Si por mi fuese...

Si por mi fuese, te dibujaría con mis dedos.

Trazaría cada línea con mis dedos, cada curva con las palmas de mis manos.

Como si fuese difícil hacerlo.

He trazado tus líneas directamente en tu piel durante años.

Sería tan fácil hacerlo hasta con los ojos cerrados, sin mirarte, sólo imaginándote, sólo siguiendo los trazos ya existentes, grabados en mis ojos.

Si por mi fuese, te dibujaría en mis sueños para soñarte, para tener tu imagen ahí presente.

Pero es que ya está ahí, en mi subconsciente. Tus líneas grabadas en mi mente.

Y no sólo quedaron grabadas allí, ellas viven en mi piel, que se fue erosionando con el roce de la tuya.

Tus líneas tallaron las mías, me dieron forma.

Y es que te conozco, con los ojos abiertos o con los ojos cerrados, porque vives en mí.

Que fácil sería detallar cada poro en tu piel, los conozco todos, porque mis poros sudaron junto a los tuyos, mientras esculpías mis formas.

Y si me quita las manos, podría dibujarte con mis pies, porque con ellos recorrí tus formas y si aún perdiera éstos, podría describirte con mi lengua, que soñó recorrerte y lo consiguió.

Y es que es tan fácil, porque me bañé en cada una de tus olas y viví contigo tus tempestades y días soleados y dormí sobre tu piel cada noche de luna llena y estrellas brillantes.

Si fuese difícil pintarte, con mis labios te di color muchas veces, ¿cómo no hacerlo ahora?.

Simplemente te pinto y coloreo tus sombras y doy luz a tus luces.

Y es que si fuese difícil hacer tus trazos, luego de cien años dibujándolos, no sería justo ahora decirlo, porque luego de tanto tiempo, ya tus curvas se llenan con las mías, como la pieza perfecta de un rompecabezas.