Si te tuviera en mis manos
Tras conocerte, tras todo lo que hemos hablado...Si te tuviera en mis manos...
Título: Si te tuviera en mis manos - Autor : Cabolin
Si te tuvera en mis manos, buscaría algo para atarte. Y te ataría. Te ataría las manos al cabezal de la cama y te iria desnudando, muy lentamente, mientras te miro a los ojos, y veo en los tuyos el deseo, el miedo y la sumisión, pues nada podrías hacer para escapar. Te dejaría completamente desnuda, ante mi, y tras observarte, te acariciaría suavemente con mi manos, con mis dedos, rozándote, casi sin tocarte, en silencio, recorriendo cada curva de tu piel. Luego me acercaría a tus senos, y los lamería. Podrias notar la calidez de mi aliento, justo antes de engullir tus pezones. Los verias moverse al ritmo que impondría mi lengua, y los verias desaparecer dentro de mi boca. Así estaríamos el rato que hiciese falta, hasta que tuvieras tu primer orgasmo, si es que realmente te puedes correr con sólo chuparte los pechos. Luego mi boca y mi lengua descenderían por tu vientre hasta tu sexo. Y allí ya sabes lo que ocurriría. Primero recorrería tus muslos, en adelanto a lo que está a punto de suceder, y luego te comería el coño como si fuese lo último que fuera hacer en mi vida, como si fuera un hambriento deseando comer, como si fuera un puto animal salvaje. Te penetraría con mi lengua para sentir tu sabor, y me metería tu clítoris en mi boca para succionarlo, para que sepas que ahora es mio, y que me lo puedo comer siempre que me apetezca. Me encantará notar como te estremeces y te corres en mi boca, atada a la cama, sudando, gimiendo...completamente perdida. Rendida y casi sin fuerzas, te follaría. No lo pienses demasiado, no te podrías negar estando atada. Te la metería despacito, para que nos fueramos acoplando, y pudieras saborear como mi pene se interna en tu interior. Lo notarias caliente y grande, pero sobre todo duro, muy duro. Poco a poco incrementaría el ritmo, para follarte bien follada, para que te notes completamente llena y te follaré hasta que te corras, no te quepa duda, pero sin hacerte daño, no te preocupes, me sé mover. Luego colocaría mi polla entre tus tetas, y con ellas lo amasaría. Colocaría la punta en tu boca, y te follaría las tetas y la boca a la vez. Terminarías haciendome correr, y te llenaría esa preciosa boquita de mi leche para que la pudieras saborear y tragar toda. Luego te desataría y nos fundiríamos en un abrazo y un apasionado beso. Y descansaríamos un rato...antes de que tú me ates a mi.