Sigue la historia epílogo silvina

PARA TENER EN CUENTA.

El presente relato es una continuación de “ Aventuras en guardapolvo blanco” de “Cambio de rubro” de “Con la música a otra parte” de “Volví” de Sigo viviendo” y “Será todo un engaño” recomiendo leer esos primero para comprender mejor a los personajes y las circunstancias.

DE QUÉ SE TRATA SILVINA ?

Es el relato de una chica de 21 años, ella ha vivido una infancia y adolescencia interesante, cuenta anécdotas de su vida, relacionadas siempre con el que fue su padre adoptivo, con el hombre que la hizo mujer, con el varón que amó siempre…

SILVINA, describe situaciones especiales, momentos justos, siempre desde una óptica personal, con un cuerpo hermoso, 1,70m. ojos claros, pelo rubio, buenos pechos y un culo llamativo, es maestra, profesora de baile y aeróbic, está estudiando psicología en la facultad…

¡QUÉ LO PARIÓ!

El muy boludo nunca dijo nada, nadie sabía que le deberían estar dando puntadas en el pecho, siempre tan macho, cómo él iba a demostrar que le dolía.

Los médicos dijeron que habría tenido algunos episodios anteriores, éste fue uno fulminante en el que no se pudo hacer nada, cuando llegó la ambulancia ya estaba muerto hace rato…

Me acuerdo cómo se retorcía, cómo cambiaba la cara, primero de alegría por la noticia de qué estaba embarazada, cuando le dije que iba a ser padre y abuelo a la vez…

Para qué mierda le tuve que decir…

Igual todos me dicen que nadie se muere en la víspera, que cuando te toca, te toca, no hay escape, te llegó la hora…

Igual tengo un dolor que no me deja respirar, yo Silvina Mendoza, su hija, su amante, la que lo amó desde que era una nena, me voy a ocupar de todo, no quiero que nadie se meta.

Yo voy a decidir qué hacer, sé que todas y todos quieren ayudar, pero Tito Mendoza, mi papá, mi macho, el que me embarazó y nadie lo sabe, va ser cremado y sus cenizas las vamos a tirar, en casa y en varios lados de Iguazú…

Ahora quién va a ser el macho que nos coja a todas, que nos enderece cuando queramos hacer una boludés…

Miro su cara y parece que estuviera durmiendo.

Tito, cómo te vamos a extrañar, quién va a bailar cómo vos, quién va a dirigir el conjunto, quién va a tocarnos la guitarra como lo hacías vos…

Hijo de puta porqué tuviste que morirte…

Mirá las mujeres, todas lloran a mares, se nota que te amaban Tito…

Se agarran al cajón como un náufrago a un tronco, ninguna se despega de tu alrededor.

Mi mamá que fue la última que te cagó también llora como una Magdalena, mi abuela Gladys que también la cagó, llora sin parar.

Vinieron de Iguazú como 50 personas, todas paradas mirándote, Tito, no te habías dado cuenta de lo mucho que te queríamos…

Las directoras de las escuelas de Iguazú.

La directora del diario, me parece que le va a dar un infarto, la abrazan las dos amantes que tiene,.

Podría seguir todo el día contando el amor que supiste generar entre todas nosotras.

También entre los hombres, Camilo no deja de llorar, los maridos de las chicas se tuvieron que ir a fuera para no dar un espectáculo…

Al estar velándote, me pongo a pensar en algunos acontecimientos de nuestra vida.

Me acuerdo cuando te conocí, llegaste en un auto grande, de esos caros, te bajaste y saludaste a mi abuela, a mi mamá y a mí…

Desde ese instante te amé, cuando me besaste me derretí, pero tanto había escuchado de vos, tanto te alababan que creo que ya estaba enamorada sin conocerte…

Y cuando lo cagaste a palos a Ernesto, sé que era mi padre, pero el hijo de puta nos golpeaba a las tres, a mi abuela, a mi mamá y a mí, lo tiraste a la mierda en medio de los pastos que estabas cortando, después se la diste por todos lados.

Él violó a mi mamá, de esa violación nací yo, me hizo pasar una infancia de mierda, nos hizo perder la casa que teníamos y nos sacaba plata, me alegré muchísimo cuando lo pusiste en un taxi todo hecho mierda. Yo me volví de la escuela porque había escuchado que vendría a hablar con vos, te tenía una fe tremenda, eras mi ídolo…

Después te cogiste a mi abuela y a mi mamá…

Pensé que en unos años ibas a hacerlo conmigo…

Yo quería que fueras mi primer hombre, desde ese día lo soñé…

Hiciste asado, tocabas la guitarra, yo te miraba embobada, va, las tres te mirábamos así…

Cuando nos tirotearon la casa nos llevaste con vos…

Viajamos.

Primero llegamos a una casa en Córdoba, tres mujeres y una nena, te cogiste a todas, a las dos doctoras y a la madre, a mi abuela y a mi mamá…

Nos salvamos Candela y yo porque éramos criaturas, bueno yo no hubiese tenido ningún problema…

Después pasamos a vivir en Iguazú, qué hermosa casa, con Teresa, Camila y Dorys, a Teresa estoy segura que te la cogías en ese entonces, a las otras dos no sé, eran medio raras, se abrazaban entre ellas…

Después pasamos a vivir en un departamento en un complejo habitacional, el departamento 10 nos tocó a nosotros, mi abuela dormía en una habitación y mi mamá y yo en otra…h

Hasta que viniste a vivir con nosotras, que alegría de las tres, mi vieja me mandó a dormir a la habitación de mi abuela…

Cómo disfrutamos esos días, íbamos a hacer las compras, preparábamos empanadas, todas risas eran.

Mi mamá y mi abuela empezaron a trabajar en una escuela, la misma a la que iba yo…

Me enteré que te habías peleado con Teresa, vino una noche toda llorosa, nos contaste que te había embolsado tu ropa y vos te cabreaste, ahí dijiste que mi mamá era tu novia, me dieron celos, pero te tendría muy cerca de mí…

Mirá cómo son las cosas, cuando le contaste a mi madre que Ernesto había muerto, mi padre, ella lo festejó cogiendo con vos…

La verdad que yo también hubiera cogido con vos, si no hubiera muerto lo mismo, no lo queríamos ninguna…

Más recuerdos.

Mi abuela Gladys le proponía a mi mamá que salieran de a cuatro, mi abuela con Jacinto, un profesor de la secundaria, creo que daba dibujo y mi mamá con Claudio un amigo de Jacinto.

Mi vieja no quería, le decía a mi abuela que no lo iba a cagar a Tito, ella le decía que Tito no se va a dar cuenta.

Él se enteró de lo que quería que hicieran y después la cogía a mi abuela, que era la de la idea infiel con bronca.

Lo sé porque dejé grabando la máquina de fotos, un día que fuimos a la peluquería y se quedaron solos, cómo la turreaste a mi abuela, se la metías con fiereza, ella disfrutaba enloquecida, me parece que tu venganza mucho no la afectó a mi abuela, ja, ja, Tito te salió el tiro por la culata…

Cuando Marcos dejó un bolso para vos, mi vieja ni bola le dio, yo no pude con la curiosidad y  miré lo que tenía, estaba lleno de dólares, nunca se habló de ese tema…

Se fueron a actuar a no sé dónde, nos dejaron encargadas a mi abuela y a mí, del asador, mi abuela ni bola le daba, anda hecha una retorcida, yo sé lo que le pasa, no solo atendí el asador, sino que hice las ensaladas, cuando vinieron me felicitaron, Tito me dio un beso en la cabeza…

Cómo me hubiera gustado en los labios…

Para su cumple le hicimos con mi vieja una torta, festejamos en la parrilla que íbamos siempre…

Se pusieron a hacer más casas departamentos, al lado de dónde estábamos…

Qué fiestas.

Festejamos en la escuela, un montón de gente, canté con el conjunto de Tito, con Aurora y Claudia…

Hasta hablé por la televisión, dije que tuviéramos esperanza, que nos preocupemos por estudiar, que con estudio las demás cosas nos vendrán…

Me agarraron de sorpresa…

Actuación en capital.

Cuando viajamos a la capital, tenían que actuar en un teatro, cuando llegamos estabas esperándonos, hicieron la actuación, salió de locura, vos no querías que te reconociéramos, no sé en qué andabas.

Cuando dijiste que iba a ser tu hija, que me ibas a reconocer, yo quería ser tu novia, no tu hija, ese día vi los bultos que se le marcaban a Narciso y a vos…

Después fuimos a tu casa, mamá lloraba, qué hermosa casa, nadamos en la pileta con las chicas en bombacha y corpiño, dormimos los tres con mi mamá, me encantaba abrazarte…

Cuando me quedé sola con vos en la casa, todos se fueron, eras para mí solita, fuimos a comprar ropa, qué días hermosos, te cocinaba, dormíamos juntos, salíamos a pasear, te conté lo que pensaba de la abuela, de cómo la trataba Ernesto, de lo celosa que estaba…

Ese día que te llamó Linda y lo cagaste a palos al hijo de puta del ex de Nacha, después me llevé a Linda para que pudieran coger, decime si no fui pata con vos…

Cuando vinieron esos matrimonios, que nos dejaste encerrados en el segundo piso, no creas que no te vi que sacaste la silla para que se cierre la puerta, esa que solo se abre de abajo.

Dónde estabas vos, cogiendo con Sara, te conozco Tito, te conozco…

Cuando hicimos ese viaje en auto a las cataratas, que te dije que Ernesto la hacía coger a la abuela por sus amigos, que me hizo hacerle la paja cuando era una niña, que mi mamá lo amenazó de muerte o de cortarle las pelotas…

Cuando empezamos a tener secretos, le mentía a mi mamá diciendo que estabas durmiendo en la otra habitación, cuando estabas al lado mío…

Cuando me hacía la mujer fatal y vos no me dabas bola, cuando me metiste en la lluvia para despertarme…

Como le hice la cabeza a mi mamá para que vayamos a vivir con vos, en la capital, en tu casa, los tres solos…

El reconocimiento como hija tuya, el casamiento de la abuela…

Que a mi mamá se le había metido la idea de tener un hijo con vos…

Yo también quería tener uno con vos, cómo deseaba ser más grande para que me pudieras coger, cómo te amaba…

Cuando me llevaron a comenzar la secundaria, mi mamá también  iba a la secundaria para adultos de noche, para terminarla…

Esas noches esperándola, cómo te abrazaba por el frío…

Cuando nos dijo mamá que estaba embarazada, no sabía qué sentir, si alegría o celos, me gustaba tener un hermano…

Y vos haciéndote el gato con las madres que iban a buscar a los hijos a la escuela, después me enteré que te cogiste a varias…

Y el día en que me vino la regla, que me hice señorita ja ja, estaba en el patio de comidas y siento que se me mojan las piernas, salí corriendo para el baño, justo me había olvidado la mochila con todo lo que tenía para esa ocasión.

Me trajiste un piloto y después, cuando te hice que me pongas en mi conchita un tampón…

Ja, ja, no sabías si salir rajando o se te iban los ojos, que delicado fuiste Tito, como te amé, cuando tenga quince me lo cojo pensé…

Mi mamá se quedó en Iguazú, vine abrazada a vos todo el viaje en avión…

Cuando encontramos a Sarni, hasta el perro se dio cuenta de que ya no estás, llora con un gemido que te parte el corazón…

Mi cumple qué alegría, qué diversión, qué emoción cuando te dije que con vos me iba ser mujer, nadie se dio cuenta, yo creo que vos sí…

Y cuando al fin, bienvenida la fiebre de Elizabet que hizo que no viajen con nosotros mi mamá y mi hermana, ese instante en que te la empecé a chupar, te despertaste y tu nariz rozó mis labios vaginales, aspirabas tratando de olerme mi vagina, tus manos tomaron con fuerza mis nalgas cada mano con una nalga , me las separaste y hundiste mi conchita contra tu boca…

Primero fueron besos, contra mis labios vaginales, luego tu lengua comenzó a jugar, la pasabas por mis labios, sentía como me la llenabas de saliva, cerré mis ojos, sujeté tu miembro y disfruté…

Ahora tu lengua estaba dentro de mi orificio, sentía como lamías mis paredes interiores, era tan rica la sensación, que llegó a su máxima expresión cuando me la metiste.

Al fin era tu mujer, al fin me hice mujer, al fin me cogiste Tito, no voy a dejarte nunca más, voy a  ser tu hembra, te voy a dar todo lo que me pidas, te amo Tito…

Fuimos a cenar, al casino, éramos una pareja, qué feliz me sentía…

Estábamos solos en la capital, terminé la secundaria, me entregaste el diploma y después al hidro los dos, qué delicia estar con vos, qué placer inmenso…

Mi amor la cantidad de veces que hemos hecho el amor. Para empezar a ser maestra vos y yo, los dos solos fuimos a mi primer día de la carrera…

Cuando me dijiste lo de mi mamá con Claudio, que los encontraste desnudos en la pileta franeleando, traté de defenderla un poco, más para la tribuna que de verdad, pensé que ahora sí íbamos a ser los dos…

Esa sensación de envidia, celos y amor que tuve cuando me enteré que Vanesa y Josefina estaban embarazadas de vos, que ibas a tener hijos con ellas, por un lado me sentía contenta, por otro celosa, no era cierto que éramos los dos nada más…

Cuando te hice la pata para que te cojas a mis amigas…

Cuando debutamos como conjunto bailantero, qué felicidad, qué importante me sentí, vos fuiste el que armó todo, vos fuiste el que dirigió, el que nos ponía, nos sacabas, nos decías cómo cantar, cómo movernos, fuiste el creador, qué mierda vamos a hacer ahora Tito...

Y en la facultad, te miraba en las clases, yo con mi grupo de amigos, vos siempre seguro, sobrio, hermoso, un poco de celos me dio cuando te juntaste con unas compañeras, va total la que dormía con vos era yo, la que iba con vos al telo era yo…

Sé que no te gustó una mierda que a mi nuevo hermanito le pusieran de nombre Ernesto, ahí, ahora que lo pienso me parece que te dolió el pecho, no me di cuenta, no lo registré…

Silvina, Silvina, van a cerrar el cajón, vení a despedirte…

Ya han pasado casi dos días…

Cuando regresamos del velorio la casa parecía una tumba, hasta los chicos no hablaban, lo único que se escuchaba era el lamento de Sarni, cómo lloraba el boludo, nos partía el alma.

Cada una nos fuimos a nuestras habitaciones a llorar solas, Vanesa estaba más entera, pero Josefina parecía una piltrafa, ojo con ella que es de frágil salud…

A mi mamá y a mi abuela les dije que se vayan para el norte, que se lleven a mis hermanos, que a las chicas no les gustaba que vinieran a casa, ellas me miraron y se callaron, bueno mucho por decir no tenían, algún día les voy a preguntar por qué le pusieron  Ernesto a mi hermanito, si el que conocimos, mi padre, fui un hijo de puta…

Esa misma noche cuando los chicos se fueron a dormir, les dije, estoy embarazada chicas…

Me abrazaron y me estrecharon, no había mucha risa pero lo tomaron como una buena noticia…

Y saben quién es el padre.

Tito, dijeron las dos juntas…

Sabían que con él teníamos relaciones.

Claro boba, creés que somos tontas, si se les notaba el amor a los dos, a mí me daba un poco de celos al principio pero después lo fui asimilando dijo Josefina.

A mí no, dijo Vanesa, ningún celo, Tito era para compartir, si hubiese en algún momento pensado en que sea para mí únicamente, jamás le hubiera pedido de tener un hijo con él…

Era para todas, a vos te quería más que a nosotras me dijo Jennifer.

Nos pusimos a llorar abrazadas las cuatro…

Débora que vino desde Iguazú, Ester (las dos contadoras, fueron las que redactaron el testamento) y Susana la abogada armaron una reunión.

Nos leyeron todo lo que había dejado estipulado Tito, nadie dijo nada, ninguna tenía nada que reclamar, con mi mamá y mi abuela ya había hablado Débora, ellas no vinieron a la lectura del testamento, no hay mucha relación con mamá y la abuela.

Josefina se hizo cargo de la dirección del conjunto “Banda 12”, Sonia es nuestra representante, a veces sube al escenario y goza cantando y bailando, ella con su fábrica está haciendo mucha plata, tiene todo muy claro, algunas noches con su madre traen empanadas y hacemos reunión, terminamos llorando todas…

Sigo en la facultad, mi panza sigue creciendo, tanto creció que Josefina me llevó a parir, la puta madre cómo duele, me gustó que me la metiera, lo que no sabía era que me iba a doler tanto cuando me lo sacaran…

Nació Francisco Mendoza, 3,900kg, semejante nene, con razón me dolió para que saliera, cómo pujé la puta madre…

Con el próximo que coja le voy a hacer poner doble forro, ja, ja, la puta cómo me hubiese gustado estar con Tito al lado mío…

Han pasado casi tres años me estoy por recibir de psicóloga hay un muchacho que me invitó a salir, no sé…

De las mujeres de Tito, por ahora, la única que coge creo es Sonia, las otras somos una boludas, hacemos fiesta entre nosotras, nos pegamos cada orgía lesbiana que quedamos satisfechas…

Y si salgo con ese muchacho…

FIN.