dejando un vacío en mí que no me gustó, pero acto seguido Miguel se sentó en el sofá, me hizo sentarme de cara a él clavándome su polla en el coño, me abrazó echándome hacia él y dejando mi culo en pompa a merced de Emilio, quien, por fin, me pudo follar el culo a su ritmo. Me la clavaba hasta el fondo, la sacaba casi toda, la volvía a clavar, me follaba rápido un rato agarrado a mis caderas y después la sacaba del todo y la volvía a meter del tirón hasta el fondo, una y otra vez, haciéndome ver las estrellas cada vez, pero también haciéndome sacar un chorro de fluidos vaginales en cada clavada.

Estos dos me estuvieron follando así un buen rato, que diferencia con los chavales que me hacían culeadas rápidas y se corrían pronto, estos sabían cómo follar a una chica y lo hacían a conciencia.

En un momento dado, empecé a notar que Emilio me follaba más duro, que su polla estaba mucho más dura, que empezaba con unos buenos espasmos dentro de mí y sin más, empezó a correrse en lo más profundo de mis entrañas clavándome aquel mástil hasta lo más fondo que hubiera ido nunca nadie.

Emilio: Me corroooo!!!!!   Putitaaaaa….. Que putitaaaaa eeerrrreeessss….   Que culo….  Aaaaaaahhhhhhh…….  Toma lecheeeeee……  Toma lecheeeeee…..

Me la saco del culo, me levanto de un tirón sacándome la polla de Miguel de mi coño, me obligo a ponerme de rodillas y me puso la polla en la boca.

Emilio: Muy bien putita…  Ahora límpiamela bien, no quiero que dejes ni una sola gotita de nada y sobretodo que no me huela a culo. Límpiala y trágatelo todo.

Aquella polla aun sacaba leche a medida que perdía consistencia y realmente el sabor era mezcla de semen y de mierda. Le estaba limpiando mi propia mierda a aquel pollón, pero no me importaba porque me habían hecho sentir muy guarra y casi me estaba sintiendo orgullosa de que una niñata como yo, les estuviera dando tanto placer a esos hombres y ellos a mí..

Néstor: Aitor…  Y tú qué? Piensas probar guarrilla o te la piensas pelar como si estuvieras en tu cuarto con porno?  Venga ya!!!!   Métesela el boca que fliparas!!!!

Levantándolo del sofá y dándole un pequeño empujón hasta mí.

Aitor: Perdón  Mirándome con ojos de cordero degollado.

Emilio: Cómesela ya putita!!!

Miguel: Fóllale la boca de una vez atontao…  Dándole una pequeña colleja.

Al ver que el chico estaba un poco parado, pero en cambio yo estaba a tres mil después de esas folladas y quería más, le agarré la polla y me la puse en la boca y empecé a comérsela como si no hubiera un mañana. Aitor empezó a gemir y yo apretaba en todo el largo de su polla con mis labios cada vez que entraba y salía de mi boca, hasta que sus gemidos eran ya muy fuertes, parece que entonces perdió la vergüenza, me agarró la cabeza y empezó a follarme la boca con los ojos cerrados mucho más fuerte y mucho más rápido que los demás habían hecho. Tanto fue así, que al cabo de un rato me la clavó hasta la garganta y me apretó la cabeza y se corrió litros de leche caliente que fueron a para directamente a mi estómago.

Uuuuufffffff……   como me gustó, me gustó Aitor, me gustó su manera de ser vergonzoso, me gustó su leche, me gustó su polla, me gustó como me agarraba la cabeza y como me la movía para follarme y me gustó muchísimo como me miró tiernamente a la cara cuando poco a poco me fue sacando la polla de la boca.

Miguel: Bueno, bueno… que con la tontera el único que no me he corrido soy yo.

Dicho esto me tumbó en el sofá boca arriba, se tumbó encima mío, me abrió las piernas y me insertó su polla del tirón en mi coño, me estuvo follando a saco como diez minutos, más hasta que me llenó de leche todo mi interior, dejándome encharcada como nunca.

La fiesta no acabó aquí, en la siguiente hora, me volvieron a follar todos, pero esta vez más lentamente y de uno en uno, esta vez parecía, más que me hicieran el amor que no que me follaran una panda de degenerados, me besaban, me acariciaban y se aseguraban de que yo tuviera el máximo placer posible follándome a conciencia mi coño, mi culo y dándome polla en la boca para que la fuera degustando a mi ritmo y llenándomelo todo otra vez de sus lechadas calientes.

No sé cuántos orgasmos me hicieron entre todos, muchos, muchísimos, perdí la cuenta. Perdí la cuenta de los orgasmos y del tiempo. Cuando miré la hora, eran las diez de la noche y yo no había avisado en casa y mis padres no tendrían ni idea de donde estaba. Me fui al lavabo, me limpié bien en el bidet, me vestí y le pedí a Miguel que me acompañara hasta la parada de bus, pero Aitor, que realmente había estado muy dulce y atento durante toda la tarde, se ofreció a llevarme en su coche hasta mi casa.

Por el camino me pidió perdón por todo lo que me habían hecho aquella tarde y me confesó que le había gustado des de que entró en aquel comedor, que había gozado mucho y que le había encantado notar su polla dentro de mi mientras me acariciaba, y que le gustaría volverme a ver, pero él y yo solos para poder conocernos.

Le expliqué que no tenía que pedir perdón por nada, que me lo había pasado de maravilla, que lo había buscado yo solita porque me encanta el sexo, las pollas, la leche y los orgasmos y que siempre busco situaciones nuevas que me hagan subir en nivel de morbosidad y tener sensaciones nuevas. Que solo me dolía un poco el culo y el bajo vientre, pero que suponía que era normal, que no pasaba nada.

Que él también me había gustado mucho des de que apareció en esa casa y que me había gustado mucho como me había follado la segunda vez, que me gustaba también su dulzura y respeto.

Le dije a qué instituto iba, le di mis horarios y le pedí que viniera algún día a buscarme a la hora de la salida y que nos conoceríamos muchísimo más a fondo si era lo que él quería.

Continuará……