Sin control

Un sueño corto pero intenso que pude disfrutar mientras dormía. Dos compañeros de piso en la misma habitación...¿Qué pasará?

Estábamos en el sofá casi a oscuras viendo la tele, me empiezo a calentar y pongo una mano en tu pierna mientras miro tu cara, quiero ver qué haces. Suspiras, la empiezo a mover de arriba a abajo por tu paquete.

Te calientas, me pones la mano en las tetas, metes la cara dentro de mi canalillo, me agarras del tanga por la parte de adelante para que me levante, nos sentamos en el suelo uno frente al otro con las piernas abiertas, yo empiezo a jadear, se te nota en la cara que estas muy cachondo, me excita mucho verte así; me subo en tus piernas poniéndote las tetas a la altura de tu boca, mientras me muevo de adelante a atrás para masturbarte sin manos.

Jadeando, me apartas el tanga y me la metes entera

-¡Dios, es enorme!-

Mirándote a los ojos, abro la boca y saco la lengua, tú aprovechas para meterme dos dedos mojados de tu saliva, para que los chupe, cuando los sacas de mi boca, no me lo trago, sino que  dejo caer la saliva que tengo de los dos por mi boca para que la recojas con la tuya.

Cada vez estas más caliente, así que me das la vuelta, me pones  a cuatro patas sobre el suelo, me das un azote en el culo, yo me agacho para dejártelo a tu merced y lo abro con las manos, quiero que hagas con él lo que te plazca, dejas caer un hilo de saliva por él para poder  empezar a follármelo.

Me agarras del pelo muy fuerte mientras no puedo dejar de gritar, tanto que me tienes que tapar la boca para que nadie me oiga.

Después me giras y mientras te miro a los ojos me haces meterme tu polla hasta la garganta, te encanta, se te nota en la cara y en tus gemidos, me agarras fuerte del pelo para moverme a tu antojo, cada vez vas más rápido, me falta el aire, me dan arcadas y me lloran los ojos, pero me encanta y a ti mucho más, me gusta escuchar cómo te gusta lo que te hago.

Cuando estás a punto de correrte, te levantas, y yo sin recibir ninguna orden, me pongo de rodillas mientras me agarro las tetas y saco la lengua, estoy esperando a que te corras en mi boca, al poco tiempo dejas caer todo sobre mí, trago lo que ha entrado dentro, está calentito, me gusta, queda un poco en mi cara, así que lo recojo con mis dedos y me los paso la lengua para dejarlo todo limpio, como a ti te gusta.