Sofia

2 meses después de visitar ese club, recibo la visita de sofia

Pasaron unos 2 meses desde mi visita a ese maldito “club” y mi relación con Roberto en la cama había mejorado bastante, me conto sus fantasías y fetiches más extraños, la verdad me tenía fascinada su amplia imaginación y me tenía aterrada la idea de cumplirlas pero la verdad también me sentía excitada, el solo pensar en entregarme por completo a mi esposo para sentirme totalmente indefensa y humillada me ponía a 100 no podía creer que algo tan asqueroso y doloroso fuera tan endemoniadamente placentero.

Durante ese tiempo había buscado información acerca de porque me era tan placentero esa sensación de asfixia, lo que encontré me dejo fascinada, aunque por lo general todos los foros y páginas que encontré en la internet llamaban a la discreción y a la práctica responsable de pareja de este juego sexual pues era bastante peligrosa, también pude encontrar otras que no hablaban acerca de esa mierda de la responsabilidad o de la discreción al contrario explicaban y mostraban muchas otras maneras de asfixia erótica, quede encantada con cada idea morbosa que encontré en esos lugares pero llevarlos a cabo no sería tarea fácil porque a pesar de estar encantada con la idea de peligro y de volver a sentirme vulnerable, no era una pendeja que quisiera ser encontrada muerta y desnuda con una bolsa sobre su cabeza, la primera vez si me salve fue de milagro y estaba segura que si estuviera de nuevo en esa situación no me salvaría, así que decidí hablar con Roberto acerca de ese tema, pensaba que la idea le fascinaría después de todo el cabron es mi esposo y no quisiera tener a otra persona a mi lado en especial si quiero sentir su gloriosa verga forzando mi delicado coño.

Llego el sábado y durante el desayuno le saque el tema, el reacciono mejor de lo esperado.

  • Roberto mi amor, quiero preguntarte algo.

  • Dime cariño ¿pasa algo malo?

  • No nada de eso, es que mmm ha pasado un tiempo desde esa noche que me pillaste atada en la cama y la verdad quiero que repitamos esa follada que me diste.

  • Andrea ¿sabes lo que me estas pidiendo no?

  • Amor yo quiero volver a sentir ese placer ese dolor quiero sentirme en peligro una vez más, vamos porfis no me dejes con las ganas, además si lo repito sola podría pasar un accidente y no creo que quieras que me pase algo malo ¿o sí?

  • Eres una maldita manipuladora, pero para ser honesto había pensado en algo similar pero no sabía cómo planteártelo, solo necesito que me respondas algo.

  • Dime

  • ¿quieres colgar para mí?

Mi corazón empezó a latir violentamente, entendía perfectamente lo que él decía acerca de “colgar” el cabron quería ponerme una soga al cuello y levantarme por los aires, quería verme patear y luchar por encontrar un suelo donde asirme, quería verme indefensa y flácida para su placer.

  • ¡Roberto¡ pero qué dices ¿Qué mierda crees que soy?

  • Andrea no seas tan hipócrita, he visto tu laptop cada página que has visitado y cada video que descargaste y ni hablar de esos comics que encontré. Eres una puta y solo quiero ayudarte a aceptarlo.

Me dejo sorprendida saber que el continuaba espiándome el portátil, pero no podía negarlo había descargado algún video de ese tipo y me sentía totalmente avergonzada, me había masturbado viendo a esas mujeres sufrir pero nunca pensé que yo estaría en esa situación y respecto a los comics eran demasiado fuertes como para disimular que los descargue por error.

  • Pe pe pero mi amor entiende que eso es diferente, eso es mmm peligroso.

  • ¿Acaso no me amas? ¿no confías en mí? Pensé que querías sentir de nuevo ese dolor, yo te ofrezco un dolor mayor aun.

Tan solo imaginar la caricia de una soga en mi cuello me ponía la piel de gallina, amo a mi esposo pero la idea de entregarme a ese punto, me aterraba sin importar cuanto lo amase pensaba que llegado el momento él podría tan solo dejarme ahí colgando para él.

  • Roberto no seas así, tu sabes que te amo y que confió en ti.

  • Perfecto volverte en una hora con lo necesario para colgarte.

Lo dijo de manera tan fría y seca que me dejo mojada, me encanta verlo tan seguro y frio, fantaseo con que es otra persona pienso que no es mi esposo y que en realidad es una desconocido que me está chantajeando con algún video o con unas fotos, me amenaza con mostrarlo en mi colegio si no complazco sus más oscuras fantasías.

  • Roberto por favor, no lo hagas tengo miedo.

Se acercó y me dio un beso con tanta pasión que sentí que me derretía y supe que no había marcha atrás, él había sellado mi destino y todo lo que pasara solo dependería de él.

  • Vuelvo en una hora, te quiero desnuda en el árbol del patio.

  • Aja

Él se fue en el auto y yo entre a casa temblando y rogando que todo fuese un sueño del cual necesito despertar antes que mi esposo vuelva o de lo contrario sería colgada, me senté en la cama prendí la portátil y busque uno de esos videos, cuando lo encontré mi respiración fue más agitada en poco tiempo yo estaría como ella, en el video una mujer asiática de pelo castaño y pechos enormes toma la cuerda y se la ata a una viga luego la sujeta firmemente y trepa un poco por ella lo más seguro para probar si resistirá su peso, toma un extremo y hace un improvisado nudo de ahorcado, la mujer mira fijamente a la cámara y llama a su pareja, entra a escena otra mujer que se acerca a ella con un banquillo y unas tijeras, le corta toda la ropa hasta dejarla desnuda, le ata las manos atrás en la espalda y le ordena subir al banquillo, una vez ahí le rodea el cuello con esa gruesa cuerda y la tensa para dejarla de puntillas. La segunda mujer también se desnuda y se echa en el suelo comienza a masturbarse puedo ver como manosea su pechos y sus dedos juguetean con su peludo coño, empieza a gemir y aumenta la velocidad de su digitación, pasan un par de segundos y la maldita patea al banquillo, veo como su pareja cuelga al principio no hay movimiento, solo un pequeño efecto de péndulo, su cabeza esta inclinada a un lado por la soga, pero luego comienza a patear frenéticamente es como si estuviera corriendo en el aire, su rostro se encuentra totalmente rojo por la presión que le ocasiona la soga, se puede notar claramente que ella quiere vivir, lucha desesperadamente por conseguir un poco de aire y sus piernas buscan un suelo donde apoyarse, la mujer que se masturba en el suelo gime cada más y más fuerte hasta que explota en un orgasmo delicioso y extremadamente largo, paso talvez un minuto y la mujer que cuelga ya casi no tiene fuerzas solo se nota algún espasmo involuntario y una ultima humillación la maldita zorra dejaba caer su orina, su pareja se levanta del suelo sale de escena y vuelve con un cuchillo corta la cuerda y deja caer a esa sufrida mujer, se acerca a la cámara y la apaga.

Estaba totalmente mojada y excitada, aun con todo el terror que recorría mi cuerpo, parte de mi quería sentirse como aquella puta, indefensa y totalmente expuesta, si Roberto me grabase mientras cuelgo seria la cereza en el pastel, me desnude y espere en el cuarto mientras pensaba en que podría pasar y como mierda había llegado a esto, deje que pasaran los minutos hasta que mire el reloj, casi era tiempo baje al patio totalmente desnuda me pare bajo el árbol y escuche el sonido del motor.

  • Andrea ven a recibir a nuestra invitada.

  • Hola putita.

En cuanto la vi quede petrificada, no quería que el trajera a alguien y menos a Sofía, esa cruel perra no tendría compasión de mí, estaba segura que si dependiera exclusivamente de ella no saldría viva.

  • Ho hola Sofía

Camino rápidamente hacia mí y me dio una cachetada tan fuerte como la primera vez, por un breve momento pensé en lo estúpida que fui, había olvidado como debía llamarla.

  • ¡Que dijiste puta¡ no eres mi amiga para que me tutees.

  • Perdón Ama Sofía.

  • ¡Dios mío¡ sabía que fue un error pensar que ya estabas educada.

Roberto no decía nada solo se acercó al árbol para empezar a armar una horca, esa niña tenía algo especial cuando la vi despertó en mi un sentimiento de terror y placer, aun recordaba que de todas las malditas del club ella parecía ser la más cruel bastarda del grupo y eso era muy llamativo me encantaba ser tratada de esa manera, en especial por una niña que podría ser mi alumna

  • ¿dime puta que mierda me miras? Por lo menos tráeme una gaseosa fría, parece que nunca recibes a nadie en esta casa.

  • Perdón Ama Sofía.

Corrí a la cocina, busque desesperada una gaseosa fría pero no encontré nada, el cabron de Roberto seguramente se la había tomado toda, el pánico se apodero de mí y decidí por lo menos llevarle agua fría.

  • Ama Sofía no encontré nada, aun no he echo las compras perdón Ama Sofía.

  • ¿y me traes agua? ¿acaso eres estúpida? ¿te pedí agua? Es el peor cumpleaños de mi vida.

Roberto por fin termino esa maldita horca y se acercó a Sofía para intentar calmarla.

  • Sofía tranquila, ella solo está nerviosa dale una última oportunidad de todos modos su regalo es muy especial.

  • Si tienes razón, ¡pero escúchame puta¡ te conviene darme un buen espectáculo.

No entendía de qué mierda estaban hablando, empecé a sospechar lo peor.

  • Mírala esta putita ya está mojada.

  • Acércate mi amor.

Resignada me acerque a mi esposo, ato mis manos en la espalda y me llevo al árbol, cuando lo vi sentí que quería orinar, el poco valor que me quedaba abandonaba mi cuerpo, mis piernas parecían de mantequilla, mi vista se empezó a nublar pensé que iba a desmayarme. Pero Roberto me dio un beso tan apasionado que me devolvió parte de mis fuerza, cuando quise hablar me callo con un dedo, saco un poco de cinta de embalaje de su bolsillo y sello mis labios, no había banquillo ni nada sobre lo que pararme, solo la soga y mi cuerpo.

Rogué a los cielos para que algún vecino hubiera escuchado los gritos de Sofía y que milagrosamente mire sobre el muro para detener esta locura, entonces Roberto me puso la soga al cuello, la teso un poco hasta dejarme de puntillas igual que la perra del video

  • Sofía, Andrea me dijo que quería darte un regalo por tu cumpleaños y le comente que eres una fanática de la asfixia así que ella me pidió que te llamara para darte este regalo.

  • Bueno al menos la putita es agradecida, pero por ahora yo quiero que tú me des mi regalo.

Mire desesperada como le bajaba el pantalón a mi esposo y empezaba a chupar esa rica verga, quise gritar pero la maldita cinta me lo impedía, ¡esa verga era mía y solo mía¡ no quería compartirla con nadie, pero en ese instante no podía hacer nada, si trataba de moverme la soga solo apretaba más aun y a pesar de sentirme violada en mi confianza solo pude mirar horrorizada como una colegiala me quitaba la verga de mi esposo. Mire el rostro de mi esposo y vi como el cabron gozaba de la mamada que le estaba proporcionando esa perra maldita, se notaba que era muuuy experimentada, apenas pasaron 2 minutos hasta que mi esposo se corrió en su boca, unas lágrimas recorrían mis mejillas, el maldito me era infiel ante mis ojos y Sofía disfrutaba de ese delicioso semen.

Sofía se me acerco aun con un poco del semen de Roberto en su boca y lo trago frente mío, quería gritar que todo era mentira, que yo no organice nada que y todo esto lo planeo Roberto, yo ni siquiera sabía que era cumpleaños de esta pendeja.

  • Roberto ya puedes retirarte, creo que hoy juegan al póker en el club.

  • Adiós querida, te veo otro día Sofía.

El cabron la tomo de la cintura y le dio un beso ¡frente a mi¡ no podía creer que esto me estuviera pasando, seguro el hijo de puta tenía planeado esto todo el tiempo, entregarme a esta maldita para que ella me cuelgue hasta mi muerte y luego hacerlo parecer un suicidio, con los videos, fotos, comics y el historial de mi portátil seguramente lo creerían, todos pensarían que esta mierda me la busque yo.

  • Mmm estas deliciosa, sabes desde que Roberto nos contó sobre la noche que te pillo asfixiándote, supe que sería cuestión de tiempo que terminaras así, pero jamás pensé que sería tan pronto.

  • Mmmmffff uughhh aaahhhh.

Trate inútilmente de suplicar por mi miserable vida, pero parecía que eso la excitaba aún más.

  • Déjame quitarme la ropa, no quiero que se ensucie, además esto será tan placentero para ti como para mí.

Cuando se desnudó, pude volver ese cuerpo escultural y ese depilado coño, sentí que si alguien se quedaba con mi esposo talvez sería lo mejor que fuera ella, mi Roberto se merece lo mejor a pesar de ser un cabron infiel, tomo el extremo de la cuerda y con todas sus fuerza comenzó a tirar de él.

Sentí como la puta cuerda empezaba a apretar más y más mi cuello, me levanto apenas unos centímetros pero ya me encontraba colgando y con el cuello doblado a un lado, instintivamente comencé a patear buscando suelo pero era inútil, sabía que apenas me había levanto un poco, pero no importaba si fuera 10 centímetros o 10 kilómetros el resultado era el mismo mis pies no volverían a tocar tierra, en mi desesperación trate de desatar mi ataduras pero fue inútil horrorizada por la idea de mi inminente muerte comencé a llorar, mientras pensaba “puta estúpida, tu marido te acaba de reemplazar por una Hembra más joven, más sensual y con mejor cuerpo que el tuyo, te mereces morir”

Cada intento de respirar era tortuoso, podía jurar que escuchaba claramente los latidos de mi corazón tan fuertes que pensé que mis oídos reventarían, comenzaba a sentir que la cabeza me palpitaba como si fuera a estallar, sentí que mi rostro empezaba a arder, eran demasiadas sensaciones apenas podía entender que mierda me pasaba. Pero de repente entre todo el dolor y la humillación pude sentir como mi coño empezaba a palpitarme fuertemente, mis piernas estaban muy cansadas y habían dejado de patear, solo mi coño me daba la sensación de vida, era como si una corriente eléctrica me golpease en mi sexo tan violetamente que sentí como empezaba a convulsionar, sentí como mi vejiga se liberaba y salpicaba el suelo con mi orina, mi vista estaba nublada hasta que pude sentir como mi Ama Sofía se apiadaba de mí, sentí sus dedos jugado con mi coño, sentí como lo penetraba torpemente buscando que me corra antes de irme de este mundo, pero parece que se dio cuenta que no era suficiente, así que comenzó a darle unos golpecillos a mi clítoris que seguramente estaría tan hinchado que parecía que reventaría si continuaba golpeándolo, lo continuo con unos suaves movimientos circulares hasta que sentí como lo presionaba con una rabia total que pensé que quería arrancármelo y entonces me corrí tan pero tan fuerte que lo siguiente fue una oscuridad total.

Cuando pude levantarme era de noche y aún continuaba en el patio de mi casa, no puedo explicar la felicidad que sentí al encontrarme viva, las luces de mi casa estaban encendidas, con la poca fuerza que tenía entre y pude ver a Sofía sentada en mi sofá viendo la televisión.

  • Mmm que rico regalo me diste putita, pero no pienses que somos amigas. Te veré otro día tenlo por seguro, y para que lo sepas me gusta El Silencio De Los Corderos, prepárate.

  • Si Ama Sofía.

No me importaba una mierda lo que a ella le gustaba, aunque viéndolo en retrospectiva talvez debí prestar más atención, espere en la cama a que llegara Roberto, a media noche escuche abrirse la puerta y lo vi entra a la habitación, lo recibí con un.

  • Gracias mi amor, siempre confié en ti.

No importa que fuera mentira, el orgasmo que tuve compensaba todo el sufrimiento.