Sin Medor Distancias 8

De un tirón la abalance sobre mi, empecé a besarla desesperadamente, buscaba su cuello, dulce, desnudando su fina piel, ella solo se dejaba...

-          interrumpo algo?

-          Para nada, pasa…

-          Que tal tu día?

-          Pues algo pesado, mucha gente, cosas… gritos….

-          Comiste algo?

-          pues no me ah dado tiempo

-          te molesta si te preparo algo rápido?

-          Pues vale, esta vez no te diré que no por que si traigo hambre.

-          Conozco tu estomago, y pues no m molesta para nada, era una de las cosas que mas me gustaba hacer, cocinar para ti…

-          Alicia… gracias…

-          No lo agradezcas, ven vamos a la cocina.

Ella siempre estuvo para mí, no importa el momento, todavía me cuestiono por que deje de amar a una persona como ella, me preparo mi comida preferida, comí hasta saciarme, mi Hijo estaba inquieto mientras Alicia y yo lo veíamos jugar, de vez en cuando se cruzaban nuestras miradas, ella es increíblemente hermosa, su cabello corto resalta el punto mas expresivo de su rostro, los labios… un movimiento rápido y me apodere de ellos, sus manos sostenían las mías, ese sabor que revivió en mis memorias de días y noches en vela enamorada de sus labios, del sabor de sus tibios besos resucito en mi interior de manera extraña, con un a gusto agridulce y una punzada al estomago, me separo de ella con la mirada un poco aturdida y mis ojos desorientados, mi rostro denotaba vergüenza y ella solo se limito a dar una carcajada sonora.

-          hey tranquila solo fue un beso.

-          Ali lo siento, de verdad si te moleste yo…

-          Para nada, ah sido lindo, si no lo hubieses hecho tú lo hago yo.

-          Bueno si tu lo dices, es que… es que no se me entraron esas ganas horribles, tu ya sabes

-          Si ya se, Sara, en realidad vine por que temprano llego esto…

-          A ver, que es.

-          Los papeles de divorcio… llegaron de España.

-          No sabia que habías tramitado esto

-          Que sentido tiene estar casadas aun.

-          Déjalos allí los reviso luego…

-           Si mañana vendré por ellos Me llevas a casa?

-          Claro… vamos.

El silencio sobreabundo durante el trayecto, al bajar solo se despidió con un extraño adiós, me marche rápido y me senté a revisa los papeles, no quiero hacerlo, ella me ama lo siento en sus besos. Se que ella no podrá llenar el vacío que dejo Jessy pero no quería pasar mi vida entera extrañando a alguien que ni siquiera se si existe… yo e el fondo la quiero y la extraño, pero no quiero que ella sienta que estoy muerta e vida por la partida de… mejor ni nombrarla, no la mencionare mas nunca, a lo mejor si me lo propongo las cosas se den con Alicia, eso seria bueno para Miguel, y hasta para mi, nadie me conoce como ella… tome con ira la carpetilla que contenía los documentos y la lance en la mesa, tome mi móvil…

“Ali, pasa temprano por los documentos”

Me fui a dormir, tarde un poco en hacerlo como de costumbre…

Me encontraba en un lugar vacío, como en una especie de auditorio, sentada en medio de aquella multitud de puestos vacíos, muchas formas incorpóreas se paseaban alrededor de mí, risas extrañas y muchas voces conjugadas en una, no llegue a relacionar ninguna de ellas y mucho menos entendía lo que decían… me estaba asustando hasta el punto de querer correr… era una extraña pesadilla hacia mi lado derecho sentada y serena apareció ella, sin hablar, me tomo de la mano y me dijo algo que no alcance a escuchar, a pesar de las miles de voces y el pánico solo me limite a preguntarle porque había desaparecido así de mi vida, pero nunca me respondió, trate de tomar su mano pero en ese instante su silueta se desvaneció como la neblina de una noche fría… desperté… me di un baño, nunca había estado de pie un sábado tan temprano, pero el suelo lo ameritaba, mientras desayunaba tocaron, era Ali, había olvidado que vendría temprano.

-          Bien, vengo por los papeles, voy un poco retasada.

-          Si pasa, aquí están en la mesa…

-          Sara esto no esta firmado aun…

-          Si lo se, y no los firmare…

-          Espera me hiciste venir hasta acá para…

-          No me quiero divorciar…

-          Sara tú me dejaste, no tiene sentido ser tu esposa aun.

-          Tú quieres divorciarte.

-          No juegues por favor.

-          No juego. Quieres divorciarte?

-          Con un demonio sabes que no, sabes que te amo, y sabes que muero por ti, pero tu me dejaste para ir detrás de una mujer que ni siquiera se de donde diablos salio y eso me dolió, tu no me amas…

-          Yo no eh dicho eso, Ali se que cometí un error gravísimo, que por estupida destruí lo que teníamos, pero no mas, no quiero estar sola, quiero que estés aquí en nuestra casa, con nuestro hijo, Ali dame una segunda oportunidad.

-          Sara por dios…

-          Yo te di a ti una oportunidad recuerdas? Creo que merezco otra chance.

-          Yo estaba olvidándote, tenias que aparecer y decirme eso, lo dices solo por que esa mujer no se que te hizo que te dejo tan mal y yo no quiero cargar con eso…

-          No menciones más a esa mujer, ya no significa nada para mí, ella fue un error, fue un karma…

-          Yo así no quiero, sigamos como estamos, como amigas, por Miguel.

-          No, no me da la gana, no quiero, quiero aquí a mi mujer y a mi hijo, tú me amas y yo me equivoque, yo te extraño….

La tome de la cintura y casi obligándola la estruje contra mi cuerpo, besándola con rabia y deseo, ella quería rechazarme pero puse en practica la forma en la que ella le gustaba que la besara, introduje mis manos e su espalda clavando suavemente los dedos haciendo que se erizara toda, no tardo en ceder, era ella quien me conducía… no tarde en recostarla al sofá de la sala y empezar a desvestirla, con caricias burdas y toscos besos, sentada sobre mi, acariciando la desnudes de sus senos erguidos por la humedad y la tibia temperatura de mi lengua, senos confundían las manos entre las prendas que decoraban el desordenado lugar…  nuestras pieles hicieron el primer contacto desde hacia mucho tiempo, no quería que fuera tan abrupto, nos costo llegar a la habitación, pero una vez que llegamos al borde de la cama todo fue distinto… me recosté sobre ella, en su espalda y la recorrí co manos y labios, ella solo se abrazaba a la almohada y me deleitaba con el sonido de su respiración y pequeños jadeos, aun provocaba en mi ese magistral deseo de siempre, sentía ganas inmensas de hacerla mía, como lo hacia al principio una brusca vuelta y su abdomen liso estaba ante mi, tentando a mis besos, nuestras lenguas se reconocieron y deje correr mi mano hasta la humedad de su sexo ansioso, su humedad me facilito las caricias, mordia mi labio con desden su mano guiaba la mía mientras me desquiciaba con el movimiento que sus caderas efectuaban llenándome de un éxtasis magistral me incorpore sobre ella, fue deleitante percibir el calor de su intimidad, mi lengua le estaba dando ahora la satisfacción mas grata, su cuerpo temblaba entre mis manos, quería que sintiera lo que me estaba haciendo sentir así que lleve su mano hasta mi interior ambas estábamos conectadas a la misma sensación, al mismo frenesí, acompasamos gestora besos y movimientos hasta el punto de la locura… me tarde un poco mas que ella en legar al final pero eso no le impidió hacerme llegar al fin del recorrido… la tome entre mis brazos bese su frente…

-          No quiero que me dejes…

-          Yo no te quiero dejar…

-          Quema esa mierda

-          Lo hago si me lo pides.

-          Te lo estoy pidiendo, quémala, y vuelve aquí a tu casa, conmigo, prometo que todo será distinto.

Ese mismo día fuimos por sus cosas, realmente por las cosas que pudimos traer y tal como se lo había pedido quemo los papeles, sinceramente pensé que seria mas difícil, pero no lo fue, estaba feliz, tenia a mi familia de nuevo, como pude haber dejado todo por algo que… mejor ni recordarlo… mi vida tenia que ser distinta debía enterrar todo lo que me recordara ese viaje y a ella… prometí a mi misma jamás volverla a nombrar y tratar de no pensar ni siquiera, mi vida ahora seria Miguel y Ali…

Meses después…

La realidad puede ser a veces algo de lo que nunca podremos despertar, es algo que si no lo aceptas se encargas de matarte en vida, mi realidad era que seria feliz e infeliz hasta el día de mi muerte, después de este tiempo solo quería aprovechar esas fracciones de alegría que me daba el tiempo…

-         Feliz cumpleaños amor! –dijo tratando de sacarme de entre las almohadas-

-         ¿Qué hora es?

-         Hora de que despiertes, Ummm... nos demos un rico baño y vayamos a casa de tu madre, ah llamado tres veces las ultimas dos horas.

-         A mama nunca se le escapa nada… reina debo ir a la oficina…

-         Vamos Sara, es sábado y es tu cumpleaños no nos hagas esto, lo prometiste amor.

-         Si lo se pero solo paso por un contrato que olvide ayer eso es todo, míralo por el lado bueno, les daré tiempo q ti y a mama para que hagan de las suyas, prometo que en menos de una hora estoy con ustedes.

-         No se como le haces para convencerme, ah de ser la forma en la que (beso) mueves (beso) los labios…

-         Que tal si nos vamos a dar ese baño que dijiste primero eh?

-         Uyyyy! Camina que pa luego es tarde.

La forma justificada que solíamos pasar en el baño eras siempre motivo de nuestras risas, sin embargo y a pesar de los pesares mi vida era casi perfecta en ese instante, deje a Ali y al bebe de paso en casa de mama y Salí de volada a la oficina, trate de hacer todo rápido pero de repente Kim me intercepto de salida

-         Feliz cumpleaños amiga!- Dijo guindada de mi cuello-

-         Kim!! Que haces aquí?

-         Ajajá pues lo mismo que tu, me toco trabajar hoy

-         Pues eh yo solo vine por el contrato de explotación ya voy de salida

-         Celebraras a lo grande?

-         No, no nada de eso un almuerzo con mi familia.

-         Toma… - me dio una pequeña cajetilla envuelta a la perfección en un papel morado resplandeciente-

-         Que es?

-         Feliz cumpleaños

-         Espera no… Kim! –me ignoro-

-         Recuerda el viaje a Argentina, el vuelo es a las 8 de la noche, no llegues tarde.

Antes de yo poder responder su esbelta figura se desvaneció a través del cristal de la puerta, mientras iba de salida abrí la curiosa cajita, contenía un pulserilla muy fina, con un dije de un hombre sosteniendo una balanza, el signo libra, a ella siempre le gustaron esas cosas de los astros y el tarot todo esa Bla Bla del cosmos, me pareció un lindo detalle lo colgué de mi mano enseguida… la llegada a casa fue mas agradable de lo que espere, mis abuelos habían llegado de México y mis abuelos de Italia, cabe destacar que en ese instante era la mujer mas feliz de la tierra, me asombro un poco el hecho de ver a mi nona cargando felizmente a Miguel, a ella le costaba mucho aun aceptar mi sexualidad, y siempre le cuestiono a mi madre el hecho de que ella lo aceptara tan fácilmente, pero desde los 15 me mantuve firme en mi condición sexual y jamás me deje intimidar ni amedrentar de nadie.

-         Nonna!, estas hermosa como siembre.

-         Tu siempre de zalamera, oh mira esto es una hermosura de ciccio, me gusto mucho el nombre que le pusiste, e un Piccolo Molto bello.

-         Si, tu y yo nos parecemos mucho, incluyendo la pasión por el arte de Miguel Ángel, quiero que mi hijo tenga un poco de mis raíces.

-         Ragazza, eso es imposible, no lleva tu sangre.

-         Nonna, vamos no empecemos, olvida de una vez por todas por lo menos en  mi caso esos principios retrogradas, además estoy  feliz de que estés aquí hoy.

-           Si tienes razón, entonces déjame disfrutar un rato mas con esta hermosura, lo estoy sintiendo mio.es tuyo Nonna, es un Pestalozzi…

-         Si, solo espero que no tenga tu temperamento, si hay algo que me agrada de esa muchacha, tu… tu amiga, es ese carácter soberbio e imponente, vaya si que no eh podido intimidarla ni un poco.

-         No es mi amiga nona, es mi esposa.

-         Si como sea, a todas estas, estoy un poco molesta contigo, no has ido con tu padre estas vacaciones a casa, por que disque te fuiste de vacaciones a no se donde, eh solo espero que te hayas divertido

-         No quiero hablar de ese tema – dije levantándome rápido-

No quería hablar de ese tema, con nadie, en mi casa estaba terminantemente prohibido hablar de ello… la tarde avanzo, y entre copa y copa se me subió lo charra a la cabeza y me entone, antes de ponerme peor nos fuimos a casa, Ali condujo y yo dormí en el trayecto, me costo bajarme del auto y caí en el sofá, fue cosa de la borrachera, lo se y también de la rabia, tenia a Jessy en la cabeza, Ali me ayudaba a mudarme de ropa, y en ese instante la visualice, a ella, esa no era Ali, era Jess era su rostro marmóreo y era una figura inconclusa pero la cual tenia color, y temperatura, sentía piel debajo de mis dedos…

-         ¿Por qué?

-         Eh? Sara… estas bien amor.

-         No, no estoy bien, te necesito.

-         Amor aquí estoy, no me eh ido.

-         Te amo.

-         Yo también…

De un tirón la abalance sobre mi, empecé a besarla desesperadamente, buscaba su cuello, dulce, desnudando su fina piel, ella solo se dejaba, y me besaba, no podía abrir los ojos, apague las luces y me dedique a su cuerpo,  se dejo caer sobre mi, hervía mi sangre al recordar tanto amor en mi pecho, sus cabellos enamorándose de mis hombros, mi piel brillaba de deseo pero no por esa con la que hacia el amor… quería curar el dolor idealizando en esa casi perfecta mujer a una que ni siquiera se si existe, me aferre de sus afiladas caderas tratando de acompasar sus movimientos con los míos, me conecte con el éxtasis que me daba su cuerpo, y no tarde en explotar junto con ella, reino un posterior silencio, solo se escuchaban nuestras respiraciones aceleradas, fue allí cuando volví a la realidad, estire el brazo y encendí la lamparilla  ella se inclino estando aun sobre mi y me beso, trate de no cambiar mi expresión de satisfacción , nos dimos un baño y regresamos a la cama, me abrace de su espalda acomodándola entre mis brazos como todas las noches, jugueteando con sus cortos y finos cabellos alborotados hasta hacerla dormir…

En la mañana despertamos, saque al niño a caminar, cuando regrese ella servia el desayuno, debía preparar mi equipaje para el viaje a Argentina…

-         Ya volvimos amor.

-         Ven a comer que se enfría, Sara tu celular lo dejaste olvidado de nuevo, no tiene batería.

-         Demonios, es cierto ya lleva mas de 24 horas apagado

Cuando lo encendí llegaron varios textos y tenia un mensaje en la contestadora, me senté a desayunar mientras lo escuchaba… casi me ahogo cuando reconocí la voz.

“ pensé mil veces para llamarte, y que suerte que solo puedo dejarte un mensaje, escuchar tu voz seria peor por que colgaría instantáneamente, Feliz cumpleaños Mi Amor, desearía que las cosas hubiesen sido de otro modo, pero era lo mejor para ti, Te amo y  te amare siempre”

Quede petrificada… no parpadeaba, no musite ni un monosílabo, clave la vista a la mesa estaba desorientada, quería llorar, gritar, quería golpear lo primero que se atravesara…

-         Sara mi amor te sientes bien, a donde vas? Paso algo?

-         No,.. nada es que olvide algo ya vuelvo, termina mi equipaje

-         Si esta bien pero a donde vas.

-         Ya vuelvo no tardo…

Salí casi corriendo, no quería que Ali se diera cuenta de nada, lo primero que encontré casi 300 metros delante fue un árbol… me abrace de el y lance mil golpes,  no pude evitar llorar como una niña, ella había aparecido de la nada diciendo te amo sin saber que desastre pueda causar en mi, estaba segura de que para ella había sido fascínate quebrar mis sueños, lo cierto era que débil y quebrado mi amor estaba allí, y era lo que no me había dejado ser feliz, sabia que ella leía todo lo que le enviaba que, estuve esperándola mucho tiempo…