Sorprendida por mi hermano 1

Mi hermano Maximo y yo siempre nos habíamos llevado más que bien, hasta que se puso de novio y me dejo de lado por Sonia. Tenemos un amigo en común David, nuestro vecino desde hace 10 años. Estamos de vacaciones y nuestros padres por primera vez nos dejaban solos para tomarse unas románticas vacaciones. Me llamo Caterina y tengo 21 años, tengo unas curvas matadoras, tetas grandes mi colita no tanto pero llama la atención lo firme que es, tengo ojos café claro y cabello castaño. Maximo es parecido a mí con la diferencia de que es 15 cm más alto que yo y de ojos verdes como los de papá, tiene un cuerpazo ya que pasa mucho tiempo jugando al básquet, lo que me gusta de él son sus brazos fuertes y largos con lo alto que es le queda de maravilla. Mis amigas se mueren por él y por David, ya que también está muy bien esculpido a diferencia de mi hermano pasa horas en el gimnasio tiene cabello rizado negro y unos ojos hermosos de un color negro profundo con unas pestañas que dan envidia.

La novia de mi hermano es una chica obsesiva tiene celos hasta de mí, le llama muchas veces al día y a mí me tiene entre ceja y ceja. Tanto así que se habían peleado porque mi hermano me defendió un día que nos encontró discutiendo en la universidad a causa de que ella en su pequeña mente pensaba que yo estaba haciendo que Max saliera con una de mis amigas.

Aquella tarde de verano, en la que ola de calor no daba tregua al estar sola me puse el bikini más pequeño que tenía y me metí en la piscina. Esa tarde supuestamente iba a salir con unos amigos de la universidad a tomar unos helados pero me fallaron así que me quede sola en casa mi hermano no tenía idea, y al parecer tenía planes para esa tarde. Escuche el ruido de la puerta me asome para ver quiénes eran estaban Maximo, David, un par de chicos más que no conozco. Tenían unas pelis y unas cervezas en mano. Max no se percató de mi presencia así que para no molestarle volví a la piscina. Al cabo de 15 min sonó el timbre y pude ver que llegaron tres chicas muy lindas entre ellas Sonia. Salí de mi refrescante baño y me acerque a Max diciéndole que quería hablar un momento con él. Sorprendido al verme en casa trato de explicarme que no fue el quien la invito si no Javi uno de sus amigos que también es amigo de Sonia. Para no quedarme atrás me uní a la juntada y salude a cada uno cuando llegue a Javi lo mire con cara de pocos amigos y el muy atrevido al querer saludarle con un beso en la mejilla corrió su cara y me planto un beso. A lo que mi hermano y David reaccionaron automáticamente reprendiéndolo y como nunca vi a mi hermano a punto de irse a golpes sobre él.

Disculpa Caty pero estas muy sexi en ese bikini que no pude resistirme, Max siempre habla de lo orgulloso que está de su hermana y ahora entiendo  porque – comento Javi inapropiadamente.

Vimos una peli bastante erótica por lo que me excite un poco así que con la excusa de que hacía mucho calor me fui a la piscina nuevamente, David se levantó al mismo tiempo y se fue al baño acompañándome en el camino.

Te ves preciosa Caty - dijo con una sonrisa que te derrite, típico de David que tiene a la mayoría de mis amigas detrás suyo incluso hace un tiempo yo tambien me fije en el pero siempre había creído que me considera como una hermana.

Ya sola en la piscina no se me había pasado la excitación y con el alcohol que ingerí no me pude contener y empecé a masturbarme de tal manera que me corrí muy rápido al levantar la mirada pensé… trágame tierra!!! o agua en este caso... David estaba parado al lado de la piscina con la cara enrojecida observando sin disimulo mis tetas al aire libre  que en el frenesí de mi corrida deje liberadas. En vez de enojarme en ese momento sentí que me volví a mojar y estaba más excitada que antes al ver el bulto erecto de David que presionaba sus pantalones cortos. Me di la vuelta para atarme de nuevo el bikini cuando sentí el agua agitada. Era David se había metido y se encontraba a escasos centímetros de mí, yo aun de espaldas podía sentir su respiración entrecortada en mi cuello me tomo de la cintura me atrajo hacia él y susurrándome al oído.

No conocía esa parte de ti Caty me pusiste muy caliente y te vas a tener que hacercargo - Sintiendo su paquete pegado a mi culo me derritieron sus palabras. Luego me dio la vuelta de un solo tirón y me planto un gran beso sentía como su lengua se fundía con la mía.

Jamás habría imaginado que David se atreviera a hacer algo así siempre ha sido tan educado conmigo… desinhibido por el alcohol me apretó muy fuerte contra la pared y luego me saco de la piscina a tirones para llevarme cerca de la lavandería donde sentí el calor de todo su cuerpo pegado al mío. El agua caliente que goteaba provocaba vapor en el ambiente. Correspondí a sus besos durante un buen rato, después bajo su boca por mi cuello provocándome una descarga de electricidad  que recorría mi cuerpo.

Hace tiempo que me gustas Caty y cada que te veo en bikini no se como ocultar esto - Dijo tocándose el gran paquete bajo sus pantalones que parecía que iba a explotar. Puso sus manos sobre mis hombros e hizo que me agachara y sacó esa pija que quedo pegada a mi cara derramando ese líquido espeso por mi mejilla  no aguanté más y la tome con fuerza  mirándole a los ojos me la metí entera en la boca la trague lo más que pude el soltó un pequeño gemido. Le lamí desde la punta a la base de su tronco chupe un poco sus huevos y luego seguí chupándosela mientras David me agarraba de la cabeza para manejarme a su ritmo. Embistiendo mi boca cada vez más rápido y con fuerza sin importarle que me ahogara tratando de comérmela, soltó un gran chorro de semen llenando mi boca tuve que tragármelo al tenerla tan a fondo, sabía delicioso.

Al cabo de un rato escuche que se marchaban los amigos de Max excepto Sonia aun podía escuchar su voz. Me daba miedo que mi hermano me encontrara en ese estado pero no podía parar.

Ahora te toca a ti preciosa – dijo y levantándome del suelo. Me sentó sobre la mesa de la lavandería quitó lo que restaba de mi bikini dejándome desnuda y a su merced.

Chúpame las tetas por favor – le suplique con desesperación. Aprisiono con su boca una de mis tetas y la otra con su mano. Las manoseaba con deseo haciendo que mis flujos chorrearan como un río entre mis piernas.

Bajo una de sus manos y metiendo dos dedos en mi conchita mojada sentí que me iba a correr luego acerco su nariz para sentir mi aroma a hembra en celo y darme lengüetazos hasta encontrar mi clítoris el cual fue intensamente chupado.

Ahh Ahh - gemía no pudiendo aguantar más aquel intenso orgasmo. Con mis flujos chorreando por su boca Ahh David que rico me corrooo…- gemí muy fuerte… Di vuelta hacia la derecha para bajarme de la mesa y allí estaba… mi hermano no sé cuánto tiempo estuvo observándonos pero tenía su pija fuera del pantalón tomada con su mano masturbándose. Era monumental nunca había visto una tan grande me quede con los ojos como platos tiesa mirándole y mordiendo mi labio inferior, al parecer eso lo puso más caliente y terminó enseguida tirando muchísimo semen.

Los dos nos avergonzamos, me cubrí el cuerpo como pude y Max entro corriendo a la casa. A todo esto David al ver la situación y decidió marcharse.

Preciosa mejor me voy esto ha sido muy fuerte tu y yo y que Max nos haya visto – dijo volviendo a ser el David que yo conocía. Me decepcione un poco porque quería que me cogiera. Aunque era mejor que se marcharan así podría aclarar las cosas y disculparme con Max. Con eso en mente deje ir a David pero no sin antes darnos un beso apasionado.

David mmm este… yo… quería… – tartamudee un poco por no saber cómo decirle que deseaba que cogiéramos.

¿Vienes a mi casa este finde y terminamos lo que empezamos?- Pregunto muy animado. Acepte gustosa pero faltaban 2 días para el sábado y quería que pasaran rápido.

Ceré la puerta y me dirigí muy nerviosa a la habitación de Max no sabía con qué cara mirarle. A punto de tocar la puerta escuche un ruido familiar… eran gemidos. Me puse celosa ya que a mí no me habían dado pija. Me que quede escuchando apoyada sobre la puerta sin darme cuenta de que no estaba con llave por lo que se abrió y pude ver como le daba toda su pija a esa persona y no a mí. Sonia se encontraba mirando al otro lado y Max le estaba dando de cuatro pero para mi sorpresa le daba por el culo, mi conchita se humedeció  al instante. Max seguía dándole duro pero me miraba fijamente a mí. Me sentí muy atraída por mi hermano eso me asusto así que salí silenciosamente y me fuí directo a mi habitación. En que estaba pensando como pude haber deseado de esa manera a mi hermano. No estaba bien, pero el solo hecho de pensar en el como hombre sabiendo que es mi hermano me ponía los pezones erectos.

Al cabo de media hora escuche el crujir de la puerta de calle, y al instante entra mi hermano sin golpear y otra vez me descubre pero esta vez masturbándome desnuda sobre la cama. A medio pellizcar mi pezones con una mano y la otra introduciendo dos dedos en mi conchita, estaba a punto de llegar y el hecho de que me estuviera mirando me puso a mil tanto que solté un gritó anunciado mi orgasmo. Él estaba quieto junto a la cama como si estuviera de piedra, mostraba una gran erección debajo de sus jeans. Al encontrarme medio desmayada por el tercer orgasmo del día pude ver ya con los ojos entrecerrados como se bajaba la bragueta para liberar a su pija, se abalanzo sobre mí besándome de una manera tan cachonda logrando que otra vez me calentara. Por mi mente pasaban mil pensamiento sobre moralidad y lo que estábamos haciendo invadía cada vez más aquellos pensamiento dejándome en blanco cuando bajo su mano hasta mi húmeda conchita.

Hermana hace tiempo que te deseo, me he contenido por miedo a que me rechaces, pero hoy… hoy NO AGUANTO MÁS – Me decía mirándome con esos ojos seductores, me beso de nuevo y le correspondí su saliva era como un dulce néctar prohibido pero tan delicioso. Bajo su boca recorriendo mi cuerpo hasta llegar a mis pechos los que chupo con delicadeza haciendo que se me erizara el cuerpo. Descendía deteniéndose un momento a jugar con mi ombligo. Llego hasta mi conchita por fin… succiono mis jugos y con ellos mi clítoris. Estaba en la gloria nuevamente, cuando sentí una extraña sensación en mi colita, pues eran sus dedos masajeando mi ano. Tomo una crema que se encontraba en la mesa y volvió como loco me puso en cuatro y después de poner un poco de cremita en mi ano… me la metió con fuerza de una sola embestida. Empecé a gemir como una loca. Me calentaba tanto que me diera por ese hoyito.

Ahh así así me gusta mucho por ahí Hermanito!!! – gemía casi gritando

Hermana eres una puta caliente… - me decía calentándome mas.

Tu culo está ardiendo siento que mi pija se quema mm… - La saco por un momento solo para voltearme. Con la espalda en la cama lo miraba lascivamente pidiendo que me la volviera a meter, así lo hizo y continúo embistiéndome cada vez más rápido más fuerte… hasta que por fin me corrí como nunca antes quedando sin fuerzas, casi desmayándome, sentía que mis flujos bajaban por mi conchita para mezclarse con un líquido mas espeso… era su semen el que chorreaba por mi colita. Nos dormimos abrazados el resto de la tarde. Hasta que el sonido del timbre nos despertó.

“Este es mi primer relato, por fin me anime a escribir una de mis fantasías, espero que les haya gustado. Despues voy a subir la SEGUNDA PARTE"