Sonia, mujer sometida (2)

Sonia no deja de caer por su propio deseo en la garras de su cruel ex esposo.

Capitulo 2

Se arreglo la ropa, antes de ajustarse el cinturon me lo acerco a la boca, para que lo besara de nuevo, asi lo hice, -viste como te hago gozar con esto, putita-, paso la punta del cinturon por mi ano, intento introducirlo, -bueno basta, no quiero que acabes de nuevo, chau estupida-. y salio de casa, cuando escuche el ruido de su auto, me incorpore, mi cuerpo estaba muy golpeado, me sentia mal, sucia, humillada, me sentia culpable de haber cometido otro grave error, habia dejado que otra vez entrara en mi vida, sin embargo tampoco podia negar lo que habia sentido, lo que habia gozado, la desesperacion de que me penetrara, de sentir su semen adentro mio, de sentirme suya sometiendome como su esclava, mi primer reaccion, fue la de ducharme, pero no pude hacerlo, me quite lo que tenia puesto y lo deje en el lavarropas, me puse el camison, y me quede con su semen en mi interior, necesitaba sentirlo, imaginar que algo de el estaba en mi, fantasear con quedar embarazada de nuevo, yo no me cuidaba, el jamas habia usado ni usaria preservativos, -es problema de la minas, si quedan embarazadas- me habia dicho muchas veces, el tenia eyaculaciones muy caudalosas, por lo cual, tener sexo con el, era garantia de embarazo, tarde o temprano, si quedaba embarazada, que les diria a mis padres?, pensarian que estaba loca, odiaba la idea de que pudiera suceder y sin embargo, al mismo tiempo, lo deseaba desesperadamente.

Al otro dia, desperte a mi hijo, tome mi auto y lo lleve a la guarderia, yo me fui a trabajar al jardin, gracias a mis padres mi situacion economica era buena, pero necesitaba trabajar para mantener mi cabeza ocupada, Guillermo nunca habia pasado un centavo por los alimentos de Matias y jamas lo iba a hacer, cuando llegue al jardin, crei ver su auto en las cercanias, tal vez fue mi imaginacion o las ganas de que fuera cierto, todo sucedia a toda velocidad, mi cabeza estallaba, la repulsion y el deseo se encontraban siempre en los mismos lugares, lo odiaba y lo deseaba, lo aborrecia y lo amaba.

Pasadas unas semanas, mas o menos todo volvio a la normalidad, seguia con mis sentimientos encontrados, por supuesto no le conte ni una palabra a mis padres, tenia cita con el medico, segui atendiendome con quien habia atendido mi embarazo y mi parto, su nombre era Facundo, tenia 28 años, yo le habia relatado mi historia, el resulto muy comprensivo conmigo, empezamos a simpatizar, se lo conte a mi mama, ella se puso muy contenta porque conocia a Facundo, de acompañarme muchas veces a las visitas, con el tiempo, mama venia a casa a cuidar a Matias, y yo salia con el a tomar un café o ir al cine, Facundo me inspiraba confianza, era calido, sensible, capaz de contener, despues de varias salidas, me invito a cenar, acepte muy complacida, me encantaba estar con el, pero debo decir la verdad no sentia ni un poco de atraccion fisica, pense que estaria traumada por las experiencias vividas con Guillermo, o que Facundo era muy joven para los hombres que a mi me gustaban, no se!!!, asimismo yo sabia en que iba a terminar esa salida, Facundo no iba a quedarse sin sexo esa noche.

Salimos, cenamos en un lugar muy agradable, unos de los mejores restaurants de mi ciudad, la cena estuvo estupenda, una charla amable, un par de veces me tomo de las manos, yo sentia que el estaba ganando terreno, ofrecio llevarme a casa, abrio la puerta de su coche, y salimos, a poco de andar, paro el auto, me abrazo, y me dijo –Sonia, me gustas mucho, no puedo ocultarlo, me encantaria seguir esto en otro lugar mas tranquilo-, el vivia con sus padres, asi que el ¨otro lado¨ seria un hotel alojamiento, acepte, llame a mi mama por el celular y le dije si tenia problemas en que la cena se alargara, ella adivino lo que pasaba, se alegro por que yo tomara esa decisión, ella habia insistido mucho en que yo era muy joven y debia rehacer mi vida, -no te preocupes, nena, Matias ya se durmio, por ahora no le contemos nada a Papa, si?-, bueno respondi, -haceme un favor, nena- -que mami?- le dije –enamorate, y goza mucho-, yo me rei, corte y Facundo pregunto que pasaba, yo le respondi que eran locuras de mi mama, nos besamos suavemente, puso en marcha el auto y nos dirigimos al hotel de parejas.

Pago en la puerta, de esas que no se ven para el lado de adentro, yo nunca habia estado en un hotel asi, entro con el auto, y lo estaciono en la cochera, abrio la puerta de la habitacion, y de entre las sombras aparecio Guillermo, con una pistola, amenazo a Facundo para que se fuera, o si no lo iba a matar, que yo era su mujer y no volviese a acercarse a mi, la situacion era muy confusa, Guillermo golpeo a Facundo con la pistola, este se asusto y salio hacia su auto para no volver, Guillermo me empujo hacia adentro de la habitacion, entro y trabo la puerta, yo sabia lo que me esperaba, -desnudate, puta, desnudate ya!!!- -no Guillermo, por favor, no me hagas esto!-, -desnudate ya, puta de mierda-, llorando empece a quitarme la ropa, se quito el cinturon, y me azotaba –apurate, carajo!-, cuando quede en bombacha y corpiño, me golpeo mas aun, -te dije, la proxima vez con porta liga y medias, no asi nomas, puta barata, te ibas a revolcar con ese boludo, sos mi esclava de nadie mas, hija de puta!!!-, me seguia golpeando cada vez mas fuerte, -veni aca, puta, de rodillas veni, de rodillas ante tu macho, y empeza a chuparme bien la pija, pedazo de puta-, le saque su pene del pantalon y empece a lamerlo, -sin lamer, carajo, a chupar te dije, perra de mierda-, de una bofetada me dio vuelta la cara, empece a chupar, el cada ves que me golpeaba se excitaba mucho, en pocos minutos quizo eyacular, se aparto un poco de mi, y dejo caer su semen en el piso, -ahora te lo tragas todo del piso, prostituta barata, juntalo con la lengua y te lo tragas-, asi lo hice mientras el me pateaba y azotaba, cuando termine, intente levantarme, tomandome de mis cabellos el arrastro mi cara por el piso –bien chupalo, bien, basura, es el semen de tu macho, el que te preño, tiene que ser de lo mas valioso para vos, carajo, no dejes ni una gota-, me levanto, me giro haciendome doblar por la cintura, empezo a azotarme las nalgas, paro, temi lo peor, tomo la parte de abajo de mi bombacha y tiro hasta romperla, se me clavo muy profundo en mi rayita, me dolio horrores, siguio pegandome con nalgadas de su mano, y me tiro a la cama

–boca arriba, ponete, estupida, que te voy a garchar bien por la argolla, pero en donde acabes te rompo la cara la trompadas, entendiste!!!-,

-entendiste, contesta carajo!!!-,

-si, guillermo, si-,

-que dijiste, imbecil, me llamaste por mi nombre? las putas como vos no me llaman por mi nombre-

dandome una bofetada, hizo que mi nariz sangrara,

-amo, patron , macho, semental, asi me podes llamar, tuviste el orgullo de poder llamarme marido, pero ahora no mas, nunca mas, ahora sos mi puta, mi esclava, nunca mi mujer!-

-si mi amo-

me abri bien de piernas, y me penetro muy rudamente, le encantaba darme sin lubricacion, a el no le dolia, su pene era de acero, pero yo moria del dolor, gemia de dolor, -no goces, puta, te dije que no goces- y me abofeteaba los senos, provocandome mas dolor, me fue imposible no comenzar a excitarme, luchaba en mi interior para que no sucediera, pero no pude lograrlo, no podia entender como esa situacion podia excitarme, pero lo hacia, no podia evitar mover mis caderas hacia el, lo necesitaba adentro mio, bien adentro, necesita de su eyaculacion en mi ser, su pene desgarrandome salvajemente, entraba y salia a toda velocidad, me deje llevar, de esa manera no lo haria por mi ano como lo habia prometido, mi orgasmo fue desesperante, gemia como una actriz porno, el me acabo adentro, su semen inundaba mi vagina, siempre eyaculaba muy caudalosamente, Guillermo era muy macho, muy hombre, fue al baño, se lavo el pene –a ver si me pegas alguna peste, de una puta como vos se puede esperar cualquier cosa-, yo pense que habia terminado todo, comence a vestirme, en eso salio el baño, y me tomo del brazo muy fuerte

-que haces, puta, no termine con vos todavia, no te voy a dejar sin romperte el ojete como a vos te gusta, despues de fajarte bien te voy a hacer gozar, puta-

Comenzo a pegarme, una lluvia de golpes, cachetadas en mi cara, en mis senos, se sento en la cama y comenzo a nalguearme, me apoyo sobre la cama con los pechos, mis rodillas en el piso y tomando su cinturon, me dio hasta cansarse, empezo a fregarme sus vellos por la cola, no lo podia soportar del ardor, seguramente estaba lastimada, escupio en mi ano, apoyo su glande en el, y empezo a penetrarme, muy corto, apenas algo mas que su glande, lo ponia y lo sacaba, solo para provocarme dolor, pero yo no podia mas de la excitación, otra vez me sentia la persona mas baja del mundo, sentia su pene entrar por mi ano, haciendome sentir su mujer, su perra, su puta, la puta de Guillermo, asi me sentia, y solo esperaba sentir su pene totalmente adentro mio, me penetro por completo, tenia la sensacion de que su pene iba a aparecer por mi garganta en cualquier momento, estaba muy grande y muy grueso, mi esfinter estirado al maximo, y yo me sentia en la gloria, el placer se adueñaba de mi cuerpo, de una forma asquerosa, solo deseaba sentir su semen adentro mio, que me hiciera sangrar la cola, sentirme suya como solo el sabia hacerlo, cada bombazo estremecia mi cuerpo, no pude contenerme mas, -haceme tuya mi macho, haceme tuya, partime el culo, mi amo, es tuyo, destruilo, gastamelo a vergazos, que no me sirva mas, hasta el fondo-, el solo se reia, gozando de la situacion, -sos muy puta, Sonia, muy puta, como te gusta mi verga, pendeja de mierda, te desespera mi verga, toma, toma!!!, carajo, bien adentro, mierda, bien adentro-, -asi, mi señor, asi, bien adentro, sacamela por la boca, garchame bien por el orto, sos mi macho, mi unico macho-, -asi dame verga, dame verga, bien adentro, ahhhh, ahhhh!-, -nalgueame, pegame, dame con el cinto, segui bombeandome, asi, ahhh, asi, bien fuerte pegame, asi, aghhh-.

Termino, sin lavarse y con los restos de la penetracion anal, me tomo de los cabellos, y me metio su pene en la boca, se recosto en la cama, -hasta que no acabe, no salis-, -si mi vida-, su cachetazo no se hizo esperar, -si mi patron-, -eso si, la proxima te quiero vestidita de sirvienta, me vas a servir un whisky y mientras me mamas la verga, dale ahora haceme acabar, y dejamelo bien limpio, no quiero tu mierda en mi verga, entendiste?-, acelere la felacion, necesitaba su semen en mi boca, acariciaba sus testiculos, y los lamia, volvia a meterme su verga en la boca, y otra vez a sus testiculos, otra ves su verga, le llevo mucho tiempo, tal vez mas de media hora, yo no baje el ritmo en ningun momento, podia estar horas gozando de su pene en mi boca, llego el momento de sentirlo, su semen espeso, agrio, abundante siempre lleno mi boca, lo degustaba, me enloquecia, empece a tragarlo, ya asomaba por mis comisuras, vivi el momento con desesperacion, el macho de mi vida me habia llenado la boca de semen, me sente en el piso, no podia con mi cuerpo, aun me duraba el estremecimiento, se levanto y se higienizo su pene, se vistio, me agarro del pelo, y me dijo – acordate que la proxima te quiero de sirvientita, eh! complace a tu macho, puta, mas te vale o si no no ves mas mi verga!, cerro la puerta tras de el, me duche y pedi un taxi.

Ya en el taxi, sola con mis pensamientos, otra vez la sucesion de sensaciones encontradas, otra vez sentirme humillada pero habiendo gozado como solo con el lo puedo hacer, con mi macho, decidi que al llegar a casa, encenderia mi computadora, para entrar a internet, y comprar en el sex shop, donde Guillermo compraba las peliculas que me obligaba a ver con el, el vestido de sirvienta que el queria, no podia resistirme a hacerlo, iba a ser imposible.