Sexo en la carnicería

El joven carnicero estaba tan cachondo que temía perder la razón, hasta que llegó un Cachito apetecible y dispuesto que satisfizo su hambre sexual.

SEXO EN LA CARNICERIA

Hacía unos días que había empezado a trabajar en la carnicería, y andaba al palo no se por qué razón. Andar al palo en la Argentina, es estar caliente, caminar erecto todo el día, tener la verga tiesa, la polla en alto, el miembro parado, no se si me explico.........

Ud podrá decir que andaba asi porque no cogía, no me desahogaba seguido, no desagotaba , no mojaba la chaucha, y quizás tuviera razón.

Un amigo mío, lo llamábamos "Media libra " porque era flaquito y debilucho, me decía " Checho , levantate a algun marica que ande por la calle girando y girando como un trompo y llevátelo a un hotel, le rompés bien el culo y te vas a sentir mas liviano.... Así no vas a poder seguir..."

Yo andaba desesperado vió. Ya me veía caminando por las paredes con mis zapatos de suela de goma gruesa...... Tenía que coger con alguien vió. La pija estaba caliente , los huevos gritaban como locos y yo trabajando en esa carnicería "La vaca encantada". , cortando todo el día bifes (bistecs) , lomo , matambre, peceto etc etc.

Estaba tan caliente que miraba con cariño a algunos clientes: al viejo gordito de anteojos "culo de botella " con mucho aumento, me lo imaginaba con un orto de novela; el muchacho flaco del taller mecánico parecía tener flor de bulto, y yo pensaba que sería pijudo a mas no poder y en la cama un tigre. El cura de la parroquia de la otra cuadra , peladito y medio jorobado ,siempre en mi imaginación, era un sátiro de aquellos , con testículos llenos de leche para repartir entre los mas necesitados. Caritativo el cura.

El dueño de la casa de servicios fúnebres no solo no la tenía muerta sino que debería coger como los dioses, con ese culo gordo y fuerte. El chico del gym de damas de al lado , con ese pechito algo peludo que dejaba ver cuando hacía calor era mas puto que las gallinas pensé , especulé, no tenia información y yo inventaba que al pibe le gustaba la garcha horrores, el médico del dispensario de a la vuelta, le gustaba que lo inyectaran con pija.....y asi otras fantasías. Pero yo no quería una paja, no porque no me gustase sino porque sabía que con una o dos no me alcanzaría para obtener el desagote de tanta leche estacionada y guardada en mi erario testicular.

Entre mis compañeros no había ninguna posibilidad. Eran feos, entrados en años , obesos, con mal aliento, y además casados y heterosexuales.

Era última hora cuando entró un gordito, de unos 25 años, tipo osito pelo castaño ojos claros cejas pobladas, un bigotito que por estar tan bien recortado vendía a la legua que su dueño era gay a rabiar. Mediría un metro setenta y pesaría unos 85 kilos , era rellenito, rosadito, perfumadito, elegantito con su chaqueta oscura y el pañuelo de cuello gris. En una palabra el gordito se la comía , era puto , y me tocó atenderlo. Después supe que era el hijo de la libanesa que tenia la veterinaria en la vereda de enfrente. Se llama Claudio y tiene un culo divino......

Venía a buscar la carne picada que la madre había encargado. Era un pedido de cinco kilos de carne picada con bastante grasa que la vieja iba a utilizar en no se que plato de la comida árabe mezclada con trigo burgol y especias. Era para el casamiento de la sobrina y no habían preparado el pedido.

Lo miré al chico con amabilidad y le dije que el pedido se lo prepararía yo en persona y que por favor esperara a que cerráramos el negocio pues llevaba un tiempito picar toda esa carne.

Claudio me miró desde sus ojos claros y pestañas arqueadas y con mohín de la boca me dijo que volvería mas tarde. Le dije que no que tendría que esperar pues si se iba no podria abrirle luego pues bajaban la persiana y se iban todos.

Me miró coqueto como esperanzado, y a mi se me paró la poronga pensando en esa boquita seductora, chupándome la verga o aquel culito gordo y movedizo cabalgándome la garcha. Le guiñe un ojo y el me devolvió el guiño.

Mi pija pensaba: Hay gordito, se te agarro te rompo el culito. Qué lindo estás gordito, con esas nalgas tan redonditas, tan grandes, tan movedizas. Seguro que son lampiñas y sin pelo y suavecitas como las de un bebé. Si reíte vos que cuando te agarre te abro un tunel permanente a pijazos.

Con pensamientos tan edificantes de mi pija pordiosera, pasaron los minutos y el pibe se quedó sentado en un costadito. Mis compañeros fueron terminando su trabajo y se fueron yendo una vez que les dije que el muchacho me estaba esperando por un pedido

Yo hacía que cerraba la caja mientras lo miraba , y él que parecía tener tres pares de ojos me miraba tambien y se sonreía coqueto , seductor, como buscándome.

Cuando todos se fueron me presenté , Sergio dije, pero me llaman Checho, , y le extendí la mano, el tomó mi mano y la estrechó mientras decía Claudio pero me dicen Cachito.

Casi salto la carcajada, recordando aquella vieja canción "Cachito Cachito , Cachito mío, pedazo del cielo que Dios me dio".

Pasá vamos atrás que te pico la carne le dije. El aceptó y pasamos a la sala de atrás del local donde tenemos las heladeras y la picadora de carnes.

El pibe pasó y le miré el culo con interés y el me miró a mi con ganas, y manito va, manito viene, me olvidé de la carne picada y me fui sobre el Cachito tan gordito , tan culón , tan redondito y tan pero tan , necesitado de pija.

Como me calentó el tipo, apenas lo abracé me empezó a besar y a gemir y a pegar grititos, me agarró la garcha con fuerza a través del pantalón , que casi me la arranca del cuerpo, y me tocaba los huevos y el culo, y nos besábamos como locos, con mucha lengua y saliva y el pibe tocaba y yo estaba al punto de estallar.

En un momento, puse un mantel que había quedado del día anterior, sobre la mesa donde se preparan las achuras, y lo acosté ahí , y el gemía de deseo , era una perrita callejera en celo, lo puse en bolas, y me desnudé y empecé a chuparlo de arriba abajo mientras el me sobaba la verga.

Cuando llegué a sus tetitas gordas y rosadas, se las chupé con gusto , y el gritaba y luego se las mordía muy sutilmente para generar una reacción todavía mas excitada de Cachito y le chupé la garcha que la tenía bien grande lo mismo que los huevos y lo dí vuelta y comencé a lamerle la espalda, las nalgas, el se separó las cachas y yo metí mi lengua en su culo deseado y ya no daba más.

El culo de él se abría fácil como una flor nocturna , y entonces me buscó y nos abrazamos, todo en la mesa de mármol de las achuras, y el se puso en cuatro y yo lo seguí chupando, y me pedía a gritos que lo cogiera , que no daba más, que se moría de ganas y lloraba, pedía, rogaba porque se la pusiera y quise hacerlo sufrir un poco, y lo dí vuelta y me subí sobre el y el me agarró la pija y me la chupó como un profesional , que manera de chuparla...

Yo empecé a gritar a gemir a jadear , y el seguía con toda mi pija en su garganta chupando chupando , como si fuera una aspiradora de mi leche y finalmente se la saqué de la boca y acabé en su cara en su cuello en las orejas en los hombros en las tetitas hasta en sus brazos. En ese momento el acabó con cinco chorros espesos y fuertes que fueron a parar a la picadora de carne ......

Lamiendo mi semen de donde podía, llegué hasta su boquita roja y de labios gruesos y lo besé apasionadamente y el me devolvió el beso aún con restos de mi leche .

Después lo dí vuelta y lo penetré sin asco, y en ese culo gordo y suave encontré el bálsamo que necesitaba mi calentura, y me lo cogí por horas hasta que extenuado y con la última gota de leche le dije,:

Cachito ya te preparo el pedido..........

galansoy.

Amigos si les gustó háganmelo saber a mi mail galansoy@hotmail.com y si quieren valórenlo. Gracias .