Sin Medir Distancias 4

Que voy a hacer ahora? Debo seguir pensando en esto realmente? ...

Podría estar así toda la noche... sentada al borde de la cama, mirando como duerme… pero a la vez no puedo dejar de cuestionarme como fue que deje que llegara hasta este punto, definitivamente estaba convencida… deje de amar a Alicia desde hace tiempo, solo Miguel me unía a Ella… que voy a hacer ahora? Debo seguir pensando en esto realmente? Que diablos… me levanto y voy directo al computador… a lo mejor ella esta allí… Jessy.

-         J: Que haces despierta a esta hora

-         S: no puedo dormir, además debo ir a trabajar mas tarde, tengo guardia esta noche.

-         J: no deberías trabajar tanto.

-         S: lo se, pero mejor así, estoy menos tiempo en casa, sin gritos sin reclamos…

-         J: las cosas no van bien por lo visto.

-         S: no, no lo están, ya llegue hasta el punto de que no siento ganas de estar con ella.

-         J: eso es grave.

-         S: no quiero hablar de esto.

-         J: entiendo, debe ser por el cansancio, piensa bien las cosas, recuerda que tienen un bebe.

-         S: tratare de hacerlo…

En ese punto avanzaba la noche, pero realmente había tratado de mil formas de rescatar algo que estaba perdido, pero ya no quedaba nada, solo un vacio inmenso… pero Jessy era el tipo de chica con la cual podía platicar abiertamente, nunca me criticaba ni me señalaba por ninguna de mis acciones, esa noche en especial platicamos mas intensamente, una fotografía que enfocaba su tés elfica y blanca, una sonrisa medio arqueada que llevaba justo al borde de la imaginación … es hermosa, eso es indiscutible.

-         Sara aun estas en ese endemoniado aparato.

-         Si, te molesta?

-         No me molesta Sara, me enferma.

-         Ah no pues que mal.

-         No te burles de mi, estoy harta Sara, harta, no me haces caso.

-         Como diablos quieres que te haga caso si solamente me hablas para discutir o echarme en cara lo simple que soy, o no… mejor aun, para compararme con un hombre y acabar dándome una bofetada.

-         Me hablas como si me odiaras.

-         Tu Alicia… tu me odias a mi, no se que carajos hice yo para que me trates como te venga en gana.

-         Eso no es cierto.

-         No voy a cuestionarte nada, me voy, debo trabajar.

-         Claro… como cosa rara la niña de papi se va a trabajar.

Me vestí tan rápido como pude y Salí, tal y como si me hubiese echado un cubo de gua bien fría, la guardia estuvo suave, bien temprano fui a casa a darme un baño y a cambiarme, dormí un poco y me regrese a la empresa, eran cerca de las 8:00 a.m. y mi turno era a las 12:00, me conecte desde mi portátil pero ella no estaba, a lo mejor era muy temprano… pasan las primeras horas…por que no llega, porque me angustio? ¡Diablos ten calma! Una hora mas… Al fin ella aparece... saludando con ese smil amarillo de ojos brillantes y boca semi abierta así como si le diera gusto encontrarme por esos lares… saludos, elogios trivialidades… pasaba horas en ese plan con ella, podía apreciar su hermosa sonrisa a través de la Cam, me inventaba cualquier locura solo para ver esos finos labios arqueados en la mas magistral de las expresiones, su mirada como perdida ante la pantalla… podía apreciarlo a diario, empezó a platicar sobre una chica que le gustaba y que anteriormente había mencionado, fue en ese instante que el color se me subió al rostro, trataba de cambiar el tema para que ella no notara mi incomodidad, mi seño totalmente fruncido, frotaba mis mejillas bruscamente…

-         J: te ocurre algo?

-         S: no, para nada porque?

-         J: no se solo que cambiaste de actitud repentinamente.

-         S: no se que pasa, no se que me pasa contigo, cuando hablamos, no se, todo deja de tener el mismo sentido, me olvido de los problemas, no se si las cosas cambien después de esto, pero me atraganto con lo que me parece que siento… pero normal, Jessy no quiero que cambies conmigo, no me lo perdonaría nunca.

-         J: a caso no te das cuenta que me pasa lo mismo?

-         S: me estas jodiendo?

-         J: no estoy jugando, no te había dicho nada por que tu tienes pareja, tienes tu vida, además míranos… estamos a miles de kilómetros es loco.

-         S: si es loco, es absurdo, pero pasa.

-         J: eso es cierto, pero ni modo.

-         S: no se, no quiero que esto vaya mas allá.

-         J: no se no estoy segura de eso, pero tratare de llevar las cosas al limite, no quiero que tengas problemas.

-         S: no te enamores chiquilla.

-         J: lo se…

Tratamos de cambiar el tema pero fue inevitable, vinieron preguntas… como paso, cuando paso… porque… y días van, días vienen hasta que un hecho termino de darme valor de hacer lo que debí hacer hacia mucho, Jessy me cuestiona por que en una de las conversaciones le había preguntado quien era, tal como si no supiera quien escribía, solo alguien se me vino en mente… Alicia.

-         S: se puede saber que demonios haces revisando mi computador?

-         A: escondes algo, y se que tienes alguien mas…

-         S: ah si claro… Alicia, estas enferma.

-         A: si tu me enfermas, me tienes hasta la coronilla.

-         S: era lo único que me faltaba que revises mis cosas, quieres ver… mira toma mis claves, toma mi celular, revísalo es mas quédate con el, no me importa, lo que tu no entiendes es que ya lo nuestro se murió hace tanto…

-         A: si se acabo fue por tu culpa.

-         S: no Alicia, no fue mi culpa, fue Nuestra culpa, ambas participamos, y lo mejor para ambas y para Miguel es que yo nos separemos, ya no lo resisto mas, no quiero, esto apesta.

-         A: que voy a hacer sin ti Sara…

-         S: lo mismo que has hecho estos días… lo mismo que harás los que vienen.

-         A: no voy a poder.

-         S: si podrás, por ti, por Miguel…

Recogí gran parte de mis cosas, saque a mi hijo de su cuna y lo acosté en mi pecho…

Hijo, perdóname… perdón por tener que dejarte, perdón por haberte fallado la primera vez, te voy a extrañar por las noches, no podremos estar juntos a diario, pero prometo hacerlo cada vez que pueda, nunca te dejare solo, cuida a mama Alicia, no dejes que se porte mal, vendré por ti para ir a casa de la abuela…

No pude terminar de hablar… las lagrimas no me lo permitían, estaba llena de rabia y de dolor, lo recosté de nuevo en su cuna, tome mis cosas y Salí… el camino a casa de mi madre se me hiso eterno, no se si era por que iba muy despacio, mama al verme llegar se asusto, pero a duras penas le explique lo que había pasado, ella estaba dolida también, Alicia es para ella como una hija, me instale en mi antigua habitación… miraba a los alrededores todo era recuerdos, como si las paredes contaran una vieja leyenda, lo que fui, lo que soy… otra vez rota, vacía y sin sentido…