Solo contigo duermo tranquilo
La tranquilidad de dormi con quien se ama.
Hoy al fin dormí tranquilo, arrullado por tu aroma y abrazado por el recuerdo de tus labios, intoxicado de ti yacía en tu lecho, mientras que mi cerebro lentamente hacia mi te traía y robaba de tus labios el antídoto del hechizo en el que me encontraba sumergido, el hechizo de no tenerte, la maldición de perderte y allí rodeado de ti, sumergido en ti, al fin comprendí que la soledad a la cual estaba aferrado por solo pensarte y no tenerte, el estado de agonía en el que entraba al dejar de verte, y lo feliz que me hacia en el día de hoy salir de aquella rutina en la que solo me era permitido el observarte y pensarte, permitiéndome por primera vez robar tu esencia en un beso y capturar tu alma al hacerte el amor.
Autor: Juan camilo Ortiz murillo