Sexo con mis tías (1: Mi querida Llanitos)

Hola me llamo Angel, soy un joven de 20 años, soy de complexión fuerte, cabello y ojos castaños. Os voy a contar mi primera relación sexual, fue concretamente, y casi por casualidad, después de una comida familiar en casa de mi tía Mª de los Llanos.

Sexo Con Mis Tías (1: Mi Querida Llanitos)

Hola me llamo Angel, soy un joven de 20 años, soy de complexión fuerte, cabello y ojos castaños.

Os voy a contar mi primera relación sexual, fue concretamente, y casi por casualidad, después de una comida familiar en casa de mi tía Mª de los Llanos (Llanos, para la familia) la reunión no tenia ninguna razón especial, la única era que a mis tíos les habían regalado unos kilos de carne de jabalí.

Mis tíos nos visitaron el mismo día en que se lo llevaron a su casa, ya que mi padre es aficionado a la caza, y también le gusta cocinar todo tipo de carne que provenga de la caza, así que vinieron a mi casa con un poco de la carne para que mi padre juzgara, y como podría cocinarla.

Cuando abrí la puerta me encontré con mi tía Llanos, ella es una mujer de unos 40 años aunque se conserva muy bien, tiene el pelo castaño con mechas rubias en una media melena que le cae hasta los hombros, sus ojos son de color café y sus labios son carnosos, sus pechos aparentemente pequeños pero redondos y muy bien formados, a la par de sus pechos está su culito, pequeño y respingón.

La dejé pasar, iba con su marido (mi tío Antonio, hermano de mi madre) y sus dos hijas, Estefanía ( Nia para la familia) y su hermana Sandra.

Llamamos a mis padres y como a mi padre le pareció de buena calidad la carne quedamos en comerlo es mismo Domingo en su casa.

Pasaron los días y a mi no se iba de la cabeza la idea de verle los pechos a mi tía, ya que cuando abrí la puerta pude ver su canalillo y me di cuenta de que no usaba sujetador, pude verlo ya que soy un poco mas alto que ella, la simple idea de poder verlos me inundaba la cabeza, el simple echo de poder tocar esos pezones me hacia tener una empalmadas del quince que solo se me bajaban matándome a pajas.

Cuando llegó el Domingo a eso de la 11 nos fuimos para su casa, al llegar nos abrió Nia que aun llevaba el pijama, ya que la noche anterior había salido de fiesta con su novio, mi ti llevaba puesta una camiseta y una faldita corta también negra, muy provocativa, entramos mi padre se fue a cocinar el jabalí mi tío y mi madre fueron a ayudarle con lo que yo me quede con mi tía a solas viendo la televisión. A la media hora mi tía se acordó de que tenía que bajar unas cosas del desván y me dijo:

-Ángel, puedes subir conmigo un momento al desván y echarme una mano-

-Claro- respondí.

Para bajar las escaleras que dan acceso al desván tubo que subirse en una pequeña escalerilla, mientras subía me di cuenta de que es día tampoco usaba sostén, ya que la escalerilla estaba en una pequeña repisa y se la bajé yo.

Cuando subió para alcanzar y tirar de una cuerda que bajaba las escaleras quedo delante de mi vista ese pequeño pero impresionante culito, pude ver que debajo de la falda llevaba un tanguita de hilo con el cual se le veía todo y dejaba muy poco a la imaginación, esa vista me provoco una erección notoria, aunque ella no se dio cuenta (o disimulo) hasta que estuvimos arriba en el desván, al acercarnos al armario del que había que sacar las cosas me digo con cierta picaresca:

-¿Te ha puesto mi tanguita negro?-

No me quedo más que disimular ante la evidencia

-No, tía es que no me esperaba que tuvieras ese culito tan bien formado-

-¿Te gustaría ver algo más?-

Trague saliva, tenia la garganta seca ante tal preposición

-¿Lo harías?- Pregunté vacilante-

-A mí me gusta mucho lucir palmito ya sea en casa, en la playa, en top-less o totalmente desnuda-

En ese momento oímos una voz a lo lejos en la casa –¡¡¡Mama, Ángel bajad!!! , el aperitivo esta listo- Era mi prima Sandra para que fuéramos a comer.

-Vamos, ya hablaremos después, cuando todos se marchen- me dijo mi tía.

Al pasar por mi lado y darme un toquecito en mi polla aún un poco erecta, y pasar mis labios cerca de los míos.

La comida pasó si ningún problema sino fuera por las miradas de complicidad que había entre mi tía y yo mismo, esperando el momento oportuno para acabar lo que habíamos empezado antes de comer.

Al acabar la comida, después de recoger la mesa (durante este proceso mi tía rozó varias veces mis genitales con su culo y restregó sus tetas por encima de mis manos) mi tío se marchó con mi prima Sandra, ya que esta practica el baloncesto y dentro de un par de horas tenia partido, Nia también se marchó pero esta havia quedado con su novio y unos amigos para ir al cine, salir a cenar e ir de copas. Nos quedamos mis padres, mi tía Llanos y yo en su casa.

Después de un rato de charla y de cotilleo sobre lo sucedido los últimos meses en el pueblo donde vivimos, mis padres decidieron irse:

-Bueno, mejor ir pasando hacia casa- dijo mi padre dirigiéndose a mi madre

-De acuerdo- afirmo mi madre, en ese momento mire a mi tía y ella les comentó

-¿Podría quedarse el Angelito a ayudarme a traer unos cuantos tratos del desván?-

-Claro- afirmaron os dos –así no se está toda la tarde mirando la televisión y ayuda en algo-

Así que se fueron, para nuestra casa sin antes soltarme el típico discursito de que me comportara aunque ellos no estuvieron. Nos despedimos con un par de besos en las mejillas y por fin se marcharon.

-Por fin- dijo mi tía al tiempo que me cogía de la mano y me sentaba a su lado en el sofá

-Ahora podremos seguir con lo que dejamos antes a medias- me dijo mientras apoyaba una de sus manos en mi pierna y la otra la usaba para cogerme cor el cuello y atraerme hacia ella y darme un cariñoso, profundo y sensual beso en los labios.

-Ahora ya puedes decirme que piensas del cuerpo de tu querida tía Llanitos- en es momento me quede helado, no era capaz de reaccionar ante el gran beso que me había dado.

Al ver que no reaccionaba se agachó delante de mí, tiró de mis pantalones cogiendo a la vez mis calzoncillos y dando libertad a mi ya excitada polla

-¡¡¡Vaya pedazo de herramienta que tienes!!! – exclamó Llanos- te la voy a chupar hasta dejarte seco-

Se la metió en la boca, primero no chupaba solo le daba pequeños besitos, empezaba por la punta e iba bajando hasta los huevos donde se paraba y me los succionaba por separado, entre las succiones gritaba:

-¡¡¡Que pollón mas sabroso tienes!!!-

Después de esto dejo los besitos y empezó la mamada en serio, el sube y baja por mi pene era frenético, hasta que llegó el momento:

-Me corroooooo- grite como poseído.

-Eso correte en la cara de tu querida tía Llanitos- chilló ella al sentirme y dejar libe mi polla a punto de estallar.

Justo cuando se la saco de la boca y le dio un par de meneos un mar de leche inundo sus manos, su cara y mancho su conjunto negro. Se levantó y me dijo:

-Uy, me has manchado el conjunto ahora no me que damas remedio que quitármelo- dijo con una sonrisa picara- así podrás ver lo que te pone tan cachondo-

Al acabar sus palabra puso una música muy relajante, a la vez que erótica, a mi se me estaba recuperando mi miembro que empezaba a levantarse de nuevo, al ver esto Llanitos empezó a bailar siguiendo el ritmo de la música, subía su camiseta hasta que se le veía la parte de debajo de las tetas (acerté en mi anterior apreciación, NO LLEVABA SOSTEN) y al momento que lo bajaba dejándome me ver esa corrida en toda la parte de la camiseta que cubría sus tetas, seguidamente se puso de espaldas a mi y empezó a subirse la faldita hasta dislumbrarse su tanguilla negra y volvía a bajárselos, se giro hacia mi y vio mi miembro viril erguido, en ese momento dijo:

-Vamos dejarnos de preámbulos –

-De acuerdo-

Me levanté y de un tirón les saqué la camiseta, empecé a mamar esos pechos, no eran tan pequeños como parecían, los podía coger con una mano aunque se me escapaban un poco por los lados, el pezón era pequeñito y estaba mirando al techo del comedor, me entretuve en ellos los mordisqueaba, los chupaba y ella solo alcanzaba a decir:

-Oh… sí… chupa mi bebe… sacame toda la leche…. ¡¡¡¡ummmm… argf… oooohhhh…!!!!-

Como no llevaba puestos los pantalones cogió mi polla y empezó a pajearme para acabar de recargar mi herramienta.

La levante y la tiré en el sofá, me quité la camisa y ella tiró su falda, quedando yo completamente desnudo y ella con aquella tira de tela negra que me volvía loco.

-Te voy a devorar el coño- le dije -así que prepárate-

Cuando me coloque delante de ese tanguilla lo aparte para empezar el festín, Llanitos se levantó de golpe empujándome y tumbándome encima en el sofá

-Esta polla tengo que saborearla después de una corrida- se echó encima de mi y comenzamos un fantástico 69, ya lamía aquel chochito suculento y totalmente rasurado, estaba inundado de jugos de mi tía, los dos apenas articulábamos palabras

-¡¡¡Ohhh!!! Si como comes el coño… sigue, sigue… así, así, no pares ooohhh, mhmhmhmhmhmh-

Chillaba mi tía los pocos instantes que sacaba mi polla de su boca, yo entre lamida y succión de su ya hinchada perlita

-¡¡¡Mmmmm!!! Que gustooohhh, sigue… sigue, eres una mamadora excelente-

En ese momento intente levantarme y no pude

-Llanitos, levántate que te voy ha taladrar el chocho-

Ella soltó mi polla y asintió con la cabeza, se sentó en el sofá, se quitó la tanga i me dijo

-Venga méteme ese taladro hasta el fondo-

Le abrí los labios vaginales y puse la cabeza de mi polla entre ellos

-¿Lista?-Le pregunté

-No aguanto mas metemela de golpe-

Yo obedecí y de una embestida se la metí entera empezamos el mete-saca, al rato cambiamos de posición, yo estaba tumbado en el sofá y ella marcaba el ritmo de la penetración estaba mirando hacia mi y entre gemidos oí

-¡¡¡Agárrame las tetas!!! ¡¡¡ Son todas tuyas!!! ¿¿¿No las deseabas???-

En ese instante solté mis manos de su culito y cogí sus tetas empecé a amasarlas, a tirar de sus pezoncillos, ella seguía gritando entre orgasmos

-Si oh que masaje mas… argf ohh..ohh. mfghh, sigue me corrooooooo-

Llanitos se corrió encima de mi aunque seguimos un rato mas con el sube-baja, se dejo caer encima de mi y nos fundimos en un apasionado beso, yo segia con polla dentro de su chocho que aun estaba inundadote sus fluidos, con el calor de tener insertada a mi tía me vinieron ganas de probar la tetas de mi tía de otra manera, mi tía se estaba recuperando y le hice una proposición.

-Oye por que no me haces una cubana con estas bonitas tetas que te gastas y me la chupas otra vez?-

-OK-

Mi tía se arrodilló ante mí, se acomodó mi herramienta entre sus tetas, las estrujó apresando mi polla, empezó la masturbación mas placentera de mi vida ya que cuando tenia las tetas lo mas abajo posible me daba pequeños besitos en el prepucio, estuvimos así durante un cuarto de hora, yo no aguantaba mas la excitación y la avisé

-¡¡¡Me Corrooooooooo!!! Argf!!!!!-

Llanitos soltó sus tetas y ahora se dedicaba a meterse dos deditos en su conchita y con la otra mano se amasaba una de sus tetas, yo le cogía la cabeza para que no se apartara y se tragara toda mi leche, me corrí i mi leche se la salía por la comisura de los labios y le salpicaba en sus tetas, cuando se acabo mi corrida se dedicó a limpiar mi polla, cuando acabó se incorporó me dio en besito mas sensual y erótico que los anteriores y me dijo

-No sabes que ganas tenía- afirmó

-Yo también lo deseaba- le confesé

Como era media tarde nos fuímos a su habitación y allí echamos un par de polvos mas hasta que volvieron mi prima y mi tío.