Sexo en el mar
Matrimonio que se masturba delante de unos chicos.
Me llamo Juan y quiero contar una pequeña historia que nos ha sucedido a mi esposa y a mí este verano.
Llevamos casados dos años y nos va de fábula. Mi esposa en términos generales esta buenísima buenas tetas (110) buen culo y además simpática. Este mes de agosto hemos estado unos días de vacaciones un pueblo costero de del Sur que no conocíamos y es precioso. Solíamos ir a una gran playa justo al lado de nuestro apartamento alquilado. Tomábamos el sol, salíamos por las noches lo pasamos de escándalo.
Desde que llegamos hacíamos el amor todos los días, algunos hasta dos veces, la verdad me encanta follarme a mi mujer. Mientras me la follaba le decía que imaginara que lo hacíamos en la playa delante de todo el mundo, esto hacia que se ecitara bastante y se corriera, y de que manera, cuando esta disfrutando de verdad suele tener orgasmos múltiples.
Una tarde de la que nos encontramos en la playa le propuse alquilar un hidropedal para irnos al fondo y denudarnos para tomar el sol, ella acepto, preparamos el bolso con las toallas y nos marchamos. Estuvimos navegando más de media hora, el mar estaba totalmente en calma, de vez en cuando pasaba embarcaciones a toda velocidad, era alucinante. Rápidamente me quite mi bañador y Ana solo la parte de arriba del bikini, que bonitos eran sus pechos al sol, libres. De vez en cuando me acercaba y le chapaba los pezones, se estaba poniendo a cien.
Paramos de pedalear y nos pusimos a tomar el sol, a lo lejos pude ver a dos chavales bastante jóvenes, tumbados en una tabla de sur tomando igualmente el sol, podía observar que estaba desnudos por lo que sobresalía. Eso me excito, empecé a besar a mi esposa, me fui acercando a ellos, pronto se percataron y nos empezaron a observar, cuando estaba a 10 m me pare, me asegure que me veían, le di un beso en los pezones a Ana que se dejaba hacer, le metí la mano en su coño y empecé a acariciarla, ella cerro los ojos y se reclino para atrás, le dije que se quitara la braguita y así lo hizo, los chavales no nos quitaban ojo, mi esposa saco la piernas por fuera y las abrió para que la acariciara mejor.
Empecé a acariciar su clítoris, lo chicos empezaron a pajearse, mi mujer los miraba y me cogía la polla a la vez que movía su cuerpo para que acelerara mis caricias. Le metía los dedos, la acariciaba hasta su culo, los chicos no pestañeaban, pero seguían pajeandose, a la vez mi mujer también me seguía haciendo una paja, has durante un buen rato, ella echaba chorros de liquido vaginal, yo lo sentía en mi mano, cuando vio que unos de los chavales se corrió, le dio un espasmo alucinante y se corrió como una perra, el otro no tardo en hacer lo mismo yo me levante me cogí la pija me di un par de meneos y me corrí en la cara de Ana.
Posteriormente volvimos al apartamento y follamos como locos recordando el momento.