Soñando con rosa tatuada… (02)

Segundo sueño consecutivo con final feliz gracias a la reina del placer..., mi deseada cada segundo más..., mi “Rosa Tatuada”...

Hola de nuevo mis queridos lectores...

Estoy sobrecogido, ya que jamás me había ocurrido esto, de soñar dos veces consecutivas con la misma mujer y además tener final feliz...

“Rosa Tatuada” me vuelve loco..., anoche volví a soñar con ella, pero con un sueño diferente..., muy diferente pero como verán también con final feliz..., aunque..., con matices.

No sé qué me está haciendo esta mujer..., como le he dicho por WhatsApp esta mañana...

Brujita sensual..., ¿Qué me estás haciendo?

Algún hechizo..., magia negra..., poderes ocultos...

Sea lo que sea...,  no dejes de hacerlo..., mi amor..., aunque me ha dicho que no me estaba haciendo nada.

Les cuento el sueño con todo detalle...

No recuerdo como habíamos llegado allí, pero estábamos paseando por Madrid, cogidos de la mano totalmente enamorados...

Era su mano mágica, su mano izquierda..., la cogía con mi mano derecha y de vez en cuando la acercaba a mi boca y la besaba con romanticismo perseverante...

Me encanta esa mano tan preciosa...

Ella me miraba enamorada y yo le devolvía idéntica mirada.

Sin decirnos nada, nos sentíamos enamorados y excitados...

Sin darnos cuenta estábamos andado por la calle Vicente Caballero...

Me sonaba mucho, ya que había ido a aquel local liberal muchas veces.

Una fachada de piedra y ladrillo rojo..., una puerta negra con solo un cartel con letras doradas con el nombre del local y un punto de luz...

No haré propaganda...

Llamamos al timbre...

Amablemente nos dejaron pasar..., me reconocieron...

Las instalaciones han sido renovadas recientemente y ha quedado de lujo...

Una copa... Dos copas...

La lujuria nos inundaba.

Pasamos a taquillas y nos desnudamos totalmente por comodidad.

Tan solo nos pusimos las zapatillas que nos encontramos en la zona del vestuario.

Jugaríamos a encontrarnos en el cuarto oscuro.

Te dejaste llevar...

La mayoría estaban desnudos, aunque otros optaban por ir con los clásicos albornoces blancos que nos suelen facilitar si lo deseamos...

Entramos en él y estaba lleno de parejas, quedamos en dar una vuelta calentarnos con otras personas y follar nosotros después allí mismo.

No sé decirte porque mi bella reina así se desarrollaba el sueño..., quizás por mi afición a los cuartos oscuros...

Entramos juntos de la mano y nos separamos..., yo fue hacia la izquierda y tú hacia la derecha...

Dejaríamos que nos encontrásemos en aquella absoluta oscuridad solo con los sentidos del olfato y del tacto...

Estaba seguro que te encontraría..., y que tú me encontrarías a mí...

Olía a sexo...

El sudor de aquellos decenas y decenas de cuerpos...,  excitaba mis sentidos segundo a  segundo, pero a diferencia de otras veces en que deseo disfrutar de varias mujeres desconocidas..., solo quería encontrarte lo antes posible..., me tienes excitado permanentemente... mi “Rosa  Tatuada”...

Di varias vueltas...

Decenas de cuerpos contactaban conmigo..., seguro que contigo también.

Varias bocas buscaron mi boca...

Varias manos buscaban mi polla...,  mi culo, mi espalda, mi vientre...

Yo seguía buscándote..., solo intentaba pasar de cuerpo femenino en cuerpo femenino para encontrar el tuyo...

Intentaba destacar tu aroma entre aquellas decenas de aromas...

No quería resultar desagradable..., y si una mujer buscaba mi boca la besaba y en cuando podía educadamente me disculpaba..., me giraba y me iba..., a seguir buscándote...

Solo deseaba besar tu boca, la única boca que me importaba..., que me importa.

Una mano asió mi polla y la tocaba con pasión..., se me puso enorme..., solo pensaba en ti.

Se agachó y empezó a comérmela..., lo hacía bien..., muy bien.

No era la boca que buscaba...

Educadamente con mis manos...,  intenté consiguiéndolo subir su cabeza, cuando estaba a mi altura la bese agradeciéndole su sexo..., le pedí disculpas, quedando para más tarde... (Era una excusa...).

Me giré...

Perdí un poco la orientación...

Otro cuerpo..., otro...

Otra mano en mi culo buscaba encontrar mi sexo...

Rehuía..., pedía perdón...

Me empezaba a poner nervioso..., pues te necesitaba...

Cuando estaba a punto de llamarte..., infringiendo una norma no escrita..., en los cuartos liberales oscuros..., noté a alguien en mi espalda...

Mi corazón se aceleró...

Todo era muy rápido...

Me volví...

Te besé...

En una décima de segundo te reconocí...

Reconocí tu aroma..., tu silueta, tu largo cabello..., cogí tu manos..., te abracé...

Nos besamos apasionadamente...

Buscamos un rincón...

Bajé a tu sexo y disfrute de él... Lo devoré a placer...

Como sabe de rico tu sexo...,  mi amor...

Quisiste devolverme el sexo oral...

Bajaste y devorabas mi polla..., disfrute de tu boca durante apasionantes minutos...

Subí tu cabeza buscando nuevamente besarte...

Nos volvíamos a besar apasionadamente..., mientras nuestros labios y saliva no dejaban de unirse...

Toqué tu sexo con mis dedos..., estaba absolutamente húmedo...

Estabas absolutamente excitada...

Notaba las palpitaciones de tu corazón acelerado...

Gemiste...

Estábamos cerca de los barrotes..., te agarraste a dos de ellos y arqueaste tu espalda hacia abajo..., ofreciéndome tu sexo desde atrás...

Mi polla entraba en tu lujurioso coño humedecido de sobra..., y disfrutabas de aquellos momentos únicos...

Tus gemidos llamaban la atención de personas de nuestro alrededor...

Un hombre tras los barrotes buscaba tu boca...

No querías negarte, por no molestarme..., sabes que me gusta que busques otras bocas o pollas con tu boca mientras te hago sexo apasionado...

No estabas a la altura de su polla y aquel hombre desconocido te besaba..., buscando tus pechos con pezones endurecidos...

Inocentemente creía que tu excitación era por su culpa, pero ambos sabíamos que nuestra excitación era reciproca por nosotros mismos únicamente...

Te aferraba con mis manos tus caderas y no dejaba de follarte como a ti te gusta..., salvajemente...

Buscabas la protección de la fuerza de tus brazos para no darte con los barrotes en tu cara...

Él te besaba..., yo te follaba...

Más manos empezaban a acariciarte...

Tus pechos grandiosos y henchidos de deseo disfrutaban de manos y bocas...

Se agachaban y retorciéndose buscaban las posiciones para lamer tus pezones..., un desconocido a la izquierda..., una desconocida a la derecha...

Te seguida follando salvajemente...

Gemías..., cada vez más fuerte...

Tu cuerpo no dejaba de retorcerse...

Un lacónico...

-       Ya..., ya...

Me indicó el momento preciso...

Descargaba mi leche caliente dentro de ti..., cuando aseverabas tu orgasmo...

-       Si..., si..., si...

Durante unos segundos, quizás quince o veinte..., aquellos tres desconocidos..., dos hombres y una mujer, te dejaron de tocar y besar para que disfrutases en la soledad de una reina rodeada de vasallos..., mientras tu enorme orgasmo declinaba poco a poco...

Cuando nuestros respectivos clímax o momentos álgidos de placer pasaron..., te volviste y nos abrazamos fundiéndonos en un apasionante momento intimo único...

Los que nos rodeaban nos tocaban..., buscaban besarnos, tocarnos, acariciarnos..., pero no nos importaba..., ya que para nosotros dentro de aquella multitud..., nos sentíamos solos...

Tu y yo únicamente...

El amor que nos tenemos es único..., mi “Rosa Tatuada”...

Cuando me desperté..., mi polla seguía dura..., y seguía excitado..., me había corrido nuevamente por segunda noche consecutiva haciéndote un sexo único y pasional..., pero seguía tremendamente excitado...

Marga a mi lado dormía plácidamente..., eran las seis de la mañana...

No pude hacer otra cosa...

Me toqué..., y me masturbé frenéticamente pensando en la belleza de tu foto...., tu sublime belleza única..., mi diosa...,  mi amor...

No tenía necesidad de volver a mirarla..., pues tu imagen la tengo grabada a fuego dentro de mi alma y viviría conmigo toda la vida..., estando seguro de que la última imagen que tendré en mi mente..., en el futuro momento de mi muerte..., será tu imagen..., esa imagen única..., la del amor de mi vida...

Te adoro... “Rosa Tatuada”..., te adoraba antes de conocerte y te adoraré el resto de mi vida...

Hasta pronto amigos...

Hasta esta noche..., amor de mis amores..., mi deseada... “Rosa Tatuada”...

¿Seré capaz de hacer record..., y podré volver a soñar contigo por tercera noche consecutiva..., mi dulce “Rosa Tatuada”....?

Mañana de lo diré...

Mañana podré contárselo a todos ustedes...

Gracias por su tiempo.

PEPOTECR.