Sexo con un expresidiario

Sexo con ex presidiario.

Salí un día de mis vacaciones para comprar un sellador de filtraciones y para sorpresa mi me encontré con un amigo de mi ahijado con el que había tenido sexo ocasionalmente. Me saludo muy afectivamente en medio de la ferretería y le pregunte por que no había vuelto a saber de él. Me contesto que había tenido unos problemas que lo habían llevado a la cárcel. Por no contar con mucho tiempo le di mi número de mi móvil para que concertáremos una cita y nos despedimos. El día 3 de julio de este año me llamó para preguntarme sobre mis planes del feriado del 4 de julio. Le dije quería ir de playa a lo que me contesto que por haber estado en la cárcel tenia unos deseos inmensos por ir a la playa. Pues le dije que nada mas que hablar vamos mañana. Al día siguiente me llamo temprano por lo que lo fui a recoger a su casa y nos fuimos a desayunar juntos. Una vez en el restaurante me explico todo lo que le había ocurrido. Le dije que no pensara por este día en ello que nos fuéramos a disfrutar del feriado. Le dije que tendríamos que pasar por mi apartamento para cambiarme y recoger unas toallas. Subimos juntos a mi apartamento y una vez cerramos la puerta instintivamente ambos buscamos nuestros labios y nos besamos. El es un mulato de 5 pies con 9 pulgadas de alto; de unas 180 lb. : pelo negro lacio corto; ojos marrón obscuros y un cuerpo llenito. Nuestro beso fue aumentando de pasión que yo le comía la lengua. Nos abrazamos nos dimos caricias tiernas y nos dirigimos a mi habitación Me tomo el pene que ya comenzaba a crecer y le dio unos cuantos jalones. Nos quitaos nuestras camisas y comenzamos a mordernos las tetillas. Volvimos a repetir esa rutina de besos en la boca jalones de pollas y hasta mordida de tetillas.

Me tomó por los hombros y comenzó a rozar su pene en mi pantalón presionándole sobre mis nalgas. Comencé a sentir un calentamiento como nunca en todo mi cuerpo. Mientras hacia eso metió su mano por mi pantalón para estimular mi pene casi erecto.

Nos quitamos la ropa quedando completamente desnudos uno frente al otro. Nos abrazamos y besamos con loca pasión mientras nuestros penes se golpeaban entre si. Mis manos apretaban las duras y redondas nalgas del mulato. Mientras el me estimulaba con un dedo mi ano.

Me recosté en la cama dejado a su disposición mi pene erecto de unas 6 ½ pulgadas un-cut. Se arrodillo frente a mi y suavemente agarro mi pene echando para atrás la piel metiendo en su boca la cabeza apretándola con sus labios magistralmente como si fuera un ritual me la chupaba y apretaba. Cuando ya la tenia en toda su erección me dijo que mientras estuvo en cárcel muchos le propusieron tener sexo. Pero pensaba solo en mi y como había disfrutado conmigo y gorda polla. Por lo que juro que si salía me buscaría para realizar su fantasía con alguien seguro y que le llenaba en el sexo. Me dijo cierra tu ojos que te voy hacer desmayar de placer. Tomo la piel de mi pene y la subió toda; la acomodo en la entrada de su ano. Lentamente fue bajando y mi pene taladrando su apretado hoyito evidente falto de acción en la cárcel.

Cuando lo tuvo todo adentro me agarro por las piernas haciendo presión sobre mi pene; como si quisiera meter las pelotas también. Se detuvo por unos segundos y me dijo que mi pene latía como si fuera un corazón dentro del. Realmente mi pene quería reventar allí dentro lo sentía mas hinchado que nunca. Empezó a moverse de forma circular con unos cuantos sube y baja entremedio convirtiendo esos movimiento en una rutina que parecía quería despelleja la piel de mi pene. No era un dolor sino una sensación de placer con unos toque de electricidad por la fricción; comenzamos a suda ambos pues ya para es momento llevamos 30 minutos de pura penetración. Se levanto lentamente dejándome me ver lo dilatado que tenia el ano aproximadamente 2 pulgadas.

Al ver lo parao que tenia su pene me arrodille frente a él y apreté entre mis labios su rosada y grande cabeza que apenas asomaba a través de su prepucio. Gimió de placer diciendo me así así aaasi me derrito. Le agarre sus pelotas duras y afeitadas mientras le chupaba el tronco hasta las pelotas. Decía que había valido la pena esperar, que se corría. L e dije que aguantara que nos quedaban muchas cosas por hacer. Fue cuando volvió sobre mi pene secando con la lengua es pre-semen que lo lubricaba. Al verlo tan duro volvió a sentarse metérselo por el ano. Se movía como una puta en celo mi excitación era tanta que me corrí dentro tan fuerte que me pregunto si me había orinado le dije que no. Pero le pedí que siguiera moviéndose más fuerte y apretara más mi pene. Logro evitar que mi pene se bajara y mantuvo su erección hasta que por segunda vez pero más abundante y caliente lo llene de mi leche caliente. Lo cual celebró como si fuera todo un acontecimiento. Le dije ahora te toca a ti ; tome su negra polla de cabeza rosada ; la puse sobre mis nalgas la apretó contra ellas dejándome sentir su dureza y calentura. Mientras me pasaba ese hierro duro y caliente por entre mis nalgas me besa mi cuello y mordía mi espalda. Me susurraba a mi oído que me amaba y me pedía fuese su hombre. Me anuncio que estaba próximo a correrse le dije que lo hiciera entre mis nalgas sin penetrarme. Una vez lo hizo le dije ahora penétrame con esa leche me lo metió hasta hacer emitir un quejido de placer y dolor. Le pedí no sacara hasta que saliera el solo. Nos besamos; chupamos la lengua mientras nuestro semen corría caderas abajo. Nos fuimos a duchar y luego nos fuimos de playa.

Prometimos volvernos a encontrar mas seguido ya les contare.