Sofía, una madre del colegio de mi hijo

Sofía y Raúl son dos adultos con pareja que deciden darse el placer que sus respectivas parejas hace mucho tiempo que ya no les proporcionan.

Soy un entusiasta lector de relatos eróticos y particularmente de los publicados en esta página. En mi condición de hombre casado consumo principalmente los relatos de la categoría de infidelidades porque me proporcionan historias con las que fantasear en primera persona. Voy a intentar escribir mi primer relato sin grandes pretensiones, mi intención es básicamente que el lector se sienta en algún momento identificado con cualquiera de los personajes y si es tan amable me cuente sus sensaciones en los comentarios o a través del correo electrónico.

Conocía a Sofía de vista, me cruzaba con ella todas las mañanas cuando iba a llevar a mis hijos al colegio. Su hijo iba a clase con el mío e inevitablemente nos veíamos a menudo. Ella es una mujer preciosa, tendrá aproximadamente 35 años y una mirada que te derrite. Su cuerpo no es el de una joven escultural pero es muy apetecible. Tiene un pecho mediano que luce increíble en los vestidos escotados que suele utilizar, su trasero es quizá lo mejor de su excelente anatomía y ella lo sabe, vaya que si lo sabe!!! Pero si hay algo que me vuelve absolutamente loco de ella es su preciosa sonrisa, esa sonrisa que está presente en todo momento cuando estás con ella, hasta tal punto que uno imagina que es una persona completamente dichosa.

Yo no había cruzado una palabra con Sofía en los dos años que llevaba viéndola en la puerta del colegio. Pero la verdad es que a veces cruzábamos miradas y notaba que sin conocernos, existía cierto feeling entre nosotros. Era una sensación extraña y morbosa al mismo tiempo.

Cierta mañana mi hijo me advirtió que uno de sus compañeros de clase tendría que venir esa tarde a casa a realizar un trabajo de ciencias sociales que les habían propuesto hacer en pareja. Solo me anticipó que su compañero había quedado en venir a casa a las seis y media. Esa tarde estaba yo solo con los niños y aproveché para avanzar en un proyecto que tenía que terminar. Nada más acabar de comer me puse manos a la obra y como es habitual cuando me pongo a trabajar se me pasa el tiempo volando. Estaba terminando el proyecto cuando oí sonar el timbre de la puerta, guarde el documento y salí al hall para abrir. Cual fue mi sorpresa cuando nada más abrir me encontré con Sofía y su amplia y maravillosa sonrisa. Estaba especialmente atractiva, llevaba el pelo con un recogido de andar por casa y lucía unas mallas negras ajustadísimas que junto con un top blanco de generoso escote hacía que me costara concentrarme en saludarla cortésmente.

  • Buenas tardes, te traigo a Juan que ha quedado con Alberto para hacer un trabajo.

  • Ahhhhhh sí, me lo ha comentado mi hijo esta misma mañana (dije casi tartamudeando)

  • Bueno, perdona que no me haya presentado antes, soy Sofía.

  • Claro, ya lo sabía, atine a decir. Yo soy Raúl, encantado de conocerte. Bueno en realidad ya te conozco aunque solo sea de vista jeje, de verdad es un placer conocerte en persona, claro como voy a conocerte si no es en persona (me salían las palabras sin ningún sentido)

Sofía empezó a reírse de una forma que más que molestarme evidenciaba lo torpe que estaba siendo y lo ridículo de la situación.

  • Pasa Juan te espera Alberto en su habitación al final del pasillo. ¿Quieres tomar algo Sofía? Dije temblándome la voz.

No sé que me pasaba con esta mujer, yo siempre he sido un hombre con cierta seguridad en mi mismo, he tenido mucho éxito con las mujeres antes de estar casado y una vez casado, aunque no había sido infiel, conservaba mi sex appeal y me gustaba flirtear con unas y con otras. Soy muy atractivo según dicen y ese atractivo lo suelo usar para seducir tanto a mujeres como a hombres en beneficio de mis intereses.

  • Pero seguro que tienes cosas que hacer, no quiero molestar.

  • No, no te preocupes acabo de terminar de trabajar. Pasa, apago el ordenador y tomamos un café. Si quieres te puedes quedar hasta que terminen los chicos.

  • Jo, que amable eres. La verdad es que me venía fatal irme y tener que volver más tarde.

  • Pues nada, ponte cómoda y esperamos que terminen.

  • ¿Café o infusión?

  • Prefiero un té

  • Pues tengo una gran variedad, a mi esposa le encanta el té.

  • ¿Dónde está tú esposa?

  • En el hospital, es enfermera y tiene turno de tarde esta semana.

  • A ver esas infusiones… té verde, té rojo, té negro, té aromatizado de vainilla, té de canela, ummmmmmm de canela, que rico ¿puedo probar este?

  • Claro que sí, pero ten cuidado la canela es afrodisíaca (dije con cierto tono sarcástico)

  • Jajajajajajajajaja por mucho afrodisiaco que tome, no creo que sirva de nada

  • Anda mujer que cuando llegues a casa podrás desfogar, jeje

  • ¿Con quién? Mi marido hace mucho tiempo que no me mira con deseo.

  • No me lo puedo creer!!! Una mujer como tú, es imposible!!!

Note que le agradó esa afirmación y por su expresión corporal pude observar como se empezaba a relajar, a sentir cómoda.

  • ¿No has oído la expresión “follas menos que un casado”?

  • Claro que sí, y yo también me siento identificado con esa frase

  • Ahora la que no se lo puede creer soy yo!!! Un hombre tan apuesto como tú… es imposible.

  • Pues mira, nos acabamos de conocer y ya tenemos algo en común.

  • Desgraciadamente…

  • Cierto. Yo llevo un tiempo planteándome seriamente ser infiel a mi esposa, la quiero y no la cambiaría por nada en el mundo pero el sexo es muy importante en la pareja y yo ya no puedo más con esta carencia.

  • ¿Ser infiel, de verdad te lo planteas?

  • Si

  • A mi me da miedo. Sería maravilloso encontrar a alguien con quien compartir solo sexo, sin ataduras. Pero eso es una fantasía, al final de una manera o de otra todo se complica

  • ¿Por qué habría de complicarse? Si las dos personas buscan lo mismo y se establecen unas normas de relación basadas en el sexo sin ataduras emocionales…

  • Sería perfecto…

  • Jeje oye ¿no tendrás alguna amiga que este dispuesta a mantener una relación de este tipo?

  • Que caradura eres jajajajajajajajajaja!!!

  • El que no se arriesga…

  • Oye ¿y no tendrás tú algún amigo que este dispuesto a mantener una relación de este tipo?

  • Un amigo no, pero YO SI!!!

Se hizo un incomodo silencio de tres segundos y al instante empezamos a partirnos de risa

  • ¿Cómo has dicho que te llamas? Me caes muy bien jajajajajajajajajaja

  • Y tú a mi también me caes muy bien

  • Con una mujer como tú los momentos íntimos tienen que ser deliciosos (dije ya sin ningún pudor y buscando una clara reacción por su parte)

  • Y con un hombre como tú serían muy divertidos

  • Y muy excitantes, te lo aseguro

  • Calla, calla que me pongo nerviosa

  • Yo me he puesto nervioso nada más verte en la puerta de mi casa

  • Jajajajajajajajaja que adulador eres

  • Es verdad, eres una mujer muy sexy y me provocas mucho morbo

  • Cualquiera que nos oiga pensará que somos amigos de toda la vida y nos acabamos de conocer jijiji

  • Es verdad pero siento que hay un feeling muy especial entre nosotros

  • Yo también lo creo

  • Eahhh pues podemos ser amantes!!!

  • Ya jajajajajajajajajaja ya te gustaría a ti

  • ¿Y a ti no? (Era el todo o el nada)

  • Pues…… Eres encantador pero…..

  • Ya estamos con los peros de las tías. “Eres muy majo pero… podemos ser amigos”, es vuestra frase preferida

  • Esa frase es solo para salir del paso cuando no quieres aceptar una oferta, aunque en este caso mi “pero” no tenía ese significado. Espera vuelvo a intentarlo: Eres encantador pero…. ¿estás seguro de lo que me planteas?

En ese momento se me abrió el cielo y empecé a ser consciente de que mi sueño de follarme a la madre más buena del colegio de mi hijo estaba a punto de cumplirse

  • Por supuesto que estoy seguro!!! Sería un sueño.

  • Yo soy nueva en esto, nunca he sido infiel a mi marido

  • Yo tampoco he sido infiel pero si lo hacemos bien podemos disfrutar los dos y darle salsa a nuestras vidas. Nos lo merecemos y no creo que haya nada de malo en intentarlo

  • Pues tú dirás

  • Mañana por la mañana mi mujer tiene turno en el hospital, después de dejar a los niños en el colegio te espero aquí. Dame cinco minutos de ventaja para que no nos vean juntos

  • ¿Te parece bien?

  • Ehhhhhhhhhhhhhhh bueno, de acuerdo

Poco después los niños salieron de su habitación y Sofía y su hijo se fueron a su casa

Al día siguiente me desperté muy emocionado por lo que iba a suceder esa mañana, me duché, me arregle la barba y me puse mi perfume preferido. Cuando llegué al colegio ella todavía no había aparecido, empecé a preocuparme y a pensar que se había arrepentido de nuestro plan y que mi objetivo de follarme a Sofía se iba a quedar en simple fantasía. Se acerco hasta donde yo estaba la madre de otro compañero de mi hijo para contarme no sé que cosa de la profesora, yo no podía atender a lo que esta mujer me decía con tanto fervor, no me podía quitar de la cabeza a Sofía.

  • Hola Marta

  • Hola Sofía ¿qué tal?

  • Fenomenal , hace un día esplendido y creo que voy a disfrutar de una mañana maravillosa, dijo dirigiéndome una furtiva y pícara mirada con su hermosa sonrisa

Estaba preciosa llevaba unos pantalones vaqueros que realzaban su espléndido culo y una camisa blanca con los botones superiores desabrochados que permitían una hermosa vista de su canalillo. Me estaba poniendo cachondísimo y temía que mi incipiente erección se notara en mis pantalones , así que me despedí de las dos mujeres y con una sonrisa picarona les desee que tuvieran un maravilloso día

  • Contigo si que tendría un maravilloso día (dijo Marta nada más darme la vuelta) Este tío me pone a cien

  • No está mal (le respondió Sofía) al tiempo que se despedía de ella

Sonó el timbre de la puerta y salí inmediatamente a abrir antes de que algún vecino pudiese ver a Sofía.

  • Estás preciosa

  • Muchas gracias

  • ¿Te gustan mis pantalones? Me dijo al tiempo que caminaba por el pasillo contorneando las caderas y ofreciéndome un espectáculo de su hermoso culo en movimiento

  • Me encantan pero más me va a encantar cuando te los quites

  • Ehhhhhhhhhhhh para machote, antes tenemos que dejar algunas cosas claras. Si esta mañana todo sale bien seremos amantes hasta que uno de los dos se canse o cambie de opinión o sintamos que nuestros respectivos matrimonios se ponen en peligro ¿estás de acuerdo?

  • Estoy de acuerdo

  • Pues llegado a este punto ya no hay vuelta atrás

  • ¿Por dónde quieres empezar?

  • Por tu coñito, dije ya sin ningún tipo de vergüenza

  • Ummmmmmmmm creo que esto va a ir muy bien. Pon música por favor

Aunque suene a tópico me encanta para estas ocasiones la banda sonora de nueve semanas y media, saque el móvil y busque la canción en mi plataforma de música online. Nada más sonar el primer acorde Sofía reconoció la canción y se mordió el labio inferior al tiempo que empezó a moverse rítmicamente y a desabrocharse la camisa lo que me permitió ver un precioso sujetador de encaje blanco que realzaba sus increíble pecho. En ese instante mi polla empezó a crecer descomunalmente hasta casi salirse del pantalón. Sofía siguió desprendiéndose ahora de las sandalias y a continuación de los pantalones para dejar a la vista un tanga blanco con un hilito que parecía pedir a gritos ser devorado.

  • Ven a la habitación que esto va a ser épico

  • Estoy deseando

Sofía se tumbo dejando su preciosas piernas fuera de la cama. Me incliné apoyando mis dos rodillas en el suelo, le cogí la pierna izquierda y empecé a besarla suavemente mientras con una enorme delicadeza mis manos recorrían sus muslos hasta llegar a su entrepierna. El primer gemido que salió de su boca anticipaba que Sofía era una mujer hambrienta de deseo y que estaba preparada para disfrutar de esta sesión de sexo como nunca antes había disfrutado en su vida. No había empezado con los preliminares y tenía las bragas empapadas de flujo. Le retiré el tanga, el sujetador y empecé a besar su cuerpo con toda la pasión que requería el momento. Me detuve en sus pechos para pellizcarlos suavemente con mis labios mientras mis manos acariciaban su entrepierna buscando el clítoris para empezar a estimularlo

  • Ummmmmmmmmm Raúl ummmmmm estoy en la gloria

  • Yo estoy a mil

  • Sigueeeeeee, ummmmmmmmmmm

Bajé hasta colocar mi cara entre sus muslos y empecé a lamer y succionar sus labios vaginales al tiempo que introduje dos dedos en su encharcada cuevecita

  • Aaahhhhhhhhhhhh hijo de puta, me gusta, MEEEEEEE ENCANTA!!!! Como sigas así no voy a tardar en correrme

En ese momento observé como empezó a vibrar y sus gemidos se intensificaron, mis dedos se quedaban atrapados en el mete y saca por sus contracciones hasta que sentí que iba a experimentar su primer orgasmo conmigo

  • SIGUE RAÚL, SIIIIIIIIIIGUUUUUEEEEEEEEE, SIIIIIIIIIIIIIIIII, QUE GUSTAZO HIJO DE PUTA ¿DÓNDE HAS ESTADO EL RESTO DE MI VIDA? ESTO ES EL PARAISO, AAAHHHHHHHHHHHHH ME CORRO, ME COOOOOOOOORROOOOOOOOO, AAAAAAAAAAAAHHHHH, JOOOOODERRRRRRR, JOOOOOOOOODEEEEEERRRRRRR, AAAAAAHHHHHHHHHHHHH

Y cerró las piernas con mis dedos todavía en su vagina en señal de que por ahora había terminado

  • Raúl este orgasmo ha sido excepcional, nunca en mi vida había disfrutado tanto

Lo consideré un alago que alimentó mi herido ego y por supuesto incremento mi morbo hacia aquella mujer . La sesión continuó con una mamada magistral que me hizo ver las estrellas por la pasión que Sofía le puso. Y es que no hay nada mejor y más gratificante que dar placer a una mujer hambrienta se sexo. Una mujer satisfecha en la cama es la mejor inversión para nuestra propia satisfacción.

Continuara…

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