Siete Días Con Alan (DÍA V)

Continúan las situaciones entre Alan, Teo y yo. Por favor comenten y valoren explicación al final del relato.

DÍA V.

Quizá eran las seis de la mañana cuando la voz medio dormida de Alan me despertó. Hablaba por teléfono.

-- ¿De verdad?  No lo puedo creer amor. -- era mi madre.

-- Pero dime ¿como paso?-- parecía sorprendido.

-... -

--¿Quieres que te acompañamos? --

--... --

-- Esta bien,  lo entiendo, te amo cariño. No sabes como lo siento. -- colgó

Alan me vio ya despierto y me contó todo lo que había hablado con mi madre,  mi abuelo fallecido,  al parecer sus pulmones y corazón ya no aguantaron más y se nos fue. Mi padrastro me intento consolar dándome su cariño pero era inútil; apenas conocía a mi abuelo,  puede oírse horrible pero no sentí dolor con la noticia de su muerte.

Se hacia tarde y debía ir a la escuela por los resultados de mi examen, pero antes de eso.

--Hijo tu madre dijo que no habrá funeral, al parecer tu abuelo pidió ser cremado,  para luego echar sus cenizas en el bosque. Así que pronto llegará tu madre -- Me comentó Alan.

-- ¡Que bueno Alan!  Pobre mamá, a ella si debe afectarle esto,  perder a su padre...  Créeme no es fácil. -- dije mirando hacia la nada, Alan me palmeo el hombro en señal de condolencia. -- Pero bueno -- dije cambiando de actitud -- hoy sabré como me fue en el examen. Adiós pa. -- y me fui pude escuchar a mi padrastro decir "Cuídate hijo".

Como dije antes, no me afectó la noticia del fallecimiento de mi abuelo. Pero si me hizo pensar muchas cosas,  entre ellas:

  • Era un sueño coger con Alan, pero ya no podía hacerle eso a mi madre.

*Debería de ocuparme en otras cosas para no pensar en mi padrastro.

*¿Alguna vez me enamoraría?

Mi cabeza era un revoltijo de pensamientos, que me daban jaquecas. Caminando en modo zombi llegue a la escuela y pronto vi a Teo,  mi mejor amigo, debía contarle todo sobre Alan,  necesitaba su apoyo en eso.

--Ricky, al fin llegas, dime por favor que tu padrastro no te hizo nada y no me hará nada, no he podido dormir de la angustia.  -- Decía, pobrecito estaba hecho una bola de nervios.

--Buenos días Teo, también me da gusto verte. --fingí sarcasmo.

-- No juegues, ya dime ¿que paso? --

--Como jodes amigo,  no tienes que preocuparte,  Alan no dirá ni una palabra, que te lo digo yo. -- dije serio

-- ¿Es neta? (verdad)?, no lo puedo creer. ¿Como lo hiciste?. --

--Teo necesito contarte cosas, necesito de mi mejor amigo. --

--Claro wey, eres mi hermano pero ¿que pasa? --

Es largo de... -- El sonido de la campana me interrumpió,  era hora de clases. -- A la salida te cuento ¿va? --Teo asintió y nos fuimos a clases.

No prestaba nada de atención al profesor, solo cuando anunció los resultados de los exámenes.

--Joven Ricardo, debo decir que yo ya lo veía repitiendo el año escolar. Felicitaciones seco un 79 suficiente para no verlo el próximo año-- Era mi némesis ese profesor -- pero debo decirle que tal vez el próximo año un 79 no sea suficiente...  Póngase las pilas. – Así de simpático era este profesor.

Luego del buen consejo del profe, no hubo mas acontecimientos que merezcan la pena mencionar. Salvo que en el descanso unos chicos rompieron la ventana de la oficina de la rectora, pero fue por accidente, en fin serán castigados.

Al salir de la escuela, Teo y yo nos fuimos a un Starbucks para poder platicar; ya en la mesita de dicho establecimiento.

--Bueno pues, aquí estamos… -- decía Teo en un intento para que yo hablase. Me moría de miedo, por alguna razón me aterraba su reacción.

--Teo, necesito que no me interrumpas, solo cuando acabe, por favor trata de entender. – le suplique, él solo sorbió de su frappe y asintió.

Fue entonces que le conté todo, desde la primera vez que mi polla se ponía dura cuando veía a Alan, la vez en la que me pajee en su honor, la vez en la que por fin tuve entre mis manos su verga dura y esos huevos gordos y peludos en la boca, también cuando yo convencí a mi padrastro para que se acostara conmigo, sabiendo que eso era serle infiel a mi madre.

-….

--¿No dirás nada? – le cuestione al finalizar

--¿Qué quieres que te diga?—dijo en un semblante que no pude descifrar.

-- Yo… -- me interrumpió.

--Solo dime ¿Cómo es que reaccionaste ahora? – me pregunto.

--Hoy en la madrugada murió el padre de mi madre, luego de pensar las cosas, me di cuenta que no es justo para ella. —le conteste algo cabizbajo.

--Ya veo…-- Se levanto de la silla y se fue, dejándome solo. Solo paso un minuto cuando lo alcance en la calle.

--¿Qué pasa? ¿Por qué te fuiste? – dije confundido

-- Tú eres lo que pasa. ¡Eres un pendejo! ¿Cómo pudiste hacer eso?

--Ya te dije como paso, hasta ahora me he dado cuenta que no debe ser. Alan sabia, pero yo lo convencí de lo contrario. – Teo rio -- ¿Qué es lo gracioso? Cuestioné a Teo

-- Yo, yo soy el gracioso… Sabes creí que me dirías que me querías, que podríamos ser algo mas que mejores amigos o frees. Soy un Pendejo.

--¿Qué dices Teo? – estaba muy confundido.

-- ¡Que te amo!—me lo grito mientras una lagrima brotaba de sus ojos.

--Teo yo… No se que decirte, estoy… --

--Shh… No digas nada, yo te diré, que acepte ser tu free con la esperanza de que algún día tu y yo seamos pareja, sabia que era cuestión de tiempo para que te des cuenta de cuanto te amo, siempre ha sido así, pero no me imagine que me hicieras esto… ¡NO!—Corrigió--  Que le hicieras esto a tu madre. – Se estaba marchando pero lo quise detener y lo único que sentí fue el puño de Teo en mi mejilla.

--¡Nunca vuelvas a tocarme en tu jodida vida y olvídate que existo! – se fue.

No sabia que hacer, fui a sentarme a un parque, pasaron las horas hasta que se hizo de noche, no quería ir a casa, pero debía, Alan no tenia la culpa de esto, debía aclarar las cosas con mi padrastro y tenia que recuperar a mi mejor amigo. Pero ahora no tenia ganas de nada.

Por suerte cuando llegue a casa Alan aun no había llegado, me metí a mi cuarto, me bañe y me tranquilice, con la cara roja y adolorida me senté en el sillón puse el canal de música y me dormí. Un rato después Alan me despertó.

--Rick, hijo ya llegue. Muero de hambre…- se quedo mudo al ver mi cara --¿Qué demoños? – se altero pero no se enojo.

-- Hola Alan, no te preocupes, Teo y yo nos peleamos, luego veré como lo arreglo. —dije mientras me sobaba la cara

-- Bueno, menos mal, pensé que algo malo te paso. – (Lo peor me paso).

--Alan…--

--Ricky…-- dijimos al mismo tiempo el nombre del otro.

Hubo unas risitas para calmar la situación. Luego los dos volvimos a decir al mismo tiempo “Tenemos que hablar”.


Hola a toda la comunidad de TodoRelatos. Antes que me maten por traer este capitulo tan corto y sin sexo, solo quería decirles… Feliz Navidad.

Quería publicar el capitulo antes de que llegue navidad, bueno… Hagamos cuentas hoy es 23, pero no se cuando se suba el relato… Ojala no sea el sea lo antes posible.

Solo quería desearles muchas felicidades estoy algo chipi (triste, melancólico) pues no se, siempre en los fines de año me entra esta nostalgia. Pero a la vez feliz por que pronto comienza el 2015. Tengo planeado subir el capitulo 6 y 7 antes del 31 de diciembre.

Ahora, la razón por la cual solo es el día 5 es por que son siete días con Alan y era obvio que un día iba a estar solo, decidí que fuera este y no el último. Además así los dejo picados (si es que hay alguien que este leyendo mis relatos obvio).

En fin…

Feliz Noche Buena y Feliz Navidad.

Quiero darles las gracias a todos aquellos que me han mandado correos, con sus historias y con sus comentarios y obviamente con sus consejos, no dejo de aprender, la verdad sus consejos me ayudan bastante.

PD: SE ACEPTAN FELICITACIONES NAVIDEÑAS.

SALUDOS

RICARDO SAND

YUCATAN, MX.