Soy infiel a mi novio con mi jefe casado
No importa cuantas veces una escuche la famosa frase Nunca te metas con hombres casados. Todo comienza por el hecho de pasar tantas horas al día en el centro de trabajo llevándote bien con esa persona...
Hola a todos, soy Karin otra vez por aquí después de un largo tiempo.
Pues así es, le soy infiel a mi novio con mi jefe que es casado. No importa cuantas veces una escuche la famosa frase "Nunca te metas con hombres casados". Nadie experimenta en zapatos ajenos y las cosas van pasando poco a poco a pesar de que una sabe que "esta mal". Todo comienza por el hecho de pasar tantas horas al día en el centro de trabajo llevándote bien con esa persona, luego vienen los coqueteos, los juegos, las insinuaciones, y sin que te des cuenta ya estas metida en una relación.
Tengo que decir que con mi novio las cosas andan muy bien, pero cuando estoy con mi jefe me siento en otro planeta. Nuestra necesidad de estar juntos no es solo física. Nos gusta besarnos y tocarnos, el es casado y estamos concientes de que disfrutaremos esta relación por el tiempo que dure y sin reclamos. Tener sexo con el es de otro mundo, existe una gran compenetración física y mental. Nuestra relación es pura pasión y locura, adrenalina, excitación y sexo.
Lo que si no hemos perdido es la relación jefe-subordinada. Tenemos que estar ocultándonos en todo momento para poder besarnos y tocarnos. Creo que es en gran parte la búsqueda de lo prohibido el condimento de nuestra relación. Como trabajábamos juntos en cuanto tenemos oportunidad en el descanso o cuando sentimos que estamos solos, empezaban los besos apasionados, luego las caricias calentonas, y al final siempre terminábamos teniendo sexo o yo haciéndole una mamada hasta hacerlo acabar. Les puedo asegurar que no hay nada mas excitante para mi que tener relaciones con mi jefe en el centro de trabajo exponiéndonos a que nos descubra algún compañero, cosa que no ha pasado hasta ahora pero que podría pasar. Después de estar con el y haber sentido uno o dos orgasmos deliciosos, me pasaba el resto de la jornada laboral muy animada y relajada.
Al principio me juré seria solo aventura, pero es imposible dejar de lado los sentimientos cuando existe tanta pasión. Pero el desde él principio el me dio a entender que no quería problemas con su esposa y que no tenia pensado separarse de ella por nada del mundo y yo acepte esa condición.
Al comienzo de nuestra relación prohibida yo me sentía un poco culpable cuando le escuchaba hablar por teléfono con su esposa o cuando ella venia a visitarlo a la oficina, pero posteriormente me di cuenta que no le estaba quitando nada a ella ya que yo solamente estaba con el en las horas de trabajo, y fuera del trabajo solo cuando no tiene planes con su esposa.
Actualmente mi relación con mi jefe esta en el momento mas desenfrenado por llamarlo de alguna manera. Nuestros cachondeos son tan frecuentes que algunas veces voy a trabajar sin ropa interior para facilitarle el trabajo. Él no desaprovecha cualquier oportunidad en su oficina o en el pasillo para meter sus manos por debajo de mi falda y tocarme a su antojo; y si quiere penetrarme un rato solo tiene que levantarme la faldita y tiene todo el camino libre a su disposición. El ambiente es tan caliente y prohibido que no me importa tragarme su lechecita o que se corra dentro de mi cuevita. Al principio de nuestra relación el se protegía, pero los encuentros se hicieron tan frecuentes y las situaciones tan morbosas y excitantes que yo misma le pedía que me llene con su lechecita. Si no estuviese tomando la píldora hace tiempo que hubiera quedado embarazada de mi jefe.
Algunas veces el me llama a su oficina y me espera sentado en su silla con su deliciosa verga apuntando al techo. Me ordena que me siente sobre el y con su verga clavada en mi interior conversamos de asuntos del trabajo mientras el se mueve lentamente y yo también. A veces me hace hablar por teléfono mientras me esta fornicando, me dice que llame a alguna amiga, a mi tía, a mi primo, hasta me ha obligado a hablar con su esposa mientras me esta penetrando. A el le encanta besarme, manosearme y cogerme mientras yo trato de hablar como si no pasara nada, pero en varias ocasiones me preguntan "¿te pasa algo? Te noto extraña" y yo tengo que decir que todo esta muy bien, y vaya que si lo esta!!!
Tal vez suene extraño pero la relación con mi novio ha mejorado mucho desde que estoy con mi jefe. Se que la relación con mi jefe no tiene futuro pero no me importa, pienso disfrutar al máximo el tiempo que dure porque nunca me he sentido tan bien en mi vida y nunca había sentido tanto placer.
Karin.