Sola en casa navegando por internet
Veo esa escena como hipnotizada sintiendo como el calor de mis mejillas delatan mi excitación, mis manos se deslizan sobre la suavidad del picardías acariciando mis pechos al tiempo que entreabro mis piernas deseando sentir el cosquilleo del vibrador
Para los que me leáis por primera vez os recomiendo una lectura previa a mi primer relato “
el juego empezó un fin de semana
”, donde podréis saber un poco más de mí y donde intento explicar cómo empezó una vida nueva, llena de travesuras morbosas y juegos de complicidad.
Desde entonces, las fantasías y los juegos morbosos se convirtieron en habituales entre nosotros. Yo intentaba complacer todos sus deseos, caprichos y fantasías. Reconozco que me encantaba hacerlo, era un juego sensual, excitante y que lograba recuperar la pasión perdida.
Durante el día me sorprendía a mí misma recordando algunos de nuestros juegos, mi imaginación, al igual que mis hormonas, andaba algo alterada y en mis sueños algunas escenas se repetían y en otras llegaban mucho más lejos.
Lamentablemente mi marido por cuestiones de trabajo viajaba mucho y entonces me dejaba sola en casa. Yo intentaba de alguna forma superar esas largas esperas, pensando en cómo sorprenderlo cuando llegara de su viaje y por las noches me consolaba con alguno de los juguetes que había comprado en mi
.
Me aficioné a navegar por internet para recoger nuevas ideas en los foros para mujeres o me entretenía en las páginas de moda y lencería. Siempre me han gustado las prendas que son sensuales e insinuantes, especialmente las que llevan algún tipo de encaje y las que se pueden combinar de diferentes formas…Me entretenía imaginando qué prendas eran las que más me podían favorecer y con cuáles me podía sentir más sexy y atrevida.
Pero internet tiene mucho peligro y buscando lencería erótica pronto descubrí otro mundo muy distinto que logró despertar mi curiosidad y que de alguna forma se logró sumar en ese proceso de cambio personal.
Así fue como empecé a navegar por los foros de sexo, las páginas de relatos eróticos, webs para adultos... y me di cuenta que esas páginas me ayudaban a desarrollar nuevas ideas, fantasías y juegos que podría compartir con mi marido, o simplemente me acompañaban en mis momentos de soledad.
Nunca antes el porno había llamado mi atención, pero ahora todo era distinto y miraba esas fotos preguntándome cómo se sentirían esas mujeres posando de esa forma y al mismo tiempo me imaginaba a mí misma posando como ellas…
Me excita la idea de ser yo esa mujer y me pongo en su lugar mientras intento adivinar lo que ocurriría en mi mente si estuvieran fotografiándome o filmándome desnuda, jugando con alguno de mis juguetes o con alguna polla entre mis manos o en mi boca…
Las imágenes pueden estar pasando ante mis ojos y da igual si se trata de una chica rubia, morena o de color…esa mujer, en ese momento en la que se la están follando, soy yo…y con esos pensamiento siento como mi vibrador se cuela entre mis piernas haciéndome sentir un excitante cosquilleo.
Con el tiempo he aprendido a disfrutar de esos momentos en la soledad y todo un ritual me acompaña para crear la atmosfera necesaria para disfrutarlos con intensidad.
Una luz calidad en la habitación, una música sensual que vaya despertando los sentidos y una copita de vino que me acompañe para no sentirme tan sola …
Me gusta vestirme para la ocasión con algo de lencería, un picardías semitransparente o una bata de seda son prendas muy apropiadas para estas ocasiones especiales en los que tengo una cita conmigo misma.
El ritual prosigue con algunas imágenes sensuales o eróticas que van despertando mi imaginación…y poco a poco provocan que suba la temperatura al igual que haría un amante regalándome dulces caricias que persiguieran encender mi fuego interior.
Con una mano muevo el ratón para buscar esa imagen o escena que logré captar mi atención. Pollas de todos los tamaños y grosores pasean ante mis ojos como si desearan sentir la suave caricia de mis manos, el calor de mi cuerpo o la dulzura de mis labios.
Un vídeo en el que aparece un hombre salvaje llama mi atención. El salvaje se encuentra en la selva y tan solo lleva un minúsculo taparrabos del todo insuficiente para que una enorme polla vaya asomando a cada paso que da…hasta que se topa con una mujer desvanecida en el suelo y de cuclillas se acerca al cuerpo tendido en el suelo.
El salvaje actúa como si no hubiera visto antes una mujer, siente curiosidad por el tono pálido de su piel blanca y por sus formas sensuales que se adivinan bajo su ropa…
La mujer entreabre los ojos y se echa hacía atrás asustada al verse ante ese salvaje que la había desnudado y que la mira con ojos incrédulos y la olfatea como si se tratara de un olor desconocido para el…
Yo me veo sentada intentando tapar mi cuerpo desnudo con las manos ante los ojos del salvaje…me tranquilizo al comprobar que no quiere hacerme ningún daño.
Me señala su torso desnudo y luego señala mis pechos…como si quisiera decirme que los míos son mucho más grandes… Comprendo que no ha visto antes a ninguna otra mujer y le intento explicar que él es un hombre y yo una mujer….
No sé si me comprende, pero observo que siente curiosidad por seguir explorándome. Es una situación divertida, si no fuera porque debajo de ese pequeño taparrabos… su polla ha crecido y asoma descaradamente ante mis ojos…
El salvaje entonces señala mi sexo y a continuación me muestra descaradamente el suyo agarrándolo con su mano….
Yo no puedo dejar de mirarlo, él lo mueve ante mis ojos con su mano como si me lo estuviera ofreciendo y no puedo evitar acercar mi mano para agarrarlo como lo estaba haciendo el…
En mi mano la siento todavía más grande, está durísima y el salvaje me mira asustado como queriendo preguntar porque se le ha puesto así…
Yo intento tranquilizarlo con una sonrisa al tiempo que mi mano empieza a masajear esa enorme polla que provoca rápidamente los gemidos de mi salvaje…
Dudo si debo parar, pero el salvaje coge mi mano en una clara señal de que no me detenga.
Veo esa escena como hipnotizada sintiendo como el calor de mis mejillas delatan mi excitación, mis manos se deslizan sobre la suavidad del picardías acariciando mis pechos al tiempo que entreabro mis piernas deseando sentir el cosquilleo del vibrador…
La mujer mueve su mano con más rapidez sin poder dejar de mirar esa polla que está deseando explotar de un momento a otro…
Acerca sus labios como si deseara besarla, pero el salvaje no adivina lo que pretende hacer y reacciona retirándose ligeramente contrariado…
Ella le sonríe para tranquilizarlo, y moviéndose como una gatita, acerca nuevamente sus labios para besar esa gran polla salvaje…
Entrecierro los ojos imaginando ser yo la que besa esa polla al tiempo que siento como mi vibrador se ha colado en mi intimidad provocando que me estremezca de placer…
La imagino entreabrir mis labios para entrar en mi boca y saborearla mientras el salvaje gime como un animal en celo.
La imagino dura e hinchada en mi boca al tiempo que tiemblo de placer sintiendo como llega mi orgasmo…
El salvaje grita de placer al tiempo que un primer enorme chorro de leche inunda la boca de la mujer que apenas puede tragársela…entremezcla gritos y gemidos sin dejar de disparar nuevos chorros de leche que la mujer intenta controlar dirigiéndolos hacia sus pechos desnudos…
Con esas imágenes yo me dejo llevar por una ola de placer que me hacen estremecer y cerrar los ojos para intentar retener esa última imagen que se me quedó grabada en la retina…
Y con esa imagen tan sensual os dejo hasta un próximo relato…
Espero que os gusten mis relatos y que me hagáis llegar vuestros comentarios a lynda.bcn@hotmail.com