Si Don Pascual, lo que diga Don PAscual
Empieza el plan de vida de Pascual
El domingo a la hora indicada estábamos en la puerta de la iglesia obligados por el jefe de mi mujer, para asistir al bautizo de su nieto. Todos hasta sus familiares tenían una cara de disgusto que daba pena verlos. De una forma u otra estaban allí obligados a asistir a la ceremonia, y digo a la ceremonia porque había organizado un banquete después a los que solo asistiría la familia menudo cabrón.
Yo estaba vigilando a mis presas. Primero eran los dos primos acosadores de mi mujer, estaba esperando a que estuviesen juntos pues quería actuar rápido y sin levantar sospechas. Había pensado en volverlos homosexuales, pero eso no es un castigo ya que encontrarían placer sexual con hombres. Y además que el ser gay no es ningún castigo. Entonces me vino una lucecita, pensaba hacerlos impotentes, era el castigo definitivo para unos putos salidos. Entonces vi como se juntaban para hablar los dos, debía acercarme a ellos sin levantar sospechas, ¿Pero cómo?. Entonces mi mujer me brindó la oportunidad.
- ¿Pascual cariño me dejas tu pluma para apuntar el teléfono de mi fisioterapeuta a Leocadia que le duele horrores la espalda?
Bingo
- Si cariño por supuesto
Saqué la pluma, pero como soy muy torpe se me cayó y fue rodando justo hasta detrás de los primos. Fui corriendo a por ella, no fuese que algún buen samaritano me la diese y jorobase el plan.
- Perdonen es que se me ha caído la pluma
Les dije para que se girasen los dos
- Bien par de pervertidos, a partir de hoy sois impotentes, no encontrareis placer sexual de ningún tipo. Además entre los dos os vais a repartir todo el trabajo de mi mujer, porque ella se merece estar todo el día sin hacer nada. Además la tratareis con unas maneras exquisitas, porque para vosotros será la mujer perfecta. ¿Quedó claro?
- Sí Don Pascual lo que quiera Don Pascual
Muy bien, primera parte del plan conseguida, ahora venía la más difícil, el gilipollas del jefe. No había forma de encontrarlo a solas, siempre tenía cerca a algún lameculos. Entramos a la iglesia y al igual que la mayoría de empleados nos sentamos en las últimas filas. Entonces le di la pluma a mi mujer y le pregunte
- ¿Qué le pasa a Leocadia?
- Pues que ya tiene 67 años y no está para trabajar
- ¡Porque no se jubila?._ Pregunte
- Porque su hijo se ha quedado sin trabajo y viven todos de su paga, llegan justos a fin de mes, si se jubilase no podría compaginarlo todo.
- Pobre mujer tengo que ayudarla
- ¿Cómo vas a ayudarla?._ Preguntó mi mujer
Mierda lo había dicho en voz alta, tengo que ir con más cuidado a partir de ahora.
- No lo sé, la verdad, lo he dicho por la pena que me da su situación, no porque realmente pueda hacer algo.
- Yo si pudiese también haría algo, pero la vida a veces es injusta._ Comentó mi mujer
Estaba empezando a preocuparme porque no había forma de acercarme al jefe de mi mujer sin levantar sospechas y la ceremonia se estaba acabando. Entonces el hipócrita hijo de puta me brindó el la solución. Se puso en la puerta de salida y obligó así a que todos le felicitasen por el bautizo de su hija. Yo me puse a hablar con mi mujer de cosas intrascendentes, para quedarnos los últimos. Cuando ya me tocaba darle a mi la enhorabuena le dije
- Hombre un abrazo.
Y cuando lo tenía abrazado le dije.
- A partir del lunes a mi mujer le dobla el sueldo trabajando media jornada, y la tratarás como a una reina.
- Sí Don Pascual lo que quiera don Pascual
Dándole la mano le dije en un tono de voz que sólo él y yo podíamos oír.
- Además contratará al hijo de Leocadia, con un buen sueldo y de manera indefinida, para que ella se pueda jubilar. Y cuando se jubile le dará una indemnización equivalente a 5 años de trabajo, contando pagas extras.
- Sí Don Pascual lo que diga Don Pascual
Satisfecho conmigo mismo me reuní con mi mujer.
- ¡ A que han venido esas familiaridades con mi jefe?._ Preguntó mi mujer
- Nada hacer un poco la pelota nunca va mal.- Le contesté
- Tienes razón
Y no volvió a comentarme nada más
Cuando llegamos a casa, mis hijas estaban llorando, cuando me acerqué a ellas, vi que María estaba cubierta de golpes y moratones, por todo el cuerpo.
- ¿Qué te ha pasado?
- Mi ex, me esperaba en el parque a la hora que salgo a correr y me ha dado una paliza brutal.
- Bego lleva a la nena al hospital, por si tiene algo fracturado, yo me reuniré con vosotras, allí.
Cuando habían salido por la puerta, Le dije a Marta.
- ¿Sabes dónde está el cabrón ese?
- A estas horas está en el parque de la fuente de Posigono, fumando petas.
- Vale cariño, espérame aquí que vuelvo enseguida
Mientras me dirigía allí, me hervía la sangre, ¿cómo se había atrevido a pegar a mi pequeña?. Mi venganza sería brutal. Primero pensé en obligarle a tirarse por un puente, pero eso era demasiado rápido y quería que sufriese mucho. Así que la parte maligna que todos tenemos dentro surgió. Y cuando llegué a la plaza me lo encontré tumbado en la fuente, estaba con tres más, pero tan colocados que no podían ni moverse.
- Tu escoria humana ven aquí._ Le grité
Cuando le tenía frente a mi le dije
- ¿Cómo te has atrevido a pegar a mi pequeña?
- Porque era mía._ Me soltó
Le di un tremendo puñetazo en la nariz rompiéndosela en el acto, continué dándole golpes hasta que me tranquilicé y cuando lo hice le dije
- A partir de hoy, cada vez que mires a mi hija notaras todos y cada uno de los golpes que te he dado hoy, cada vez que pienses en ella te cagarás encima, cada vez que tengas pensamientos lascivos con ella de le dirás a todas las mujeres que encuentres ese día que eres un puto salido que las quiere violar. En la espalda te tatuarás con letras bien visibles que eres un hombre que pega a las mujeres. Y por supuesto olvidarás quien te ha dado la paliza y que hoy me hayas visto. ¿Esta claro?
- Sí Don Pascual lo que quiera Don Pascual._ Dijo mientras se meaba encima.
Le dejé allí tirado, pasé a por Marta y fuimos al hospital a ver como estaba mi niña. Sólo tenía contusiones, los médicos nos aconsejaron que lo denunciásemos, pues hay que acabar con la lacra de la violencia doméstica. Cuando estuvimos fuera le dije a mis mujeres
- Ya me he encargado yo del cabrón ese, no volverá a hacerte daño jamás
- ¿Qué has hecho Pascual? No me asustes._ Dijo mi mujer
- Tan solo mostrarle que le pasa a todo aquel que se mete con mis chicas. Eso sí no le diréis a nadie que he sido yo quien le ha pegado la paliza al hijo de puta ese.
- Como tu digas._ Dijeron las tres
Cuando llegamos a casa, las tres se quedaron en bragas, enseñándome sus preciosas y grandes tetas, cosa que hizo que me empalmase de inmediato
- ¿Papi no estarías tu más cómodo sin ropa?._ Dijo mi hija mayor al verme la polla
- No me gusta el nudismo. ¿Por qué lo dices?
- Porque me gustaría verte la polla._ Contestó
Eso de que me dijesen siempre la verdad me estaba gustando
- Para eso, sólo has de pedírmelo._ Dije mientras sacaba mi polla de su encierro
- Joder que grande que es.- Dijo Marta
- ¿Papi te la podemos medir?._ Dijo María
- Por supuesto adelante
Salieron las dos a por un metro y como si fuese un trabajo de ciencias me midieron la polla a lo largo y a lo ancho.
- 21 cm de largo y casi 7 de grosor._ Exclamó Marta
- Esta polla es una revienta culos._ Dijo María
- Si la llevases depilada sería la polla más bonita que hayamos visto._ Dijo Marta
- Sí papi déjanos depilarte la polla._ Dijo María
- ¿Sabéis hacerlo bien?._ Pregunte
- Nos depilamos los coños desde los 15 años, somos unas profesionales. Dijeron las dos
- A ver esos coños para que me deje depilar yo
Las dos se bajaron las braguitas enseñándome unos coños perfectamente depilados y perfectamente chorreando, se habían puesto muy cachondas al verme la polla .Eso hizo que empezase a pensar en ellas como mujeres
- Adelante pues.
Y las dos salieron raudas a sus cuartos de aseo a traer todo el instrumental necesario. Pusieron una toalla en el sillón y tras aplicarme espuma fueron rasurándome con tanto mimo y cuidado que cuando acabaron de hacerme los huevos me corrí, no pude evitarlo.
- Que barbaridad de leche, que sueltas, tengo que probarla._ Dijo Marta
Ni tiempo Para reaccionar me dio, se metió la polla en la boca y me la chupó con ansia
- Yo también quiero saber como sabe la leche de papi.- Dijo María
Cogió dos chorreones que había en el suelo se los metió en la boca
Verlas gemir de gusto hizo que me empalmase de inmediato
- Niñas hacer eso delante de mi es peligroso, porque me dan ganas de follaros hasta que pidáis basta
- ¿Y porque crees que lo hemos hecho?._ Dijo Marta besándome con tanta lujuria que casi me corro
Desnudaos las tres pero ya Y cogiendo en brazos a Marta que era la que más cerca tenía, fui ensartándola poco a poco, muy poco a poco en mi pollo, cuando sólo había metido el capullo, noté el himen.
- Marta ¿Eres virgen?
- Sí papi, dijo bajando la cabeza
- Nunca te arrepientas de eso, además en poco vas a dejar de serlo, pero vamos a tomar precauciones porque imagino que no tomarás anticonceptivos
- No papi
- Bego trae los condones, que vamos a follar los tres como locos
- Por supuesto cariño._ Dijo mi mujer mientras iba al cuarto y traía una caja de condones.
Me puse uno tumbé a Marta en el suelo, boca arriba, le puse un cojín en las caderas y le hice una buena comida de coño hasta que se corrió para lubricarla bien
- Tengo la polla tremenda, vamos a ir muy despacio, quiero que tu primera vez sea algo memorable
- Sí papi estoy en tus manos
Volví a meterle la polla hasta que note nuevamente el himen, ella bufaba y resoplaba, pero no paraba de decirme que continuase. Poco a poco fui aumentando la presión y noté como el himen se desgarraba. Marta soltó un grito ahogado. Paré unos instantes para que su vagina, fuese adaptándose a mi grosor y hasta que ella no me dijo que continuase no lo hice. Fui metiendo y metiendo mi polla. ¿Cómo podía ser? Una virgen estaba engullendo mi polla hasta los huevos, joder si es que estaban hechas para mi. Cuando la tuve toda dentro, Marta, soltó
- Dios noto como si me fuese a reventar el coño. Pero me siento como si estuviese completa, como si esto fuese mi razón de ser, tu polla es la polla que necesita mi coño, dame caña que lo necesito
No fui tan impetuoso como me pedía, estuve más de 10 minutos abriéndole el coño poco a poco, cuando noté que entraba y salía sin dificultad, aumenté la velocidad hasta convertirla en un galope desbocado. Se corrió en pocos minutos y por ser su primera vez la dejé que disfrutase de el. Entonces mi hija María me soltó
- Conmigo no has de ser tan delicado que yo lo tengo bien abierto
Me tumbó boca arriba y ella misma fue empalándose.
- Dios como llena la polla esta, tu si que eres un macho, no como el gilipollas de mi ex
- Ves con cuidado que tienes varios moratones y no quiero lastimarte
- No te preocupes, me molesta el condón y yo si que tomo anticonceptivos.
Así que se la volvió a sacar, literalmente me arrancó el condón y volvió a metérsela.
- Que gusto así es mucho mejor. Hermanita toma pastillas cuanto antes, que esta polla es de vicio
- Como tienes tanta experiencia si eres una cría
- Mañana cumplo los 17, no soy tan cría. Hazme tuya como regalo anticipado de cumpleaños.
María empezó a cabalgar como una loca y a correrse cada pocos minutos.
- Joder nadie había conseguido que me corriese tantas veces, eres un dios del sexo papi
- Pues esto no es nada. Ponte a cuatro patas
- Si papi
En esa posición se la volvía a endiñar y estuve dándole un cuarto de hora hasta que me corrí llenándola tanto de leche que cuando salí rezumaba.
- Papi eres bueno, me he meado de gusto.- Me dijo María
En ese momento fue cuando me di cuenta que había un gran charco bajo de ella
- Vaya María eres una caja de sorpresas.
- Tu me haces así._ Contestó dándome una larga serie de besos que consiguieron empalmarme de nuevo.
- Papi nosotras tenemos el coño escaldado, no nos folles más
- Niñas dejad paso a la reina de esta casa, que la tenéis cachonda perdida._ Dijo mi mujer
- Ven aquí puta mía que te voy a dar caña de la buena
Empezamos a follar como auténticos animales a la vista de nuestras asombradas hijas. Cuando se había corrido dos veces me dijo
- Reviéntame el culo
No le había ordenado que me diese su culo. ¿Se estaría volviendo una gran sumisa sexual? Sin pensármelo más y con la polla lubricada de los jugos de mis tres mujeres se la metí sin contemplaciones, no aguanté mucho, la verdad, pero fueron unos minutos gloriosos que me dejaron completamente satisfecho.
Bueno ya me había convertido en un pervertido incestuoso, y así se lo dije a mis mujeres, mientras nos tumbábamos a descansar en los sofás. Entonces Marta me dijo
- ¿Porque crees que era virgen? Te recuerdo que estoy muy buena y chicos no me faltan
- ¿Pues porque?
- Porque tú eres el único hombre que tenía el derecho y el deber de desvirgarme. Dijo tremendamente sería
- Gracias hija, he aceptado este regalo con mucho deleite. ¿Y tú qué opinas María?
- Hace tiempo que dejaste de ser sólo mi papi, el bulto de tu entrepierna cada vez que nos poníamos pronunciados escotes me tenía intrigada, no sabía que era tremenda, pero me imaginaba que era grande. Solo salí con ese gilipollas para calmarme y no ir cachondísima todo el día. Ahora tengo claro que mi coño, mi ser, mi amor y mi vida son tuyos.
- Y tú Bego ¿Qué opinas?
- Hace tiempo que noto la atracción que tus hijas sentían por ti, pero pensaba que sería algo idílico y pasajero. A menos que probasen tu polla, es adictiva una vez la tienes dentro no puedes vivir sin ella. Por eso se que moralmente está mal, pero no las puedo privar del placer que les puedes dar.
- Sabiendo que a todas os parece bien, mis reparos morales se desvanecen, desde hoy sois mías, y sólo follareis conmigo.
- Sí papi._ Dijeron las dos al unísono.
- Otra cosa si conocéis a una mujer solitaria, presentádmela, voy a crear una red clientelar que me haga disfrutar tanto sexual, como en todos los sentidos.
- Papi tengo a la candidata perfecta._ Dijo María
- ¿Quién?
- Mi profesora Luz, la de de educación física, desde hace unos años las desgracias les persiguen tiene varias medallas en tiro con arco, pero las tetas se le desarrollaron tardíamente haciéndose enormes y tuvo que dejarlo. Cuando tenía 5 años sus padres murieron en un accidente de coche, hace dos años pilló a su ex marido follando con otro tío, y el año pasado murió su abuela materna que era la única familia que le quedaba. Además alguien corrió la voz de que era lesbiana y había acosado a una alumna, todo mentira pero aunque se aclaró, ella cogió una profunda depresión que la aisló de todo el mundo. Está dando clases de nuevo pero intenta que nadie se le acerque demasiado, porque no quieren que le hagan daño.
- Perfecto el lunes voy por ti y me la presentas.
- Vale papi
Nos fuimos a dormir, y al día siguiente estaba en la puerta del colegio de mi hija, esperándola. Cuando salió, la felicité por su cumpleaños y me cogió del brazo, como hacía siempre y me dijo
- Está en el gimnasio, vamos a verla
Cuando llegamos al gimnasio, la vi. Era una mujer de estatura media, pelo rubio corto, pechos gigantes, como los de mi mujer más o menos, tenía un cuerpo perfecto, sin un solo gramo de grasa, fruto del machaque que se daría en el gimnasio.
- Luz quería hablar contigo._ Le dijo María
- Sí, María ¿Qué quieres?
Al girarse pude comprobar que era una mujer normal, ni guapa ni fea, eso sí sus ojos denotaban una tristeza profunda
- Este es mi padre Pascual, quería hablar contigo.
- Dígame Don Pascual
- Mira Luz a partir de ahora estás bajo mi poder
- Si Don Pascual, como quiera Don Pascual
- El viernes cuando acaben las clases quiero que acompañes a María hasta mi casa, pues allí te daré instrucciones.
- Sí Don Pascual…._ Bueno ya sabéis la frase de rigor
Os preguntaréis, porque me esperaba hasta el viernes, pues sencillamente, porque pensaba pasarme la semana reclutándolas y el fin de semana las iría citando, una a una para darles las instrucciones pertinentes. Y fallármelas claro. Mientras tanto tenía a mis tres chicas.
Al llegar a casa, Marta me dijo
- En mi clase hay una chica, se llama Soledad, puede que se adapte a tus gustos, tiene un problema de adicción, sus padres ya están hartos de ella y la han tirado de casa. Nadie quiere tenerla cerca, pues ha robado, mentido y engañado a todo el mundo, por lo que está más sola que la una. Le he pedido que venga, para que tú la veas.
En ese momento llamaron a la puerta, fui a abrir y me encontré a una chica delante mío. Era un auténtico cadáver, blanca como la pared, profundas ojeras en unos ojos hundidos, le temblaba todo el cuerpo, que era de por si esquelético, eso sí, poseía unas grandes tetas, no hacía más que rascarse la nariz.
- Pasa chica._ Le dije
Y ella con una voz gangosa, fruto del estar bajo los efectos de alguna droga, dijo buenas y pasó. Me preocupó nada más verla, le ordenaría que dejase de consumir drogas, pero el síndrome de abstinencia podía ser terrible, por lo que tendría que tenerla en casa, para vigilarla. Así que me puse delante de ella y le dije.
- Soy Pascual, el padre de Marta, a partir de ahora dejarás de tomar cualquier tipo de sustancia estupefaciente, incluido tabaco y alcohol. Además vas a vivir aquí con nosotros, pues quiero controlarte y vigilarte. ¿De acuerdo?
- Si Don Pascual, lo que usted diga Don Pascual._ Y entró y se sentó en un sofá
- Papi, esta está muy enganchada, ¿de verdad crees que por decírselo tu va a dejar de consumir?._ Dijo Marta
- Sí, y tu también lo vas a creer
- Vale papi.