Siempre hay modo
Como logre tener sexo con las 2 piernas enyesadas de mi pareja.
Bien chicas ¡prepárense! por les voy a relatar cómo eran mis sesiones de sexo cuando mi pareja tuvo un accidente automovilístico y se rompió las 2 piernas.
Como ustedes comprenderán no podía hacer casi nada de fuerza con las piernas y eso iba a ser según había dicho el médico por alrededor de 6 semanas. Cómo les explico que para la segunda semana yo ya quería que me dieran pero duro, las primeras semanas traté de ser consecuente con el pro su estado y todo pero ya . . . ocupaba . . . ustedes saben una buena cogida.
Bañarlo era para mi una prueba de fuego, tenerlo ahí y . . . . . . bueno, pero en una ocasión cuando su condición era mejor y lo estaba bañando así como no queriendo le empecé a dar masajito en el pene y para mi sorpresa luego luego respondió, ahí fue cuando yo me di cuenta de que él también ya estaba queriendo pasión. Así que seguí con más euforia.
El estaba sentado en la silla de ruedas y con cuidado le acomodé las piernas bien abiertas se le estaba poniendo muy dura lo empecé a masturbar lento y aguantó no hablaba ni decía nada, pero se me antojó darle una mamada a full y me fui directo le chupaba el pito sin piedad, el ya gemía sin poder controlarlo, a los minutos obviamente se corrió. Pero . . . valiente cosa él satisfecho y yo?? Yo estaba muy caliente sobre todo después de eso; después de que me trague su leche me le quedé viendo y el comprendió mi mirada. Me propuso salir del baño, y según sus instrucciones fuimos al comedor.
Me dijo que me subiera a la mesa y le regalara una panorámica de mi raja, no me dijo 2 veces, me acosté boca arriba con el culo a la orilla de la mesa y él pegadito a la orilla sentado en la mesa me abrió la piernas con brusquedad, y me empezó a acariciar con los dedos para hacérmela de emoción, yo ya me retorcía por que ya me urgía, siguió con unos besos y lengüetazos que me hacían no dejar de gritar. En una de esas le dije: Ah, ah, ah, ya , ya me vengo, ah, mmm Entonces dejó de hacerlo y con la yema del dedo pulgar me empezó a sacar mis juguitos de la vagina (se los recomiendo no se lo imaginan).
Me junto las piernas y yo las crucé y las agarré con mis brazos, la sensación de apretar mi clítoris con las piernas era cómo si me estuviera masturbando, su dedo pulgar llevaba mis jugos hasta el culo y lubricó mi entradita, también lo hacía con su saliva dándome besitos en el culo, yo sentía cómo mi corazón se me quería salir del pecho.
Me tenía bien agarrada de las nalgas abriéndolas cómo yo no imaginaba que las podía abrir él también estaba muy excitado sobre todo por verme lo caliente que estaba. Pero que sorpresa me llevé cuando me di cuenta de que detrás de él estaba la vitrina del comedor que tiene espejos, por ahí podía tener la misma vista que él tenía, él notó que por alguna causa había subido mi excitación y en menos de los que me di cuenta ya me bombeaba con una dedo en el culo, yo me retorcía como una serpiente, no sé como se hizo de un plumón me imagino que lo encontró por ahí pues soy diseñadora y una ves que se medio dilato mi culo lo metió primero en mi vagina dio 3 bombazos y lo metió en el culo ya bien mojadito y me hizo lo que nunca pensé que se podía hacer con un plumón y lo mejor era que yo lo estaba viendo todo, como si fuera una película. Les aseguro chica que muy pocas han tenido la oportunidad de tener la vista que tienen sus hombres, verte el culo clavado con un plumón, con contracciones, en el momento en el que sucede y cómo la vagina chorreaba y chorreaba . . . WOW. Practíquenlo lo recomiendo ampliamente!!!
Después les doy otros tips . . . espérenlos