Sodomizado en una casa abandonada

Acabando este por sustituir estos por su polla, ¡embistiéndome con fuerza y comenzar a penetrarme… ooohhh!!, comenzó a follarme sin compasión, comenzó a encularme vivo y sin que yo pueda hacer otra cosa que disfrutar.

Sodomizado en una casa abandonada

Soy de esos que entiendo que el sexo hay que disfrutarlo en su plenitud, pero eso si con cautela y seguridad… sobre todo seguridad, no realizándolo y menos haciéndolo con el primero que se pone a tiro. Me gusta disfrutar del sexo sin tabúes como del buen vino, no me gusta la violencia, pero en un momento es inevitable, me considero liberal, infiel, fetichista, pervertido y mucho más. Soy raro… lo reconozco, pues me considero hetero a pesar de mis experiencias con hombres, no me considero bisexual pues no me gustan los hombres, puntualizo solo me gusta cualquier tipo de hombre, ya que solo me atraen los hombres maduros… hombres mayores. No me gustan los jóvenes, pero si es cierto que en un momento dado a veces no puedes evitarlo, como cuando estoy de cruissing. Pues a veces estás siendo sodomizado en pompa, cuyo penetrador ofrece su puesto a otro, dándome cuenta a veces que este macho es un jovencito, cuya virilidad me demuestra que para nada es despreciable, pero sus formas hacen que eche de menos a maduro, cuya experiencia es esencial. El otro día conversando con un lector me pidió consejo, cuya conversación en un momento dado, me confesó que él había sido follado en sitios públicos, ya sean cines, sex shop, parkings e incluso en aseos de centros comerciales, pero su idea últimamente era sufrir una violación sin que salga traumatizado.

Pero en referencia al sexo duro, debo decir que no soy persona a la cual le guste o es de mi agrado el sexo duro, entrando en esto el sexo tomado a la fuerza o lo que es lo mismo la violación, pero debéis de tener en cuenta que cuando comienzas, debes de tener en cuenta que todos no somos iguales, debemos de comprender que hay personas que no permiten que les pongas al límite y lo dejes en ese punto. Estos hombres los que tenido yo, no los he buscado, pero su físico o fisionomía me ha atraído, hombres cuyas maneras o formas de ser, llega un momento… tarde por cierto que me niego a continuar, hombres que unos te dejan y otros te obligan. Doblegación que de una forma inexplicable me gusta y me atrae. Eso me hace recordar una experiencia que tuve, experiencia que me ocurrió dentro de la zona denominada la ‘Raya’, pero al fondo casi con la linde con los campos de labrado.

Echas una mirada hacia atrás, y recuerdas que ese día era uno de tantos, bueno para especificar más, debo decir que era entre un lunes y un viernes, días de la semana en los cuales me quedaba por las tardes. Era primavera… miento, era verano, día que, hacía un calor sofocante, calor que te ayuda y te anima a envalentonarme. Ese día salí de trabajar a eso de las cuatro de la tarde, salí caliente y con ganas de perversión como era costumbre. Salí y mientras me encaminaba hacia el coche, llame a mi novia con el pretexto de hacerle saber que me quedaría un rato más en la oficina, novia que estaba acostumbrada a mis tardanzas. Tras colgar y coger el coche, me encaminé hacia la Raya donde tras deambular un poco con el coche, acabo estacionando aun lado. Acercándose un conocido que me dice…

  • “Que… ¿Cómo vienes hoy?, tienes ganas de tema”.

Claro está le hice saber que venía a todo, esté abriendo la puerta de mi coche, me invito a subir al suyo, donde tras hacerlo condujo hasta los campos de labranza, donde dejo su coche aun lado. Bajándome y fuimos caminando, mientras caminaba este no dejaba de magrear mis nalgas, llegando a introducir su mano por dentro de mis pantalones, mano cuyos dedos dedeabá mi orificio… ooohhh!!. Conocido que para nada le importaba que otros le vieran, pues le gusta dar envidia en esos momentos, conocido que no dejaba de decirme…

  • “Uuuffff!!... que ganas tengo ya de follarte, no te imaginas como de cargados están mis huevos… uuummm!!”.

Caminamos por esos caminos repletos de olivos y campos de labranza, caminamos cada vez más hacia el interior, buscando este un lugar donde podamos estar cómodo, no dejando de meterme mano, no dejando de dedear mi orificio anal… uuuffff!!. Pasamos una casa casi en ruinas, seguramente de alguien que trabajaba esas tierras de labranza en su día, acabando este por detenerme y volver sobre nuestros pasos hasta esa casa. Edificio que debería de estar ya demolido, pero por el lugar donde está, difícilmente podría llegar las maquinarias. Ahora abandonada y casi en ruinas, sirve para todo, sirviendo en eso momentos para nosotros. Temí entrar, pero esté tras animarme acabe por entrar, dándonos cuenta al menos yo, que ese lugar ya ha sido usado para lo que íbamos nosotros, pues entre envoltorios de condones, preservativos, toallitas y demás basura.

Nada más entrar en esa casa abandonada, este fue al grano, no quiso perder el tiempo, tiro de mí y mientras me magreaba, comenzó a babear mi cuello, boca que busco la mía con deseo… uuummm!!. Pero como siempre… es algo que deniego, pues no me gusta besar… aunque a veces trago. Este de todas formas, magrea de aquí para allá y entre caricias y manoseos, este me va desvistiendo poco a poco, soltándome al oído…

  • “Descálzate… puta”.

Cosa que hice a pesar del frio suelo y de la humedad, este desabotona los botones de mi camisa, abre esta y dirige su boca a mi pecho, chupa y besa mis pezones… aaahhh!!, continuando por pellizcármelo y mordérmelos… uuuffff!!. Momentos que yo no he perdido el tiempo pues ya se lo había sacado, no me refiero a otra cosa que su polla, miembro que no está mal, pero que nada mal… uuummm!!.

En no más de un cuarto de hora entre caricias, muerdos, magreos y pellizcos, me tiene ya sin camisa, pantalones y calzoncillos, tiempo que me pide que me ponga en cuclillas y se la coma… cosa que obedezco. Me arrodille al tiempo que tome su tronco, comencé a pajeársela al tiempo que besaba alrededor de su ingle, lamí su glande, tronco, genitales y perineo… uuummm!!. Mientras aullaba de placer, no dejando de decirme obscenidades o mencionarme como me iba a follar, no dejando de asegurarme que cuando acabara, no me voy a poder a sentar en semanas y que me dejaría bien preñadito… uuuffff!!.

Tomé su polla por la base y tras restregar su glande por mis labios, ¡comencé a introducírmela poco a poco… uuummm!!, acabando por metérmela hasta las mismas amígdalas, sintiendo como se me escapa un par de lágrimas de mis ojos. Comenzando a metérmela y sacarla con rapidez, teniendo cuidado en todo momento de no rozar mis dientes con su tronco, babeando este al mismo tiempo que magreo genitales… ooohhh!!. Este se entretiene en acariciar mis cabellos, cuello o espalda, llegando en un momento dado a inclinarse a modo de llegar a mis nalgas y golpearla… ooohhh!!. No deja de insultarme y menos preciarme, llegando incluso a pisar mi pene, miembro que aun estando flácido y no midiendo más de cuatro centímetros. Este le daba la pica, comenzando a pisármelo como disfrute, intentando incluso patalear mis diminutos testículos, mientras me soltaba…

  • “Vaya mamada de campeonato me estás dando cabrón… ooohhh!!”.

Dice y vuelve a soltar…

  • “No te esmere tanto cabrón que vas a hacerme correr… uuummm!!, yo quiero romperte ese culito de maricona que tienes y follarte hasta correrme… aaahhh!!”.

Acabando por detenerme en más de una ocasión, pues no desea correrse, ya que no dejaba de mentarme lo de follarme hasta preñarme. Y en una de esas ocasiones, este acaba por detener, me hace levantar y girarme, comenzando a sentir como comienza a comerme el culo… uuummm!!. Recuerdo como en minutos, escucho el rasgar de algo, dando por sentado que es el envoltorio de un preservativo, cosa que veo que es cierto al ver este caer al suelo. Y acto seguido, noto su glande deslizarse por mis nalgas hasta mi orificio, colocándolo y presionar e intentar metérmela… aaahhh!!.

Me quejo y este la saca, subiendo sus pantalones con la intención de meter sus manos en el interior de sus bolsillos, pudiendo ver como del interior de uno de ellos, saca algo. No siendo otra cosa que un bote de popper, bote del que me da a oler, obligándome a esnifar hasta tres veces al menos, y tras unos segundos vuelve a la carga, cuya polla me entra ahora mucho mejor… ooohhh!!. Comenzando a embestirme durante un rato, tiempo que se detiene al hacerme saber que ha escuchado un ruido, cogiendo yo por intentar sacármela ante esta noticia, intención que era junto a querer coger mis ropas e irme, pero este me tranquiza a modo de hacerme saber…

  • “No te preocupes no será nadie, y si acaso, será algún mirón de mierda como siempre, uno de esos que quieren cortarnos el rollo”.

Dice y vuelve a embestirme con fuerza, ¡sintiendo su glande golpear mi próstata… aaahhh!!, embestidas violentas y que no deja de pellizcarme cualquier parte de mi cuerpo, besando, babeando e incluso morder mi cuello o hombros… ooohhh!!. Un nuevo ruido nos alertó, volviéndome este a decir…

  • “Joder con los mirones de mierda, ¡estarán hoy nervioso y salidos al ver el menudo espectáculo… eeehhh!!”.

Pero bien recuerdo que este ruido se acentúa, tanto que ni nos percibimos como detrás del conocido había aparecido un extraño, persona con muy mala pinta. El conocido nada más verlo, saco su polla de mi culo y sin pensar que somos dos, fue el primero en intentar marcharse siendo retenido por otro en la puerta, quien tras pararlo le pide algo de dinero, cosa que este torpemente de la cartera saca diez euros que se los da. Yo que desnudo no me queda otra que vestirme a la carrera, colocándome los calzoncillos, cosa que ese extraño de aspecto entre agitanado y rumano, coge mis prendas del suelo con rapidez. Soltándome…

  • “¿Son tuyas?, pues ahora creo que no”.

Le hago saber que, si y le pido con educación que me las devuelva, pero este sonriente y con una pizca de malicia, me pregunta…

  • “¿Qué me das a cambio de tus ropas?”.

Le hago entender que no tengo dinero, informándole que cuando deambulo por estos sitios suelo ir sin dinero, este me alaba ante mi idea, pero aun así me hace saber que también es malo, pues ahora me he quedado sin poder recuperar mis ropas. Le sugiero que me acompañe al coche y que allí le doy dinero, e incluso sugiriéndole que se lo de mi acompañante, pues este tiene bastante dinero encima. Cosa que este me dice…

  • “Bueno eso no creo, tú novio, no solo sea quedado sin cartera… o sea sin dinero, sino que incluso me ha ofrecido tus servicios, como compensación a modo de dejarle marchar”.

Ríe y termina…

  • “Vaya mierda de amigos que tienes… eeehhh!!”.

Ante mi falta de ideas… temía por mí, maldiciéndome en el momento que accedí acompañar a este hasta ese lugar, no sabiendo cómo iba salir de esa, pues todo e incluso las llaves de mi coche, estaban en ese pantalón. Volví a insistirle, volviéndole a sugerir que me acompañe al coche y que daré el dinero, este me hace saber que no quiere marcharse, sugiriéndome otra manera de pagarle. Sugerencia que sabía perfectamente lo que este quería, callo y bajo la cabeza como muestra de acatamiento, momento en que este coge y manda a dos acompañantes fuera. Mandándole que vigilaran, acompañantes que muy sumisamente se marcha sin decir palabra alguna, pero por sus caras no están muy de acuerdo.

Coge este y se gira hacia mí, no viéndolo venir coge y tras cogerme de los pelos tira de mí, haciéndole seguirle mientras este busca un lugar donde ponernos. Deteniéndose y oprimiendo ahora mis cabellos hacia abajo hasta que me hace sentar sobre una lata, lata que me transmite a mis nalgas como de fría esta la chapa. Acto seguido coge su polla y me la pone delante, diciéndome…

  • “Bueno aquí tiene tu moneda de cambio, ya sabes qué debes hacer si quieres recuperar tus ropas”.

No pude ni darle una lamida, pues ese olor nauseabundo que desprendía me lo impedía, sentía arcadas e incluso nauseas, ese olor me hacía pensar que este llevaba días sin asearse. El gitano viéndome, acabo por cogerme de mis pelos y zarandearme, intentando obligarme a chupársela, acabando por darme hasta dos fuertes bofetadas. Pero viendo mi negación y comprender el posible motivo, acabo por coger mis pantalones y hurgar en los bolsillos, sacando del interior de uno un par de preservativos, un paquete de clínex y un móvil. Móvil que en verdad no es el personal, sino uno que uso para estar por estos lugares, móvil que, en el caso de perderlo, no perdería gran cosa, pero bueno, continuo. Este continúo hurgando en el otro bolsillo, donde saco un bote de popper y un paquete de toallitas húmedas. Dándome de este último dos de estas, toallitas que cogí y utilicé para limpiar su polla y testículos, mientras este dirigiéndose a mí, me soltaba…

  • “Vaya con la putita, si vienes preparada como toda una profesional, ¡pues debes de actuar como tal… eeehhh!!”.

Ahora sí que comienzo a chupársela, ahora ha dejado de olor mal y saber aún peor. Comencé por lamer y chupar su glande, pasando por babear su tronco y deslizar mi boca a lo largo de su tronco hasta sus genitales, mientras me ayudaba con una de mis manos por pajearlo… ooohhh!!. Mi idea era que se corriera lo antes posible, idea que no estaba que este me diera por el culo. Continúe chupando su tronco fibroso, ¡tronco lleno de venas hacia esos huevos peludos… ooohhh!!, no dejo de escuchar a este gemir y suspirar, mientras me acaricia mi nuca, cabellos, oreja, cuello y hombros. Momentos que un ruido peculiar me hace mirarlo, llevándome la sorpresa al verlo con ese móvil mío en mano, móvil con el cual se ha puesto a hacerme fotos, fotos de como se la estoy comiendo.

Acabando por hacerme levantar de malas maneras, tira de mi por mis pelos y me tira contra un muro, poniéndolo contra la pared y obligándome a inclinarme, sacando mi trasero hacia atrás y quedarme a cuatro patas. Escupe varias veces sobre mis nalgas, llevándose con su mano esta hacia mi orificio a modo de humedecérmelo, sintiendo con dolor como me introduce dos de sus dedos… ooohhh!!. Acabando este por sustituir estos por su polla, ¡embistiéndome con fuerza y comenzar a penetrarme… ooohhh!!, comenzó a follarme sin compasión, comenzó a encularme vivo y sin que yo pueda hacer otra cosa que disfrutar, no quedándome otra que, con mis manos, separe mis glúteos a modo de facilitarle que me folle. No dejando de gemir y suspirar, no dejándome de insultar e incluso humillar, soltándome eso de…

  • “Uuuffff!! maricona, pedazo de culito tragón que tienes, no te imaginas el tiempo que llevaba sin follar… uuummm!!”.

Gitano que se regocijaba en la follada, no dejando de embestirme, no dejando de pellizcarme y tirar de mis pezones, llegando a palpar mi miembro, haciendo alusión a este por la falta de erección. Insultándome por ello y sugiriéndome que ante la falta de masculinidad, tendría que convertirme en una putita, ya que mi cuerpo y sobre todo mi coñito (orificio anal), estaba predestinado para ello. Pero este comenzó a acelerar, pues sus amigos no dejaban de meterle prisa, no dejaban de recordarle unas tareas que debían de acabar. En esas, yo le implore que no acabara dentro, sugiriéndole que la sacara y que deseaba lo hiciera en mi cuerpo o rostro, cosa que ente no dejo de decirme…

  • “¿Que dices puta?, yo acabo donde me sale de los cojones, ¡y quiero preñarte… eeehhh!!”.

Acabando en esos momentos, sintiendo como me rellenaba por dentro, sacándola de mi con la misma violencia con la cual me la metió, dejándome caer hacia el suelo, mientras él se vestía. Marchándose no sin antes amenazarme que la próxima vez en vez de ser uno solo, serían tres los que me follarían, asegurándome que debía de agradecérselo. Yéndose y dejándome ahí tirado, me quede descansando antes la brutal corrida, me quede cogiendo aire, levantándome y comenzar a vestirme, dándome cuenta que me faltaba ese móvil.

Antes de dejaros, debo de decir que acabe días después por hacerme unas pruebas por si acaso, pruebas antes a alguna infección que este me haya provocado, pero dio todo negativo, gracias a Dios. Bueno lo dicho, no me enrollo más, espero que os haya gustado tanto como a mí recordarla, espero vuestros comentarios. Mi email es… Jhosua 1974 @ Gmail . com, obviamente todo junto( jhosua1974@gmail.com )