Soy mariana

Siempre he sido muy impulsiva, sexual y morbosa en realidad. Pero siempre he tenido que ocultar ese placer culposo de mis gustos por hombres mayores, ambientes desagradables y situaciones potencialmente de riesgo

Como el mismo título lo dice... déjenme presentarme. Soy mariana, actualmente tengo 37 años, soy originaria de Monterrey. Crecí en una familia por demás “disfuncional” ( ya saben padres siempre ausentes por el trabajo, progreso económico familiar, falta de atención hacia mí,mucha moralidad, demasiado pensar en el que dirán, ir a la iglesia todos los domingos, etcétera). Nunca tuve problemas de dinero,(hasta ya de adulta) ya que mis padres siempre me cumplieron todos mis gustos, caprichos y necesidades (siempre tuve auto, estuve en muy buenos colegios, una buena universidad, unas buenas vacaciones)a cambio de siempre estar sola. Así que crecí sin que se dieran cuenta de cómo era realmente por dentro y todo lo que me pasaba por la mente y hacia. Ya de adulta fui diagnosticada con trastorno límite de la personalidad. Lo cual explicaría: el ¿por qué? de casi todas mis acciones y actitudes, siempre buscando mayor intensidad, siempre muy impulsiva en las emociones, periodos de remordimiento e irritabilidad, uso con abuso de alcohol (¡y otras substancias divertidas!).

Todo esto que les relatare sucedió durante mi adolescencia y mis veinte. Así que si desean más de todos estos eventos de mi vida, con gusto y mucho morbo les contaré de ellos. Por lo pronto, me describiré a mi misma: soy delgada (siempre lo he sido) pero en estas épocas era un poco más, peso al rededor de 47 kg, mido 1.57 m, soy de tez blanca, cabello obscuro a los hombros (muy negro y muy liso), mis ojos son café obscuro. Buenos pechos aunque no muy grandes, siempre buenas nalgas (así paraditas), piernas largas, otra cosa que también siempre ha ayudado es que siempre he hecho gym, así que puedo decir que mantengo una figura bastante esbelta y estilizada. Otra cosa es que desde hace mucho me ha gustado vestir bien siempre muy entaconada, (mientras más altos mejor) y siempre mantengo mis uñas (tanto de las manos como de mis pies) muy bien manicuradas, algo que también adoro hacer es cambiar de look radicalmente para sentirme diferente.

Lo siguiente que les voy a contar es una experiencia que tuve alrededor de cuando tenía 23 años. Y es relacionado a un placer que culposamente siempre he tenido. La verdad es que siempre me ha gustado la pornografía. Algo que siempre marcó mis gustos es el hecho de que desde que yo recuerdo es mi gusto por los hombres mayores ( desde que vi mi primer vídeo porno era algo que me atrapó completamente, ya que el primer video que vi se trataba de esto). Creo que esto siempre influyó en lo que me excitaba, ya que siempre sentí atracción hacia tipos desagradables (en algún momento le relatare en otro texto, como me inicie en este particular gusto). y otro tipo de “cositas sucias” que me atraen.

Recuerdo que cuando estudiaba mi primer año en la universidad, e iba de camino a mi casa, siempre pasaba por una casa que estaba en construcción. Y ya saben siempre está lleno albañiles y ese tipo de trabajadores, me refiero a hombres fuertes, sudorosos, que siempre toman caguama y gritan cosas con un florido lenguaje. Mientras iba manejando por ese sitio,resulta que iba una chica caminando por ahí, nada especial físicamente. la verdad). Y cuando se le ocurre pasar por ahí... los gritos no se hicieron esperar... ¡mamacita!, ¡que rico lo mueves!, ! Que sabrosa estas, chiquitita!!... acto seguido pude notar como la chica se enrojeció de la cara y salió huyendo de ahí, pero igualmente a mi se me subieron los colores a la cara, ¡pero de morbo¡. Me sorprendí a mí misma sonriendo, y sintiendo como me empezaba a sentir más y mas mojada al imaginarme en su lugar, siendo ametrallada por esas frases vulgares y sexualmente explícitas. El simple hecho de imaginarme deseada por un montón de hombres sudorosos, y vulgares me hacía sentir tan, pero tan caliente que hasta mojé mis panties de una manera casi instantánea. De pronto escuché una voz que me sacó de mi nube, la cual se destacaba de todo ese grupo de mandriles. —¡Qué buen culito tienes Reina!—, gritaba uno de los “ maistros”, de una manera tan, pero tan vulgar, que fue como si su voz me abofeteara. Era un tipo de unos cuarenta y muchos años, super moreno, de cabello chino, malencarado, bastante alto e igual de panzón. Que mientras se quitaba la camisa y se reía con los otros albañiles. Y después de eso empezó a dar órdenes. Pues al parecer era la “cabeza” de por ahí. Y al grito de —¡órale cabrones ora si hay que jalar pa’ que se completen una putita de esas!— empezó a arrear al resto de los albañiles.

La verdad era que en mi mente no podía dejar de imaginarme a ese hombre de modales tan vulgares y con un vocabulario tan sucio para hablar, haciéndome mañas. Me volví a mojar de imaginarme en esa situación tan comprometedora. Pero la verdad me ponía muy caliente el pensar en ponerme en modo de “zorrita” con alguien así. Ya había fantaseado con eso antes pero nunca había sentido el impulso tan fuerte de hacerlo, de sentirme acosada por hombres así, y de querer dejarme que me hicieran de todo, la verdad tenía muchas ganas y me ponía súper caliente el siquiera pensarlo... lo iba a intentar me iba a exhibir, para cumplir un deseo de “puteria” que me era incontrolable... y probablemente logrará algo más.

Desde que llegué a mi casa ese día, me sentía muy excitada. Poco me faltó para llegar escurriendo. Me encantaba la idea de sentirme el blanco de las miradas y más que me dijeran cosas tan vulgares y sexuales la verdad quería que me insultaran y que me vieran, se sentía como me sonrojaba al pensar eso. Me masturbe varias veces ese día. Fantaseando con el hombre que había visto. Sentía remordimiento de hacer algo así pero la verdad me fascinaba la idea de al menos pasar por ahí. Un par de dias despues, me arregle con plena intencion de ir a probar mi morbo, me vesti con una blusa color azul de tirantes, ajustada con la espalda bastante descubierta y un pantalon negro entallado que resaltaba en si todas mis nalgas y hacia ver mis piernas mas estilizadas y mis tacones negros de un tacon bastante delgado, pero sin ser de aguja. lo hice parecer lo más casual posible. Salí de mi casa y ya estaba decidida a pasar por ahí. sentía algo de remordimiento y vergüenza de que alguien me viera, o que en mi casa se fueran a dar cuenta. Justo antes de llegar sentía una excitación y miedo tremendos, me detuve a pensar. Me daba miedo pasar por ahí pero a la vez quería sentirme deseada de la mala manera. Cerré los ojos y respire profundo. Empecé a caminar... , justo cuando los abrí de nuevo ya estaba enfrente de la construcción aquella y escuche un silbido fuertisimo. escuché como los "maistros" empezaban a hablar entre sí a lo lejos, pero los gritos no tardaron en escucharse. "¡Qué rico lo mueves mamacita!,¡así me gustan las flaquitas!, ¡ qué sabrosa estas mamita!... sentía como se me subía la sangre a la cabeza y empecé a caminar más coquetamente haciéndome como que no los tomaba en cuenta, pero por dentro era como si mi vagina se quemara, la excitación y el. olor que desprendía ese lugar, !me ponía a mil!, me excitaba el olor a tierra, sudor y suciedad. sin contar los piropos sucios que me soltaban. ¡era como si mi vagina ardiera!. justo cuando ya iba pasando de largo por ahí, vi que estaba el panzón, el jefe de todos. Igual sin camisa, sudoroso y mal encarado.Mientras estaba batiendo el cemento, levanta la mirada justo cuando pasó a su lado y con una voz ronca, me dice: ! que buen culito tienes chiquita, como para dejarlo todo pando!... lo voltee a ver y me hice indiferente, pero dentro de mí la realidad era que por dentro me sentía arder. Hasta mis pezones se endurecieron, empecé a mojarme y casi pierdo el control. Cuando logré salir de ahí les juro que hasta jadeaba y sudaba de lo prendida que me había puesto, en mi mente pasan ideas de verme rodeada de todos ellos, deseaba sentir un monton de manos tocándome por todos lados, atrapandome, desnudandome, tocandome todita. Imaginaba sus vergas enfrente de mi deseosas de penetrarme y yo sedienta de ellas, haciéndome de todos, sometiendome. Cuando llegué a mi casa mi vi vagina era como un grifo de agua, estaba super mojada, era como si escurriera, me sentía tan caliente como una brasa de carbón. me encanta sentirme super zorra al hacer eso... y de pronto sabía lo que quería... quería que me cogiera el último hombre que vi en esa construcción (¡o todos a la vez!).

Me encendió tanto la manera en que me lo dijo, su palurdez, su vulgaridad, me hacía sentir como si. fuera una perra en celo. La manera en que lo dijo, la saña en sus palabras y su aspecto me prendia, como si tuviera brasas dentro de mi vagina, me hacía sentir sedienta de una buena verga. ahora si lo había decidido... quería que me montara como una puta, quería portarme muy, pero muy mal y hacer algo prohibido.

Después de unos días, me estaba poniendo de acuerdo con unas "amigas"en la universidad para salir por la noche a un antro. aunque ese dia me sentia mal no tenía ganas de salir a un lugar asi. Pero a pesar de todo me empecé a preparar para ir, estuve fumando un par de cigarros mientras escogía mi ropa y me tome un par de vasos de vodka absolute. ese dia me deje el cabello suelto y se veia mas negro de lo habitual, ojos con sombra muy negra, la boca con un lipstick rojo carmín ,un elegante collar negro de pedreria, me puse una blusa blanca que tenia los hombros descubiertos y un muy buen escote que dejaba ver mis senos, solo un poquito mas de lo necesario, pero lo suficiente para ser muy sugestiva, un bra muy coqueto que me las levantaba muy bien, con una falda negra asi super cortita y una tanga negra de esas super mini, y mis adorados tacones negros super altos y cerrados. Guarde mis cigarros y un encendedor en mi bolsa, y un condón (por si acaso,una nunca sabe, quedar embarazada sería algo muy malo para mi, y para qué negarlo siempre he sido muy mala cuidandome) una vez que estuve lista y ya en el carro. pase justo por esa calle, eran ya pasadas las nueve de la noche. y vi una luz en la construcción, y ahí estaba él. Afuera estaba sentado en una silla de aluminio mientras fumaba y tomaba de una botella (de esas chiquitas que son como un panalito que por lo general tienen como un mezcal super corriente). Al parecer creo que el tipo no solo era el encargado de ahí, sino que también la hacía de velador. Y de pronto… El impulso de sacarlo puta que llevaba adentro, salió de mi.

Me estacioné justo enfrente de la casa en construcción, y abrí el cofre del carro, fingiendo que se. había descompuesto de algo. me pare frente a él fingiendo preocupación y desconcierto. cuando vi que se acercó a mi. me dice de una manera muy amable:–– le paso algo al carro señorita?––. yo fingiendo le dije: que de repente había dejado funcionar bien y que algo le había empezado a hacer un ruido muy raro. se acercó y lo vio (pero obvio era que no sucedía nada con él), de manera muy amable me dijo que necesitaría una linterna para ver bien, que si quería lo acompañara por una a la caseta de herramientas. Acto seguido cerré el cofre y me fui detrás de él a donde estaba la luz, dentro de la construcción. Pasamos junto a la silla donde estaba sentado y justo a su lado estaba la botellita de mezcal. Haciéndome la disimulada pregunte: –– eso que esta tomando no sabe muy fuerte?––, mientras caminaba hacia adentro de donde tenía las herramientas, me responde en un tono muy jovial:–– debería de probarlo no sabe tan mal, pero si es fuerte––, sin pensarlo tomé la botella y le di un buen trago. – ¡puajjj!, esta fuertisimo– ,dije mientras sentía que me quemaba la garganta y me empecé a sentir mareada, era como si todo empezara a dar vueltas y luego un leve mareo. El tipo vio como me tambaleaba y me tomó de la mano, me sentó en un banco que tenía ahí adentro. me dijo con tono muy paternalista:–– ¿apoco ya se mareo werita?, sientese aqui en lo que se le pasa, lo que pasa es que no está acostumbrada––. Me sentía como si estuviera en un barco que se movía suavemente. la verdad si estaba super fuerte y era la primera vez que lo tomaba ,aparte ya traía un poco de carrera por el vodka que me había tomado, previamente. cuando tomé conciencia de donde estaba el lugar tenía una luz asi amarilla, era muy sucio y solo había una mesa, el banco donde estaba sentada y un colchón con hedor a sudor y cigarro. Donde me intente incorporar una vez que me sentí un poco mejor aunque un poco mareada, mi bolsa (la cual era bastante pequeña, olvide mencionar) se me cae al piso y todo su contenido se desparrama, muy atento el tipo se agacha y empieza recoger todo lo que se había salido de ella y a ponerlo adentro. la verdad me empecé a sentir un poco decepcionada de lo que estaba pasando. pensé que sería igual de corriente como gritaba.

En eso levanta el condón que estaba adentro junto con mi cartera... sonríe y me ve a los ojos, diciendo: –– ¡eppale!, ya viene preparadita la werita ––, me dio mucha vergüenza y le arrebate la bolsa de las manos, y así tambaleando y todo me dirigí a la puerta, cuando de repente me agarra por una de mis muñecas y me jala hacia el. Sentí el sudor de su cuerpo pegarse a mi, el olor a ese vino barato y una de sus manos callosas y sucias sobre mi cintura, me asuste mucho cuando me tomó por sorpresa. Y despues me dice :—¿apoco cree, que no se que anda buscando riata, mamacita?—. En ese momento sentí la necesidad de salir de ahí, me invadió el miedo con el subidón de adrenalina, pero al intentar soltarmeme di cuenta que no me iba a dejar ir, comparado conmigo, era muy grande, a lo mucho mi cabeza le llegaba al mentón. intente resistirme un poco pero sabía que eso no iba a pasar (hasta pensé:¡¿en que bronca me meti?!, y todo por andar de zorra). empecé a sentir sus manos, las cuales eran muy grandes, sucias y callosas en mi espalda hasta llegar a mi cola, de nuevo sentía como el sudor se pegaba mis pechos a través de mi ropa, de pronto sentí como el miedo empezó a sentirse una excitación brutal, como si me hubieran bañado en gasolina y prendido fuego. Mi boca empezó a buscar sus labios y empezó a besarme. Su lengua entró en mi boca con un muy fuerte sabor a vino y cigarro, como si me invadiera, tenía la barba mal rasurada y muy cerrada, me raspaba los labios. sentía como se daba gusto manoseandome todas las nalgas y los pechos. mientras le encajaba las uñas en la espalda, podía sentir como me pegaba a su voluminoso abdomen lleno de sudor. cuando de repente empecé a sentir como se le empezaba a parar la verga... mmmm. Me volví loca solo de sentirla. La manera en la que me manoseaba era tan tosca, que me lastimaba un poco, el olor y todo el ambiente sucio donde estaba me sacaba mis más calientes deseos, sabía que iba a ser penetrada por esa verga en esos momentos y poco podía hacer para detenerlo, la verdad lo deseaba mucho. –– ¡huyyy!, chiquita, pues parece que después de todo si andas buscando una buena riata, ahorita si vas a saber lo que es que te dejen bien cojida, mi reina––, me dijo mientras me desabrochaba la blusa y me arrancaba el bra, me empezo a chupar los pechos y a morder los pezones, tan fuerte que sentía que me los iba arrancar, y yo solo podia gemir y respirar mas profundo.–– ¡ayyyyy asi papi, asi, comeme toda!–– era lo unico que podia decir mientras me llenaba de saliva. Despues de eso y mientras cerraba los ojos, senti como me volteo y quedando de espaldas a el me empezo a bajar la falda, hasta que cayo al piso, y quede solo con mis tacones y la tanguita puesta, me agarro por el cuello y me dio un par de nalgadas, que me hiceron gemir de placer y dolor a la vez, cuando me dijo: – mira nomas que rico culito tienes mamacita, lo voy a poner a trabajar un buen rato hasta que te quede hinchado–, acto seguido me arranco la tanga y quede completamente desnuda. Para esto ya estaba yo super caliente y hecha toda una puta que hasta me costaba pensar con claridad, me di la vuelta y le quite la camisa para dejar al aire su corpulencia, era muy moreno, grande y con una panza igual de voluminosa. –– !si papi, hazme todo lo que quieras!––, le dije mientras me tomaba de los hombros y me hacia que me incara. empece pasarle la lengua por la panza, sabia a sudor y a tierra, pero eso me hacia sentir bien putita y me habia hecho exitar muchisimo, empece lamerle el ombligo, recorri todo lo que pude con mi lengua, mientras el se exitaba aun mas, empece a tocar sobre su pantalon hasta que puse mis manos sobre su verga que estaba creciendo cada vez más y más, la sentía cada vez mas dura. Me puso de rodillas frente a el y ya no me podia contener, estaba que chorreada de jugos vaginales, y empece adesabrocharle el pantalon y bajarle el zipper, meti la mano y le baje la trusa, la cual estaba super impregnada de sudor y por fin la encontre, y la saque bajandoe los pantalones el olor era super fuerte, no era muy grande ( era como de unos quince centimetros), pero. vaya que estaba super gruesa, era una verga muy prieta, se le marcaban las venas y con muchos pelos en la base, la cabeza no era muy grande pero se empezaba a hacer mas y mas gruesa, la verdad es que mi mano no la alcanzaba a abracar completamente, al verla me hizo salivar, le hice el cuerito para atras para descubrir la puntita, mientras se la empezaba a jalar y sentia como se hinchaba en mis manos.Era como si me hipnotizara. Con mi otra mano enmpece a acriciarle los huevos, estaban tan grandes y calientes. acerque mi cara para empezarlos a chupar, sentia como me caia su verga en mi cara, pero no me podia detener, al final los ensalive todos y empece a recorrer ese delicioso pito con mi lengua, desde la base hasta la cabecita, me encendia el sentir, esa verga en mi lengua podia sentir todas su venas y como se iba ensanchando cada vez mas. puse mis labios al rededor de la punta y la empece a chupar como una loca, mientras el gemia y me decia :–– asi putita, asi. que rico la mamas, ¡ahora si perrita, te la vas a comer toda!––. puso sus manos en mi cabeza y me empujo su verga a tra vez d mi boca, era como si me violara por la garganta, no me cabia toda en la boca, por mas que la abria, ya no podia pasar mas, me hizo llorar y me sacaba arcadas. llore tanto que se me corrio todo el maquillaje, me dolia la boca y queria vomitar donde escurria ese liquidito que gotea antes del semen. Me encantaba sentirme dominada y usada sexualmente de esa manera. Me la saco de la boca y me llevo hasta el colchón que estaba ahí adentro, me dolía la boca, no podía cerrar la quijada de lo adolorida que estaba. Con lo caliente y puta que me sentía me deje llevar... ligerita, ligerita para entregarme a esa puteria que me dominaba.

—Ahora si,! por andar de zorrita te voy a dejar bien cojida!— . Me dijo mientras jadeaba y yo con la cara de puta que no podía dejar de ver esa verga que me tenia toda trastornada. Me puso boca arriba en el colchón. Y en ese momento intenté alcanzar mi bolsa para sacar un condon, no podía arriesgarme a que dar embarazada. Justo cuando la alcancé y pude sacarlo,el tipo me lo arrebato de las manos y lo avienta a una esquina. Entre risas me dice :-¡ ora resulta pendeja, como si te fuera a pegar algo!, y por si lo estabas pensando... te preño y te sale panza te paso por puta! -. Me le vanto las piernas y las acomodo en sus hombros, mientras yo. entre gemidos y gritos sofocados le pedía: –– ¡No por favor!, ten cuidado que si me vas a ...¡AGHHHHHHHH!!!!!!––, de un solo golpe me empalo con su pito, los ojos se me pusieron en blanco, y solte un gemido, estaba muy lubricada asi que entro como un cuchillo en mantequilla, la tenia tan dura como su fuera una piedra, y casi me entro toda, hasta la parte mas gruesa, me la dejo ahi adentro. No sabia si llorar o pedir mas. ––¡si ya meacorde de ti!, eres la del otro dia, mira que saliste facilota, ya ves lo que te pasa por andar ahi de presumida ––. Ni siquiera alcance a responder por que cuando apenas estaba por gemir como perra en celo, me da un par de bofetadas tan fuerte, que senti como mi cara se puso roja, senti como me empece a venir de una manera espectacular, mis ojos se pusiero en blanco de otra vez y me epumujo la verga de nuevo y me penetro toda sin ninguna resistencia, me dolia, por que estaba muy gruesa, y la sentia toda adentro, lo unico que podia hacer era gritar como loca de placer y pedir mas, cuando me empezo a bombear muy fuerte e intenso, –– ¡ que rico papi dame mas, dame mas, papi, por favor!–– solo podia suplicar por mas verga, era como si no me pudiera controlar, me sentia como una perra en celo, ya no me importaba nada, solo queria mas y mas placer.

Justo cuando creí que no podia pasar mas, senti sus manos en mis caderas y su verga saliendo de mi, mientras mi vagina no dejaba de mojarse, me da la vuelta para quedar boca abajo. mi cara pegaba sobre el apestoso y sucio colchon. escuchaba su respiracion y como jadeaba y gemia sobre mi, con la voz agitada me dijo: – te voy a dejar ese culito que tienes todo pando, por andar de culerita, ahora asi vas a ver––. –– ¡No,no,no!, ten cuidado, ¡no!–– suplicaba, ya que aun que sabia lo que era, nunca habia sido penetrada por el ano. (alguna vez masturbandome , llegue a juguetar conmigo misma, pero nada mas grueso que mi dedo). Senti como ese barrote de carne me abrio las nalgas, era sumamente grueso y baboso, ahora me acomodaba la punta buscando mi ano. clave. las uñas en el colchon para aguantar cuando senti la presion de su cabeza en la puerta trasera.Y me la empezo a empujar. la presion se sentia horrrible. lo unico que sentia era miedo, sabia que iba a doler. por mas que apretaba y me movia intentado escaparme, estaba sometida con sus manos en mis caderas. cuando me apreto contra su cuerpo senti la punta de su verga entrar en mi ano – ¡AHHHHHHHHHHHHHH CABROOON, YYAAAAAA!– , grite fuertisimo y me estremeci toda, era como si me estuvieran metiendo un fierro de lo dura que estaba su verga. me hizo sudar frio, mientras escuchana su risa, sus gemidos y sus jadeos.

Gemia de placer como un animal. su verga empezo a entar poco a poco mientras yo seguia apretando inutilmente hasta que me vencio, pero el dolor solo se hizo peor. empece a llorar y gemir del castigo que me estaba dando, y asi empece a sentir como se abria paso en mi recto, cada vez mas grueso y duro, era como si se inchara. Escuhe cuando me dijo: —ANDALE PUTITA CREIDA, TE VAS A IR TODA PANDA DE AQUI—, me escupio en la cola y le empujo mas aun, lo unico que podia hacer era morder el colchon fuertisimo y pedir que parara, era como si me estuviera empalando, sentia como mi recto se llenaba con toda esa carne, dura y venosa. depronto me la empujo de un solo golpe y senti como si mi cola se rompiera!, el dolor fue tan intenso, que ni si quiera pude gritar, y me brotaron algunas lagrimas, mi cara de puso roja del esfuerzo. Después de eso fue como si hubiera quedado toda abierta, el dolor desapareció, y empecé a sentir un orgasmo muy diferente a todos los que había sentido hasta entonces. El esuchar su respiracion agitada y sus gemidos de placer, como si fuera un animal, y esa verga rompiendome la cola, como si estuvera furiosa, me hicieron prenderme aun mas, empece a olvidar el dolor. Empece a gemir y a pedir mas mientras me bombeaba cada vez mas rapido. –¡ahhhhhhh!,¡ahhhhhhh!,¡ahhhhhhh! ,¡dame mas papi!, ¡la quiero toda mas adentro!–, gritaba ya convertida en toda una puta, escurria ya por todos lados, sentia mis jugos correr por todos lados, el placer y lo sucio del momento, que hasta yo misma termine separandome las nalgas con mis manos.

–¡Pero mira que ya te salio el cobre!, hasta te abres el fundillo tu sola. Perrita-, me dijo. Ahora si vas a saber lo que es bueno, la manera rapida en que me abria el recto. se detuvo y me comenzo a penetrar, lento y muy fuerte. mientras yo no para de salibar y poner los. ojos en blanco. Podía sentir como me pegaban sus huevos en mi vagina, y me trastornaba mas aun. alance a escuchar que me decia:– !te voy a hacer cagar mis mecos!, reina.– mienras gemia cada vez mas fuerte y bufaba como un toro. lo unico que alcance fue a gritar entre gemidos:–¡¡¡NO, NO, NO,NO!!!–. intente escaparme sacandomela de atras pero de nada sirvio, ya que me agarro de las caderas yme ensarto toda... despues fue como si su verga me estallara en mis intestinos, sentia como me llenara de algo caliente, como si se me pegara a las tripas, intentaba apretar mi ano pero era imposible, era como si no reaccionara. despues la empezo a sacar. me ardio un poco cunado me la saco completamente, era como si me hubieran hervido completita. las piernas me temblaban, me palpitaba el culo, me dolía el abdomen, los pechos y la cara... me dolia todo.

Me avento sobre el colchon como si fuera un trapo viejo y me desplome sobre el, quedando en pocision fetal, sientiendo como, de mi cola seguia saliendo leche caliente, la cual me ardia mientras escurria a borbotones.

–¡ahi te vez!, perrita. por si algun dia quieres mas–, me dijo burlonamente mientras se vestía y salia de la caseta de herramientas.

Me habian tratado como basura, no me parecia nada a la chica guapa que habia llegado a ese sitio, estaba toda sudada, sucia, adolorida, con el maquillaje corrido y la cola me ardia como si me hubieran quemado. como pude encontre mi ropa y me vesti lo mas rapido que pude (no encontre mi tanga, asi que me fui sin ella). sali de ahi como pude, y llegue al coche, (me sente como pude, o como soporte hacerlo) lo encendi, prendi un cigarro, respire profundamente el humo... y me largue de ahi.

Me sentia extasiada, y sucia, me senti aun llena de su leche, cuando llegue a casa, me tuve que quitar los tacones. la verdad me costaba caminar. con ellos de lo adolorida que iba, inclusive mache un poco el asiento de mi carro con su leche y un poco de sangre. no podia dejar de sonreir y de sentirme extremadamente sucia, me habian tratado como un simple objeto sexual, tome un baño y me limpie completa. me fui a dormir con algo de remondimiento, dolor y hasta miedo de estar embarazada. El tipode la construccion, habia cumplido su palabra: habia regresado a mi casa toda maltrecha. (no pude sentarme bien algunos dias, de lo mismo inflamada que estaba), habia sido usada como una perra en celo y me habia encantado, me sentía como si tuviera fiebre... quería repetirlo, o explorar hasta donde podía llegar.

Pues hasta aquí mi primer relato, espero les guste. De ser así seguiré escribiendo más de mis experiencias, de una etapa muy extrema de mi vida. Me encantaría escuchar sus sugerencias. Las cuales leeré en mi correo de la manera más morbosa posible... un beso.