Solo tú.
Solo tú me hiciste gozar con el placer del dolor
Las preciosas palabras con las que me da mi perrito los buenos días, y como él mismo dice, como no te voy a querer yo a ti también...
Solo tú,
solo tú me llevaste de tu mano a dar un paso más,
solo tú.
Solo tú,
solo tú hiciste de mi un instrumento en tus manos,
solo tú.
Solo tú,
solo tú atrapaste mi alma con las redes de tu embrujo,
solo tú.
Solo tú,
solo tú me hiciste gozar con el placer del dolor,
solo tú.
Solo tú,
solo tú supiste cómo hacer que mi piel se estremezca con solo oír tu voz,
solo tú.
Solo tú,
solo tu volviste para mi la dureza en dulzura,
el llanto en alegría,
la humillación en orgullo,
la angustia en éxtasis,
solo tú.
Solo tú,
solo tú me diste sin pedirlo mucho más de lo que podía imaginar,
solo tú.
Solo tú, mi dulce amiga, mi encantadora Ama.