Soy de esas

Soy de esas, de las que saben del deseo de lo hombres, de las que están interesadas en descubrirlo.

Tod@s tenemos nuestros morbos, y el mío es conocer acerca del deseo de los hombres, soy de esas que mirarías por la calle, de las que deseas al instante y hace volar tu mente, y que finalmente, verás alejarse por la calle mientras te lamentas por no tener una mujer así a tu alcance.

Soy de esas que llegan a casa y después de echar un vistazo a su cajón de tangas de hilo, se pone aquel que combina más con las nuevas botas que he comprado, se ducha despacio y perfuma su cuerpo, para vestirse ese tanga, ponerse esas botas y sacar de su estuche el collar negro de cuero que adornara, como casi cada noche, mi cuello.

Soy de esas que cuando su hombre llega a casa, engancha la cadena a mi collar y se pone a 4 patas, el tatuaje de mi espalda luce ahora más que nunca, sobre ese tanga y el collar se tensa, mientras mis nuevas botas arrastran por el suelo, recorriendo un camino que conozco hasta el sofá.

Allí me pongo en mi sitio, sobre mis rodillas, con las manos sobre mis muslos y la boca abierta, con la lengua fuera, mi pequeña estatura, 158 cm, y esa cadena colgando de mi cuello, hacen que parezca un juguete, soy un juguete, mi pelo largo y rizado cae sobre mi rostro, resaltado por mis pecho desnudos, 47 kilos de juguete, de líneas proporcionadas, rellenas de tez morena.

En ese momento con mi boca abierta y mi lengua fuera, tan solo puedo pensar en la de hombres que desearían eso, un juguete, un juguete físicamente acorde a sus gustos y expuesto, destinado a darle el placer que tantas veces han imaginado.

Soy de esas que imaginan, a una señal suya pondré mis manos en la espalda y lamere su polla, disfrutaré su sexo y esperaré a escuchar los gemidos de placer, es entonces cuando se que debo mostrarme espléndida, apoyar mis manos en el suelo y levantar mi culo, ese que sueñan tantos en esa posición y que en breve será golpeado, mientras su polla ya se acerca al final de mi garganta; se que verá mi coño brillar sin haberlo tocado, abrirse, sin haber esperado que el lo abra, y es entonces cuando dirá de nuevo, "menudo juguete tengo".

Soy de esas que en esa posición, a 4 patas, no levantará la cabeza de esa polla, hasta que así lo desee, hasta que tire de mi correa para erguirme de nuevo, para poner mis manos otra vez sobre mi espalda y esperar su próximo deseo, me agarrara del pelo, seguramente, mi cabellera rizada, y alojándose de nuevo en mi boca, dirá..... " Que la chupes es fantantisco, follarte la garganta es, tocar el cielo". Soy de esas que entregan el poder a quien lo merece, y que le hacen saber, que aunque hubo otros en ese lugar, nadie llegó tan lejos.

Soy de esas que con un chasqueo de dedos, se da la vuelta de forma sinuosa, ofrece su culo y el extremo de su cadena, de esas que en ese momento, saben que sus nalgas serán azotada, no como un juego, fuerte, con ganas, de esas que saben que su culo merece la pena.

De esas, que al penetrar gesticulan y emiten un gemido que la pone más dura, y que al sentirla en el fondo, sabe lo que tiene que hacer, ser un juguete, moverse como solo ella sabe hacerlo, mientras recibe dedos en su boca y palmadas en sus pechos, de esas que no decepcionan y de las que siempre quieres más, de las que siempre entregan más, a quien lo merece.

Soy de esas, sobre las que un hombre se corte donde quiere, por saberme suya, y que una vez desmadejada sobre el sofá, rendida, espera tan solo un beso en la mejilla y un.... "muy bien juguete".

Aún desconozco si soy sumisa, o simplemente disfruto dando placer a quien lo merece, lo que si se, es que deseas una como yo, y eso, eso hace que lo disfrute más aún.

Soy Laura, y seguiré contándote.