Sorprendida por Emilio (3)
Con mi amiga Mar nos montamos una cogida formidable con el negro espectacular que ya me había cogido y se nos suma otro negrazo para darnos una fiesta de sexo y placer.
SORPRENDIDA POR EMILIO 3
Hola amigos, hoy les cuento como sigue la historia vivida junto a mis amigos Emilio y Mar, con mi amiga nos montamos una buena cogida al negrazo de Simón a la que luego se suma un amigo dueño de la casa que queremos alquilar y disfrutamos un momento lleno de sexo caliente.
Fue otro día de intenso trabajo, al que se nos sumó Mar, pero desde la mañana en que conoció a Simón, ella no deseaba y pensaba en otra cosa que cogerlo junto conmigo, pero solo tuvimos una oportunidad recién a la tarde, cuando Emilio sugirió que ahora que había venido Mar, necesitábamos alquilar una casa mas grande y no estar en el hotel, por lo que Simón nos dijo que un amigo tenía una casa que podía servirnos para pasar los días que íbamos a estar allí, Emilio haciéndose cómplice, nos dijo que fuéramos con Mar a verla y si nos gustaba la alquiláramos, casi nos entregó a ese negro, con el que luego de llamar a su amigo, nos dirigimos a ver la casa, ya en el camino Mar se le insinuaba y esto pareció calentar a Simón, que seguro ya se imaginaba la posibilidad de estar con dos hembras como nosotras.
Al llegar recorrimos la casa y no tardamos mucho en querer ver el dormitorio principal, entramos y me senté sobre la cama
es lo que buscamos, le dije a Mar
si, esto es lo ideal, me contestó mi amiga
me alegro que les guste la casa, nos dijo Simón
no nos referimos a la casa dijo Mar, es lo ideal para esto
y caminando hacia mí, se inclinó para besarme y juntas caímos acostadas sobre la cama, comenzando a acariciarme por todo mi cuerpo, y mirando a Simón, le dijo
Sentate y disfruta el espectáculo
Él se sentó en un pequeño sillón frente a nosotras, que comenzamos a desnudarnos lentamente, Mar desnudó mis pechos y comenzó a comérmelos, apretaba mis pezones duros entre sus labios, yo entrelazaba mis dedos entre sus cabellos, hundiendo su cabeza contra mis excitadas tetas, bajo por mi cuerpo, hasta llegar a mi pubis depiladito, me lamía y pasaba su lengua a todo lo largo de mis labios mojados, abrió bien mis piernas y se hundió en mi sexo, devorándomelo todo, movía mis caderas refregando mi conchita húmeda por su boca y cara.
Subió por sobre mi cuerpo y volvió a besarme saboreando en su boca el sabor de mis propios jugos, siguió subiendo hasta sentarse sobre mi cara y acomodar su sexo sobre mi boca, hundí mi lengua en su conchita bien profundo, sintiendo como se mojaba, mi amiga apretaba sus pechos, disfrutando de mi mamada y mirando al negro que se refregaba su dura verga por sobre su pantalón, entonces ella lo llamó, él se paró al lado de la cama y mi amiga desabrochó su pantalón, bajándolo, para luego liberar su enorme verga ya totalmente dura
es tan grande como me contaste, me dijo
se ve tan rica y deliciosa, voy a comértela toda, le dijo mirando a Simón
Y se agachó un poco, abalanzándose sobre esa gruesa polla y comenzando a lamerla y chuparla despacio, yo seguía devorando su conchita mojada y ella mamaba la verga del negro cada vez con más pasión y un poco mas profundo, lo hacía con esfuerzo debido al tamaño pero conseguía comerla un poco más con cada chupada.
Entonces le dijo al negro que se acostara boca arriba, su descomunal verga apuntaba al techo desafiándonos, las dos nos pusimos a su lado y comenzamos a mamársela, una la chupaba y la otra lamía su tronco, sobraba verga para las dos, comencé a chupársela y me la tragaba profundo, él gozaba con mi boca sobre su verga
ahora vas a disfrutar de mi mejor alumna en mamadas, le dije
si es como tu, será toda una experta también, dijo Simón
ya veras lo bien que aprendí, dijo Mar
y ahora ella se devoró su verga, de un bocado casi se comió la mitad de esa polla enorme y comenzó a chupársela, haciendo sus bocados mas profundos
así, cométela toda como te enseñé a hacerlo, alenté a mi amiga
es muy buena como tu, amor, dijo Simón, la chupa muy bien
tomé la cabeza de mi amiga y la empujé despacio sobre esa verga, haciéndosela comer hasta su garganta y ella excitada empezó a devorársela, subía y bajaba fuerte por esa verga apretada en su boca, Simón gemía fuerte de placer con la mamada de Mar, que se comía toda esa enorme polla poniéndola a punto de explotar y lejos de parar mi amiga hizo mas intensas sus chupadas, el negro respiraba entrecortado, anunciando su acabada y casi por llegar tomó la cabeza de mi amiga y enterró toda su verga, que seguro estalló en un río de leche, porque mi amiga tragó y tragó todo lo que pudo pero aún con la polla enterrada en su boca, la leche desbordaba por sus labios, corriendo hasta sus tetas, él libero su cabeza y al salir de su boca otro borbotón de semen salió de ella, lo que aproveché para tomar su polla y mamársela hasta vaciar sus últimas gotas.
Limpie bien esa polla negra y luego me ocupé de limpiar a mi amiga, bebiendo los restos de leche de su cara y tetas, esto excito de nuevo a Simón y mi amiga queriendo sentirlo bien adentro se montó sobre su polla, clavándosela poco a poco en su concha, yo me monté sobre la cara de Simón y de frente a mi amiga, él hundió su lengua en mi concha y con Mar nos besábamos en la boca o chupábamos nuestros pechos, mientras ella lo seguía cabalgando fuerte, gozaba con la tremenda verga enterrada dentro de ella y no paro de montarlo hasta acabar sobre él en un intenso orgasmo, ella se bajó y yo tomé su lugar sobre esa dura polla, pero de espaldas a él, lo montaba al tiempo que mi amiga lamía mi concha y las bolas de Simón y parte de su verga cuando salía de mi sexo, la mamada del negro y la montada sobre él me llevaron a acabar fuerte y la montada de esas dos hembras, dejaron a Simón a punto de acabar, pero cuando sentí que estaba por explotar, saqué su verga de mi concha y esta empezó a lanzar fuertes chorros de leche sobre mi pubis y vientre, alcanzando también la cara de mi amiga que nos mamaba.
Descansamos un poco acostados los tres en la cama, pero enseguida estábamos de nuevo con Mar devorándonos esa enorme polla negra, hasta ponerla bien dura, volví a montarme sobre ella, ahora de frente al negro ofreciéndole a comer mis duros pezones al tiempo que lo cabalgaba, mientras mi amiga acariciaba mis nalgas y comenzó a lamer el agujerito de mi culo, mojándolo y excitándolo, lo abría con su lengua y luego lo hizo con sus dedos, yo gozaba con la verga llenando mi sexo y mi amiga excitando mi culito, cabalgaba fuerte subiendo y bajando sobre ese negro, pero luego me salí levemente de su verga y moviéndome un poco la apoye en la entrada de mi ano, mi amiga dándose cuenta de mi intención, tomo la verga y la chupo toda, mojándola bien con su saliva y con su mano volvió a apoyarla en mi agujerito, yo moví mis caderas, empujando contra mi culito, dejando que la cabeza de esa gruesa polla me penetrara, Simón gimió de gusto, sintiendo como mi culito apretado comenzaba a devorar su verga.
Me hundí mas en esa polla, que abría mi culito, se deslizaba en mi interior, ayudada por mi amiga que lamía y excitaba mi culito y la polla para que entrara sin mucho esfuerzo, hasta que la sentía al fondo de mi culo, y comencé a cabalgarla fuerte, sacándola y dejándola entrar casi por completo en mi interior, llenando y haciendo gozar mi culito, el negro me tomaba por las nalgas y me hundía mas contra su verga acompañando mi montada sobre él, yo gozaba de placer, Mar seguía lamiendo mis nalgas, y las bolas de Simón, me llevaron a un orgasmo intenso, acabé fuerte montada en esa polla rica y gruesa
ahora quiero probar el culito de tu amiga, me dijo Simón
si, quiero que cojas mi culo, dijo Mar excitada
Ella se puso en posición de perrito y Simón detrás, yo me coloque a un costado y comencé a darle el mismo tratamiento a su culito que ella me había dado, también chupaba bien la verga del negro para dejarla toda mojada, la apoyo sobre su agujerito y empujó, Mar dio un pequeño grito, pero su culito cedió a la cabeza de esa enorme polla, él la tomó por las caderas y hundió un poco más su polla en el culo de mi amiga, mientras yo estimulaba su coño para que relajara su esfínter y facilitara su penetración.
El negro lo hacía lento, pero no detenía su penetración, podía ver como esa descomunal verga desaparecía en el apretado ano de mi amiga, que se aferraba con sus manos a la cama y gemía mezcla de dolor y placer, pero le pedía mas, quería sentirla toda, Simón le dio una fuerte embestida, que venció toda resistencia del culito de mi amiga, y también dobló sus piernas, cayendo boca abajo sobre la cama con la polla de Simón clavada hasta el fondo de su culo, él montado sobre ella comenzó a cabalgarla desde atrás, penetrándola fuerte e intensamente, Mar daba gritos de placer, el musculoso cuerpo de Simón, aplastaba el de mi amiga mientras la cogía salvajemente por el culo, ella estalló de placer, acabó dando fuertes gritos de placer y el negro no paraba de cogerla, prolongando su orgasmo y casi enseguida alcanzando el suyo, inundando el culo de mi amiga con su leche.
Al sacar la verga de su culito, este estaba muy abierto y dilatado y chorreaba leche, me encargué de limpiárselo todo, al igual que la polla de Simón, estaba en esto cuando oímos una voz detrás nuestro
veo que ya empezaron a disfrutar de la casa
Era el amigo de Simón, el dueño de la casa que había entrado y buscándonos nos encontró a los tres en la cama cogiendo, su amigo era parecido a Simón, un negrazo alto y bien moreno, de cuerpo aún mas fornido, con solo verlo con Mar lo invitamos a unírsenos
ya que eres el dueño, creo que es justo que la disfrutes junto con nosotros, le dije
No tardó en acercarse y pararse junto a la cama, con Mar nos sentamos al borde y desabrochamos su pantalón, del cual debajo ya se evidenciaba una notable erección, no nos detuvimos hasta desnudar su verga que como imaginábamos era enorme como la de Simón, incluso un poco mas gruesa, comenzamos a mamársela entre las dos y rápidamente tomó un tamaño descomunal, pero nuestras bocas expertas no tardaron en devorársela toda, yo me pare a su lado mientras Mar lo mamaba y él se comía mis grandes tetas, luego me hizo acostar y poniéndose sobre mí me penetró de una embestida, sentí como esa enorme polla se deslizaba hasta el fondo de mi mojado coño, me cogía fuerte y duro, yo gemía de placer, al tiempo que Mar a mi lado, mamaba a Simón buscando recuperar la dureza de su verga.
Entonces el negro me pidió que lo montara, me subí sobre su verga y comencé a cabalgarlo, y lo mismo hizo mi amiga a mi lado, montándose sobre Simón, las dos hembras cabalgábamos enterradas en esas enormes y duras pijas, yo estaba a punto del orgasmo, pero antes el negro acabó abundantemente en mi coño, lo seguí montando despacio exprimiendo su verga hasta vaciarla, que a pesar de ello no perdió toda su dureza, mi concha se encargó de ponerla en acción de nuevo y se excitó aún mas cuando notó como refregaba mi culito por su polla y moviendo mis caderas me la clavaba por mi culo, él chupaba mis tetas y apretaba mis nalgas con sus manos, acompañando mi penetración, Mar y Simón a nuestro lado, cogían en forma lenta, disfrutando y al mismo tiempo descansando un poco, pero mi negro recién comenzaba, así que pronto me estaba cogiendo muy duro, enterrándome toda su verga y yo lo montaba profundo por mi culo, hasta que estallé en un rico orgasmo, acabé fuerte por mi culito lleno de esa polla negra enorme y caliente.
Me baje de su polla, y el negro se acercó a mi amiga por detrás
veamos si tu culo es tan rico como el de tu amiga, dijo
te aseguro que si, contestó su amigo
y colocándose en su espalda comenzó a penetrarla, Mar se recostó sobre el pecho de Simón y levantó mas su culo en pompa, facilitando la penetración y gozándola, los dos machos tomaron ritmo y mi amiga daba gritos de placer, gozaba de la tremenda cogida que esos dos negrazos le estaban dando, acabó fuerte una vez y casi sin parar comenzó otro orgasmo, ahora no solo ellos la cogían sino que amiga movía sus caderas hundiéndose mas en esas dos pollas que la llenaban toda, volviendo a acabar muy fuerte, noté como sus jugos chorreaban por las dos pollas y sus piernas, Mar acababa por su coño y su culo, gritando de gozo, los dos macho estaban por acabar también
queremos beber sus leches, les dije
Y así nos acostamos con Mar boca arriba y los dos negros a nuestro lado no tardaron en comenzar a lanzar fuertes y gruesos chorros de leche caliente sobre nosotras, cruzaban nuestras caras y bocas, sobre nuestras tetas, era una catarata de semen que nos bañaba, tomamos sus vergas para vaciarlas en nuestras bocas.
Luego de ducharnos, finalmente arreglamos los detalles de la casa con Joao, ese era el nombre del amigo de Simón, y como podíamos ocupar la casa ese mismo día, decidimos con Mar dar una cena al día siguiente, a la que por supuesto invitamos a Simón y Joao, ya que con mi amiga todavía deseábamos mas de esos dos negros, al que ahora sumariamos a nuestro querido Emilio, que al conocer la noticia, se puso muy contento, pero lo hicimos sufrir un poco con Mar, ya que esa noche no le dimos sexo, para tenerlo bien caliente a la noche siguiente, pero también porque con mi amiga teníamos los agujeros algo doloridos e irritados por esas dos descomunales vergas que tanto nos hicieron gozar, y así podíamos estar bien para poder gozarlas de nuevo.
La cena fue al día siguiente y hubo más momentos de sexo y placer compartidos con mis amigos, pero eso se los cuento en la próxima historia.
Continuara