Sin tener nada claro

Porque siempre lo que se hizo ayer, se recuerda hoy y puede afectar el mañana.

Hola (:

Soy yo, volví de nuevo. Quizás esta parte no la comprendan muy bien o no le vean mucho sentido por tanta contradicción, pero se lo van a encontrar. apuesto a que más de una persona se va sentir en "auto experiencia" con esto.

no es mi costumbre responder a los comentarios aunque a veces lo hago, no piensen que es porque no me interesa, simplemente los leo y analizo que piensa cada persona de lo que hago cuando escribo.

Muchisimas Gracias por todo el acompañamiento que siempre me han dado, y Disculpen si a muchas personas (por no decir que a casi todas) he dejado de responderle alguna vez, suelo tener un problema de concentrarme en una sola cosa. no siendo mas, lo dejo y de nuevo muchas Gracias. Un beso. Danii2.

  • no lo puedo creer – entró  Sofi al cuarto, a penas pude taparme y sentir como todo dentro de mi me daba vueltas, la culpabilidad se hizo presente y la vergüenza aún más, Laura sólo cubrió su cuerpo y se sentó sobre  la cama intentando hablar pero en realidad nada coherente salía de sus labios   - que carajos te pasa Joss? – Alzó su voz, se vino a mi y me dio un empujón que logró lastimarme – son unas descaradas

-       -Cállate – traté de que hiciera silencio

-       -¿Qué me calle? Vos entendes lo que sucede? Te acostaste con Laura!!

-       -ya sé Sofía!! – Cubrí su boca – mis padres van a escucharte

-       -¡no me toques! – me habló con indiferencia – y vos – se refirió a Laura – maldita la hora en que llegaste de nuevo – se alejó de mi

-       -Vení Sofi, no te vayas así

-       -Si lo que te preocupa es que vaya a decirle a Nat, quédate tranquila, eso queda en tu conciencia – dijo por último y salió, miré a Laura, asustada estaba, con su mirada fija en mi, se levantó y la abrasé, unas lágrimas bajaron apresuradas por mis mejillas, jamás en mi vida me había sentido tan mal, y sabia que ella estaba igual que yo, los tragos de ayer, las ganas y el amor habían ganado, habíamos cedido a los que por dos meses nos habíamos negado y restringido, y justo ahora… Sofi nos había visto.

-       -¿Qué pensas, Joss? – me preguntó Lau con su voz triste y un susurro  ahogado

-       -no sé – encogí mis hombros, llegó ese momento de silencio, fue tomando cada una de sus prendas y se fue vistiendo, la miré atentamente preguntándome muchas cosas sin poder encontrar las respuestas necesarias para sentirme tranquila, la puerta sonó un minuto después, mi mamá estaba llamándonos a comer, le dije que bajaría en unos minutos y después, Ella sonrió dulcemente y me abrasó.

-       -Lo siento tanto…

-       -¿Qué es lo que sientes?

-       -Arruinarlo todo, sentirme vulnerable contigo, Dañar su amistad, joderlo todo

-       -Shh, Lau… las culpables somos las dos. – la miré, su celular sonó y necesariamente no había que preguntar quien la solicitaba ahora

-       -Tengo que irme

-       -Si

-       -Fue lindo Joss. Me dio un beso que no esperaba, por alguna razón, después de lo que había pasado lo esperaba en mis labios, pero se despidió como si se tratara de una amiga, y al final yo no era nadie para cuestionarle eso

Abrí la puerta sintiéndome avergonzada, culpable y estúpida, caminé después de ella, me gustaba esa manera de  caminar, sin afán pero tampoco lento, con un taconeo que subía hasta sus muslos y resaltaba su cadera…

-       -¿vas a estar bien? – me dijo ya, en la entrada de la casa

-       -Si, lo estoy – la miré

Se despidió de mi familia, vi en sus ojos un rastro triste, sentí que no quería irse de ese modo pero tenia que hacerlo, debía hacerlo…

-       -Chao – dijo dando la vuelta

-       -Chao – le respondí, cerrando la puerta y con unas ganas infinitas por llorar.

Capitulo l

Y entonces estaba sentada mirando la ventana y observando como la lluvia aislaba la ilusión de una “buena tarde” aunque en realidad, para mi, no hay mejor tarde que estar en la cama un día de domingo  con la persona que amas debajo de las cobijas disfrutando de escuchar la lluvia caer con fuerza sobre el techo… Mariana estaba reclamándose a si misma por qué había perdido dos horas frente al espejo haciéndose ese peinado que sólo le quedaba una vez al mes así de perfecto, se detuvo frente a mi y me miró con ganas de golpearme al ver mi sonrisa

-       -lo disfrutas, no? – dijo sarcástica

-       -Disfrutar que?

-       -No te hagas Joss, te ríes de mi

-       -¿bromeas? – reí y se acercó

-       -Tonta – me empujó – ahora vamos a tomar un taxi!

-       -Caminemos

-       -Jajajaja

-       -Bueeeeeno, está bien. Taxi!

Me levanté de mi asiento, me miré al espejo y me di una última retocada, casi al salir mi madre estaba preparando un café caliente para tomar, y hablaba con su mejor amiga, me pregunté por qué Familia estarían ahora, Cual persona iría en la lista de sus pláticas, y es que en eso se les iba el tiempo…

-       -Nos vamos  má

-       -Llegaras tarde?

-       -no creo – le di un beso en su mejilla y esperé a que Mariana bajara, estaba hermosa, con su cabello, su rostro maquillado y esa silueta encantadora, sino fuera mi hermana…

-       -estoy divina, no? – sonrió, parecía una pregunta pero en realidad lo que estaba haciendo era incitándonos a responderle que sí.

-       -Te vienes con Joss Mariana – le ordenó mi madre en tono serio

-       -¡Mamá!

-       -ya hablé – tomé a Mariana de mi mano y la llevé conmigo

-       -no molestes más, acaso piensas quedarte de amanecida?

-       -no – cambió su expresión – adiós mamá – se despidió

Salimos de la casa y mi sorpresa fue al ver el carro de su novio ahí, entonces me respondí el por qué quería quedarse hasta tarde

-       -no digas nada, quieres?

-       _mariana, es en la fiesta, ni se te ocurra…

-       Ya sé, ya sé – me calló – “ni se te ocurra perderte con ese vago” ja

-       -nos vemos allá

-       -vamos Joss, no seas idiota ¿Cómo vas a irte en taxi si Leo está acá?

-       -eh, no le hablo a “Leo” además, no pienso tocar nada del imbécil que te hace llorar los 8 días de la semana las 25 horas del día, vete con él

-       -Joss – me miró suplicante – no me hagas sentir mal

-       -hablamos allá Mari

Y  me subí a un taxi, en realidad la tarde estaba bastante fría, mi celular vibraba como loco, todos mis amigos me llamaban para confirmar que si fuera, en especial Nati… me sentía tristemente y como nunca, la peor persona del mundo, ella me llamaba a mi y yo con ganas de llamar a su novia…  en que momento Laura se había metido otra vez, de nuevo en mi? Por que no fui capaz de superar lo pasado con ella? Siempre que hubo  algo fuerte entre dos personas… puede volver a resurgir con más intensidad…

Me recosté en la ventanilla y pensé en la reacción de sofí, a puesto a que ni me quería ver llegar, ni siquiera le encontraba un sentido a irme ¿Qué pasaría? Nati con Laura y Sofi mirándome mal y dando sus directos sarcasmos a la mierda que era ahora yo, para ella.

-       -Por acá ó más adelante? – dijo el señor, mirándome por el retrovisor con una mirada simpática

-       -Si, acá. – saqué dinero y le pagué, al bajarme pude notar que no sólo era una “pequeña” reunión como me lo había asegurado Mariana, estaba a reventar, mucha gente de la universidad estaba, hasta del colegio… muchos conocidos y muchos auto invitados también.

Saludé a la gente de entrada y vi a lo lejos a Sofi, me acerqué a ella sin que lo notara y la abrasé delante de toda la gente que había en el lugar, no correspondió a mi abrazo como solía hacerlo siempre pero tampoco me dejó con las manos estiradas, le di un sonoro beso en su frente y halé su cachete derecho – podemos hablar vos y yo? – le dije pasito, sonriéndole a los demás

-       -tenemos de qué hablar? -  alzó su ceja – ándate de mi vista

-       -vos me estás ordenando a mi? – reí, halé su mano y cuando me disponía a caminar llevándomela a ella, Nati se me atravesó

-       -pero mira  quien llegó a la fiesta ¿Dónde te habíais metido mi Joss? – me abrazó – te he llamado como loca y no contestas, te pasaba algo?

-       -Nati, luego te cuento – no fui capaz de mirarla a los ojos, quería ponerme a llorar y pedirle perdón por defraudar su confianza y acabar con nuestra amistad – estás hermosa – le dije sinceramente esquivando mis lagrimas, en esas miré como Sofía dudaba de mi reacción

-       -vos también hermosa – pasó su mano por mi hombro – y salud – me dio una copa – por las tres – y brindamos, miré a todo mi frente a Lau, estaba mirándonos con una pequeña sonrisa tímida,  vi en su mirada la misma expresión que de seguro tenia yo, se sentía mal… y podía entenderlo, si Nati era mi amiga, ahora ella… que tenia que compartirlo todo… -saludaste a todos, ya?

-       -no, acabo de llegar

-       -Vení te presento unas amigas – me dijo sonriente, terminé de tomar mi copa y tomé a sofí de mi mano

-       -si te incomoda que esté acá…

-       -Cállate – me interrumpió

Y entonces temí acercarme, más que nada porque, quería correr a ella y abrazarla, susurrarle un montón de cosas y decirle que la extrañaba, quería tomarla de la cintura y no sé, proponerle escaparse conmigo, pero la realidad me golpeó feo, reaccionando bruscamente y tener que ver como un beso suyo y de Natalia se unía en frente de mi

-       -sos una tonta Joss – dijo Sofi -  no sé que le ven, hay veces que lo que viene de adentro es mas importante que lo de afuera – la miré, queriendo  explicarle muchas cosas, queriendo decirle que, esto no era físico ni una simple atracción, pero ella no me iba a entender porque simplemente no comprendía el sentido del amor

-       -hay veces no Sofi, Siempre es más importante lo de adentro que lo de afuera.

Y sonreí, saludé a Laura quien trató de alejarse de mi cercanía, noté su  inconformidad y después de presentarme ante unas amigas de Nati, caminé lejos de ella.

-       -oye, tú – escuché una voz masculina, volteé y lo miré – cuando vas hablarme?

-       -Cuando dejes a mi hermana

Sonrió – he cambiado, lo estoy intentando

-       -el que es, es – le dije de frente – vos sos un imbécil, un cobarde, y un huevón y no creo que eso cambie

-       -hay cuñada…

-       -ahórrate malos deseos, y haz como hago yo; como si no existieras – le dije cuando Mariana llegó.

Y en el segundo piso del lugar, me di cuenta que estaban mis compañeras de universidad, me fui en dirección allá y comencé a tomar, a tomar apresuradamente, ahora comprendía que tenia un pequeño problemita con el alcohol, pero es que, parecía que el problema era de toda la gente con la que me rodeaba, Rosaura, una rubia simpática extendió su mano para invitarme a bailar

-       -Vení, Bailemos – me levanté, en realidad no sonaba una canción para bailar entre dos, solo un tema movido y envolvente, me tomó de la cintura y me acercó a ella, entonces sonreí de ver sus ojos clavados en mi, y aprovechando los tragos que tenia en su cabeza para coger el valor de tener tanta coquetería de su parte, en otra situación sólo se habría atrevido a saludarme. – vos siempre tan hermosa Joss

-       -Jajaja, me muero por verte mañana, a que te cubrirás el rostro todo el día para no verme la cara – se echó a reír conmigo

-       -Quizás, Quizás, pero hay que aprovechar que hoy no

-       -Quien te llevará a casa así?

-       -Sí quieres, te vas conmigo ¿No?

Me giré, preguntándole a Susan lo mismo pero reaccioné dándome cuenta que no sé sabia bien quien carajos iba a llevarlas a todas, Nati entró de la mano Con Laura, me miraron las dos y se rieron del comportamiento de Ross, en realidad es una mujer muy seria y verla bailando así y tratando de no se que conmigo, era chistoso. Pero fue ahí donde todo pasó, Laura me llamaba con sus ojos, Nati se fue abrazar a las demás y ella se quedó ahí mirándonos…

-       -Siempre eres así, desde que te conocí…

-       -Así, cómo?

-       -Es tan difícil de fijarse en alguien normal?

Reí – a ver borrachita, tu sabes de que me estás hablando hermosa?

-       -Claro!! – colocó sus manos en mi cuello – es tan Fácil de ver a tu alrededor, pero es casi qué imposible cuando tus ojos sólo quieren ver una sola cosa, Mira Joss, vos siempre te has fijado en la mujer más llamativa, la más tierna, la más hermosa, la más difícil de conseguir por que siempre te gusta lo “mas” y te niegas a ver que siempre hubo alguien que no era la “más” pero que tampoco era la menos; esperando a que tu la vieras… - se tomó otra copa – te has preguntado cuantas mujeres has dejado ir y ni siquiera has notado su presencia?

-       -Joss Vámonos – exigió Sofi en voz alta, callando a Ross y llamando la atención de las demás

-       -Tan pronto?

-       -Me siento mal – y vi la expresión de malestar a causa del alcohol en su rostro – vámonos, si?

-       -No, no, no Sofi – se metió Nati – deja la tontería, Si la estamos pasando bien

-       -Nati, vos está Full, yo ya no doy más – me miró de esa manera en la que no se podía decirle que no – me llevas Joss?

-       -No – tomate un efervescente y se te pasa Sofi, pero por que estás así hoy? Alguien no te acompañó anoche o qué?  - Y una risita salió de mi

-       -Que chistosita Natalia… -

-       -Vení hermosa, cuando nos volvemos a ver todas? Yo trabajando, vos estudiando, Joss trabajando

Entonces Sofía se quedó en silencio, fue corriendo al baño, Rosaura se preparaba para otra canción, pero yo en cambio me senté, sin darme cuenta cómo Laura terminó haciéndose al lado mío, no sabia bien que era lo que me atraía a mirarla, a sentirme tan vulnerable, a parecer una idiota sintiendo como todo se movía por dentro, pero era claro que sentía algo fuerte…

-       -Estás divirtiéndote?

-       -Si y vos?

-       -Si, pero al parecer no como tú

-       -Te ha dicho algo Sofi?

-       -Ja –sonrió – hace muy bien su papel cuando se trata de actuar como si yo no existiera

-       -Menos mal, es bastante sarcástica cuando se lo propone

-       -Si, lo sé – me tomé un tequila que me hizo aguar los ojos, yo en cambio, a comparación de mis amigas, era bastante mala para el licor a pesar de seguirles el ritmo tomando, siempre me caía mal y al otro día no aguantaba la resaca, Nati estaba bailando con Susan, Laura las miró un momento y yo me sentí estúpidamente mal, ella estaba pendiente de su novia y yo pendiente de ella… - Joss

-       -¿qué?

-       -No tomes tanto… ¿si? No quiero verte como todos aquí

-       -no molesto cuando tomo, no soy así

-       -de todos modos, no quiero…

-       -¿por qué? – bajé mi mirada a sus labios sin poder disimular algo

-       -por que eso se prestaría para muchas cosas…

-       -¿Qué cosas?

-       -hay alguien acá que quiere llevarte a su cama – y seguido de esto, mis ojos se fueron en dirección a Ross que en este momento nos miraba – ves?

-       -No, yo no estaría con ella…

-       -¿Por qué? Es linda

-       -no es suficiente para mi, acostarme con alguien por qué sí, no me hace sentirme más, además se encargaría de decirle eso a todas las mujeres con las que me vea después

-       -¡pero cómo la conoces!

-       -Algo – encogí mis hombros y de nuevo miró hacia dónde Nati – tranquila que Nati te respeta – y me miró

-       -no es por eso

-       -no tienes que explicarme, eso hace toda novia

-       -No Joss, es porque

-       -Ya, tranquila

-       -pero por que te molestas?

-       -por que soy una tonta Lau, porque para lo que vos es atracción ó aventura, para mi es enserio – y vi la rabia en sus ojos

-       -a mi me respetas

-       -Entonces hazte respetar, si tanto la quieres, no andes por ahí estando con alguien más – y me levanté.

Salí de ahí sin despedirme, sintiéndome molesta conmigo misma, antes fue mi culpa, podía reconocer eso, yo estaba joven y Laura quería las cosas muy enserio, apenas estaba descubriendo todo en mi, y después… ese maldito beso, mi perdición, lo que acabó con nuestra historia; me besé con otra mujer… ella se fue lejos y nunca pude volver con ella, así me hubiera arrepentido todo este tiempo. Y pensé que todo había pasado, pero… verla de mano con mi mejor amiga simplemente me destruida, más cuando ella me daba pie para sentir algo más, todo era tan del aire… yo no soy tuya, no soy de nadie… ese era el lema de todos ahora… solo una oportunidad para llegar a la cama y hacer esa noche especial, pero al día después, actuar como si eso no significara nada.

Salí de ahí a paso rápido, subí a un taxi y cuando menos lo pensé, mi hermana llegó gritando al conductor, pidiéndole que esperara un segundo.

-       -no digas nada Joss – y así evitó que le preguntara que tenia, se recostó en mi brazo y nos fuimos en silencio hacia la casa.

Capitulo I

Parte II

-       -Joss!!!!!!!!!!!!!!

-       -Mariana estaba durmiendo!! – Dije molesta – dame 30 minutos más

-       -Es que te buscan!!

Hice una expresión de desagrado, miré el reloj y me pregunté a quien se le ocurría venir un Lunes principio de semana a una casa a las 10 de la mañana!! La puerta se abrió, lo primero que vi fue un jean de color blanco, unas sandalias de playa, una camisa en V que le quedaba algo suelta para su silueta, una tira que le bajaba por su brazo y se veía algo del top de color rosa, unos lentes de sol y su cabello natural suelto.

Y ahí estaba, la mejor vista para despertar en un día así, me levanté de la cama y no duré 5 segundos en esa posición, me dio una cachetada tan dura que logró sacarme Lágrimas y me senté en la cama reaccionando

-       -¡¡pero que carajos te pasa!! – Le grité - ¡¡estás loca!! ¡¡Estás borracha!! ¡¡Laura!!

-       -para que aprendas a respetarme Joss – susurró con su voz suave, la mejilla me seguía doliendo, nunca jamás nadie había hecho eso – Joss? – me miró preocupada – te pegué muy duro? – preguntó en voz suave, me reí por dentro, llegaba furiosa a pegarme y ahora me preguntaba eso

-       -no, nada – dije sarcástica – algo más que decirme?

-       -¡eres tan odiosa a veces! – se dio la vuelta, me levanté de afán, la tomé del brazo y no le di tiempo a reaccionar, la besé con fuerza, con Rabia, pero no pude seguir haciéndolo por mucho tiempo., tener ese tipo de contacto con ella no me daba para ser brusca, la abrasé, sus manos se ubicaron en mi  cuello, un suspiro salió ahogado, sentí mi corazón latir a mil, nos separamos al mismo tiempo y la vi a los ojos

-       -Lau… - tuve que aguantar las ganas de llorar

-       -Que pasa? Te sigue doliendo?

Me reí sin pensarlo – te dolió más a ti esa cachetada que a mi!! – bajó su cabeza

-       -Perdóname, ayer te faltó decirme perra

-       -no digas eso… Perdóname, es que me…

-       -te pusiste celosa? – sonrió

-       -¡no! – negué a la defensiva, tomó mi rostro, se sentó en mis piernas y me besó

-       -¿segura? – preguntó de la manera más tierna

-       -Si – acaricié su rostro – Laura

-       -dime – me miró a los ojos – pasa algo?

-       -Si

-       -¿Qué es?

-       Suspiré temiendo su reacción – Te amo – le confesé, se quedó mirándome fijamente, no dijo nada, mi mamá tocó a la puerta, nos separamos y yo me sentí mal de haber confesado eso por primera vez y no haber escuchado un “yo también”

-       -Laura – saludó mi madre – no sabia que estabas, como estás?

-       -Bien si señora, y usted?

-       -Gracias a Dios, de maravilla – sonrió – pasa algo? – preguntó cuando me miró a mi, Laura también lo hizo

-       -Oh no, nada mamá, acabo de despertar…

-       -te venia a decir que no llego hasta el atardecer, está todo bien?

-       -Si claro, llevas el celular?

-       -Ah se me olvidaba – me sonrió – ya lo empaco – me dio un beso – pórtate bien, te amo

-       -yo también – le dije duro y a propósito para que Laura lo entendiera

Y salió, me senté en la cama y escuché el sonido de la puerta cerrarse, la miré, estaba hermosa, tanto, que era de esas veces en las que hay una persona tan bella que no eres capaz de poder mirar a otro lugar, de esas veces en las que no te importa disimular… ella también calló, prendí el televisor, busqué palabras pero me sentía mal, ya estaba comprobado, me estaba enamorando de ella y ella amando a otra, a mi amiga.

-       -Joss – intentó decir algo – yo…

-       -Sólo dime una cosa, si?

Se quedó en silencio

-       -¡no! Tu me estás confundiendo – expresó con tristeza – tú me dejaste, me engañaste, mientras me fui…

-       -mientras te fuiste te busqué, intenté verte y arreglar las cosas, pedirte perdón, pedirte solo que me escucharas, siempre fue un no – me defendí

-       -ahora es tarde, no me salgas con que me amas…

-       -y que buscas entonces? Un acoston?

-       -¡¡No!! Me voy

-       -no seas cobarde Laura, dime que quieres – le pedí – esto no está bien cuando hay otra persona en el medio, no está bien cuando esa persona es Nati, no ella…

-       -por que no dijiste eso cuando te besaste con ella? – lagrimeó

-       -A la mierda!! ¡lo jodí! Y lo estoy jodiendo ahora con Nati – me levanté – esto tiene que acabarse

-       -¡Si! – dijo igual de exaltada que yo – Nati se ha portado bien conmigo

-       -Me imagino! – alcé mi voz, y fue cuando volví a caer en su mirada, me abrazó con tanta ternura que me fue imposible rechazarla, se acercó a mi y sin proponerlo nuestros labios se unieron, apreté con fuerza su cintura, mordió sutilmente mis labios y después, sólo me dejó

-       -Lo siento Joss – dijo finalizando su suspiro – no está bien, Nati se ha portado bien conmigo

La miré, aceptando su verdad, su motivo y su razón – estás enamorada de ella?

-       -no lo sé – encogió sus hombros – lo único que tengo seguro, es que me dolió mucho lo que me hiciste, y yo estoy haciéndole algo peor a una persona que sólo me ha hecho sonreír

Y ya no dije más, me sentí mal por todo, me sentí mala persona, era mi amiga la que estaba en el medio y la que se estaba llevando el peor papel, no podía hacer eso más, no era justo. Laura salió, pasó toda esa semana en la que no supe nada de ella, le envié un solo mensaje para saber como estaba y jamás lo respondió.

Hoy tenia que terminar un trabajo por el que me habían pagado, llevaba dos horas sentada frente a mi computador sin saber que más ponerle de diseño a la tarjeta que tenia que elaborar, llevaba 3 cafés, sentía el peso en mi espalda y tenia dolor de cabeza, miré mi celular y me pregunté de quien esperaba llamada, si la única que quería que me llamara no me iba a llamar… después, solo vi en la red social un beso de las dos, se veían bien, me alegré por Nati, era la primera vez que la veía tan enamorada, tan satisfecha con alguien, y también era la primera vez en la que no decía que le veía algún detalle desfavorable. Había escogido bien, Laura era la mujer para cualquier persona.

-       -y vos? Vas a seguir ahí todo el día?

-       -¡Sofi! – me levanté con una sonrisa, intenté pasar de ventana pero fue tarde porque ya la había visto

-       -Joss…

-       -ya, no digas nada

-       -Marica, pero si sos una tonta! Preciso en este momento están en casa de Laura, presentándola en familia a Nati

-       -En serio?

-       -es de verdad, no seas tonta. Vení salgamos, hace un bonito día

-       -ya no estás molesta conmigo?

-       -Pues, Seguís pareciéndome una Hija de…

-       -entendí – la interrumpí y me abrazó –

-       -Sólo acuérdese Joss que la amistad va primero que un acoston

Ella no me dejó hablar, no me permitió explicarle que no era un acoston…

Capitulo I

Parte III

Sofi llevaba tres canciones seguidas con el tipito ese, me pregunté desde cuando se había vuelto tan heterosexual mi amiga, y es que no era por nada, pero además de que me costaba bailar más que nada, por que no sabia muy bien, tampoco me salía eso de bailar “pegadito” con hombres… oh no, no era lo mío.

Me entretuve viendo esos pasos descoordinados, el chico queriendo besarla y ella riéndose en su cara, a lo mejor cómplice consigo misma por prender a un tipo que estaba lejos de imaginar que a ella le gustaba exactamente, otra cosa en la vida real y en la cama.

La misma niña de la barra seguía mirándome, aunque en realidad me gustaba más la bar-tender, era mi prototipo, y es que yo si tenia un prototipo de mujer, Sencilla; solo pedía eso.

Me gustaba la sonrisa con la que atendía a todo el mundo, esa expresión simpática de atender a los pedidos de los clientes, sus ojos seguían paseándose disimuladamente por mi dirección, tomé otra copa tequila y entonces le sonreí, pero la mujer que estaba en la barra pensó que era para ella, lo vi porque también me sonrió.

-       -Yo si sabia que ese amor te duraba poco – dijo Sofi llegando

-       -que dices?

-       -estás coqueteando con la rubia!

-       -Naaaaah, que hablas tu? Si vos estás que te vas con el moreno – y una gran carcajada salió de mi boca, no pude con el comentario y con la cara de Sofi al escucharme, quiso responderme pero al reírme con tantas ganas, no pudo, así que sólo pudo reírse conmigo de ella misma.

-       -puedo dormir contigo esta noche? – y me hizo esa mirada particular, que la tomé en doble sentido, era el momento de sacar a Laura de mi y enfrentar mi mundo real

-       -claro – asentí. Nos tomamos lo que quedaba de la botella, ella salió a tomar el taxi y yo, sólo me despedí de la mesera. Salí de ahí y me di cuenta que había tomado lo suficiente para sentirme ebria… de nuevo… y mareada, subí al taxi con Sofi y no fueron dos minutos de camino cuando sin explicación, siempre que tomábamos, simplemente nos besábamos.  Sólo pasaba en ese momento, en el que las dos sabíamos que le pasaba a la otra, solo esa noche y al día después, todo era cuestión de olvido…

A mi, me gustaban sus besos, Por mas sensual que Sofi fuera con la gente, conmigo solo era ternura propia, acarició mi rostro y yo quise algo más, bajé mi mano a su pantalón, y acaricié sus piernas, olí su cabello y luego le dije que la quería. Nos separamos un momento a tomar aire y vi la mirada inquietante del conductor, me pregunté que estaría pensando en este momento… Sofi me llevó a ella de nuevo, nos separamos sólo cuando supe que estaba frente a mi casa

-       -Oye, Joss

-       -ya Vení, o te arrepentiste?

-       -pero mira – me dijo asustada

-       -Sofi, Vení –  la tomé de la mano, le pagué al señor y le estampé un beso en sus labios – entremos – y sólo vi ahí, a mi madre y mi familia, a Mariana sentada en las piernas de su novio, y a Nati sonriéndome de mano con Laura, quien precisamente no tenia una sonrisa en sus labios.

-       -¡¡Feliz Cumpleaños!! – me dijo Sofi Gritando, me abrazó efusivamente y luego me llevó a casa, todo me daba vueltas, mi fecha especial se me había olvidado, todos me habían visto darle un beso a Sofi y de seguro ya darían por hecho mis familiares, que era la primera novia que llevaría a casa, Y Laura… con esa miradita de querer entender tantas cosas que ni siquiera yo misma podía explicar…C