Sexo con una tia madura

Me toco hacer un trámite a la costa, el cual tendría que sacar en el día, sin embargo los trámites se alargaron más de la cuenta y me vi en la necesidad de quedarme. Estaba sin trabajo y las divisas no eran muchas. En eso me acorde que ahí tenía una tía, hermana de mi padre, a la que no veía hace años y pensé que como esta tía era solterona, quizás me invitaría a alojar en su casa y así ahorrarme algunos pesos.

Una llamada telefónica a mis padres y me entregaron la dirección.

No me costo mucho llegar y al conserje del edificio le pregunte por el nombre de mi tía y me dijo en que piso vivía y en que departamento.

Subo al piso indicado y luego de tocar un par de veces y estará punto de marcharme, siento como se abre la puerta, y a través de una cadena, aparece una mujer de unos 50 años, rubia.

Si , ¿ que desea?

¿Sra Rosa?

Si joven ….¿ que se le ofrece?

No se acuerda de mi?

No … la verdad que no

Soy Ricardo ….. su sobrino …..el hijo del Yayo

El hijo del Yayo !! .......¡ Mijito ¡ -------- ohhhhh que sorpresa ……. Pero pasa niño ….. mira nada mas … que grande estas !!!!!!.......... si la última vez que te vi, tenias como 10 años !!!! … estas hecho todo un hombre ….

Me invito a pasar, me pregunto por mi padre, hermanos tíos etc etc etc ….. Siempre alabando lo buen mozo que estaba, lo grande que estaba. Me preguntó que estaba haciendo por ahí y le comenté que estaba haciendo unos trámites, y que como me había desocupado temprano la había pasado a ver

Me invitó a tomar once y conversamos mucho rato. La verdad mi tía era una persona muy alegre y jovial.

Al momento de decirle que tenía que marcharme, me preguntó donde me quedaría y le dije que me habían recomendado una pensión buena. Me dijo que por ningún motivo, que me quedaba ahí y que no se discutiera más el tema.

Me mostró el baño, me paso toallas etc, me atendió como a un rey. Al salir de la ducha, me vestí y salí de la habitación. Mi tía se encontraba en el balcón, fumando un cigarro. La vista desde el balcón era sorprendente. Ella me dijo que cuando necesitara alojamiento, que no dudara en quedarme ahí, que le encantaba recibir visitas, ya que ella estaba muy sola etc. ( era separada )

La conversación fue muy agradable y más aun con un trago que me sirvió, admirando la playa de noche. En esa conversación me prohibió llamarla tía, ya que se sentía muy vieja, y me obligo a tratarla de tu o Rosa. A las finales, lo pase muy bien, incluso, después del segundo trago, comencé a encontrar muy interesante a esta tía, por que la verdad, a pesar de su edad, tenía una tetas espectaculares, pero solo ideas mías …. A las finales, nos fuimos a acostar.

Me desperté a la mitad de la noche , muerto de sed. Pensé que a esa hora mi tía estaría durmiendo a si que sin ponerme los pantalones, solo con calzoncillo, me dirigí a la cocina. Pero mi sorpresa fue tremenda al encontrarme a mi tía, con un delgado y transparente camisón sacando la bebida del refrigerador

• Tía , por favor disculpa, por venir así, pero pensé que estarías durmiendo

• No te preocupes niño, mira a mi también se me olvido que no estaba sola …. Ja ja ja … imagínate si hubiese sido mas en verano … me hubieses encontrado completamente desnuda! Ja ja ja

Nos reímos un rato de la situación, nos tomamos la bebida y nos fuimos a acostar. Sin embargo la imagen de ella en ese camisón, quedo grabada en mi mente y las palabras " me hubieses encontrado completamente desnuda" …. Me tenía loco y no me quedó otra opción que masturbarme con la imagen de mi tía en mi mente. A parte que no se si fueron ideas mías, o mi tía también se puso nerviosa al verme solo en ropa interior.

Al otro día me despedí de ella, dándole las gracias por su hospitalidad y comprometiéndome a pasarla a ver la próxima vez que viajara a la costa.

Me dirigí a terminar mis trámites, pero para mala suerte mía, tendría que volver en dos semanas más.

Pasaron las dos semanas y antes de salir de mi casa, se me ocurrió llamar a mi tía y preguntarle si, que en caso que no terminara mi gestión, si podía alojar esa noche nuevamente en su casa. A ella le pareció muy buena la noticia y dijo que me esperaría con los brazos abiertos y que pobre de mí si no pasaba por su casa.

Llegue a la costa, hice mis trámites y todo salió impecable. La verdad no había necesidad de quedarme ahí, pero como lo había pasado tan bien la primera vez, que pensé en repetir la velada

Ya caía la tarde y me aparecí por el departamento de mi tía. Ella esa noche preparo una comida muy especial y nos bebimos un buen vino que yo había llevado de regalo.

Salimos al balcón a fumar y a tomarnos un "bajativo". Ambos parados en el balcón, mirando los autos pasar cuando ella me abraza y me dice que estaba muy contenta de que la haya pasado a ver. Yo también la abrace y le dije que al contrario, era yo el que le daba agradecía el recibirme en su casa, mientras sentía como sus tremendas tetas se rozaban en mi pecho.

Llegó la hora de irnos a acostar y afuera de mi cuarto me abraza y me agradece nuevamente que " me haya acordado de esa vieja y que la haya pasado a ver "

Como se te ocurre ….. aparte que vieja no estas … estas regia

Tu crees?

Estoy seguro …. Ya me gustaría tener a mi una mujer asi como tu

Uy … no digas eso que me puedes entusiasmar

Tu crees? ( en un tono muy coqueta y con una mirada muy sensual )

Que daría yo por que un joven como tu se fijara en alguien como yo

Te confieso algo ….. ( mi mano baja un poco mas allá de su cintura ) …. Hace rato que me estoy fijando en ti

Ella me da un suave beso en los labios al cual correspondí inmediatamente. Nos seguimos besando, un beso muy suave, pero con nuestros cuerpos muy juntos. Sus pechos se sentían explotar contra el mío y mi verga era imposible que no la sintiera.

Fue ella la que tomo el primer paso y desabrocho mi camisa, la que cayó al piso.

Lentamente continué besándola y arrastrándola suavemente al interior de mi habitación.

Lo primero que hice fue sacar su blusa y liberar casi inmediatamente sus gigantescos pechos.

Eran preciosos, grandes, redondos, realmente exquisitos, como a mi me gustaban, su textura, todo era perfecto. Los bese una y otra vez, mientras ella con sus manos me acariciaba la cabeza y me pedía que no parara.

Continué besándola, bajando lentamente besando su vientre y comencé a sacar su falda. Sentía como ella se estremecía, al sentir que su sobrino poco a poco la estaba desnudando.

La salir su vestido, sus hermosas y gruesas piernas quedaron antes mis ojos cubiertas con una medias de encaje negro que me dí cuneta que se había colocado especialmente para mi. En el fono ella también lo había deseado y se había preparado para este momento. Lentamente pase a retirar sus calzones de encaje color negro que hacían juego con sus medias.

Ante mis ojos quedo su concha apenas poblada por suaves vellos. Sin dudarlo le separé las piernas y besándolas comencé a avanzar, hasta que mi lengua se encontró con la humedad de su intimidad. Suave, muy suave como a ella le gustaba, le di un sexo oral de todo un profesional, mientras ella con sus ojos cerrados, solo se dejaba llevar y disfrutaba la diestra lengua de su sobrino en sus partes intimas.

Casi estuvo a punto de acabar en mi boca, pero me obligo a dejar de complacerla, para pasar ella a entregarme placer a mi.

Que placer me hizo sentir la boca de esa mujer, se notaba que también, al igual que yo era una fanática del sexo oral. Se lengua recorría completamente mi erecto miembro que salía y entraba de su boca.

Se levanto y me quedó dando la espalda. La tome de la cintura y le bese su culo, dándole pequeños mordiscos, que note que le encantaban.

Luego la hice sentar en mis piernas y apuntando mi verga a su húmeda cavidad. Lentamente ella se fue sentando hasta que se la enterró completamente. Comenzamos a follar como locos, haciéndole salir gritos que podrían haberse escuchados en todo el edificio. Nunca imagine que esa mujer fuera tan caliente, me hacía tiritar las piernas a cada embestida con que ella me golpeaba con su nalgas.

Su orgasmo no tardo en llegar y sin levantarse, dejando mi verga completamente apretada, solo con movimientos pélvicos, comenzó a acabar de una manera monstruosa. Podía sentir como un chorro que salía de su concha, inundaba mis piernas y bajaba hasta mi culo, mientras ella gemía como una perra en celo

Pero yo aun tenia cuerda para rato, y ella sin salirse de la posición que estaba continuó cabalgándome , diciéndome que me relajara y que disfrutara todo lo que yo quisiera, que por ningún motivo se la fuera a sacar, ya que quería sentir como me descargaba en su interior.

Mis manos las tenían cogidas del culo, mientras ella con sus pies sobre la cama, se levantaba y se dejaba caer haciendo que la penetración fuera absoluta. Me anime a meterle un dedo en el culo, que en esa posición quedaba completamente expuesto y ella no dijo nada, solo disminuyo sus movimientos para hacer que este entrara sin hacerle daño. Ya cuando entró la primera parte de mi dedo, ella se movió bruscamente y se lo introdujo hasta el fondo.

Ya eso fue mucho para mí, tener a ese pedazo de mujer así, sentada en mis piernas, con toda mi verga dentro de ella y con mi dedo en su culo, me llevó a sentir una corriente que recorrió todo mi cuerpo y entre jadeos le avisé que me corría.

Ella aumento sus movimientos y me dijo que me aguantara unos segundos que estaba apunto de acabar de nuevo. Con mucho esfuerzo logre contenerme hasta que un fuerte grito diciendo ¡ Ahora ¡ , y un gran chorro que volvió a inundarme , me indico que alcanzaba su segundo orgasmo al mismo tiempo que yo descargaba en su interior toda mi leche caliente.

Se quedó en la misma posición , con suaves movimientos , que prácticamente me acariciaban la varga que poco a poco fue perdiendo su dureza hasta que se salió de su interior.

Nos recostamos desnudos uno al lado del otro. Ella completamente transpirada y yo con mis pierna un poco dormidas, comentando lo fantástico que había sido.

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