Sexo con el amor

Su encuentro con una antigua novia, fue muy apasionado. Le confesó que no le había podido olvidar y como su matrimonio no iba bien, le propuso una noche de placer juntos.

Aquí va, te contare lo que me sucedió y empezó hace casi un año, desde los catorce años hasta los 20 tuve una novia a la cual quise demasiado y la cual por una tontería terminamos ella termino casándose con otro tipo a la edad de 22 años, en ese entonces yo contaba con 24 años, para mí fue algo muy doloroso, después de varios años tuvimos un encuentro casual, o sea platica como antiguos amigos, te confieso que jamás en el tiempo de novios habíamos tenido relaciones sexuales, mas que las caricias atrevidas que nos permitíamos de vez en cuando, lo mas fuerte que habíamos llevado a cabo y a ella le encantaba era besar sus hermosas tetas que ella tenia lo cual me dejaba como loco y siempre quería avanzar pero siempre algo me lo impedía, visitas inesperadas, hermanos, su madre o su propio miedo a embarazarse. Bueno en esta ocasión platicábamos de cómo estaba su matrimonio a lo cual me confeso que mal y que ya no soportaba a su espero. Pero tenia un hijo de 2 años por lo cual ella decía que no podía dejarlo, y me confeso que no me había podido olvidar la verdad eso me puso a mil y le conteste si era capaz de hacer algo conmigo, ella me dijo que si se diera la oportunidad lo haría, la verdad no tuve que esperar mucho ya que al sábado siguiente con el pretexto de unos accesorios de cocina se introdujo a mi casa y me sorprendió cuando tenia un cerveza en la mano, lo cual haciéndolo a un lado me dio un gran beso de esos que te meten la lengua y te exploran todo y te hacen calentarte y querértela tirar ahí mismo, la verdad yo quería mas pero él tiempo la apresuraba ella se marchó con la promesa de volvernos a ver para llegar a algo más, intercambiamos teléfonos y nos llamábamos para saber cuando podría suceder eso que tanto deseábamos, explotar juntos sexualmente, cuando por fin se me dio la oportunidad no podía creerlo la mujer que más quise en el mundo por fin iba a ser mía, fue un sábado en que toda la familia de ella salió y decidió quedarse sola, inmediatamente después como habíamos acordado me habló por teléfono y de inmediato me introduje en su casa esto era como a las 11:00 p.m., después de checar que nadie nos molestaría, al llegar y encontrarla en solamente una bata trasparente, donde se dibujaba un hermoso par de tetas que con matrimonio las tenia mas grandes que cuando las conocí, y una diminuta tanga hilo dental en la cual sobresalían su par de nalgas bien formadas y que siempre me habían vuelto loco, acercándose a mí mientras yo me deleitaba con mirarla me fue quitando la camisa que tenia en el momento de hacerlo fue besando mi pecho lentamente lo cual hizo que mi mientras intentara salir del pantalón, cuando termino, siguió con mi pantalón el cual fue bajando lentamente y grande fue su sorpresa al ver que delante de ella surgió mi miembro en todo su esplendor, ya que para agilizar las cosas no me había puesto ropa interior, inmediatamente le empezó a dar besitos y me dijo que no me moviera ya que me daría una gran mamada, cosa que antes según ella le daba asco, pero su marido la enseño como hacerlo y le agarró bastante gusto por lo que veía en ese momento su boca entraba y salía de verga mientras con la mano me acariciaba los huevos lo cual me ponían como loco, yo agarraba su cabeza y la hundía hasta que penetrara todo mi pene en su boca, después de un gran momento de mamada tal vez por la necesidad según ella no había tenido sexo en 6 meses, me tiró en la cama y me dijo que no hiciera nada y diciendo esto se sentó sobre mi miembro y la verdad fue algo delicioso no se si por que era la mujer que más quise o por que ella me estaba utilizando a su antojo y me estaba haciendo gozar, se levantaba de mi pene y se volteaba y yo le veía la espaldo como le entraba y salía fue algo lujurioso, después le pedí que parara pues sentía venirme si seguía con ese ritmo tan frenético de entrar y salir le di la vuelta y con la posición del misionero le empecé a introducir todo el pene por delante a la vez que mis dedos hurgaban por su culo, ese hermoso culo que quería castigar, tirado sobre ella le empecé a morder los pecho y la hacerlo enrollaba mi lengua entre sus pezones y los succionaba de una manera que ella no dejaba de gemir, yo le preguntaba amor que es lo que te gusta a lo que ella contestaba entre gemidos, tu verga amor tu verga metemela toda, soy toda tuya yo le decía vamos amor se una putita conmigo la mejor de todas, y esto nos calentaba a los dos, después de esto la separe y le dije que se pusiera de a cuatro patas y le fui introduciendo la verga de esa manera mientras ella gemía de puro gusto, pero en una se esas embestidas y viendo lo mojada que estaba la verdad estaba súper caliente tanto que ya había mojado todas las sabanas como si se hubiera orinado, y de un golpe se lo introduje en su culo lo cual entró si oponer presión ya que estaba bastante lubricado, pero eso fue un momento ya que ella paró en seco y me dijo que se lo sacara pues nadie le había dado por ahí, tuve que ceder para poder terminar viniéndome dentro de ella y bañando todo su cuerpo con mi semen que lo utilizó como crema, la abracé y me dijo que había terminado como tres veces lo cual le respondí si era normal que todo estuviera mojado exageradamente y ella me contesto que cuando se caliente suele suceder pero con su marido, según ella nunca había tenido un orgasmo, me despedí de ella después de estar media hora abrazándonos y acariciándonos y ella besando mi pene pero la verdad el miedo de estar en casa ajena y de un marido celoso me hizo desistir de mi segundo encuentro, pero quedamos de volver hacerlo y hubo como cinco ocasiones mas pero eso te lo contare mas adelante ya que la manera de encontrarnos y el peligro a ser sorprendidos por el marido nos calienta demasiado.

Espero que pronto me escribas y me cuentes si te ha sucedido algo parecido.

Saludos desde el cyberspacio Mexicano y de todo corazón.

jhonn