Sexo grupal-Fiesta de egresados con 23 pendejos 1º

Primera Parte de un gang bang con 23 pendejos que festejaron su fiesta de egresados.

Este gang se dió porque tenía que ser, no lo estaba buscando, pero por suerte todo fue saliendo para que ocurriese.

Para ese entonces me encontraba fuera del país por trabajo, y me surgieron unos temas fiscales que tenía que resolver. Traté de dilatarlo lo más que pude pero mi contador me dijo que si no me presentaba tendría problemas con la AFIP, y que solo era un trámite, era lo último que quería hacer pero no quería problemas y me escapé del trabajo unos cuatros días.

Era fin de noviembre del 2013, arribé a Ezeiza. Mis padres esperaban por mí, quienes me alcanzaron a mi casa a buscar los papeles para el fisco. Ellos se quedaron en el auto con las valijas porque no me iba a quedar en mi casa, ya que pensaba quedarme en la casa de ellos ese par de días, mas que nada para ponernos al día, después de tanto tiempo sin vernos.

Entré a mi departamento, busqué unos papeles que tenía que llevarle a la AFIP, donde me esperaba mi contador. Por su puesto me llevó casi media hora encontrar todo, nunca fui muy organizada con esos temas.

Mientras estaba cerrando la puerta, me tocan del hombro por detrás. Grité como una loca del susto.

Cuando me di vuelta era mi vecino Ezequiel, quienes leyeron mi relato: "mi primer gang bang, sexo grupal con 7 pendejos", saben quién es.

-Pensé te habías mudado, me quería morir, me dijo.

Le explique que estaba fuera por trabajo, y que estaba de pasada, que estaba apurada.

-Espera no te vayas, te extrañé mucho, me dijo.

Era un buen vecino, no muy seguido pero cuando estaba en casa me garchaba muy bien, fue adquiriendo muy buena práctica y me sacaba unos cuantos orgasmos.

Le vi esa cara de nene esperando los caramelos, y soy débil, no se lo podía negar.

Abrí de nuevo la puerta de mi casa, lo tomé de la mano y lo metí adentro conmigo. Cerré la puerta y lo empujé contra esta. Le desabroché el botón del jean, y le metí la mano debajo del boxer. Eso es lo bueno de los pendejos, apenas hablamos y ya le tenía muy dura.

Le agarré bien fuerte la pija, y lo empecé a masturbar, le metí mi lengua en su boca y nos besamos mientras le sacudía su pija. Con sus manos me manoseo mi culo sobre el jean negro ajustado que tenía puesto, solo dejaba de apretarme la cola  para manosearme las tetas sobre mi camisa blanca corta y ajustada.

Su pija parecía que explotaba en mi mano hervía de lo caliente que estaba, sentía sus venas bien dilatadas, solté su pija solo para apretarle los huevos con mucha fuerza, nuestras lenguas no paraban de acariciarse.

Ezequiel gemía como un animal, parecía que explotaba, cuando sus gemidos me decían que estaba por acabar le agarré con mis dedos índice y pulgar la base de su pija haciendo un anillo y se lo apreté muy fuerte.

Cuando largó su leche explotó del dolor y placer me dijo, le dolió demasiado esa acabada por la fuerza que le hacía en la base de su pija pero fue una de sus mejores me dijo.

No había tenido en cuenta, que todavía me esperaban mis padres, y mi vecino me llenó de leche mi camisa y pantalón a la altura de la cintura. Pero no importaba, tenía algo de ropa en mi placard.

Si hay algo que no suelo hacer es dejarle la pija sucia a alguien, por lo que me arrodillé delante de Ezequiel, le terminé de bajar el jean y el boxer, le pasé la punta de mi lengua por los huevos, se los recorrí hasta el último milímetro, para luego meterme la verga en mi boca para limpiarle hasta la última gota de leche, me la tragué toda su verga hasta el fondo de mi garganta, cuando terminé con su pija, pasé a sus huevos, primero le chupé su huevo izquierdo, para luego terminar con sus dos huevos en mi boca, se los chupé un par de minutos y le dije, espero te alcance por unos meses.

-No me dejes así, estoy para cogerte de vuelta, me dijo.

-Me tengo que ir en serio, pajeate mientras me cambio le dije riéndome.

Fui a mi cuarto, busqué en el placard dos prendas que combinen, al final encontré un pantalón de vestir negro con una remera verde.

Me saqué mi ropa, quedé completamente desnuda mientras Ezequiel me contemplaba.

Por favor entregame el orto y no te jodo mas......por hoy, se rió.

Y como saben bien, no me cuesta mucho entregar mi cola.

Me puse en cuatro en una de las puntas de la cama, mis piernas y manos quedaron sobre el colchón y con mi cola parada apuntándole a mi vecinito.

Me escupí los dedos de mi mano derecha, y me los pasé sobre el ano, con ni dedo índice me puse un poco de saliva dentro de mi ano, pero Ezequiel no me dejó terminar. Apartó ni mano de mi culo, con su mano izquierda me tomo de la cintura del lado izquierdo, y su mano derecha agarraba su pija y me hundía la cabeza de su miembro contra mi ano. Debido a que tuve que adelantar unas cosas en mi trabajo y tuve que salir disparando, no tuve tiempo de coger, y hacía tres días que mi culo no probaba una pija, y se notaba que le faltaba dilatación, pero la calentura que tenía mi vecino, le hizo seguir presionando y presionando, hasta empecé a sentir como mi ano comenzaba a ceder y asomaba dentro mío su cabeza. Ejercía una fuerza constante la hundía la hundía hasta que su cabeza entro completamente de mi cola.

-Ahhhhhhhhh, grité, sentí una pequeña puntada, en mi ano. Pero mi vecino siguió como si nada, ya me conocía bien.

Pude sentir gran parte de su verga dentro de mi culo, y tomo de mis caderas con sus manos y empezó a darme duro. Su cuerpo chocaba contra mis nalgas con mucha violencia, podía ver su cara, por uno de los espejos de mis cuarto, y estaba hipnotizado, en como su pija violaba mi culo. Eran embestidas brutales, estaba desesperado, se veía que lo hice desear mucho tiempo y me lo estaba cobrando todo junto.

-Siiiiii, sisiiisiii, siii, te gusta, siiiii, ahhhhh decía Ezequiel.

La verdad me estaba lastimando el culo, me dolía en serio, es increíble, con todas las pijas que pasaron por mi culo, todavía tenga sensibilidad en esa zona, pero me encanta le da un condimento mas al sexo anal.

Cada vez sus manos iban subiendo mas por mi cuerpo, ya me estaba tomando por mi cintura, me embestía brutalmente con movimientos muy cortos y constantes, sacaba su pija unos centímetros de mi culo para volver a hundirla hasta el fondo, yo estaba completamente mojada, sentía como mis jugos bajaban por mis piernas hasta desembocar en mis sabanas. Fue una cogida muy intensa, pero solo duró unos diez minutos, hasta que dio un grito de desahogo y largó toda la leche que le quedaba dentro de mi culo. Me acarició mis nalgas y se recostó al lado mío boca arriba, yo seguía en cuatro, no sé que esperaba, pero estuve unos instantes con el culo parado lleno de leche.

De repente me acordé de mis padres que me seguían esperando abajo, salté de la cama y llamé al celular de mi madre, mientras sonaba sentí como bajaba el semen que tenía dentro de mi culo, la leche de Ezequiel salía de mi ano, bajando, por mi raya y continuaba su camino por mis piernas, no pensé que tenía tanta leche mas después de la paja que le hice.

Me atendió mi madre y le dije que ya bajaba.

-No te preocupes, ya te conocemos me dijo con voz de resignada.

Tomé mi tanga negra, me la pasé por mi concha para limpiarme mis jugos y se la tire en la cara a mi vecino que seguía tirado en la cama, me miró con una cara mezcla de felicidad y relajación, que me hizo sentir bien haberle dedicado ese tiempo. Algunas hacen obras de beneficencia, yo entrego mi cuerpo para traer algo de felicidad a unos pocos, así es la vida.

Me duché con agua fría, me había olvidado que el calefón estaba apagado, me lavé los dientes para sacarme el olor a pija de Ezequiel de mi boca. Y fui a cambiarme. Mi vecino estaba sentado en el borde de la cama con los pantalones aún en sus tobillos.

-Vestite que ya salgo, le dije.

Busqué una tanga, pero no encontré ninguna. Suelo llevarme toda mi ropa interior cuando viajo y toda la que tenía estaba en uno de mis bolsos. Me puse el pantalón sin tanga. Usé el mismo corpiño que traía, y me puse la remera verde. Sentía como el pantalón se me metía en la concha y entre mis nalgas, era bastante incomodo, pero por dentro mio pensé, quizás el inspector de la AFIP sea más bueno conmigo si me ve así, ojala fuese bien pajero pensaba.

Salí apurada, casi echándolo a mi vecino, me dio algo de ternura verlo con mi tanga en su mano derecha y con sus dedos acariciando la tela de mi tanga, me sacó una sonrisa esa situación.

Cuando cerré la puerta le di un pico y me despedí. Dame tu numero me dijo. Le mandé un mensaje de texto a su número que me pasó así le quedaba registrado.

Mirá que no hago sexo telefónico y esas cosas, le dije riéndome.

Me dedicó una sonrisa le di otro pico y fui a llamar el ascensor. Sentía que olvidaba algo. Por suerte me acordé antes de bajar, hubiese quedado en ridículo no bajar con lo que estuve buscando supuestamente mas de una hora. Tomé la carpeta con los papeles para el fisco y con Ezequiel sin sacar sus ojos de mí en todo momento bajé finalmente. Subí al auto y fuimos a la AFIP, en mi celu tenía varias llamadas perdidas y mensajes de texto de mi contador. Le respondí que estaba en 40 minutos.

No los voy a aburrir con temas fiscales, no creo que venga al caso, pero si a algunos tienen un fetiche sexual con los temas impositivos me preguntan y les cuento como me fue, jajaja.

En mi estadía en Buenos Aires, mas precisamente en Capital, pasó algo interesante, que ya les voy a contar en otro relato.

La noche anterior a volver a Canadá, recibo un mensaje de texto de mi vecino. Se los transcribo textualmente ya que lo tengo en el celu el mensaje.

-No sabes como tengo la pija, no se mueve para nada, esta muerta, jaja.

-Jaja, espero que haya valido la pena.

-No tenes idea, me cambias la vida Irina. Coger una hembra como vos, no se puede pedir mas.

-La pasé muy bien tb, cuando vuelva espero que tu pija este bien y seguimos. Beso

Esperaba que fuese el último mensaje, estaba muy cansada, vine por cuatro días pero estuve de aca para allá, tenía muchas cosas pendientes, es que por mi trabajo de un día para otro estoy a miles de kilometros y no me da tiempo a nada.

-No te enojes, pero unos chicos se enteraron de lo nuestro.

-??????????? explicame.

No estaba segura a que se refería pero no me gustó nada como sonaba.

-Si les conté como fue lo de ayer y lo del gang.

Lo llamé al celular, bastante molesta, si hay algo que cuido, es mi privacidad, soy toda una puta con todas las palabras, pero trato que mi vida personal, de amigos, familiares, quede completamente separada de lo que hago en la cama.

Me atendió: -Hola Irina, perdoná pero lo tenía que contar, es único lo que pasó con vos, y quería que supiesen, pero fue entre nosotros.

En parte era de esperar, es común entre  los pendejos que hablen de las minas que se cogen, lo hacen muchos maduros, no podía esperar menos de el.

-Pero igual te cuento esto para hacerte una proposición, me dijo.

No entendía nada, -Cómo? le pregunté.

-Te cuento, son unos chicos que estuvieron juntando plata para la fiesta de egresados, habían reservado el lugar, pero el boliche, lo clausuraron y se quedaron sin fiesta a último momento. Con la plata juntada, se la repartieron entre todos lo del curso, y estaban pensando hacer un viaje a la costa. Pero cuando les conté de vos y lo del gang que hicimos, me preguntaron si les alcanza para hacer uno con vos. Ezequiel no era compañero de ellos era mayor en un par de años pero los conocía de jugar al futbol, me había contado luego.

Me sorprendió la propuesta, pero le dije que mañana por la noche estoy viajando de vuelta. Que no iba a poder.

-Te esperan lo que necesites, vos decís cuando y listo.

Estuve a punto de decirle que no definitivamente, pero me excitaba la idea, el gang que tuve con Ezequiel y sus compañeros fue una de mis mejores experiencias. Me dio curiosidad, y le dije no te prometo nada, pero mañana hablamos.

-Ok, Besos, me dijo.

Pensé un poco sobre la propuesta, pero tenía muchas cosas en la cabeza y se me pasó.

Al día siguiente con una cosa y otra, ni me acordé.

Eso de las 18:30 hs, me manda un mensaje Ezequiel.

-Y????

-Perdoná pero vengo muy complicada, esta madrugada me estoy yendo.

-Querés que te alcancemos uno de los chicos tiene auto, y hablamos en el viaje.

No me desagradó la idea, además no tendría que molestar a mis padres, no me gustaba la idea de que manejen de noche, y si le decía que me alcanzaban unos amigos se quedarían tranquilos.

-Dale, pasen por la casa de mis mis viejos a las 00:45, si se demoran 1 minuto me pido un taxi, y le pase pasé la dirección por mensaje de texto.

-Olvidate, estamos ahí en punto, besos.

-Beso.

A los minutos, me llega un mensaje de Ezequiel: -Ahhh si sale el tema de mi, deciles que soy de los que mejor te cogen, y mandó un emoticón con carita sonrojada.

Me hizo reír, pero cuando estas con pendejos son cosas que pasan.

-Beso, le puse.

Eso de las 00:10 hs, me llega un mensaje:

-Estamos en la puerta, salí cuando quieras. Ezequiel.

Todavía me faltaba acomodar unas cosas. - En 15 salgo, le escribí.

-Dale.

No suelo viajar en avión en calzas, pero me puse una de color negra (quería que vean la mercadería) y una musculosa blanca, encima me puse una camperita deportiva roja, no hacía frío, pero en el avión hace falta por el aire acondicionado.

Me despedí de mis padres, y los vi, estaban en frente, fuera del auto, dos de ellos estaban fumando, mientras hablaban. Apenas me vieron, se congelaron, incluso mi vecino. Se me quedaron mirando estúpidamente, los saludé uno por uno con un beso en la mejilla, y a Ezequiel le comí la boca, con lengua y todo, quería hacerlo quedar bien.

-Vamos?, dije.

Uno de los chicos dijo: -No, sisi, ok. Apenas le escuché la voz.

Me subí primera a propósito y me senté en el asiento de atrás, en el medio.

Ezequiel subió adelante, en el asiento del acompañante, y los otros, uno manejaba y los otros dos uno a cada lado mio.

Ezequiel, me los presentó.

El que manejaba era Fernando, el de mi izquierda Sergio, y el de la derecha Alejandro.

Estaban mudos, el que mas hablaba era Ezequiel, pero también estaba algo tímido.

Tomé la iniciativa:

-Que tienen pensado chicos. Dije.

Alejandro, el menos tímido de todos dijo: - Hacer algo como hiciste con Ezequiel esa vez en tu casa. Unos de los chicos tiene una casa en Pilar, que solo la usan los fines de semana la familia y podríamos ir cuando quieras. Lo dijo tartamudeando bastante.

-Suena bien, dije.

-Tenemos $9375, alcanza?, me dijo.

Fernando no paraba de mirarme las tetas y las piernas por el espejo retrovisor, estaba segura que tenía la pija parada para ese entonces.

-Podríamos arreglar algo, pero con ciertas condiciones dije:

1º Tiene que ser entre el 26 y 27 diciembre que voy a venir para las fiestas.

2º Nos tenemos que hacer un examen de sangre y lo traen el día que nos encontremos, así lo hacemos tranquilos.

3º Nada de cámaras, celulares, ni nada.

4ºQueda entre nosotros, nada de que la vecina de Ezequiel se prostituye, ni nada.

Si están de acuerdo, lo hacemos.

Todos a la vez dijeron: -Siiiii.

-Tenemos la plata aca, querés que ya te paguemos, dijo Fernando.

-No, el mismo día me pagan. Y cuantos son en total? Dije.

-31 somos los chicos del curso, pero no sé si todos vienen. Dijo Alejandro.

-Ok, por dentro pensaba ojala estén todos, ya quería comerme las 31 pijas.

Estaba muy caliente, y levanté mi cola un poco del asiento y me bajé la calza junto con la tanga hasta los tobillos y me saqué la musculosa. Luego me saqué la musculosa y quedé sola con el corpiño puesto.

Agarré los bultos de Sergio y Alejandro por sobre los pantalones y empecé a apretárselos, Sergio ya la tenía completamente parada, Alejandro estaba en eso, Fernando miraba mi concha, abrí un poco mis piernas para que pudiese ver mejor, y Ezequiel giró la cabeza y contemplaba la imagen de su vecina con la pija de sus amigos en sus manos.

Fernando, no miraba de reojo, se distraía mucho con la situación por lo que le dije que baje de la autopista, bajamos y le dije fuese cerca del parque Chacabuco que hay unas cuadras demasiado tranquilas, le dije se estacionada en una cuadra debajo de la autopista que de día no pasaba casi nadie y menos a la madrugada que estaba por provocar un accidente.

Cuando estacionó decidí empezar con Alejandro, ahí donde estaba giré mi cuerpo para quedar sobre las piernas del chico de mi derecha, le agarré la pija por debajo del pantalón y del boxer y saqué su pija afuera, me acomodé como pude quedé de costado dándole la cola a Sergio. Me metí su miembro en mi boca y comencé a chupársela, todavía no la tenía completamente erecta, por lo que fue creciendo dentro de mi boca, mientras presionaba su pija con mi labio superior y mi lengua, de arriba a abajo acariciaba sus huevos. En un momento siento unas manos traspiradas que acariciaban mis nalgas, y de la nada un dedo penetró mi ano, era increíble del que menos pensaba que me metería un dedo en el culo sería Sergio que no me dijo ni una palabra en todo el viaje, ni siquiera me miraba, solo miraba por la ventana del auto, pero es verdad los callados son los peores, siempre me llevo esa sorpresa. Me penetraba con su dedo, supuse era el índice, costaba meterlo y sacarlo porque no lo había lubricado, pero igual lograba meterlo y sacarlo una y otra vez hasta el fondo.

No pasaron ni 5 minutos, que Alejandro eyaculó en mi boca, me largo una gran cantidad de leche que me tomó de sorpresa y no pude tragarla toda, algo cayó fuera de mi boca, por lo que terminé de tragarla, y chupe su pija y huevos para dejársela limpia, cuando terminé con la pija de Alejandro, me acomodé y quedé sentada devuelta, pero esta vez sobre la mano de Sergio, y su dedo dentro de mi culo. Pensé que me lo iba a tener que llevar conmigo a Canadá, con su mano incrustada en mi culo. Los chicos de adelante miraban, como si fuese una película. -Ya estoy con Uds., chicos, dije. Tardó en darse cuenta pero sacó su dedo de adentro mio, me incliné hacia el, lo besé, metí mi lengua en su boca, y agarré su pija que ya la tenía afuera del pantalón, tenía un pija bien potente, no podía cerrar mi mano cuando la agarré, era muy gorda, y desproporcionada con su largo, tendría uno 12 cm, pero extremadamente gorda y venosa, se la apreté bien fuerte, y empecé a masturbarlo, pobre no sabía que hacer con su lengua, la llevaba de un lado para otro, fue un beso extraño, pero muy húmedo. Alejandro mientras tanto, me acariciaba mis muslos, y fue tomando confianza, y pasó sus dedos por mi concha, y disimuladamente, metía la punta de algún que otro dedo, en mi concha mojada. Comencé a pajearlo muy fuertemente a Sergio, me encantaba esa pija bien venosa, me hubiese gustado tener tiempo para probarla bien. Comenzó a temblar un poco, y largó un poco de semen muy espeso, que bajó por su cabeza, hasta llegar a mi mano. Me limpié la mano con mi lengua, e hice lo mismo con la pija de Sergio, le pasé la lengua para sacarle todo su semen.

Les dije a los chicos que se bajaran del auto, y le pedí a Fernando que se siente donde estaba Sergio. Lo hizo inmediatamente y bajé del auto, me costo por tener la calza y tanga en los tobillos. Afuera le dije a Ezequiel sorprendeme. Me metí devuelta en el auto pero esta vez solo de mi cola para arriba, quedé sobre las piernas de Fernando, con mi torso y caderas dentro del auto sobre el asiento, y mis piernas afuera del auto, quedó mi culo parado, listo para ser cogido. Le desabroché el jean a Fernando, metí mi mano, debajo del pantalón, le agarré la pija, y comenzó a gemir entrecortadamente, ni siquiera me dio tiempo a metérmela en la boca, me había eyaculado en la mano, era un enchastre, no te preocupes le dije y me metí su miembro aun parado, en mi boca, le hice una buena paja con mis labios, no quería que pierda la erección, mientras le chupaba su miembro, sentí las manos de alguien supuse que era Ezequiel, y me mandó su miembro de una contra mi ano, logró metérmela de golpe por lo menos la mitad, y de ahí en mas me violó el culo con su pija, quería hacer una muy buena performance delante de sus amigo, y la verdad que lo hizo bastante bien, mas teniendo en cuenta la posición que estábamos, a los minutos de darme y darme por atrás, mientras seguía comiendome la pija de su compañero, siento el cuerpo de Ezequiel dejarse caer sobre el mío aún con su pija dentro de mi cola, me agarró de los pelos de mi cabeza, y me empieza a hundir mi cabeza contra la pija de su amigo violentamente. No sé de donde vino eso, pero me gustó ese toque espontaneo, onda sexo duro mientras hundía mi cabeza contra el cuerpo de su amigo, se corrió dentro de mi culo, una vez que lo hizo, soltó mi cabeza, pero la otra sorpresa de la noche fue que Fernando empezó a hundir con sus manos mi cabeza contra su miembro, su pene estaba lastimando mi garganta era un pija delgada pero de unos 18 o 19 cm, y se aseguraba de metérmela hasta el fondo. No tardó en eyacular dentro de mi boca, largo un par de chorros que fueron derecho a mi garganta.

El olor a pija que había quedado dentro del auto era impresionante, salí del auto, tomé de mi cartera unas toallitas húmedas y me limpié como pude, para salir del paso, luego en el baño del aeropuerto me higienizaría bien. Los chicos se vistieron, hice lo mismo y seguimos viaje. El ambiente estaba muy relajado, hablamos de algunos detalles del gang que haríamos, me preguntaron algunas cosas personales de mi vida, hasta Sergio estaba hablador.

Llegamos a la puerta de la terminal, me despedí con un beso de lengua a cada uno y me bajé. me aseguré de mover mi culo mientras me iba, sabía que lo estarían mirando.

Quedé bastante ansiosa. Me sorprendieron los chicos el buen momento que me hicieron pasar, deseaba mucho que llegue el día del gang.

Esta es la primera parte y pronto les cuento como terminó esta experiencia.

Besos

Irina