Shirly Hot House capitulo 3

Es el tercer capitulo de la serie Erotica de suspenso y ciencia ficcion, que cuenta los distintos enredos sexuales, dando surgimiento a relaciones incestuosas, Bi, Gay, les, en todas las formas existentes, para que el lector se distraiga y se excite usando su imaginacion más aya de la realidad

Capitulo 3

(¿Café con leche?)

Como todas las mañanas, la primera en levantarse era Shirly, se baño como lo hacía de costumbre, se puso su aburrido traje formal, zapatos negros de tacos altos, medias negras una pollera gris hasta la rodilla, camisa blanca y una chaqueta gris, a pesar que era un traje formal todo en ella se veía sexy era la virtud de tener un cuerpo con muy buenas curvas. Luego bajo a la cocina, para preparar café, y comenzó a hacer el desayuno, algo habitual en todos los hogares, un instante después bajo Sophia, y se sentó en la miza de la cocina junto con su mamá,

—Davis me conto lo que paso las otras noches…, -dijo Sophia-, estaba como loco pajeandoce a todo lo que da al costado de la piscina, -agrego-

—¿De verdad?... ¿Por qué habrá sido?, -dijo irónicamente, y las dos se rieron-,

Sabían muy bien lo que pasaba en la casa con Davis, pero hasta ahora no se hablaba mucho del tema, era como que no hacía falta hablar.

—me agrada lo que Ailyn nos propuso que hagamos como familia y estoy de acuerdo en participar, -dijo Sophia-,

—¿Te refieres a que… debemos excitarlo, provocarlo hasta que su mente estalle para que sus sentimientos sexuales se enfoquen en una persona ajena a la familia?, -dijo Shirly-.

—quiero participar para ayudarlo, -dijo Sophia-,

Shirly la miraba y sólo pensaba, «que ingenua que es mi hija, si supiera que yo seduzco a su hermano, desde hace mucho tiempo, por placer propio, para zacear mis fantasía», pensaba Shirly, pero como hacia tanto tiempo que mantenía reprimida su verdadera personalidad, no quería que ella notase lo retorcida que podía llegar hacer su imaginación,

—No sé si está bien que participes en esto…, -le dijo Shirly-, tu eres su hermana y esto no te incumbe a ti,

Para mantener apariencias, hablaba como una persona muy coherente, pero en realidad tenía miedo que su hija fuera competencia para ella con los hombres que la excitaban.

—¡Sé que puedo ayudar muy sutilmente cuando tu no estés en la casa!!!, -dijo sonriendo-,

—Esta bien… ¿pero se prudente?, -respondió de inmediato-, no quiero que se te valla la mano excitándolo demasiado…,

Por lo menos estaba segura que su hija no sabía, que la charla que les dio Ailyn, fue por un pedido de ella. En realidad era algo un tanto más complejo, Cristopher le dijo  a Ailyn, cuando estuvieron juntos, que le hiciera creer a Shirly que la solución a sus problema con Davis, era pervertirlo al extremo, y a cambio de ello, Cristopher le retribuiría sexualmente el favor. Ailyn no tuvo que convencerla a Shirly de nada. A través de las sesiones con Davis, Ailyn sabía que Shirly, lo hacía muy sutilmente desde hace mucho tiempo, pero la indujo a pensar que hacerlo abiertamente como recomendación profesional lo ayudaría a mejorar mucho más rápido a Davis, Shirly ignorando las intenciones de su amiga, y pensando en su beneficio propio, pensó que:  «¿la indicada para comunicar le a su esposo e hija, lo que debían hacerle a su hijo Davis, es, Ailyn?, ¿de esa forma todos seguirán creyendo que soy una buena mamá?», Sophia ignorando todo lo que pasaba por detrás de ella, también tenía un interés personal, cuando escucho, que utilizarían el complejo de Edipo en contra de su propio hermano, pervirtiéndolo hasta que su cabeza no pudiera saber que es malo o no, vio la oportunidad de vengarse por todos los años que él la había tratado como su hija y no como hermana, de paso exploraría la sexualidad que estaba empezando a florecer muy fuertemente en ella, Davis sin saberlo se convertiría en el títere sexual de todos, y precisamente esa mañana todos iniciaba de una forma natural la tarea de pervertir la mente de Davis, para lo que cada uno iba a comenzar a prestar ayuda para algo que pasaría a ser un jobbi, muy divertido para todos.

Cuando Cristopher  entro a la cocina, mientras madre e hija charlaban sobre Davis, disfrutando de un café, pensó que era el momento de poner las bases de cómo sería su vida y su matrimonio con Shirly, se acerco a su esposa, saludo a Sophia, casi sin prestarle atención y tomo a Shirly por la cintura la abrazo y la beso como un verdadero amante,

—¿Sabes que es lo que me gustaría que hagas a la mañana ante de irte al trabajo?, -le dijo él, muy románticamente, entre besos y abrazos-,

—No se mi amor… ¿que quieres que haga cada mañana?, -le respondió ella-,

—Quiero que dejes el recuerdo de tus labios grabado en mi, - respondió él-,

La frase de inmediato saco sonrisas a las dos mujeres, que veían en él, el hombre romántico, recio, sexy y varonil con el que sueñan todas las mujeres,

—¿Cómo dejo mis labios grabados en ti?, -pregunto muy ingenuamente con el tono de niña buena-.

—lamiéndomelo…, -respondió-, mientras desayuno cada mañana,

Shirly de inmediato, se puso seria, sabía que él era tan depravado como ella y que compartían el gusto por coger delante de las demás personas, pero lo que a ella le causaba realmente placer era hacerlo delante de Davis.

—mi amor…, -dijo ella con una voz suave-, se supone que tenemos que tener muestras de pasión delante de Davis…  no de Sophia… no tengo que excitar a mi hija, -le respondió ella-,

—Lo sé… pero si estaremos exhibiéndonos desnudos, teniendo sexo por todos lados, ella nos vera y tiene que sentirse como da con ello y no molestarse cada vez que nos vea…, -le explico él-,

A ella la idea le encantaba, sus ojos brillaban y de re ojo la veía a su hija sonriente mientras tomaba su café, «¿Qué sexy es lo que quieres que haga?, ¿pero no quiero quedar como una puta delante de Sophia?», pensó Shirly.

—Que de ahora en más veas mucho sexo en la casa no significa que todo está permitido, -le dijo Shirly a su hija-, él es mi esposo, por eso yo hago lo que el me pida, pero nadie más lo puede hacer con él… ¿esta calro?...

—si mamá…, -respondió ella-,

Mmientras Shirly le  bajaba el sierre del pantalón a su esposo y sacaba su gran pene afuera,

—quédate tranquila…, -le dijo Cristopher-, a ti es a la única que amo, «pero no a la única que me cojo», ella solo vera… y se beberá por mi pene… pero no tocara ni probara, «mientras estes en la casa», -le intento dar un poco de confianza-,

Shirly le dio un enorme beso aceptando las cursilerías que decía.

—de una vez mami… ¿te comerás ese enorme trozo de carne?, ¿Por qué me estas haciendo desear?..., -dijo irónicamente Sophia-, ¿si estas a dieta?... ¿no quiero que te salgas de ella?

—hay para todas… no se pelen, -respondió a la ironía de Sophia-, ahora miamor ponte de rodillas y demuéstrale a tú hija como se mama una verga grando como la mía, -le dijo él, a Shirly-.

Ella acato la orden, pero mientras iba ancándose, le dijo

—No quiero que termines en mi boca,

Quería demostrar desesperadamente que ella se hacia respetar aunque solo fuese un poco,  y mientras miraba a su hija y a su esposo, se metió el largo pene en la boca, Sophia hizo una cara de asombro no imaginaba que su madre hacia eso tan bien, le resultaba sexy, y mientras él disfrutaba del sexo oral mañanero, a Sophia se le ocurrió algo que le agrado a la pareja,

—Cuando estés por terminar no lo hagas en la boca de mamá…, -dijo ella-, para que no se moleste contigo… en cambio acaba en la taza de café, ¿y dásela a Davis para que la beba?…, -dijo Sophia-.

Shirly de inmediato sonrió, le había encantado la idea, así que se lo hacía con más ganas imaginando el momento que Davis se tragara la abundante eyaculación de se esposo.

—¿tu hija me encanta?… , -le dijo Cristopher a Shirly, mientras se la mamaba-, tiene la mente tan sucia, igual que su madre y nos dará buenas ideas, «y tiene un cuerpos… que encuanto se distraiga me la tiro también» , -dijo, sonriendo por lo que estaba pensando-,

Pero apareció en la cocina Davis, no se percato lo que estaba pasando, ni vio a su madre detrás de la mesada en cuclillas haciéndole el sexo oral mañanero a su esposo, cuando estaba por acabar ella se detuvo se paro.

—¡Hola hijo!, -dijo ella muy simpática riéndose y limpiando su boca con una servilleta-,

«¿Ella apareció de repente, desde debajo de la mesada limpiándose la boca muy feliz y contenta?...».

—¡hay que asco!!!, estabas haciéndoselo a tu esposo delante de Sophia, -dijo Davis-, mientras desayuna lo mas tranquilo de la vida ese señor… eres una asqueroso zorra, -termino diciendo él-.

Pero su madre se acercaba con intenciones de saludarlo e intentar darle un beso en la boca.

—mi nene chiquito…, -dijo con voz burlona-, ven y dale un beso de buenos días a mamá, -él volteo la cara para evitar tocar sus labios-, ¿no te resistas?, ¿dale un beso a mami?...

—No dejare que me beses, -dijo él-,

—¿pensé que siempre quisiste que te diera un besito en la boca?… ¿que nuestras lenguas se cruzaran y nuestra saliva se mezclara?…, -le respondió ella-,

—si… siempre he deseado besar tu boca, pero no deseo hacerlo después que él a tenido su miembro en ella, -le contesto él-,

Pero ella sólo le distraía para que no notara que a sus espalda su esposo se masturbaba para acabar en la taza de café,

—Ya madre quítate…, -dijo Davis un poco fastidiado-, no te saludare con un beso, -termino diciendo él-,

Fue en busca de un poco de café, para desayunar

—Toma el mío que ya está listo, con leche y azúcar, -dijo Shirly-, de todos modos yo ya me he alimentado bien…

—Muchas gracias, -dijo él-.

Tomo la tasa que estaba sobre la mesada, le dio un largo trago, tomo el diario y comenzó a leer los titulares, él se relamía la había sentido un gusto raro.

—Si no me besas ahora en la boca… no dejare que lo hagas nunca,- le dijo ella-,

—ya te dije que después que has estado lamiendo el pene de tu esposo, no quiero ni tener tu cara cerca, -le respondió él-,

—¿te gusto el café con la abundante crema?..., -pregunto maliciosamente ella-,

—si, estaba muy bueno…  mejor que de costumbre … ¿Por qué?...,  -pregunto él-.

—Por nada, -dijo ella, y riéndose se retiro-, adiós cielo… te perdiste mis labios, -agrego cuando se alejaba-,

Detrás de ella salió Cristopher llevándola desde la cintura, su hermana también se retiro con ellos riéndose,

—¿Por qué se burlan?..., -le pregunto a su hermana antes de que saliera-,

—Te negaste a besar a mamá y él eyaculo dentro de la taza de café que tú tomaste con mucho gusto, -le dijo ella-,

—¿De verdad lo dices?, -pregunto él-,

—lo blanco, no era crema, -dijo Sophia dando la media vuelta- y marchándose con ellos-,

Davis quedo asombrado, no podía creer que fuese verdad, olio la tasa un par de veces, pero la verdad que no había sentido ningún aroma que confirmara lo que ella le había dicho, y así mismo se dijo «?espero que no sea verdad lo que me dijo Sophia?, ¿Por qué estaba delicioso el café?», pero del sólo pensar en ello revolvió su estomago y tuvo que correr al baño para devolver todo. Ese día pintaba feo, pero no se podía poner peor que eso, comenzó su trabajo en la casa, a realizar todas las modificaciones que le había marcado Cristopher, corto el pasto, limpio la piscina, aseó toda la casa, mientras su padrastro retozaba con su terapeuta, Ailyn, y cada día fue el calco del anterior, aunque había cosas que no se repitieron, como presenciar en el mismo cuarto a su madre cogiendo, que le hubiera encantado que pasara seguido, solo para poderla ver desnuda bien cerca de él, algunas otras cosas él deseaba que no pasaran jamás y cada vez que tomaba algo intentaba prepararlo él mismo, porque desconfiaba de todos. Un mes después de ese horrible día, por fin había concluido todas las reformas que le había pedido su padrastro.

—Te quedo muy bien el trabajo…, -le dijo Cristopher-,

—gracias es muy amable… señor, -respondió Davis-,

—ven… tomemos unas cervezas mientras charlamos,

Fueron a la cocina sacaron de la nevera una caja con seis latas y salieron al patio, se sentaron en las reposeras junto a la piscina,

—me gusta lo que has hecho en la casa, ahora tendré una bañadera, además de las duchas y un enorme yacusi a donde poder coger con tu mamá …, -decía Cristopher-.

Pero Davis, no contestaba, no quería conversar con él, lo odiaba e intentaba mantenerlo lejos, por más que en el fondo en realidad le agradaba, porque Cristopher era todo lo que él soñaba ser, un semental, que cogiera a diestra y siniestra a todas las mujeres que tuviera ganas, pero se mantendría firme y no cambiaría su opinión  de él ante los demás.

—¿tienes novia?, -le pregunto a Davis-,

—no, -respondió-,

Se limitaba a contestar mono sílabos, para que no se confundiera y notara la distancia que ponía entre ellos,

—¿pero supongo que te has tirado alguna chica en algún momento?, -pregunto irónicamente Cristopher-.

—no… jamás he estado con una chica…, -contesto Davis-, siempre he amado a la misma mujer, -dijo Davis-.

—¿a tu mamá?..., -dijo Cristopher-, ¡y que irónico!, yo me la paso cogiendo a esa puta todo el tiempo… ¿y tú te muerde de ganas por acerlo?...

Davis no contesto, se limito a seguir bebiendo su cerveza, el pensaba: «¿se que disfrutas refregarme que te coges a mi mami?, ¿pero no te daré el gusto de que me hagas enojar?»

—te entiendo… a mi me encanta coger con ella, es una puta que lo hace ¡muy rico!!!, -agrego Cristopher-,

—No hables así de ella, -le dijo Davis-,

—Es mi esposa… y gracias a ti tengo lugares nuevos para cogerla, la bañera, el yacusi, la mesa de pool, -dijo él-, y cada vez que lo hagamos en eso logares recordare que tú los construiste para que me divierta… y lo haré con más fuerza para no defraudarte.

En ese momento lo interrumpió,

—la mesa que compro con el  dinero de mis cosas que vendió, -dijo Davis-,

—¡si, esa mesa!!!, pero ese dinero me alcanzo para comprar una cama estragando para hacer orgias, -le respondió Cristopher enervar en el la ira la bronca y los celos-.

—¿Crees que a ella le gustara esa idea?, -dijo Davis-, es una madre, y no va con ella el hacer orgias.

—a mi si me va a gustar mucho, -le respondió Cristopher, se rio un poco y le dio un golpecito en el hombro-, ¡oye!!! no seas tan serio… piénsalo de esta forma… ¿soy tu padrastro… me cojo a tu madre tengo todo lo que tu soñaste durante todos estos años…?, -dijo presumiendo sus logros-, tendrías que ser feliz por ella y por mí… que gozamos del sexo a todas horas…

Davis no lo quería admitir, pero era verdad, lo que le decía, tomo su segunda cerveza, y presencio el humillante espectáculo de ver desnudarse a Cristopher para recostarse a tomar sol.

—¡esto es vida!!!..., -dijo Cristopher-, tener una mujer con dos grandes pechos… una hermosa cola y una cocha para coger queda vez que tenga ganas…, -y continuo diciendo-,  no tener que trabajar, poder estar todo el puto día echado bebiendo y tomando sol sabiendo que mi esposa trabaja para traerá el dinero a casa, sin que yo me esfuerce… ¿eso es vida?

—¿te gusta ser un vago?..., -pregunto Davis-, ¿Qué solo vive para verse bien, hacer gimnasia, tener buenos músculos y estar brenceado?...

—Soy un feminista…, -contesto él-, amo a las mujeres y les doy lo que ellas quieres, -expreso su idea, su filosofía de vida-,  tantos años las mujeres tuvieron una vida de óseo, disfrutando de los placeres del hogar, sin tener que trabajar, sin horarios y esfuerzo alguno, metiéndole las guampas a sus hombres cuando ellos estaban ganándose el sustento para mantenerlas…, y ellas rechazaron eso para ocupar otro espacio en la sociedad…, -después de un pequeño silencio como para que Davis lo meditara, continuo diciendo-, yo simplemente, disfruto de los logros de ellas, dejo que trabajen y que traigan el sustento, a cambio les doy momentos de increíble sexo, por eso cuido mi cuerpo…,

Pensaba Davis mientras que Cristopher hablaba: «¿es verdad lo que dice?, cuantas veces ellas recalcan que quieren ser tratadas como igual… y son las primeras en auto discriminarse, entre ellas no se seden los asientos en los colectivos, y siempre están buscando saltarse las filas en los bancos y los super mercados, por el solo hecho de ser mujeres… ¿si este hombre no se cogiera a mi madre, seria mi ídolo?». En ese momento Cristopher se coloco los anteojos de Sol y cuando Davis supuso que la conversación había acabado y se podía ir el pregunto,

—¿Ya se los tocaste?, -dijo Cristopher-,

—¿Qué cosa?, -respondió con otra pregunta-,

—¡ya sabes… los enormes pechos de tu mamá!!!, -contesto Cristopher-,

Intentando querer indagar sobre su vida, aparentando una conversación amena de amigos, pero  no le pudo responder por que llego su hermana de la escuela con una amiga, se pararon junto a ellos.

—hola Cristopher…, -dijo ella-,  hola Davis…,

La amiga estaba baboseándose, admirando el enorme pene de Cristopher,  y exclamo

—¡guau… que grande que es!!!,

—Todavía no has visto cuando lo tiene duro, -respondo Sophia-, son como cuarenta centímetros de por sexo.

—Tu linda amiga… ¿quién es?, -pregunto Cristopher-,

—Ella es Abby… y se quedara unos días hasta la reinauguración de la casa, -contesto Sophia-, nos vamos a poner los trajes de baño para asolearnos y meternos a la piscina, -agrego Sophia-.

—Para que los trajes de baño…, -dijo Cristopher-, ¿si no les molesta que yo este desnudo?, ¡a mi no me molesta que ustedes lo estén también!…, -agrego Cristopher-.

Las chicas se comenzaron a desnudar, muy lentamente hasta dejar sus cuerpos totalmente sin ropas

—¡hablando de un buen par de tetas!!!, -exclamo Cristopher-.

—¡oye son niñas!!!, -dijo Davis-.

—no está prohíbe mirar…, -dijo Cristopher-, ¡además ella ya vieron mi pene, yo quiero ver sus cuerpos!, -le respondió-.

Las chicas bailaban sensualmente delante de ellas, tocándose y rosando sus cuerpos muy eróticamente, al tiempo que se iban metiendo en la piscina «¿son hermosas?, ¿Qué daría por poder coger con una de ellas?» pensaba Davis.

—pero todavía no me respondes…, -Cristopher distrajo a Davis que se estaba babeando por las niñas-, ¿ya le tocaste las tetas a tu mamá?…,

—No… sólo le he espiado, -respondió muy apenado-,

—¿Cómo espías a tú hermana cuandose baña?, -pregunto Cristopher, riendo burlona mente-,

Él se sintió molesto, estaba apenado, Cristopher indagando en cosas muy intimas para Davis, que él, había mantenido en secreto, a pesar que todos sabían lo pervertido que era Davis, se levanto con intenciones de irse.

—Alto allí, la conversación termina cuando yo digo, -dijo enérgicamente Cristopher-

Davis volvió a sentarse en la reposera, tragando saliva haciendo el ultimo esfuerzo para no excitarse viendo a las dos chicas dijo.

—Hay cosas que todavía no puedo hablar abiertamente, y que las estoy tratando con Ailyn, -respondió Davis-.

Cristopher se levanto dio dos pasos largos y salto en clavado dentro de la piscina,  pasando por encima de la cabezas de las chicas que gritaron de alegría y excitación, con ese alarido agudo y estridente, que caracteriza a todas las mujeres, cuando vieron pasar volando por sobre sus cabezas ese gigantesco pene, que parecía moverse en cámara lenta…     Cristopher una vez en el agua, inicio un juego inocente con las muchachas, tocando a las chicas y haciendo que ellas lo tocaran, con la intención de provocar mayor excitación en Davis.

—¿Por qué no se besan chicas?, -dijo Cristopher-,

Las dos chicas se besaron…, como si se conocieran muy íntimamente,  pero se detuvieron, cuando entro Shirly. Se acerco a la piscina y los vio a todos desnudos en ella, Davis se paro y le dijo a su mamá.

—¿hola mami…, -le dio un abrazo y no pudo evitar hacer rosar su pene erecto contra el cuerpo de ella-, disculpa… estábamos charlando con Cristopher…

Dio la media vuelta y se entro a la casa, muy apenado, ella lo siguió y entro con él.

—¿Paso algo mientras yo no estuve?, -pregunto Shirly-,

—No… ¿pero tal vez? ¿si no hubieras llegado?…, -contesto, si sañosamente, Davis-, ¿ya se estaría cogiendo a las dos chacas?... y hablo de querer tener orgias contigo.

Ella mientras escuchaba a su hijo, le bajo la bragenta y comenzó a tocar su pequeño y duro penes, pensando: «esto se esta poniendo interesante… ¿con quien estará planeando tener orgias?...», ella como si se tratara de una manija lo toma a Davis por su miembro, y lo condujo nuevamente hacia afuera, lo sentó en la reposadera en la que estaba.

—quédate ahí masturbándote…, -dijo Shirly-.

Él escucho las rizas de las chicas y de inmediato supo que se estaban burlando de su pequeño pene, ¿tal vez, no era tan pequeño?, pero comparándolo con el de Cristopher era diminuto. Shirly haciendo un estriptís fue dejando su ropa en el suelo junto a la piscina, por ultimo quito su sostén y al sacar sus bragas… intencionalmente se inclino, exhibiéndole a su hijo, en el rostro, su hermoso trasero, Cristopher con las dos chicas, seguían jugando en el agua estimulados por el espectáculo de Shirly.

—¡Ven aquí, mi amor!, -dijo Cristopher-,

Ella entro al agua, y Cristopher, la tomo entre sus brazos de inmediato, le dio un beso.

—Te extrañe toda la tarde, -le dijo él-,

—¿no se nota?..., -contesto-, ¿has estado bastante entretenido?, ¿por lo que veo?

—¿Estas celosa?..., -pregunto él-.

Ella se rio, y continuo besándolo, demostrándole que no le molestaba verlo desnudo en el agua con dos jovencitas.

—Date la vuelta, -continuo diciendo él-,

Ella volteo, quedando de frente a su hija y su amiga, que observaban atentamente, muy de cerca el ritual de seducción de la pareja, veían como él la acariciaba con sus manos desde atrás, le besaba él cuello, y le apretaba los pechos

—inclínate, -le indico él-,

Ella apoyo sus ante brazos en el borde de la piscina, quedando con parte de su cuerpo afuera, entre su hija y la amiga de ella, que de inmediato posaron sus manos en la espala y el pacho de Shirle, besando sus hombros, frotaba su pene en el culo de ella y cuando estaba por penetrarla, ella lo detuvo,

—alto, ¿por la cola aún no estoy preparada para que me lo hagan?..., -dijo Shirly-. ¿y no se si esta bien que las chicas estén presentes?...

—¿No creo que a las chicas le moleste ver cómo te cojo…?, -dijo, él-, ¿ademas?... ya están excitadas… ¿deja que disfruten el memento?...

Shirly, miro a su hija, giro la cabeza, y miro a Abby,

—esta bien señora… no hay problema, -le dijo la amaga de Sophia-,

Mirando directamente a los ojos de Shirly y solamente bajaba un poquito la mirada para mirarle la boca, las dos fueron acercando sus rostros lentamente y Abby beso a Shirly, para ambas era el primer beso con una mujer, «¿Qué ricos son los labios de una mujer» pensó Shirly, que no quería dejar de besarle a Abby, mientras sentía como lentamente el pene de su esposo entraba en su cuerpo, haciéndola gemir y gritar, como pasaba cada vez que le cogía, Sophia, como disfrutaban, y no podía aguantar la calentura que tenia dentro sin participar con ellos, así que se coloco por debajo del cuerpo de su madre, rodeada por los pechos de Shirly y de Abby, a los que beso y lamio uno a uno, para después meter sus dedos en la vagina de su amiga, haciendo que sus manos le dieran el placer femenino que solo una mujer le puede dar a otra.

Esa misma noche, cuando se estaban yendo a dormir, Shirly, decidió hablar con su esposo,

—Hay algunas cosas que me preocupan…, -dijo Shirly-, ¿Davis menciono que estas pensando tener orgias?… ¿es verdad eso?...,

—si…, -respondió él-, ya hemos tenido nuestra primera orgia en la piscina…, -dijo irónicamente y agrego-,  me gusta cómo has sido desde que te conozco, dispuesta a probar cosas que hagan de una simple relación sexual una experiencia única, como la de esta tarde…, ¿Por qué no dejamos que las cosas se vallan dando naturalmente?

—me gusto… fue sexy, pero no me convence exhibirme, delante de otra persona que no se a Davis…, -dijo ella-, me excita sobre manera hacerlo delante de él y provocarle celos… y a pesar, que cuando lo hago en público, me excita el temor a ser pescada infraganti o que un extraño me mire sin que lo sepa, no es tan intenso como cuando Davis está presente.

—me he dado cuenta que coges más rico cuando esta él…, -dijo Cristopher,  ¿pero debes explorar otras opciones?, que también me gusten a mi… quizás podamos tener orgias delante de Davis, -le respondió él-, además tu escuchaste lo que nos dijo Ailyn, debemos llevarlo al límite, y poner ante él otras personas para que deje de obsesionarse con vos…,

Ella lo escuchaba atentamente, sabía que esa era la escusa, el ayudar a superar el complejo de Edipo de Davis, pero en realidad, Shirly no deseaba que se enamorara de nadie más que de ella, quería seguir siendo la mujer que lo trastornaba y que lo llevaba a la locura, pero no quería confesar, la verdad, que era una adicta al sexo raro, incestuoso, y sucio, así que solamente le dijo a su esposo.

—Está bien… tienes razón… yo seguiré la corriente de lo que tu hagas.

—Muy bien… entonces mañana hay que buscar una mucama…, -le dijo él-,

—¿Para qué?, -pregunto ella-,

—Para que haya una mujer disponible, sensual y atractiva que distraiga las miradas de Davis… y que haga que baje la guarda, así nosotros podamos tener más tiempo libre para coger.

esta historia continuara...

a los que la han leido y les a gustados les agradeszco sus comentarios, así mismo pido disculpas a los que no la han disfrutado, porque no comprendieron el objetivo de la misma o por mis faltas de ortografia, ya que todos tenemos un poco de ellas y que normalmente escribo de madrugada en mis noches de insomnios, igualmente me nutro de sus criticas buenas o males... no dejen de hacerlas valoro mucho lo que me dicen, besitos a todos, con cariño Sofía.