Sofia y Yo

No todos los relatos interraciales son contados por blancos, esta vez alguien de color cuenta la historia desde su punto de vista.

Me llama la atención que siempre que leo relatos interraciales son narraciones realizadas por personas generalmente blancas contando sus experiencias con gente de color o de otras razas, por eso me he decidido a contar algunas de mis vivencias, para que se tenga una percepción desde el otro lado de la orilla.

Debo decirles que soy negro como el ébano, mido 1.70, 67 Kg. y un cuerpo atlético a causa del ejercicio y un alto componente genético, no soy un caballo de 30cm de verga como los que describen en otros relatos, pero estoy bien dotado.

Era un sábado por la tarde y yo tenia poco que hacer, pense en alquilar un par de películas y relajarme en mi apartamento mientras llegaba la noche y se presentaba un mejor plan, en eso suena mi teléfono, era Sofía, una amiga con la cual tuve una corta relación hace unos años pero que no funciono debido a que los dos vivíamos en mundos totalmente diferentes, nunca pasamos de besos y caricias, en ese entonces ella tenia 15 años y yo 20, desde entonces hablamos de vez en cuando por teléfono, pero rara vez nos vemos, pero somos buenos amigos, además ella esta estudiando una ingeniería y de vez en cuando me hace consultas, como en esta ocasión, me pregunto si podía pasar por mi casa para que le ayudase con un problema, Yo acepte, ya que no tenia mucho que hacer, como les había dicho.

Media hora después llego a mi casa, venia vestida con un top de color azul que dejaba ver su abdomen plano, un jean descaderado y su cabello negro y largo hacia contraste con el blanco de su piel, sus ojos color miel estaban enmarcados en los lentes que utiliza. -pasa- le dije con la vos entrecortada ante el espectáculo que tenia frente a mí.

Explicarle el problema realmente no tomo mucho tiempo ya que era sencillo de la matemática básica propia de una ingeniería, cuando terminamos ella me pregunto que pensaba hacer ese resto de tarde, yo le respondí que alquilaría una película y luego pensaría que hacer, me pregunto si podía acompañarme y yo le respondí que seria un honor.

Fuimos a una videotienda cercana, alquilamos una película, compramos unos pasabocas y regresamos a mi apartamento, nos acomodamos en mi sillón e hicimos correr la película, poco a poco nos fuimos acercando mas, ella apoyo su cabeza en mi pecho y yo aproveche para acariciar su cabello (que es hermoso), luego acaricie su rostro, poco a poco levante su barbilla hasta que nuestras miradas se cruzaron, retire sus lentes y le di un largo beso, al cual ella correspondió iniciando un juego con nuestras lenguas, luego volvió a apoyar su cabeza en mi pecho y continuamos viendo la película. Pasaron como 5 minutos cuando siento que introduce una de sus manos por debajo de mi camisa y comienza a acariciarme el abdomen, su mano descendía mas y mas a cada momento, poco a poco fue metiendo sus delicadas manos por debajo de mi pantalón, acaricio mi zona púbica y continuo hasta sujetar mi pene que ya estaba duro como roca, justo en ese momento me volvió a mirar y quede paralizado, nunca antes había visto esa expresión en su rostro, yo siempre la había concebido como una niña tierna, pero en ese momento pude ver su cara de lujuria, había sufrido una transformación increíble se incorporo poco a poco sin soltar lo que tenia sujeto bajo mi pantalón, con su otra mano acaricio mi mejilla y me beso intensamente, ese beso me hizo reaccionar y de inmediato la tome por la cintura y le di la vuelta colocándola debajo de mi, la seguí besando y comencé a acariciar sus tetas por encima de su top, inmediatamente ella se lo comenzó a quitar, dejando ante mi un par de hermosos senos no muy grandes pero perfectamente redondeados. Comencé a chupar como un loco, poco a poco fui descendiendo por su abdomen, desabroche su jean y se lo quite, bese sus muslos acercándome poco a poco hacia su sexo, note como la humedad había invadido esa pequeña tanga que llevaba puesta, ese olor casi hace que me vuelve loco, poco a poco se la quite y de inmediato comencé a devorarla, jugué con su clítoris por un momento, sumergí mi lengua en su vagina, estuve así por un rato, ella solo se movía y pedía mas, introduje dos dedos en su vagina, luego tres, los retire e introduje uno en su ano, mientras con mi lengua seguía jugando con su clítoris, un espasmo invadió su cuerpo, se convulsiono un poco y me regalo líquidos en gran cantidad.

Me puse de pie y la observe acostada en el sofá con la cara roja, pero satisfecha, abrió sus ojos y se sentó, dirigió su mirada al tremendo bulto que se había formado en mi pantalón y comenzó a acariciarlo por encima de este, luego me quito el pantalón con todo y ropa interior, liberando al prisionero de su jaula, empezó a masturbarme suavemente y me sentó en el sillón, se arrodillo frente a mi y comenzó a hacerme una espectacular mamada, sus labios recorrían mi miembro de arriba abajo, su lengua jugaba con mi cabeza y con la otra mano me masajeaba los testículos, debo reconocer que es una experta en eso, continuo así por un rato, pero cada vez con un ritmo mas rápido, sentí que me venia, le pedí que se detuviera, pero ella siguió, solo se detuvo un momento me miro a los ojos y me dijo "Esto es todo o nada", continuo aplicándome esa mamada hasta que no soporte mas y llene su boca de leche, ella la tomo toda, no dejo escapar una gota, realmente fue todo o nada.

Aun después de eso no dejo de mamar, mi pene rápidamente recupero toda su potencia, me puse de pie y ella también, nos besamos, luego puse una de sus piernas sobre el sofá, acaricie su vagina la penetre poco a poco, se sentía mas caliente de lo normal, comencé a bombear suavemente, con mi mano sujete la pierna que estaba en el piso y la levante, ella se aferro a mi nuca y comenzamos a hacerlo de esa manera, estuvimos así por un rato hasta que sentí que mis piernas comenzaban a cansarse, la acosté sobre el sofá y seguimos con la faena, lo hicimos en tantas posiciones que explicarlas me tomaría mucho tiempo, sentí que se convulsiono un par de veces mientras lo hacíamos finalmente, estando ella sobre mi, sentí que me venia y se lo dije, nuevamente ella me miro pícaramente y me dijo nuevamente "todo o nada", me vine en su interior y sentí como sus paredes vaginales ejercieron presión en mi pene, inmediatamente después mas jugos salieron de su interior y me bañaron los testículos, se dejo caer sobre mi y nos abrazamos.

Me confesó que el día anterior había terminado con su novio, que este era un chico precoz y nunca la había llevado al clímax, que había hablado con Natalia (una amiga de ella con la cual tuve relaciones en diciembre pasado) y le había contado todo lo que hacíamos, que desde ese momento había querido estar conmigo, ese sábado no salí, lo hicimos toda la noche.

Esto es todo por ahora, sin embargo no es la única chica blanca con la que he estado, es mas solo he estado con una mujer negra en mi vida, si desean escríbanme a mi correo leo2042@hotmail.com , y les contare como han sido estas y como Sofía el día de mi cumpleaños convenció a Natalia para que estuviésemos los tres.